Las guerras floridas o Xochiyáoyotl (del náhuatl xōchiyāōyōtl /ʃoːt͡ʃiˈjaːoːˈjoːtl/, derivado de xōchi- ‘flor’, yao- ‘guerra’ -yō- [derivativo]) eran un tipo de guerra ritual propio de los Aztecas en los siglos anteriores a la Conquista consistente en el acuerdo entre varias ciudades que organizaron combates en los que se capturaban prisioneros de ambos bandos que eran sacrificados ritualmente; con frecuencia, se realizaban en condiciones de sequía extrema.
Algunos autores como Román Piña Chan aseveran que su única función era obtener víctimas para los sacrificios humanos, forma de pacificar los dioses en momentos de intensas hambrunas.
Otros investigadores consideran que, dada la práctica mesoamericana del sacrificio de prisioneros y la ingesta de parte de sus cuerpos, estos sacrificios humanos serían aprovechados para enriquecer la dieta y aliviar la presión demográfica en tiempos de carestía. Esta explicación material fue propuesta inicialmente por Michael Harner y fue ampliada por Marvin Harris, aunque ha sido controvertida. Para Harris, la perduración del canibalismo en Mesoamérica tiene que ver con las condiciones materiales. Harris arguye que en otros lugares, como Europa, los sacrificios humanos, que originalmente fueron acompañados de prácticas caníbales, evolucionaron hacia un sistema de esclavitud, ya que, de acuerdo con el análisis de ese autor, el trabajo extraíble de un enemigo esclavizado llegó a superar al aporte a la dieta de consumir el cuerpo del enemigo. En cambio, la escasez de grandes animales en Mesoamérica pudo haber impedido una evolución similar en esa región.
Escribe un comentario o lo que quieras sobre Xochiyaoyotl (directo, no tienes que registrarte)
Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)