Batalla de Bornhöved (1227)

La (segunda) Batalla de Bornhöved tuvo lugar el 22 de julio de 1227 cerca de Bornhöved en Holstein . El conde Adolf IV de Schauenburg y Holstein , al frente de un ejército formado por tropas de las ciudades de Lübeck y Hamburgo , unos 1000 dithmarsianos y tropas combinadas de Holstein junto a varios nobles alemanes del norte , derrotó al rey Valdemar II de Dinamarca y al Welf Otto the Child .

54 ° 4′N 10 ° 12′E

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Valdemar y su predecesor, el rey Canute VI de Dinamarca, habían conquistado previamente Holstein, Mecklenburg , Hamburgo , Lübeck (1202), Ratzeburg y la costa de Pomerania, incluida la isla de Rügen .

La batalla se mantuvo con gran firmeza en ambos lados, y continuó durante un período de tiempo inusual, y la carnicería fue tan grande que se dice que sus combatientes lucharon hasta las rodillas con sangre. Al Rey de Dinamarca le hirieron uno de sus ojos y le mataron varios caballos , pero sus tropas y sus aliados lucharon con tanta valentía que la victoria habría sido suya si el contingente de Dithmarschen , un grupo étnico sajón, no hubiera abandonado sus filas. En el momento más crítico de la acción, estas tropas se pasaron al enemigo y los daneses se vieron obligados a ceder. En la confusión que siguió Otto I, el duque de Brunswick-Lüneburg y el obispo de Ribe fueron hechos prisioneros. Otto fue enviado a Rostock, la capital de un señorío en poder de Mecklenburg , donde fue encerrado en una fortaleza. Pero el Rey de Dinamarca, que escapó del campo, se ocupó de reparar este desastre formando un nuevo ejército, con el cual mantuvo al enemigo bajo control.

Como resultado de la batalla, la frontera danesa con el Sacro Imperio Romano se trasladó nuevamente al norte desde el río Elba hasta el río Eider , la frontera sur del ducado de Schleswig . Esta frontera permaneció vigente hasta 1806. El victorioso Adolf IV de Schauenburg recuperó el condado de Holstein y su compañero vencedor Albert I, duque de Sajonia se reafirmó como señor de los condes de Schauenburg y Holstein contra el reclamo de Welf. Dithmarschen se sacudió la supremacía danesa y regresó a un señorío muy débil por el Príncipe-Arzobispo de Bremen, allanando el camino para su autonomía de facto como república campesina hasta 1559. El Principado de Rügen fue la única posesión en el Sacro Imperio Romano que le quedó a Valdemar después de la batalla.