Felipa Cartas Orozco, conocida artísticamente como Lina Marín, fue una actriz mexicana de ascendencia zapoteca, recordada por su participación en el largometraje estadounidense Un hombre llamado Caballo (A Man Called Horse, 1970) y por su papel estelar al lado de Gaspar Henaine «Capulina» en la película cómica El bueno para nada (1973).
Nació en la región del Istmo de Tehuantepec, en el municipio de Unión Hidalgo, Oaxaca. A los 14 años se fue a vivir a la Ciudad de México, donde debutó en cine en la película El derecho de nacer en 1966.
Tuvo papeles secundarios relevantes en La marcha a Zacatecas y El último pistolero (ambas de 1969) antes de interpretar a una indígena sioux llamada Thorn Rose (Rosa de Espina) en Un hombre llamado Caballo, película con la que se dio a conocer a nivel internacional.
Después participó en Espérame en Siberia, vida mía (1971), con Mauricio Garcés; Chanoc contra el tigre y el vampiro (1972), con Gregorio Casal; Tacos al carbón (1972), con Vicente Fernández; El rey de Acapulco (1972), con Capulina; y El Payo - un hombre contra el mundo (1972), con Jorge Rivero.
En 1973 se estrenó su segunda película con Capulina, El bueno para nada, en la que destacó interpretando el principal papel femenino: María, la novia indígena de Capulina y empleada doméstica de Susana Alexander y Pancho Córdova. Su actuación en dicha película fue su mayor logro en el cine mexicano, y demostró que, además de ser una gran belleza, la actriz también tenía dotes para la comedia.
Retornó al cine a mediados de los ochenta con una participación en la película Lo que importa es vivir (1987).
Falleció en 1989,cáncer de seno. Le sobreviven dos hijos.
víctima deUna sala de cine en el Centro Cultural Herón Ríos de Juchitán de Zaragoza lleva su nombre.
En 2016, se le rindió un homenaje en Unión Hidalgo en el que se inauguró un mural conmemorativo y se estrenó un cortometraje.
Escribe un comentario o lo que quieras sobre Lina Marín (directo, no tienes que registrarte)
Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)