x
1

Basílica de La Gratitud Nacional



El Santuario Nacional de María Auxiliadora,[1]​ inicialmente nombrada Iglesia de la Gratitud Nacional al Sagrado Corazón de Jesús, es un templo de estilo neogótico en Santiago de Chile que se emplaza en el mismo lugar donde, durante la época de la colonia, se levantaba la ermita de San Miguel.

En 1699, durante Colonia, el entonces gobernador Tomás Marín González de Poveda ordenó levantar la ermita de San Miguel, que luego de su muerte quedaría abandonada. Su sucesor, Juan Andrés de Ustáriz Vervizberea, se encargó de restaurarla con mucho lujo, e instaló un sacerdote estable.

Sin embargo, por lo peligroso del barrio donde estaba ubicada —“La Cañada”, donde "campeaban personajes de “dudosa reputación” para la época, como bandidos y prostitutas"—, la ermita —que se había erigido precisamente para sanear el barrio—[2]​ quedó nuevamente desocupada hasta que las autoridades de la época decidieron donarla a los mercedarios, quienes le anexaron un convento y una escuela.[3]

Este templo fue sede de dos hechos históricos de gran relevancia: allí se velaron los restos del asesinado ministro Diego Portales Palazuelos; también fue allí donde la ciudadanía, ante un arco de triunfo, recibió al general Manuel Bulnes después de su victoria en la batalla de Yungay en 1839, durante la Guerra contra la Confederación Perú-Boliviana.

El arquitecto alemán Francisco Stolf fue el encargado de diseñar el templo mayor de la que pretendía ser la “abadía de Westminster de Chile.[2]​ La primera piedra fue bendecida en 1857, pero por diversos problemas la obra quedó paralizada, siendo inaugurada recién en 1883, 26 años después.[3]

En 1879 el sacerdote salesiano Ramón Ángel Jara, preocupado por el destino de los huérfanos de la Guerra del Pacífico, creó el Asilo de la Patria. Con la autorización del Arzobispado compró los terrenos de la antigua Ermita de San Miguel, al costado norte del templo. Allí se ubicó la capilla-mausoleo con 128 nichos, donde fueron ubicados los restos de los héroes de la guerra.[3]

La imagen de María Auxiliadora que preside el presbiterio es una copia hecha por Pedro León Carmona del cuadro que Tommaso Lorenzone (it) pintó a pedido de san Juan Bosco y que se encuentra en la basílica santuario de María Auxiliadora de Turín.[4]

San Juan Bosco, fundador de los salesianos, fue un gran devoto de la Virgen bajo la advocación de María Auxiliadora y la tomó como patrona de su congregación. En Ella vio el fundador la ayuda que la humanidad necesita para su redención. También venera a la Virgen como el auxilio de la humanidad y de la patria.

Desde 1954 este templo lleva el nombre de María Auxiliadora.

Después de terremoto de Chile de 2010 la iglesia debió cerrar temporalmente debido a los daños causados; reabrió sus puertas en marzo de 2012[5]​.[6]

Es una iglesia de estilo neogótico, en la que destaca su fachada con doble pórtico ojival, de una altura mayor a lo común. El templo tiene una planta tradicional de cruz latina, con un crucero que interrumpe el ritmo de la arquería interior.

En la obra, encargada al alemán Francisco Stolf, también particuparon posteriormente Lucien Hénault, Belloni en trabajo colaborativo. A comienzos del siglo XX, se le pidió a Ignacio Cremonesi, que había participado en el diseño de otros proyectos arquitectónicos religiosos en Santiago, que proyectara la fachada de la iglesia. Este arquitecto italiano realizó el diseño con una gran torre central con campanario sobre la entrada principal, que le hubiera dado una altura y presencia destacada en el panorama de la capital del 1900, pero la torre no llegó a ser construida y el proyecto de Cremonesi quedó inacabado.[3]

Los mejores artistas de la época participaron en su ornamentación, entre ellos José Miguel Blanco, el primer escultor chileno que el Gobierno envió a París.[7]​ El altar principal cuenta con un cuadro de María Auxiliadora, copia de la obra de Tommaso Lorenzone (it) que fue encargada al pintor chileno Pedro León Carmona.[4]

El 18 de septiembre de 1973, siete días después del golpe de Estado encabezado por el general Augusto Pinochet, se realizó el tradicional Te Deum de las Fiestas Patrias en esta iglesia de los salesianos. Además de los miembros de la Junta Militar, asistieron los expresidentes de la República Gabriel González Videla (ex-Radical), Jorge Alessandri Rodríguez (Independiente pro Nacional) y Eduardo Frei Montalva (Demócrata Cristiano).[8]

Por su ubicación en el centro de la capital, el templo ha sido atacado en diversas manifestaciones populares y generalmente los vitrales del ala sur (por ejemplo, en 2015)[9][10]​ y la fachada de la iglesia, son los que sufren mayores daños (rayados con pintura, ataques con piedras e incendiarios).[11]

En junio de 2016, durante una marcha estudiantil, un grupo de encapuchados robaron la escultura de Cristo crucificado y la sacaron a la Alameda, donde procedieron a destruirla a golpes y a quemarla.[12][13][14]​ Los policías lograron recuperar parte de la escultura,[15]​ que casi dos más tarde, el 24 de abril de 2018, fue repuesto restaurado en el santuario. Sin embargo, conservó "algunas secuelas del daño recibido, como simbolismo de Jesús sufriente"; a esta cruxificción los feligreses la han llamado Cristo roto de la paz. [16]

}}



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Basílica de La Gratitud Nacional (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!