Arzobispado de Santiago de Chile

Arzobispado de Santiago de Chile nació en papa.

Arzobispo de Santiago es un título de la Iglesia católica que ha sido otorgado desde 1840 al prelado que preside la arquidiócesis de Santiago, la capital de Chile. El 27 de diciembre de 2019, el papa Francisco nombró como decimocuarto arzobispo de Santiago a Mons. Celestino Aós Braco, OFM. Cap., quien asumió el cargo el 11 de enero de 2020.

El territorio eclesiástico de la actual República de Chile fue originalmente dividido por la Iglesia católica en tan sólo una diócesis, la de Santiago, el 27 de junio de 1561 por el papa Pío IV. Por lo tanto, los prelados que presidían aquella diócesis tenían la dignidad de obispo.

El 21 de mayo de 1840, la diócesis de Santiago fue elevada a la categoría de arquidiócesis mediante una bula expedida por el papa Gregorio XVI el 23 de junio de ese mismo año. El obispo de entonces, Mons. Manuel Vicuña Larraín, pasó a ser su primer arzobispo. A partir de 1843, se han sucedido doce prelados en la sede arzobispal.

El 27 de diciembre de 2019, el papa Francisco nombró como Arzobispo de Santiago a Mons. Celestino Aós Braco, quien asumió el cargo el 11 de enero de 2020. Desde el 23 de marzo de 2019, se había desempeñado como administrador apostólico, en sede vacante. El 25 de octubre de 2020 el Sumo Pontífice lo creó Cardenal, recibiendo la birreta en el consistorio del 28 de noviembre de 2020. ^[2]​

Anteriormente, el 15 de diciembre de 2010, el papa Benedicto XVI había designado como arzobispo de Santiago a Mons. Ricardo Ezzati Andrello, S.D.B., hasta entonces arzobispo de Concepción. El 23 de marzo de 2019 el papa Francisco le aceptó su renuncia al gobierno pastoral, siendo ahora Arzobispo Emérito.

Desde el arzobispo José María Caro, se ha dado la tónica de que todos los arzobispos han sido creados cardenales. Además, el arzobispo cuenta con tres obispos auxiliares que lo secundan en su tarea evangelizadora y con varios vicarios que se encargan de las vicarías zonales o para asuntos especiales que tiene la arquidiócesis de Santiago de Chile.

En ausencia de un arzobispo en el gobierno de la arquidiócesis, la Santa Sede nombra generalmente un administrador apostólico. El cardenal chileno Francisco Javier Errázuriz Ossa, tras el nombramiento de Mons. Ezzati, fue elegido por el papa como administrador apostólico de Santiago hasta la toma de posesión del nuevo arzobispo, celebrada el sábado 15 de enero de 2011 en la catedral metropolitana chilena. Lo mismo ocurrió con Mons. Aós.

Por derecho propio, el arzobispo de Santiago es también gran canciller de la Pontificia Universidad Católica de Chile, desde su creación en 1888.