Noches sin lunas ni soles es una película policial argentina rodada en 1982 y estrenada el 21 de junio de 1984 dirigida por José A. Martínez Suárez, con el protagonismo de Alberto de Mendoza, quien encarna el personaje de Cairo. Está basada en el libro homónimo de Rubén Tizziani. La película tiene escenas de acción automovilística inusuales para el cine argentino de la época.
Un maleante encarnado por Alberto de Mendoza logra escapar del juzgado gracias a la ayuda de tres cómplices, con el objetivo de buscar al amigo de su vida, pero se entera de que está gravemente enfermo. Un policía protagonizado por Lautaro Murúa sabe que el maleante anda tras un millonario botín, que con la enfermedad de su amigo corre peligro. Los tres cómplices tienen en custodia a Cairo en la casa de uno de ellos, pero el protagonista logra fugarse con la chica de uno de ellos.
Un amigo anarquista español,
quien le falsifica unos documentos, dice la frase: "En un tren se engancharon dos vagones, en uno iban los fusiles, y en el otro los cojones", la misma es repetida por Cairo al final de la película.La escena del enfrentamiento entre Cairo y el policía tiene reminiscencias con Fuego contra fuego (en la parte del enfrentamiento entre Robert De Niro y Al Pacino).
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