Copa Mundial de Fútbol de 2006/Grupo G

El Grupo G de la Copa Mundial de Fútbol de 2006, realizada en Alemania, estuvo compuesto por cuatro equipos. Los cuatro equipos se enfrentaron en partidos de 90 minutos, totalizando seis encuentros. Los dos equipos con mayor número de puntos de acuerdo a las reglas del torneo clasificaro a la segunda ronda.

El Grupo G era considerado por los expertos como un grupo regular y sin grandes candidatos. Sin embargo, los cuatro equipos llegaban con ganas de cumplir diversas metas. Mientras Francia debía borrar la pésima impresión que dejó en la Copa Mundial de Fútbol de 2002 donde fue eliminada en primera ronda en la peor presentación de un campeón defensor, Corea del Sur debía tratar de revalidar su cuarto lugar en el torneo previo realizado en su país. Por otro lado, Suiza regresaba a la Copa Mundial tras 12 años de ausencia en la que sería la primera prueba de la selección de Köbi Kuhn en su proyecto de convertir al seleccionado en el campeón de la Eurocopa 2008, a realizarse en su país en conjunto con Austria. Togo, en tanto, llegaba a su primera Copa Mundial por lo que trataría de dejar al menos una grata impresión.

En la primera ronda de partidos, Togo comenzó dando la sorpresa al ponerse en ventaja durante el primer tiempo frente a Corea del Sur, pero éstos lograron remontar el resultado en la segunda mitad dejando el marcador 2:1 a favor de los asiáticos. En el otro encuentro, Francia y Suiza quedaron empatados sin goles al igual que en los dos partidos de las clasificatorias europeas en que se enfrentaron. En tanto, surgieron los rumores de quiebres en el seleccionado francés y el veto del entrenador Raymond Domenech al delantero David Trezeguet.

Tras los primeros resultados, los cuatro equipos tratarían de lograr alguna ventaja en la siguiente ronda de encuentros. Suiza derrotó fácilmente a Togo por 2:0, eliminando al equipo africano. Francia se enfrentó a Corea del Sur y en los primeros minutos logró anotar por medio del goleador Thierry Henry. El gol fue el primero en un Mundial desde que Francia levantó la Copa Mundial de Fútbol de 1998 y parecía que además rompería la racha sin victorias desde esa oportunidad. Sin embargo, a 9 minutos del final, Park Ji-Sung arruinó la celebración gala anotando el gol del empate.

En los últimos dos partidos, los europeos y los coreanos se jugarían todo con tal de alcanzar el cupo clasificatorio. Francia se encontraba en desventaja, ya que si no ganaba por más de dos goles de ventaja o si en el partido de Suiza y Corea del Sur se producía un empate, serían eliminados. Domenech apostó con un cuadro ofensivo integrando a Trézéguet desde el inicio. Suiza y Corea, en tanto, luchaban no solo por la clasificación sino que también por alcanzar el primer puesto del grupo y así enfrentar al segundo lugar del Grupo H.

Finalmente, el combinado helvético derrotó a los coreanos por 2:0, mientras Les Bleus registraron igual marcador ante Togo, permitiendo la clasificación a los octavos de final de ambos equipos y la eliminación de togoleses y sudcoreanos.