Hwoarang (Hangul: 화랑; Hanja: 花郎 Hwarang; Japonés: ファラン Faran) es un personaje coreano de la serie de videojuegos de lucha Tekken. Este personaje se caracteriza por ser un letal exponente del Taekwondo ITF y discípulo de Baek Doo San, a su vez Hwoarang es el enemigo y rival más grande e importante que Jin Kazama tiene.
El artista marcial original de la captura del movimiento de Hwoarang en Tekken es Su-Il Hwang de la “Japan Internacional Taekwon-Do Federation” (Japón ITF). Esta es la razón por la cual Hwoarang puede ser visto realizando los segmentos de los patrones de ITF Hwa-Sonó, Hwarang y SAM-Il desde su aparición en Tekken 3 y todos los torneos en los que él ha participado.
Es uno de los personajes más difíciles de manejar, el dominar los ataques que posee en sus posiciones para ataques tipo Flamenco requiere de mucha práctica. Su repertorio de golpes los realiza mayormente con patadas. Un jugador que domine ataques básicos puede dominar los más avanzados siendo así un personaje casi invencible, debido a que sus ataques son veloces y letales.
Como detalle anecdótico, en las poses de victoria de Hwoarang, este habla en inglés en la versión japonesa de Tekken 4, mientras que en la versión americana y europea lo hace en coreano (excepto en el vídeo del final, que sigue hablando inglés).
El estilo de lucha de Hwoarang es el Taekwondo ITF. Este arte marcial le da a Hwoarang la ventaja de atacar desde más lejos que otros luchadores que atacan con los brazos. Aunque Hwoarang también posee habilidades con los brazos. y algunas proyecciones del Hapkido.
Este personaje depende más que nada de los combos para realizar un golpe final muy fuerte, lo cual puede dejar fuera de combate a sus contendientes, realizando una serie de combos aéreos, que no dejan caer al rival.
Hwoarang era un discípulo del maestro de Taekwondo y Hapkido Baek Doo San, que había participado en el II Torneo del Rey del Puño de Acero. Hwoarang era un luchador de espíritu competitivo e impulsivo, deseoso siempre de poner a prueba sus habilidades en luchas callejeras por dinero. Hwoarang solía estafar a sus competidores, fingiendo tener menos habilidad de la que realmente poseía, de esa forma subía las pujas y después vencía a sus oponentes con su enorme destreza en el Taekwondo. Esto fue así hasta que un joven llamado Jin Kazama lo desafió a un combate, ante el que solo pudo empatar. Herido en su orgullo, Hwoarang regresó con su maestro Baek para mejorar y poder tomarse la revancha llegado el día.
Cuando se disponía a acudir a uno de los entrenamientos con su maestro, descubrió que este había desaparecido y que había sido atacado por una criatura llamada Ogre. Poco después se convocaba el III Torneo del Rey del Puño de Acero y Hwoarang se disponía a inscribirse, dispuesto a vengar a su maestro y a tomarse la revancha con Jin Kazama.
De vuelta a su hogar en Corea del Sur, Hwoarang fue llamado a realizar el servicio militar. Por sus extraordinarias habilidades y capacidades de combate, Hwoarang fue asignado a la unidad de fuerzas especiales. Pese a su eficacia en el cumplimiento de misiones, Hwoarang se hizo conocido por su carácter rebelde y su tendencia o desobedecer o incumplir órdenes, lo que dio más de un dolor de cabeza a sus superiores.
La vida militar hacía sentirse vacío a Hwoarang. Añoraba ganarse la vida en peleas callejeras y tomarse la revancha con Jin Kazama; el ejército no podía llenar ninguna de estas necesidades. Al oír que se convocaba el IV Torneo del Rey del Puño de Acero, la sangre de Hwoarang volvió a arder como hacía años que no había hecho. Abandonó la base militar y acudió a inscribirse de inmediato, dispuesto a derrotar a Heihachi Mishima y a Jin Kazama.
Durante el pasado torneo, el ejército surcoreano arrestó a Hwoarang por deserción, justo cuando se disponía a combatir contra Jin Kazama.
Hwoarang fue enviado a prisión, hasta que recibió una carta del embajador de Corea (la carta estaba firmada por su antiguo maestro, al que él creía desaparecido, Baek Doo San). Hwoarang quedó estupefacto y exigió ser liberado de prisión de inmediato. Tras volver a Corea, Hwoarang cumplió el servicio militar restante y se preparó para culminar su enfrentamiento con Jin Kazama en el V Torneo del Rey del Puño de Acero.
En el pasado torneo, Hwoarang por fin vio cumplido su ansiado objetivo de derrotar a Jin Kazama. Sin embargo, cuando creyó que ya había triunfado, Jin se incorporó transformado en su versión demoníaca, Devil Jin. Jin derrotó entonces de forma brutal a Hwoarang, el cual creyó que había llegado su hora, antes de caer inconsciente. Al despertarse, se encontró que estaba en un hospital.
Baek Doo San, su maestro, le contó lo sucedido, afirmando que había estado al borde de la muerte. Pese a estar convaleciente, Hwoarang rogó a su maestro que volviera a entrenarle, con una modestia y desesperación que Baek nunca había visto en su pupilo. Meses después se convocaba el VI Torneo del Rey del Puño de Acero, y Hwoarang se preparaba para tomarse su venganza sobre Jin.
Hwoarang ve a un hombre como su rival: Jin Kazama. Jin, mientras era Presidente de la Mishima Zaibatsu, le declaró la guerra al mundo entero, y en un confuso incidente desapareció de repente, sin dejar rastro. Sospechando que hay algo más sobre la desaparición de Jin de lo que se reveló al público, Hwoarang juró encontrarlo.
Con solo un puñado de información confiable a la mano, se dirigió a Medio Oriente. Después de una serie de puntos muertos, Hwoarang escuchó el rumor de un demonio que había aparecido en un pueblo. Sin pensarlo dos veces, se subió a su motocicleta y se dirigió hacia allá.
Cuando llegó, el lugar había quedado vacío, salvo por Jin Kazama en su forma demoniaca.
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