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Río Tijuana



El río Tijuana es un río intermitente que fluye entre México y Estados Unidos, posee 195 km de largo, se ubica en la vertiente pacífica del Estado de Baja California en México y el sur de California en los Estados Unidos. Está formado por dos redes de desagüe que se unen dentro de la zona urbana de Tijuana.

Drena un área árida a lo largo de la frontera México-Estados Unidos, que fluye a través de México en la mayoría de su curso; luego de cruzar la frontera baja 8 km hasta su desembocadura en el mar, en un estuario en el extremo sur de San Diego. Su curso inferior proporciona los humedales de la costa sin desarrollar por última vez en el condado de San Diego en medio de un entorno altamente urbanizado en el límite meridional de la localidad de Imperial Beach. El río ha sido objeto de gran controversia en las últimas décadas respecto a la contaminación, control de inundaciones y protección de EE. UU.

A unos 17 kilómetros río arriba, en el lado estadounidense inician algunos arroyos que río abajo se unen, la red de arroyos se compone principalmente de los afluentes de Pine Valley Creek, Campo Creek y Cottonwood Creek.

Dos represas en los Estados Unidos, Barrett y Morena, almacenan agua que es llevada desde la subcuenca del arroyo de Alamar-Cottonwood Creek dentro de la cuenca del río Otay hacia el norte, para abastecer de agua a la ciudad de San Diego. El afluente Cottonwood Creek es conocido como arroyo de Alamar desde el punto donde ingresa a México hasta su confluencia con el río Tijuana dentro de la ciudad.

El tributario principal del río Tijuana es el llamado arroyo de las Palmas, el cual desemboca en la presa Abelardo L. Rodríguez. Río abajo de la presa Rodríguez el agua fluye a través de Tijuana en parte por un canal de concreto hasta la frontera internacional, de allí continúa hacia el oeste a través del valle del río Tijuana por una distancia de unos nueve kilómetros hasta el estuario y después hacia el océano Pacífico, donde desemboca.

La precipitación en la cuenca exhibe fuertes variaciones por temporadas, el período de noviembre a mayo es el más húmedo, algunas veces se presentan tormentas intensas que duran de tres a cuatro días, como consecuencia existe un flujo de corriente altamente variable. Durante las temporadas de verano y otoño, el flujo de agua en la cuenca es casi inexistente mientras que en los ciclos de invierno y primavera el agua corre a niveles altos, provocando algunas veces inundaciones.

Las precipitaciones intensas provocaron inundaciones severas en 1980, 1983 y 1993 en Tijuana. Estas tuvieron efectos devastadores en el hábitat natural, estructuras, propiedad personal e instalaciones de transporte en el valle del Río Tijuana. Los cañones laterales del valle, tales como el cañón de Los Laureles-Goat Canyon y el cañón Matadero-Smuggler's Gulch se encuentran sujetos a inundaciones repentinas durante fuertes precipitaciones o lluvias. Es un hecho que las inundaciones continuarán ocurriendo en el área debido a la pérdida de vegetación en las laderas, la creciente urbanización, acumulación de sedimentos y escombros en los canales de desagüe y un inadecuado sistema de alcantarillado.

El río Tijuana y la zona aledaña a su cauce, que prácticamente pasa por el centro de la ciudad del mismo nombre y que de hecho la divide en dos, inició su canalización y urbanización en la década de 1970, durante el gobierno del presidente Luis Echeverría (1970-1976), esta obra urbanística, fue en su época la de mayor importancia a nivel nacional, tanto por el monto de la obra por sí misma, como por la rapidez con que se efectuó. El proyecto se planeó para llevarse a cabo en tres etapas, la primera de las cuales se inició oficialmente el 18 de julio de 1972 bajo la supervisión de la Secretaría del Patrimonio Nacional (SEPANAL) y comprendía una superficie de 160 hectáreas, en un tramo lineal de 4,5 km. Partiendo de la línea internacional (frontera México-USA.) hasta el puente del ferrocarril, que se localiza en las inmediaciones del complejo escolar Agua Caliente. Previamente se tuvo que limpiar la zona de asentamientos humanos irregulares, uno de los cuales fue “Cartolandia” asentamiento de casas hechas de madera y cartón, prácticamente pegado al centro de la ciudad.

En la actualidad esta primera etapa, conocida entre los tijuanenses como Zona Río Tijuana, es una pujante y moderna área comercial y financiera, donde se encuentran famosos restaurantes, tiendas de autoservicio, el moderno Centro Cultural de Tijuana con su sala de cine en formato OMNIMAX y la famosa Plaza Río Tijuana, que antes de la construcción de la Macroplaza Insurgentes llegó a ser el centro comercial más grande del noroeste de México durante los años 80. La segunda etapa, comprende desde el puente del ferrocarril, hasta el sitio en donde el arroyo de Alamar se une al río Tijuana y la tercera, desde este sitio hasta la cortina de la presa Abelardo L. Rodríguez. Esta tercera etapa, ya es una pujante zona comercial, en ella se encuentra la Macroplaza Insurgentes, Museo El Trompo, Centro de las Artes Musicales, CEART Tijuana, el World Trade Center Tijuana y varios hoteles.





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