Luis María Martínez y Rodríguez fue un obispo mexicano y Arzobispo Primado de México, trigésimo segundo sucesor de Fray Juan de Zumárraga y custodio de la venerada imagen de la Virgen de Guadalupe del Tepeyac.
Nació el 9 de junio de 1881 en la Hacienda Molino de Caballeros del Municipio de Epitacio Huerta lo que ahora es el poblado de San Antonio Molinos en el occidental estado de Michoacán. Fue hijo de Rosendo Martínez y de Ramona Rodríguez; al morir su padre lo amparó su tío materno el P. Casimiro Rodríguez. En enero de 1891 ingresó al Seminario Menor de Morelia. En 1897 pasó al Seminario Mayor.
El 20 de noviembre de 1904, recibió el Sacramento del Orden con el grado de Presbítero en la Capilla del Arzobispo, siendo nombrado Profesor del Seminario y poco después Vicerrector, cargo que desempeñó durante 32 años. Siendo Canónigo de la Catedral de Morelia fue designado Administrador Apostólico de la Diócesis de Chilapa el 6 de noviembre de 1922.
Fue consagrado Obispo Auxiliar de Morelia el 30 de septiembre de 1923. y coadjutor de a misma arquidiócesis el 10 de noviembre de 1934. Tras conocer a la Beata Concepción Cabrera de Armida, Monseñor Martínez, se une a las Obras de la Cruz, haciendo votos como Misionero del Espíritu Santo.
Fue elegido para guiar la Arquidiócesis Primada de México el 20 de febrero de 1937, teniendo en cuenta sus virtudes, gran prudencia y su amistad con la familia del presidente Lázaro Cárdenas, dada la delicada situación que atravesaba el país, como por ejemplo, el término de la Segunda (1932-1934) o la continuación de la Guerra Cristera (1926-1929). Ejerció su ministerio con prudencia, inteligencia y benevolencia logrando la paz entre la Iglesia y el Estado hasta su muerte el 9 de febrero de 1956.
En 1942 apareció en las primeras escenas de la película mexicana Jesús de Nazareth.[cita requerida]
Fue nombrado miembro correspondiente de Academia Mexicana de la Lengua el 15 de mayo de 1950; pocos años más tarde fue nombrado miembro de número, tomó posesión de la silla XXIV el 30 de diciembre de 1953. Luis María Martínez era llamado "el santo del Espíritu Santo"; en el árbol genealógico se encuentra Josefa Martínez Sámano; luchadora incansable y ejemplo de vida, procreó 6 hijos. Sus restos reposan en la cripta de los arzobispos de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México y actualmente se encuentra en proceso de beatificación.
Escribe un comentario o lo que quieras sobre Luis María Martínez y Rodríguez (directo, no tienes que registrarte)
Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)