Celestino II (antipapa)

Celestino II (nacido como Teobaldo Boccapecci o Boccapeccora) (Thebaldus Buccapecuc en latín) fue el 26° antipapa de la Iglesia católica. Su antipapado sólo duró un día, el 21 de diciembre de 1124. Aunque por un tiempo fue considerado legítimo, las circunstancias de su elección hicieron que se considere como sucesor de Calixto II a Honorio II.

Teobaldo Boccapecci fue nombrado cardenal por Calixto II en el consistorio de diciembre de 1122 con el titulus de presbítero de Santa Anastasia. A la muerte de Calixto II, Boccapecci fue elegido Papa en una confusa y caótica elección, en la que se apreció la lucha entre las familias romanas Pierleoni y Frangipani por el poder. Luego de la elección de Boccapecci (apoyado por los Pierleoni), y durante la ceremonia de investidura del nuevo pontífice, Roberto Frangipani y sus hombres armados irrumpieron por la fuerza al recinto y lo obligaron a renunciar.

Boccapecci era viejo al momento de ser elegido, y su elección se produjo después del fracaso de elegir a un candidato de compromiso entre los partidos rivales. Cuando el nuevo Papa asistió a un Te Deum en presencia de los cardenales, donde sería solemnemente proclamado, fue atacado y agredido por los hombres de Frangipani, quienes proclamaron a otro cardenal, Lamberto Scannabecchi como Papa bajo el nombre de Honorio II. Herido, conmocionado, y queriendo evitar un posible cisma, Celestino II renunció al trono papal y nadie supo qué fue lo que pasó con él.

Con la renuncia de Celestino II, Scannabecchi se convirtió en Honorio II el 21 de diciembre de 1124 y fue coronado ese mismo día.

Luego de su renuncia, Celestino II desapareció.

Celestino II generalmente es considerado en las listas papales como un antipapa, probablemente porque sus seguidores continuaban reclamando a favor de él. Su caso se asemeja más al caso de Esteban II quien murió antes de ser nombrado Papa. En ese momento, la precedencia sobre la elección de la coronación, ni Esteban II ni Celestino II son considerados como Papas oficiales. Ya que el papado de cada uno terminó incluso antes de que éste pudiera empezar.

Por último, se debe tener en cuenta que dado que este Papa no es reconocido en la lista oficial de papas, su nombre y número fueron tomados por el Papa legítimo, Celestino II.