La Primera Autonómica Preferente de Castilla-La Mancha, es la quinta categoría de la pirámide futbolística del sistema de ligas de España en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, siendo la primera organizada de manera exclusiva por la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha.
La Primera Autonómica Preferente es un torneo organizado y regulado por la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha (FFCM), cuyos miembros son los propios clubes participantes.
La competición se disputa anualmente, empezando a finales del mes de agosto o principios de septiembre y terminando en el mes de mayo o junio del siguiente año.
La Primera Autonómica Preferente consta de 2 grupos integrados por 18 equipos de Castilla-La Mancha distribuidos por proximidad geográfica. Siguiendo un sistema de liga, los dieciocho equipos se enfrentan todos contra todos en dos ocasiones una en campo propio y otra en campo contrario sumando un total de 34 jornadas. El orden de los encuentros se decide por sorteo antes de empezar la competición.
La clasificación final se establece con arreglo a los puntos totales obtenidos por cada equipo al finalizar el campeonato. Los equipos obtienen tres puntos por cada partido ganado, un punto por cada empate y ningún punto por los partidos perdidos. Si al finalizar el campeonato dos equipos igualan a puntos, los mecanismos para desempatar la clasificación son los siguientes:
Si el empate a puntos es entre tres o más clubes, los sucesivos mecanismos de desempate son los siguientes:
El equipo de cada grupo que más puntos suma al final del campeonato asciende directamente a Tercera División Nacional. Los subcampeones de cada grupo juegan una eliminatoria entre ellos para determinar el tercer ascendido y así sustituir a los tres descendidos de Tercera División Nacional. Los cuatro últimos equipos de cada grupo descenderán directamente a Primera División Autonómica. De esta ascenderán directamente los primeros y segundos clasificados de los cuatro grupos reemplazando a los cuatro últimos equipos de cada grupo de Primera Autonómica Preferente.
Las normas federativas contemplan el sistema de coberturas ante eventuales vacantes que se producen por diversos motivos, ya sean ascensos de tercera división a segunda división “B” (y los que se producen en las distintas categorías regionales por arrastre), renuncias a participar en la categoría que por derecho corresponde, o bien decisiones adoptadas por los órganos federativos en cumplimiento de la normativa vigente. Las citadas coberturas se consuman por los clubes de la categoría inferior que, sobre la base de la clasificación de la temporada anterior, ostentan mejor derecho deportivo, con una excepción: que un equipo haya tenido que descender no por méritos deportivos sino por efecto cascada ante la inclusión en su grupo de un equipo procedente de una categoría nacional que no estaba contemplada en las bases de competición; en este caso y si se produce una vacante en la categoría superior le corresponde cubrirla, en primer lugar, al equipo descendido por aquellos motivos de arrastre.
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