El monumento homenaje a las víctimas del 11-M de Madrid es una construcción erigida en homenaje a las víctimas de los ataques terroristas del 11-M en Madrid.
El monumento se encuentra frente a la estación de tren de Atocha, en la que tuvo lugar uno de los ataques. Consta de dos partes, una exterior y otra interior a la estación. El aspecto exterior que presenta el monumento visto desde la plaza del Emperador Carlos V es el de un gran cilindro de cristal. Tiene una altura de 11 metros y un diámetro de 9,5 metros. Desde el interior de la estación se accede a la parte inferior del monumento, una gran sala diáfana subterránea con paredes de color azul cobalto, en cuyo interior el visitante puede mirar hacia arriba para visualizar mensajes en varios idiomas que se recogieron tras los atentados. Estos mensajes están impresos en una burbuja de plástico de 48 kg de peso que se mantiene elevada contra el cilindro de cristal gracias a un compresor de aire que eleva la presión en el interior de la sala. Para evitar que dicha presión descienda, se necesitó instalar cuatro puertas especiales que actúan como válvulas.
El monumento, a cuya construcción se opuso Adif, fue inaugurado por los reyes Juan Carlos I y Sofía el 11 de marzo de 2007, coincidiendo con el tercer aniversario de los atentados. A la inauguración también asistieron diversas personalidades como los príncipes de Asturias; el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez. Durante la inauguración se guardaron tres minutos de silencio por las víctimas. El acto finalizó con la canción tradicional catalana El cant dels ocells, popularizada como himno de paz por Pau Casals, interpretada al violonchelo por Antonio Martín Acevedo.
En 2009, dos años después de la inauguración, el monumento se resquebrajó en su parte superior.
En septiembre de 2015 la estructura interior de plástico caía por quinta vez al suelo al no funcionar el compresor de aire que la mantiene elevada. El proyecto del monumento fue desarrollado por el estudio de arquitectura FAM. Este estudio, que se creó en 2002, está situado en Madrid y tiene por objetivo la elaboración interdisciplinar de proyectos de arquitectura y urbanismo. El proyecto de FAM fue el ganador del concurso que se llevó a cabo para la elaboración del monumento. El concurso se falló el 30 de noviembre de 2004 y el proyecto de FAM venía firmado por cinco arquitectos: Esaú Acosta, Raquel Buj, Pedro Colón, Mauro Gil-Fournier y Miguel Jaenicke. Además de la construcción de la idea ganadora, los miembros de FAM fueron dotados con un premio de 48.000 euros.
La instalación tuvo un sobrecoste de aproximadamente el 40% (6,6 millones de euros frente a los poco más de 4 en que se adjudicó).
Tras su inauguración, el 13 de diciembre de 2007 el Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio de Fomento (a través de sus sociedades Renfe y Adif) firmaron un convenio para su mantenimiento y conservación, por el cual el municipio asumía el 50% de los gastos y las dos empresas públicas un 25% cada una.Un informe de febrero de 2015 reveló
que el Ayuntamiento de Madrid había estado sin abonar su mantenimiento seis años, el sistema de climatización no funcionaba porque no se conocían las claves informáticas para encenderlo, la instalación tenía goteras, se desprendían partes y no había dotación presupuestaria para arreglarla.Escribe un comentario o lo que quieras sobre Monumento homenaje a las víctimas del 11-M (directo, no tienes que registrarte)
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