María Ana de Austria (1738-1789)

María Ana de Austria (1738-1789) cumple los años el 6 de octubre.

María Ana de Austria (1738-1789) nació el día 6 de octubre de 1738.

La edad actual es 286 años. María Ana de Austria (1738-1789) cumplió 286 años el 6 de octubre de este año.

María Ana de Austria (1738-1789) es del signo de Libra.

María Ana de Habsburgo-Lorena (Viena, Austria; 6 de octubre de 1738 - Klagenfurt; 18 de octubre de 1789) fue archiduquesa de Austria, segunda hija de María Teresa de Austria y del Emperador Francisco I.

María Ana era descrita como la favorita de su padre, ya que compartía su interés por las ciencias. Completó la colección de monedas de su padre, escribió un libro sobre la política de su madre, los experimentos llevados a cabo dentro de la química y la física, exhumaciones arqueológicas, artísticas y científicas

María Ana nació en el Palacio Imperial de Hofburg en Viena, el centro de la inmensamente poderosa monarquía de los Habsburgo. Fue la segunda en la línea de sucesión y ella era la presunta heredera de las tierras hereditarias de los Habsburgo de Austria entre 1740 y 1741 hasta el nacimiento de su hermano José, quien sería más tarde sería José II de Habsburgo. Era conocida como "Mariana".

María Ana era inteligente, pero nació atrofiada y enfermiza, sufría constantemente de mala salud y tenía una disfunción en la columna vertebral, lo que la llevó a tener un bulto en la espalda. En 1757, contrajo neumonía, que dañó permanentemente su capacidad respiratoria. Sus discapacidades físicas hacían difícil cualquier tentativa de comprometerla en un buen matrimonio. Para una mujer de esa época era de suma importancia dejar descendencia y su delicada salud y problemas físicos no servían como garantía.

María Teresa, consciente que tenía más hijos para disponer de ellos para sus fines políticos, no desesperó, ya que consideraba muy importante la carrera eclesiástica para cualquiera de la familia. Fue así como María Ana y sus hermanos María Isabel y Maximiliano Francisco, fueron entregados a la educación eclesiástica.

Ambas hermanas ingresaron al convento y se convirtieron en abadesas, cargo que la mayor parte de las veces recaía sobre los miembros de las familias nobles.

María Ana era descrita como la favorita de su padre, ya que compartía su interés por la ciencia. Completó la colección de monedas de su padre, escribió un libro sobre la política de su madre, los experimentos llevados a cabo dentro de la química y la física, exhumaciones arqueológicas, artísticas y científicas. Su mentor fue Ignaz von Born.

María Ana fue Abadesa de la Institución de Damas Nobles del Castillo de Praga y más tarde de Klagenfurt.