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Trap latino



El trap latino[1]​ es un subgénero musical del hip hop latino que tiene sus orígenes a finales de la década de los 2000 en Puerto Rico. Fue popularizándose masivamente a partir del 2015, coexistiendo junto con el reguetón dentro de la cultura urbana puertorriqueña. [2][3][4]

Las raíces de este subgénero se encuentran en canciones de artistas como Arcángel, Ñengo Flow, Randy, De La Ghetto, Yaga & Mackie, entre otros, principalmente reguetoneros y cantantes de Puerto Rico. Randy y Arcángel se atribuyeron el haber comenzado a finales del año 2006 el movimiento del trap latino mediante canciones como «Me compré un full» y «El pistolón», a pesar de que en 2007 no se hablaba aún de este subgénero, ya que no se tenía conocimiento del mismo y se lo relacionaba con un reguetón simple.[5]

Cierta popularidad comienza cuando jóvenes raperos puertorriqueños como Almighty, Bad Bunny, Anuel AA, entre otros, lanzaban sus canciones con ritmos de hip hop/reguetón en plataformas de internet como SoundCloud entre 2015 y 2016.

Así como el reguetón en su momento, el trap latino es duramente criticado por sus letras explícitas y temas como el sexo, las drogas, infidelidad, lujos suntuarios, etc. Algunos de sus intérpretes siguieron impulsando el género hacia un plano internacional, siendo un estilo musical escuchado desde Puerto Rico a países europeos como España e Italia, pasando por prácticamente todos los países del continente Americano.[cita requerida]

El trap latino alcanzaría mayor acogida con la aparición del puertorriqueño Bad Bunny, quien logró incluir quince canciones en la lista Hot Latin Songs en 2017 y en 2018, logrando posicionar 27 temas en la misma lista.[cita requerida]

Los intérpretes más conocidos del trap latino son: Bad Bunny, Anuel AA, Bryant Myers, Noriel, Darell, entre otros. En el ámbito femenino destacan: Karol G, Becky G, Natti Natasha, entre otras.[6]​ También se puede distinguir una serie de cantantes argentinos que cultivan el trap original y autóctono que mantiene ciertas diferencias con el trap latino de Puerto Rico, entre llos Khea, Duki, Lit Killah, Nicki Nicole, entre otros.

El instrumental de una canción de trap latino está caracterizado por el uso de sintetizadores, cajas rítmicas, sub-graves, hi-hats de subdivisión binaria o ternaria y modos armónicos menores para darle una estética oscura y triste.[cita requerida] En ocasiones los raperos utilizan el auto-tune en sus versos, llegando a ser en algunos casos excesivo. Pueden ser melodías pausadas o muy frenéticas, aunque a veces consigue fusionar una rapidez marcada por los hi-hats con una lentitud melancólica a través de melodías sintéticas y en algunos casos el violín, piano, flauta e incluso el bajo. El trap latino mantiene una fuerte influencia del hip hop, tanto estética como técnicamente, aunque en el caso del trap adquiriendo mucha más importancia los efectos sonoros.[cita requerida]

A pesar de las raíces callejeras de este género musical, existe un grupo de artistas que han decidido no desecharlo, en este caso, utilizándolo para mejores fines, reconociendo la utilidad del mismo y la gran aceptación en el público joven,[7]​ entre ellos, Redimi2, quién lanzó una fuerte crítica al contenido lírico de las canciones de moda en este estilo con Trapstorno, [8]​ a su vez, algunos creen en la fe cristiana, como Almighty, siguen haciendo la música que habitualmente hacían, aunque con mensaje positivo.[9][10]​ Otros cantantes como Lunay, quien debutó con «Un panda muy diferente»,[11]​ en el género que se conoce como trap cristiano[12][13]

Hablando de la letra, aunque en general utiliza un lenguaje coloquial, es posible encontrar el uso de muchas metáforas, referencias, dobles sentidos y distintos recursos estilísticos. Utiliza muchas expresiones coloquiales propias del español de cada zona, siendo muchas veces difícil de entender el contenido de la letra por oyentes de otros países.[14]​ Generalmente, los temas que frecuentan son: poder adquisitivo, armas, desamor, sexo y el panorama musical que vive el propio artista.[15]

La incapacidad del Trap latino para reproducirse en los radios de Estados Unidos se deriva de la blasfemia, simplicidad y lascivia presente en las letras,[cita requerida] pese a que en 2019 Bad Bunny ha logrado colocar algunos de sus sencillos en las radios más conocidas de Estados Unidos. La canción «Cuatro babys» de Maluma ha recibido mucha controversia sobre su letra, ya que podría parecer que sugieren violencia directa hacia las mujeres y machismo. Se publicó una petición en Change.org exigiendo la eliminación de la canción de las plataformas digitales.[16]​ Debido a esto, el trap latino ha tenido un seguimiento grande, pero principalmente odiado.[cita requerida]

El 15 de septiembre de 2018, Anuel AA lanzó una canción dirigida a su compañero rapero Cosculluela.[17]​ La canción fue ampliamente criticada debido a su lenguaje grosero y comentarios ofensivos sobre la homosexualidad y los pacientes con VIH.[18]



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