x
1

Pixie



Los Pixies son unas criaturas del folclore británico. Son pequeñas hadas esbeltas, que viven en los bosques. Su presencia en la comarca de Devon[1]​ y Cornualles sugiere un origen celta para la creencia y el nombre.[2]

Un pequeño pero altamente ingenioso transceptor QRP fue llamado Pixie en su honor.

Los Pixies han sido profundamente descritos en el folklore y la ficción. En las leyendas asociadas con Dartmoor, se dice que los Pixies se disfrazan para confundir a los niños en su interpretación. Los pixies de Dartmoor tienen la reputación de ser amantes de la música y de la danza. Se dice que ayudan a los humanos normales, a veces ayudando a viudas en la necesidad y a otros con trabajos hogareños; y a menudo están mal vestidos.[3]​ La falta del sentido de la moda ha sido tomado por la escritora fantástica Rachael de Vienne, para sugerir que los Pixies van a menudo desnudos, a pesar de que son sensibles a la necesidad de los humanos de cubrirse.[4]

En Devon, se dice que los Pixies son invisibles de tan pequeños, e inofensivos o bien amistosos hacia el hombre. Sin embargo, en algunas de las leyendas y cuentos históricos, se presentan con estatura humana. Por ejemplo, un miembro de la familia Elford en Tavistock, Devon, se escondió con éxito de las tropas de Cromwell en la casa de un Pixie.[5]​ Un lugar en Devon asociado con los Pixies fue la fuente de inspiración para el poema de Samuel Taylor Coleridge, La Canción de los Pixies (Song of the Pixies).[6]

Varios poetas de la época victoriana los veían como seres mágicos. Un ejemplo es Samuel Minturn Peck. En su poema The Pixies, escribe:[7]

‘Tis said their forms are tiny, yet

All human ills they can subdue,
Or with a wand or amulet
Can win a maiden’s heart for you;
And many a blessing know to stew
To make to wedlock bright;
Give honour to the dainty crew,
The Pixies are abroad tonight.

En los primeros años del siglo XIX, su contacto con humanos normales se había vuelto infrecuente. En Cornwall de Drew[8]​ se encuentra esta observación:

Se dice que algunos Pixies roban niños. Esta versión parece un híbrido con la mitología de Fairy y no es original de los Pixies. Thomas Keightley observó que el mito del Fairy está arraigado en los Pixies por la mitología de Devon.[9]​ Los Pixies también supuestamente premiarían la consideración y castigarían el desdén de la parte de los humanos. Keightley da ejemplos. Por su presencia, atraen bendiciones a quienes los aman.

Los Pixies practican la equitación por placer. Tienen fama de grandes exploradores, conocedores de las cuevas del océano, las fuentes ocultas de las corrientes.[10]

La escritora de la época victoriana Mary Elizabeth Whitcombe dividió a los Pixies en tribus, según su personalidad.[11]​ Ann Eliza Bray sugirió que los Pixies y Fairies eran especies distintas.[12]​ Algunos atribuyen a los Pixies un origen humano, o de naturaleza humana, a diferencia de los Fairies cuya mitología remonta a espíritus malignos e inmateriales. En el folklore, los Pixies y Fairies son antagonistas. Se han batido en Buckland St. Mary, Somerset. Los Pixies triunfaron, y aún visitan el área. Los Fairies, supuestamente han abandonado el lugar luego de la derrota.[13]

La mitología Pixie parece integrarse en la presencia cristiana en Gran Bretaña. Se dice que son las almas de los niños que murieron antes del bautismo. Hacia mediados del siglo XIX, los Pixies estaban asociados con los Pictos. Es un origen posible aunque improbable de la mitología Pixie. Algunos investigadores del siglo XIX han hecho aseveraciones más formales sobre los orígenes de los Pixies, o los han conectado con Puck, una criatura mitológica a veces descripta como un Fairy. El nombre mismo de Puck es de origen incierto.

Un investigador se tomó el mito de los Pixies suficientemente en serio como para asegurar que evidentemente son una raza más pequeña, y de la gran oscuridad de los cuentos que sobre ellos refieren, creo que han sido una raza primitiva.[14]

Se dice que los Pixies son dueños de una belleza sin par, a pesar de que hay alguno que otro Pixie con apariencia extraña. En particular, se dice de algún Pixie que tiene características similares a un chivo.

Antes de mediados del siglo XIX, los pixies y fairies eran tomados muy en serio en Cornualles y Devon. Algunos libros se dedicaron a las creencias de los paisanos con incidentes de manifestaciones de Pixies. Algunos topónimos llevan su nombre por los Pixies asociados con ellos. En Devon, cerca de Challacombe, unos peñascos reciben su nombre de los Pixies que los frecuentaban. En algunas áreas, la creencias en Pixies y Fairies aún persiste.

Probablemente sea Rachael de Vienne la autora contemporánea de literatura fantástica más fiel a la mitología Pixie, transcribiendo en su obra varios de sus atributos. Otros escritores rinden homenaje a los Pixies al menos usando sus nombres, pese a que frecuentemente se desvían de los textos mitológicos. Los mitos mismos son tan diversos, que varios y distintos enfoques a los Pixies pueden ensayarse, sin contradecir fundamentalmente las fuentes originales.



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Pixie (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!