María Elena Tortolero, de nombre artístico Malena de Toledo, (Santa Fe, Argentina; 30 de abril de 1913 - Montevideo, Uruguay; 22 de enero de 1960) fue una destacada cancionista de tangos argentina.
Hija de padres españoles, Maria Elena se hizo popular en la década de oro del tango argentino por su voz y timbre característicos para el género. Nacida en la provincia de Santa Fe, Argentina, residió desde su infancia en Brasil junto a su hermano Nicolás debido al nombramiento de su padre como cónsul español en Porto Alegre.
El estar radicada en Brasil le permitió acceder a un repertorio de canciones populares a nivel bilingüe e internacional, alcanzando gran fama en los años cuarenta.
En 1929 integra la orquesta de Elvino Vardaro - Osvaldo Pugliese con quien hace giras en el interior del país.
Su "voz de sombra" no tuvo acceso a la radio, pero según los eruditos del tango, llevó al disco por lo menos una canción : Volvé de Edgardo Donato y Bayón Herrera.
El compositor Homero Manzi la conoció en una boite en San Pablo, Brasil en 1941 cuando volvía de México. Allí Manzí quedó totalmente enamorado de ella a tal punto que le dedicó un tango muy popular, Malena, ya que en ese país Elena adoptó el nombre artístico de Malena de Toledo. Volcó sus emociones en versos que luego se lo entregó a Lucio Demare ya en Buenos Aires. En pocos minutos sentado en a la mesa de un café de Acevedo y Libertador, el autor Dandy le puso música.
Hizo una vasta carrera en Brasil, donde alcanzó a dejar su voz en un sello discográfico del género tanguero. En Argentina, trabajó como representante de artistas como la del grupo Trío Azul que encabezaba el cantor Roberto Palmer.
Realizó giras por el exterior como México, Venezuela y Uruguay.
En lo sentimental Tortolero estuvo casada con el tenor y cantante melódico mexicano Genaro Salinas, a quien conoció en una gira por Cuba y con quien vino a Buenos Aires. Salinas murió en un trágico accidente debajo de un puente en Caracas el 29 de abril de 1957. Al parecer un marido celoso lo apeleó hasta matarlo a los tan solo 38 años. Ya viuda y con dos hijos, Concepción y Genarito, se vio obligada a alquilar parte de su casa que habitaba en calle Maipú 746, para poder sobrevivir.
María Elena , acompañada de Genaro Salinas Jr. y del cantante Roberto Palmer (primera voz del conjunto floklórico Los Cantores de Quilla Huasi), fueron a Caracas, Venezuela a recoger los restos del tenor y llevarlos a darle sepultura en el “Panteón de los Artistas” del cementerio de la “Chacarita” en Buenos Aires, Argentina en donde yacen, hasta la fecha.
La cancionista Elena Tortolero murió en 1960 a los 43 años de edad en la ciudad de Montevideo, Uruguay, víctima de un edema pulmonar. Elsa, la mujer de Roberto Palmer se trasladó, junto con Genarito, al vecino país para repatriar los restos de la cantante y depositarlos junto a los de su marido en el Panteón de los Artistas.
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