x
1

Ghost Ship



Barco fantasma (Ghost Ship en su título original) es una película estadounidense de terror dirigida por Steve Beck que llegó a las salas de cine el 12 de noviembre de 2002.

En mayo de 1962, decenas de pasajeros ricos están bailando en el salón como en la cubierta del trasatlántico italiano Antonia Graza, mientras que una mujer italiana (Francesca Rettondini) canta Senza Fine. En la cubierta, una niña llamada Katie (Emily Browning), está sentada a solas, aburrida, hasta que el capitán del buque, notándolo, se ofrece a bailar con ella. Repentinamente, una mano mueve la palanca de un cabrestante (aparato para enrollar sogas o cadenas a bordo de los barcos) que enrolla rápidamente un alambre delgado. El carrete rueda y el alambre recorre la pista de baile como una cuchilla que parte por la mitad a los bailarines, matándolos. Sólo Katie se salva, gracias a su altura. El rostro del capitán se abre a la altura de la boca y se ve como la parte superior de la cabeza se cae y grita Katie en horror.

40 años después, el Capitán de un remolcador de salvamento marítimo privado (rescate de estructuras navales hundidas o por hundirse) llamado Sean Murphy (Gabriel Byrne) y su tripulación: Maureen Epps (Julianna Margulies), Greer (Isaiah Washington), Dodge (Ron Eldard), Munder (Karl Urban) y Santos (Alex Dimitriades) están celebrando un éxito reciente en un bar de Anchorage, cuando un sujeto llamado Jack Ferriman (Desmond Harrington), quien se presenta como un piloto del servicio meteorológico, se acerca a ellos y dice que ha visto un barco misterioso navegando a la deriva en el mar de Bering. Debido a que el buque se encuentra en aguas internacionales, puede ser reclamado por quien sea capaz de llevarlo a puerto.

La tripulación y el piloto zarpan en su búsqueda y al encontrarlo descubren que el buque es el Antonia Graza, que desapareció misteriosamente en 1962 y se cree que está perdido en el mar, seguramente hundido, ya que nunca se supo nada de él ni de la tripulación ni de los pasajeros. Al abordar el barco se preparan para remolcarlo y descubren que contiene una gran cantidad de lingotes de oro. Sin embargo cosas extrañas comienzan a suceder. Epps afirma haber visto a una niña en la escalera. La tripulación encuentra un reloj digital funcionando en el puente de mando, junto a cartas de navegación, y es el primer detalle que les llama la atención ni bien abordan el barco ya que no existían relojes digitales en 1962, y Greer cree haber oído una mujer que canta en todo el barco. Epps y Ferriman descubren los cadáveres de otro equipo de salvamento. Ellos deciden abandonar el barco, pero quieren el oro. Una fuerza invisible abre una válvula de gas en la sala de máquinas y el Guerrero del Ártico explota cuando se arranca el motor, causando la muerte de Santos y dejándolos varados.

Mientras tratan de arreglar el Antonia Graza y navegar de vuelta a tierra, los miembros de la tripulación son eliminados uno a uno. Greer se encuentra a Francesca, la cantante que escuchó, que lo seduce y lo lleva al hueco de un ascensor, haciéndole caer a su muerte. El Capitán Murphy, después de entrar en la cabina del capitán, este inesperadamente se encuentra con el fantasma del capitán del Antonia Graza, quien le explica que recuperaron el oro de un crucero llamado el Lorelei que estaba perdido a la deriva en el océano y terminó por hundirse 2 días antes de que el "Antonia Graza" desapareciera sin dejar rastro, además de ello, Murphy le comenta al capitán del Antonia Graza que según muchos reportes no había sobrevivientes en el Lorelei, hasta que el capitán le revela si había un único superviviente y le muestra una fotografía a Murphy del único sobreviviente a bordo, a quien se sorprende de reconocer. Por otro lado Epps recorre otros sectores del barco y encuentra un camarote en el cual descubre los restos de Katie, la niña fantasma que había visto varias veces colgando en el armario, cuando analiza el cadáver de esta encuentra un guardapelo colgado en el cuello en el cual tiene la foto de los padres de la niña, hasta que la misma Katie se le aparece detrás de ella y le menciona que no se asuste, ya que ella no va ha hacerle ningún daño y le menciona que el alma de ella como la de los pasajeros que no están marcados están atrapadas a bordo y que no pueden irse al otro mundo, además de que cuando la persona que los tiene atrapados haya llenado su cuota o cuando el barco este completamente lleno de almas, todas serán enviadas por igual al infierno, sin embargo cuando Epps quiere indagar más sobre el tema una fuerza oscura se le aparece a Katie para llevársela del lugar y que no siga hablando de más, la cual es invisible para Epps y se limita a advertirle que deben salir del Antonia Graza antes de que sea demasiado tarde. Por otro lado Murphy se apresura a contarle al resto de la tripulación su descubrimiento, pero su intento es frustrado por una fuerza sobrenatural la cual lo hace ver y confundir a todo el mundo con el fantasma quemado de Santos, haciendo que el equipo piense que se volvió loco y deciden encerrarlo en el tanque de drenaje. por otro lado Munder muere triturado por los engranajes del barco mientras reparaba el casco.

Conforme pasan las horas Epps se encuentra con el cadáver de Greer en el fondo del cubo del ascensor tras ser asesinado por el fantasma de Francesca, empalado con varillas de metal, ante tal situación Katie se le aparece nuevamente a Epps y le pide acompañarla por un momento para mostrarle toda la verdad acerca del barco, en una visión Katie le revela a Epps que el único sobreviviente del Lorelei fue quien convenció a la tripulación del Graza para deshacerse de todos los pasajeros con el fin de reclamar el oro para ellos mismos. Ante tal situación la tripulación tentados por la avaricia, matan a sangre fría a todos los pasajeros por diversos medios (disparándoles con armas de fuego, también usando veneno para ratas en la cena de esa noche ya que poco antes del atentado habían matado a los cocineros originales del barco, entre otros medios), incluyendo a Katie (quien murió degollada y colgada del cuello en su camarote), pero después de haber cometido tal acto de crueldad, estos comenzaron a traicionarse unos a otros con tal de repartirse entre menos el botín. Perpetrado el atentado, toda la tripulación sobreviviente se dirigió al cuarto donde habían escondido el oro en las cajas. Sin embargo el último oficial, creyendo que Francesca había accedido a traicionar a los otros por él, asesina al resto de sus compañeros de tripulación, pero justo al terminar es traicionado también y recibe un disparo en la cabeza por parte de la cantante Francesca. Tras esto, otro hombre se le une a Francesca en un apasionado beso, pero éste también traiciona a Francesca y le incrusta un gancho grande en la cara, matándola. Posteriormente el hombre le pone un sello maldito en la mano del cadáver de la cantante y se revela (a través de foto que Murphy recibe del fantasma del capitán del Graza) como Jack Ferriman, que es en realidad un espíritu demoníaco que planeó la masacre en 1962 y pudo haber hecho algo similar en el Lorelei.

Epps deduce que Ferriman atrajo al equipo de salvamento al Graza para reparar el barco que se hunde, y que la mejor manera de luchar contra él es hundirlo, en eso recuerda que Murphy esta en peligro y corre rápidamente a sacarlo del tanque de drenado, pero es demasiado tarde ya que el tanque se inunda y Murphy termina muriendo ahogado en el interior, dejando caer la fotografía de Jack Ferriman que le había dado el capitán del Graza previamente, dejando a Epps llorando desconsolada por no salvarlo a tiempo. Poco después Epps va a advertirle a Munder del peligro, sin embargo esta encuentra los restos de este en el fondo del agua. Ahora enfurecida por lo sucedido, Epps toma la decisión de colocar los explosivos y hundir el barco de una vez por todas, ya que el responsable de todo esto son las cajas con el oro y que si otro equipo salvamento viene y lo encuentra tampoco no lo sacaran del barco y para evitar que alguien mas caiga en la trampa, sin embargo Ferriman se aparece en la escena y se enfrenta a Epps tras haber matado al último miembro de su equipo. En eso Ferriman se describe a sí mismo como un rescatador y que recoger almas es su trabajo el cual según este se ganó por una vida de pecado. También explica que como Katie era una niña en ese entonces, esta nunca cometió un pecado verdadero y por ende no puede controlar su alma como también la de algunos de los pasajeros que tampoco pecaron, a diferencia de las demás almas que sí pecaron y que mientras el Antonia Graza permanezca a flote podrá seguir utilizándolo como una trampa y así mantener satisfechos a sus amos (y a Satanás), revelando que el barco le sirve para atraer gente que luego asesinara para capturar sus almas y cuando el buque esté lleno de almas, todas serán llevadas al infierno, además Ferriman le advierte a Epps que si pierde el barco sus amos no estarán contentos y le ofrece un intercambio: dejar el barco intacto, a cambio de perdonarle la vida a Epps, sin embargo ella le responde que lo único que quiere es a su tripulación devuelta, pero Ferriman le responde que eso es imposible, ya que una vez que están marcados con el sello maldito, sus almas ya le pertenecen. Por lo que Epps le responde que no hay trato y opta por detonar los explosivos. Sin embargo Ferriman usa sus poderes para mover una pieza de metal que esta a un lado de Epps y la golpea en la cabeza, para que esta caiga al agua y suelte el detonador, después Ferriman intenta ahogarla mientras esta en el agua, pero Epps con la ayuda de un arpón que estaba a su lado, consigue quitárselo de encima, posteriormente esta amenaza con dispararle a Ferriman, pero este le menciona que eso no lo matara definitivamente, pero en lugar de usarlo en contra de Ferriman, ella opta por dispararle al detonador con el arpón y activa los explosivos en los sumideros del Antonia Graza el cual comienza a hundirse rápidamente. Poco después, Katie ayuda a Epps a escapar de la nave que se hunde y la guía hasta una escotilla de escape y ella se queda entre los escombros mientras observa como las almas atrapadas en el barco que no pecaron ascienden al cielo, ya liberadas de su prisión, mientras que las almas que pecaron son enviadas al infierno. Por otro lado Katie se detiene un instante frente a Epps antes de desaparecer y darle las gracias por su ayuda.

Unas horas después de estar varada a la deriva del mar abierto, Epps es encontrada por un barco crucero y llevada de vuelta a tierra. Cuando la están metiendo en una ambulancia, ve las cajas dañadas del oro siendo subidas al barco de crucero por Ferriman y los miembros de la tripulación, que se parecen a los tripulantes caídos pero no son ellos. Ferriman la mira y sigue adelante, y ella grita mientras las puertas de la ambulancia se cierran.

La película fue rodada en las ciudades australianas de Brisbane y Queensland, Adicionalmente también se rodo en la provincia Australiana de Hallifax.

En el 2020 Dark Castle Enterteinemet saco una edición de colección de la película Barco Fantasma. Esta nueva version tiene la remasterización del audio y el video. Adicionalmente tiene el siguiente contenido extra;[1]

Para interpretar el papel de la seductora cantante Francesca la actriz Francesca Rettondini se inspiro en grandes celebridades del cine mundial como Marlín Monroe, Rita Hayward y por supuesto en la misma actriz. El vestido rojo fue elegido entre dos propuestas. Uno era un vestido largo y de color transparente entre color purpura y celeste; y el otro fue el vestidito rojo que se uso finalmente en la película.[2]



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Ghost Ship (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!