San Policarpo

Policarpo de Esmirna (c. 70 - c. 155) fue un obispo de la Iglesia primitiva. Considerado por la Iglesia católica como padre apostólico o conocedor en vida de algunos de los apóstoles. Fue obispo de la ciudad de Esmirna,^[1]​ tanto Ireneo^[2]​ como Tertuliano^[3]​ registran que Policarpo había sido discípulo del apóstol Juan.^[4]​ Jerónimo escribe que Policarpo era un discípulo del apóstol Juan y que Juan lo había ordenado obispo de Esmirna.^[5]​ Policarpo es considerado uno de los tres Padres Apostólicos principales, junto con Clemente de Roma e Ignacio de Antioquía.

Existen pocos datos acerca de su vida, aunque se sabe por una relación posterior, acerca de su muerte en la hoguera que es considerada ejemplo evangelizador de los primeros cristianos.^[6]​

Fue cercano y mantuvo contactos con otros padres apostólicos como Ireneo de Lyon, quien fue su discípulo, e Ignacio de Antioquía, quien le solicitó camino a su muerte que escribiera a su comunidad en Asia Menor. El texto que escribió a la comunidad filipense es la única obra que se le atribuye, la Epístola de Policarpo a los Filipenses, un mosaico de referencias a las Escrituras Griegas que, junto con un relato del Martirio de Policarpo, forman parte de la colección de escritos denominada Padres Apostólicos. Después de los Hechos de los Apóstoles, que describen la muerte de Esteban, el Martirio de Policarpo se considera uno de los primeros relatos genuinos de un martirio cristiano.^[7]​

Policarpo fue quemado en la hoguera y atravesado con una lanza por negarse a quemar incienso al emperador romano^[8]​ en el año 155 de la era cristiana, durante el gobierno del emperador Antonino Pío.^[9]​

Es venerado por las iglesias católica, ortodoxa y luterana.