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Dioses hinduistas



Los devas son deidades benévolas en el hinduismo y el budismo.

Posteriormente fueron asimilados también a las creencias esotéricas occidentales.

Deva proviene de la palabra protoindoeuropea *deiwos,[1]​ un adjetivo que significaba ‘celestial’ o ‘brillante’, el cual es un derivado vrddhi de la raíz *diw,[1]​ que significa ‘brillar’ (especialmente el cielo iluminado por el día). El femenino en sánscrito es devī (en protoindoeuropeo *deiwih2),[1]​ que significa ‘diosa’.


En idioma avesta el cognado era daeva, que tenía una connotación peyorativa. En el zoroastrismo posterior, los daevas eran seres malignos; pero este significado no es evidente en textos más antiguos.

La pareja de dioses Mitra-Varuna en el Rig-veda es sorprendentemente similar a la par Mithra-Ahura en el Yasna. En el Zend avesta, sin embargo, los daevas son retratados con cualidades guerreras como fuerzas opuestas de los ahuras (que son afines a los asuras hinduistas).

También cognados de los devas son:

Existe un nombre propio protoindoeuropeo relacionado pero distinto: *Dyeus, que ―aunque tenga la misma raíz diú (‘[cielo] brillante’)— originalmente puedo haberse referido al cielo, y de ahí viene el «Padre del Cielo», el dios principal del panteón indoeuropeo, que continuó en el dios sánscrito Dyaus.

En la India se convirtió en el sánscrito Dyaus Pitar (padre de los dioses), en Grecia sería Zeus Pater y en Roma Iu-Piter (Júpiter).

En el idioma hindi moderno, a los devas se los conoce como dévatas.

La palabra romaní (gitana) para «dios», del o devel, desciende directamente de dévata.

El panteón en la tradición srauta consiste en varios dioses y diosas. Los principales dioses varones son los siguientes:

Las principales devis (diosas) son:

Los Vedas contienen mantras para complacer a los devas y obtener así bendiciones. El Rig-veda, el más antiguo de los cuatro Vedas, enumera 33 devas, que más tarde los Puranas aumentaron a 330 millones.[2]

Algunos devas representan las fuerzas de la naturaleza y otros representan los valores morales. Los principales devas abordados en el Rig-veda son Varuna, Mitra e Indra. El Aitareia-brahmana en su primera estrofa sugiere que entre los devas hay jerarquías.[3]

Todos los dioses en su conjunto son adorados como los Vishvedevas.

Varuna tiene el doble título de deva y asura.

Las Upanishads distinguen entre los dioses celestiales y las formas divinas de Dios. El Brijad-araniaka-upanishad habla de 33 dioses en los mundos celestiales, en términos de la realización de rituales e iagñás (‘sacrificios’) védicos.


Para los budistas, los devas son seres que habitan diferentes cielos donde gozan de los placeres en recompensa a sus buenas acciones anteriores, ya que aún no han superado los niveles kármicos y están sujetos a nuevos renacimientos.

Los devas serían igualmente seres superiores o etéricos de varios tipos, también llamados “espíritus de la tierra”.

Según el pensamiento esotérico, los devas habitan y gobiernan los objetos naturales (como árboles, ríos, montañas, plantas o minerales) y apoyan a la evolución del planeta.

A los devas se les relaciona con seres de otras culturas, así los persas les llamaban dev, los judíos elohim, los antiguos egipcios afries y los africanos orishás.

En el tomo 18 de la Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana (Espasa) (la cual se encuentra en el dominio público porque su copyright es anterior a 1929) los devas aparecen con el nombre de deutas. Los define así:

Según las creencias búdicas [en realidad, según las creencias hinduistas], los Deutas nacieron del más antiguo de los bracmanes [sic, por brahmanes], pertenecen a una raza inmortal y entre ellos figura el Sol, la Luna, y las estrellas, que disfrutan de alma y vida propias. También son convertidos en Deutas después de su muerte, los hombres que lo merecen por su virtud.

Pero en realidad solo doce devas son hijos de Aditi.



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