La Cumbre de Washington fue una reunión internacional que trató de la reforma del sistema financiero mundial, y contó con la presencia del llamado G-20, grupo de países más desarrollados, y los más grandes de los países en desarrollo. Propuesta por la Unión Europea y organizada por Estados Unidos, esta cumbre se celebró el 15 de noviembre de 2008 en la capital estadounidense.
Así, la cita se celebró en un contexto de desestabilidad política y económica tras los derrumbes bancarios y bursátiles y una crisis financiera global que ha requerido la intervención pública en el mercado. Por su potencial relevancia la cita ha sido comparada con los Acuerdos de Bretton Woods celebrados en 1944 tras la Segunda Guerra Mundial y que convirtieron el dólar estadounidense en moneda internacional.
Sobre la celebración de la cumbre el 26 de septiembre de 2008 Nicolas Sarkozy, jefe de estado francés y presidente de turno de la Unión Europea, planteó que "deberíamos replantear el sistema financiero desde cero, como en Bretton Woods.”
Por otra parte, el día 13 el primer ministro británico Gordon Brown añadió que los líderes mundiales deberían acordar un nuevo sistema económico. "Tenemos que celebrar un nuevo Bretton Woods, construyendo una arquitectura financiera internacional nueva para los años venideros." Sin embargo, su declaración defendía la continuación de la globalización y el libre mercado contra volver a una tasa de cambio fija, como el patrón oro opuesto a la idea de Sarkozy que respondió que el modelo anglosajón de mercados irrestrictos ha fracasado.
Tras la inoperancia de la 34ª Cumbre del G-8 por la falta de los países emergentes el presidente estadounidense George Bush declaró que en principio estaban invitados a la cumbre los gobiernos miembros del G-20: es decir el G-8 más Argentina, Australia, Brasil, China, India, Indonesia, México, Arabia Saudita, Sudáfrica, Corea del Sur, Turquía y representante de la Unión Europea. Los organismos financieros del FMI y el Banco Mundial también suelen participar en las reuniones del G-20, un grupo que fue constituido para responder las turbulencias financieros de 1997-99 con políticas comunes para promover estabilidad financiera internacional. A pesar de la importancia del G-20 el grupo omite unos 170 gobiernos de otros países (192 países son miembros de la ONU).
Aunque a grandes rasgos la fórmula del G-20 se corresponde aproximadamente a la distribución de los 20 países, deja de lado a España y Holanda, dado que se considera que al estar representada la Unión Europea, los países que no estaban antes en el G-8, lo estarían por medio de la UE. España no entraba en el G-8 original (que incluye en cambio a países de similar PBI como Rusia y Canadá) ni tampoco entra en la categoría de país subdesarrollado que amplía el G-20 (por este criterio también se excluye a Holanda, Suecia y Bélgica, más desarrollados económicamente que Indonesia, Arabia Saudita, Sudáfrica y Argentina) El gobierno español sobre la base de la relevancia de la cumbre declaró su intención y deseo de participar en la cumbre organizada por el gobierno estadounidense. José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente del Gobierno español, declaró que España tiene que estar. Para ello se contactó con Washington y a través de la diplomacia con sus aliados, recibido tanto el apoyo interno del jefe de Estado, el rey Juan Carlos I y del líder de la oposición, Mariano Rajoy como de organizaciones como la Unión Europea y varios Estados Iberoamericanos y también de numerosos países del G-20 que declararon el apoyo a la participación española: El presidente francés Nicolás Sarkozy pidió a Bush la asistencia de España a la cumbre. Finalmente, España participó en la reunión y, para que no ser visto como una inclusión particular, se incluyó también a Holanda.
La cumbre, aprobó por unanimidad
los siguientes acuerdos:Adoptó, además, los siguientes compromisos:
Escribe un comentario o lo que quieras sobre Cumbre de Washington (directo, no tienes que registrarte)
Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)