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Rocky III



Rocky III es una película estadounidense de drama de 1982, la tercera de la saga que inició la película Rocky (1976). El filme está protagonizado por Sylvester Stallone, quien además dirigió y escribió el guion de la película, y además cuenta con las actuaciones de Carl Weathers, Burt Young, Burgess Meredith y Talia Shire, quienes repiten sus papeles de las anteriores películas.[1]

Como novedad aparece Mr. T, quien interpreta a Clubber Lang, el nuevo oponente de Rocky. También aparece en esta película Terry "Hulk Hogan" Bollea, interpretando a un luchador apodado Thunderlips.

Rocky III empieza donde finaliza Rocky II, con Rocky ganando el título de campeón mundial de peso completo ante Apollo Creed (Carl Weathers). Tras la pelea por el título, Creed se retira y Rocky, ahora el nuevo campeón, defiende hasta diez veces su título en los siguientes tres años, todo esto bajo la melodía "Eye of the tiger" de Survivor. La fama y la fortuna ahora le sonríen al italiano y su familia, comprándose una gran mansión, apareciendo en portadas de revistas y programas de televisión (incluido en el de los Muppets), y su nombre empieza a ser popular, recibiendo muchas ofertas de patrocinadores importantes. Por otra parte vemos a Clubber Lang (Mr. T), un boxeador desconocido que está subiendo rápidamente en el escalafón, derrotando a todos sus oponentes de una manera brutal, hasta convertirse en el aspirante número uno al título. Al mismo tiempo Rocky se reconstruye la nariz rota con cirugía y empieza a recibir clases para poder hablar en público.

Tres años después de la pelea contra Apollo Creed, mientras Rocky vive una vida confortable, su cuñado y hermano de Adrianna, Paulie, aún vive en los suburbios de Filadelfia. Una noche, borracho, destroza una máquina de Pinball que tenía la efigie de Rocky, ya que estaba celoso del éxito y del nivel de vida de su cuñado. Es arrestado y el púgil consigue sacarlo de la comisaría. La causa de los celos y el enfado de Paulie se origina porque Rocky nunca le invitó a vivir en su mansión o ayudarle en su carrera de boxeador. Rocky le reprocha que él no sabía nada de eso, y después de que Paulie le reprocha muchas cosas intenta golpear a Rocky, Rocky sorprendido finalmente le complace en sus peticiones.

Rocky acepta un combate de exhibición benéfico contra un luchador llamado Thunderlips (Hulk Hogan). En la pelea Rocky se lo toma como una broma, pero el luchador aparenta tomárselo en serio y empieza a hacerle todo tipo de llaves a Rocky, quien finalmente decide pelear en serio, logrando un espectáculo chusco, del que logra salir. El combate acaba en empate, y bajo la atenta mirada de Clubber Lang. Este combate tiene además una consecuencia al mostrar el estado de salud de Mickey, ya que al ver como apaleaban a Rocky le sobreviene un infarto del cual afortunadamente logra recuperarse.

En la cima de la escalinata del Museo donde Rocky solía entrenar, se desvela una estatua suya y aprovecha la ocasión para comunicar que piensa en retirarse, lo que provoca un nuevo reto de Lang. Mickey, el entrenador de Rocky, rechaza la pelea porque considera que Lang es una deshonra para el deporte y un rival peligroso para Rocky. Lang provoca a Rocky al dirigirse a Adrian en tono atrevido y logra que acepte el reto. Mickey le dice a Rocky que no piensa entrenarle para ese combate. La razón es que durante los últimos tres años Rocky ha peleado con buenos boxeadores pero débiles, no con auténticos aspirantes que estén a la altura del desafío. Lang no sólo es brutal sino que es un boxeador en estado puro, mientras que Rocky ya se ha civilizado. Mickey teme un combate del estilo de los que enfrentaron a Rocky contra Apollo y teme por él.

Rocky comienza a entrenarse, finalmente con Mickey, pero su dilatada vida social le impide hacer un entrenamiento en condiciones. Mickey observa con preocupación cómo Lang se está entrenando muy duramente y teme las consecuencias.

Rocky y Lang se encuentran en el Philadelphia Spectrum. Empieza una discusión entre Lang y Mickey, quien es empujado bruscamente por el retador, lo que le genera un ataque al corazón. Rocky quiere cancelar la pelea pero Mickey se niega y pide que lo lleven al vestidor. Rocky está más pendiente de la salud de Mickey que de su oponente. En la mesa de comentaristas está el excampeón Apollo Creed, quien sube a saludar a los oponentes, pero Lang lo amenaza y lo echa groseramente, diciéndole que en su esquina no necesita nada de alguien que está acabado. Apollo Creed se dirige a Rocky y le dice que lo termine. En la mesa de comentarios, Creed se niega a dar comentarios respecto a lo que le dijo Clubber. Comienza la pelea, Rocky empieza golpeando con rabia al aspirante, pero al cabo de un momento, Lang reacciona y propina a Rocky formidables golpes que lo aturden enseguida. Lang noquea a Rocky en el segundo asalto, ganando la pelea y el título con el público abucheándolo. Creed se va del Spectrum con una mirada de decepción y desolación. Ya en los vestidores, Rocky ve a Mickey por última vez, y este rechaza ayuda médica. Rocky le dice que el combate ha acabado en el segundo asalto pero no le dice quién ha ganado. Mickey muere en brazos de Rocky, creyendo que su pupilo ha vuelto a ganar un combate.

Después del combate y del funeral, Rocky ha perdido toda la motivación y confianza en sí mismo, llegando a lanzar el casco de su moto a su propia estatua. Se va caminado hasta el viejo gimnasio de Mickey y, allí, se encuentra con Apollo. Este le propone a Rocky entrenarse juntos para volver a combatir, y sobre todo para ganarle a Lang, a quien desprecia. Aunque al principio Rocky afirma que no quiere volver a boxear, Apollo insiste animándole y aparentemente lo convence. A cambio del entrenamiento, Apollo sólo le pedirá un pequeño favor, sin decirle cuál.

Apollo, Rocky, Adrianna y Paulie se van a Los Ángeles para comenzar el entrenamiento. Allí, Apollo lo conduce al gimnasio donde él empezó: un pésimo lugar, oscuro, mal ventilado, con gente mal entrazada... pero con hambre de ganar, la motivación que Rocky no encuentra, lo que Creed llama "el ojo del tigre". El entrenamiento es duro, ya que Rocky tiene que ganar en fuerza y, sobre todo, en confianza. Al principio del entrenamiento, el antes campeón es un desastre, máxime para ser rival de alguien tan duro como Lang. Rocky tiene miedo, duda de sí mismo y en cierto modo se siente engañado por Mickey, pero una conversación con Adrianna, donde ella le muestra toda la confianza que tiene en él, le revitaliza. Vuelve a entrenarse haciendo carreras en la playa y moviéndose cada día con más soltura (en estos entrenamientos Creed hace nadar a Rocky), esta vez con mucha ambición y sintiéndose preparado para enfrentarse a Lang. Las escenas donde ambos boxeadores corren por la playa mientras suena Gonna Fly Now, intercalada con los progresos de Rocky en el ring y en la playa (donde empieza perdiendo contra Creed y termina sacándole ventaja, y bañándose ambos en el mar) son, nuevamente, las más emotivas del film.

El combate de revancha ante Lang, y ante el mundo, se disputa en el Madison Square Garden. En los vestidores Apollo le pide a Rocky que se ponga la pantaloneta con la forma de la bandera estadounidense que usó en la primera película. Cuando entran al cuadrilátero Rocky y Apollo junto con Duke y Paulie son recibidos por el público con una gran ovación, mientras que Lang recibe muchos abucheos y golpea a un espectador que lo estaba insultando. Antes de comenzar el combate, Lang provoca a Apollo y a Rocky, pero los entrenadores y preparadores físicos consiguen separarlos. Rocky ha recuperado su espíritu combativo, y su fiereza sorprende a Lang, que no puede entender cómo un boxeador puede cambiar tan rápidamente de un combate a otro, y puede usar tal variedad de estilos. En el primer asalto, Rocky pone en práctica su nueva gran velocidad y agilidad adquiridas y boxea con el mismo estilo que Apollo. Lang enfurece y lo lanza fuertes golpes, pero Rocky los esquiva. Durante el primer intermedio, Rocky se da cuenta de que ese estilo acabará sirviendo de nada, ya que Lang tiene una gran resistencia y Rocky acabaría cansándose antes. En el segundo asalto, el campeón logra acorralar al aspirante y le da terribles golpes, llegando a tumbarlo dos veces, pero el Semental Italiano se levanta. Rocky deja que Lang le ataque con furia sin oponer resistencia, dando a entender que se trata de una estrategia para cansarlo. Rocky acaba agotando a Lang y le noquea en el tercer asalto. Gana el combate, recupera el título y se gana el respeto de todo el mundo.

Después del combate, Apollo y Rocky se citan en el gimnasio de Mickey a solas, y allí Apollo le desvela el pequeño favor que quería a cambio del entrenamiento: un nuevo combate contra Rocky para dirimir quién era realmente el mejor. Rocky acepta y ambos suben al ring del gimnasio vacío. El último fotograma de la película es el de Apollo y Rocky a punto de golpearse el uno al otro en un cuadro.

En la película Creed del año 2015, Rocky le revela a Adonis (hijo de Apollo) que su padre fue el ganador de este enfrentamiento.

Sylvester Stallone patrocinó una estatua de bronce llamada Rocky, esculpida por A. Thomas Schomberg en 1981. Se hicieron tres estatuas y una de ellas fue colocada a los pies de la escalinata del Museo de Arte de Filadelfia para el rodaje de Rocky V. Tras el rodaje estalló un importante debate, ya que se consideraba que la escultura no era una muestra de arte sino promoción de la película.[2]​ Se estudiaron varias ubicaciones y se colocó frente al Wachovia Spectrum en el sur de Filadelfia. Para el rodaje de Rocky V volvió a ubicarse temporalmente en el Museo de Arte. Luego volvió al Spectrum.[3]​ La estatua volvió a la escalinata del museo en septiembre del 2006, por el trigésimo aniversario de Rocky I.[4]

La tercera de estas estatuas se subastó en Ebay con un precio inicial de USD 5 millones para financiar la construcción del International Institute for Sport and Olympic History. No se alcanzó el precio y fue de nuevo subastada por USD 3 millones. Sólo recibió una puja y resultó ser fraudulenta. Se ha vuelto a poner varias veces más a subasta, ahora al precio de un millón de dólares. Las estatuas pesan dos toneladas cada una y miden unos tres metros.[5]

Rocky III cuenta con un ranking aprobatorio del 63% en el sitio Rotten Tomatoes basado en 38 reseñas, con un índice de audiencia promedio de 5,5 sobre 10. El consenso del sitio afirma: "Está notablemente sujeta a la ley de los rendimientos decrecientes, sin embargo Rocky III todavía tiene suficiente espectáculo musculoso para estar en el ring con las mejores entradas de la franquicia".[6]



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