Chicha criolla

La chicha criolla es una bebida dulce no alcohólica de Venezuela hecha a base de arroz o sémola de trigo —principalmente— y leche de vaca, a la que suele agregársele leche condensada, canela o chispas de chocolate.^[1]​ Es una bebida muy espesa que se toma fría con hielo.

A diferencia de la chicha andina, esta bebida no es fermentada y es de uso comercial en el país, vendida de forma ambulante por vendedores llamados usualmente «chicheros». Incluso se vende pasteurizada con presentaciones similares a la de los jugos, leches y malteadas industriales. Es usual encontrar en la calle chicheros y en casa suele encontrarse fría en la nevera.

Es la más difundida de las chichas venezolanas y es elaborada con leche, agua, leche condensada canela y arroz.^[2]​

Existe también una variante en la cual se sustituye el arroz por sémola de trigo llamada también chicha de pasta. Se suele elaborar con pasta alimenticia de calidad inferior o más económica^[2]​ (mezcla de sémola y harina de trigo). Es más espesa y posee un color marfil intenso.

Se realiza con ajonjolí y tiene una preparación más laboriosa.^[1]​

También tiene una variante, la chicha andina, la cual se hace con hongos de piña que se fermentan, a lo que esa agua se le añade maíz molido ya cocido. Se endulza con papelón y al pasar de cada día se va colocando más fuerte. Cuando se prepara con arroz se hace llamar masato, en otras regiones se le llama chicha andina a la chicha recién hecha que le agregan jugo de piña.

El origen de la chicha andina es precolombino, es decir era y es tomada por nativos de la zona .^[1]​

Otros ingredientes para la preparación de la chicha son el ocumo, la berenjena o la auyama.^[1]​ Al parecer surgieron en algún período de escasez de arroz, también está la chica de fresa que se hace con arroz y jugo de fresas con trozos grande de la misma fruta .^[1]​

Otra bebida similar a la chicha criolla se elabora pero a base de maíz tierno y se hace llamar carato de maíz o chicha de maíz.

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