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Libre de sospecha



Libre de sospecha (título original: Above Suspicion) es un thriller erótico estadounidense de 1995 dirigido por Steven Schachter y en la que los principales protagonistas son Christopher Reeve, Joe Mantegna y Kim Cattrall. También se le considera una película noir.

Seis días después del estreno de la producción cinematográfica, Reeve se rompió el cuello en un accidente mientras montaba a caballo, quedandose así paralizado por el resto de su vida.[1]

Dempsey Cain es un policía muy capaz, que tiene un hermano, que también es policía, aunque no capaz. Se llama Nick. También tiene una mujer, que se llama Gail, y un hijo pequeño. Él y su familia viven bien, mejor que su hermano. Sin embargo él se entera, que su hermano tiene en secreto una relación sexual con su mujer, que resulta ser infiel, y jura venganza. Un día Cain queda paralizado de medio cuerpo como consecuencia de un tiroteo y parece ser, que va a quedarse paralizado para siempre. Esa desgracia lo hace parecer inofensivo, pero lo que nadie sabe, es que, con el tiempo, él ha empezado a recuperar su capacidad para andar, lo que esconde como parte de un plan para asesinar en venganza a su mujer y a su hermano.

Les hace creer, que, a causa de su situación, quiere suicidarse y les pide por ello que lo maten con una bala para ese propósito y lo hagan parecer como si fuese la obra de unos ladrones, que hubiesen entrado en su casa y lo hubiesen matado para que puedan cobrar así un seguro de vida suyo muy alto y puedan vivir con él bien el resto de sus días. Ellos, tras algunas dudas, acceden y actúan según lo indicado por Cain. Así se dan cuenta demasiado tarde de la trampa y él los mata con una pistola a ambos en su casa y manipula luego el lugar del crimen para salirse con la suya utilizando para ello su capacidad de andar que ha ocultado haciendo creer así a todos, que ambos intentaron matarle por el seguro y para estar juntos y que él los mató en defensa propia.

Su rival en la policía, Alan Rhinehart, se da cuenta de lo que ha hecho y hace todo lo posible para probar su crimen. Cain, sin embargo, como gran conocedor de estos asuntos por ser muy buen policía, prevé todas las posibilidades y consigue incluso evadir en el juicio ser condenado hasta el punto que Rhinehart, en su desesperación, le clava en público un cuchillo en su pierna para destapar el engaño y los asesinatos. Su plan falla, porque también previó esa eventualidad y sale libre, mientras que Rhinehart es expulsado de la policía por su acción.

Como hombre libre, Cain está ahora con su hijo y empieza una relación romántica con Iris, una mujer cerca de su casa, con la intención de casarse con ella un día y así tener a ella como reemplazo para su mujer, ya que su hijo la aprecia mucho como persona, al igual que él. Al mismo tiempo continúa en la silla de ruedas, pero planeando ya hacer creer a todos, que sus piernas han empezado a moverse para poder volver otra vez a caminar y vivir como antes saliéndose así con la suya con el crimen.



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