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Francisco III de Este



Francisco III de Este (Francesco Maria, Palacio Ducal, 2 de julio de 1698 - Palazzo Estense, 22 de febrero de 1780) fue duque de Módena y Reggio desde 1737 hasta su muerte en 1780. Fue también señor de Varese entre 1765 y 1780.

El príncipe Francisco María nació el 2 de julio de 1698 en el Palacio Ducal de Módena, como el hijo mayor del duque Reinaldo III de Este y Carlota de Brunswick-Luneburgo. Tras la alianza entre Francia e Inglaterra, su padre se adhirió a ella y consiguió comprometer a su hijo con la princesa Carlota Aglaé de Orleans, hija del regente Felipe II de Orleans, quien recibió una gran dote de 1.8 millones de libras, la mitad de la misma aportada por el rey Luis XV. Según los escritos de la princesa Palatina, abuela de Carlota, Francisco se enamoró de su futura novia con tan solo ver su retrato.[1]

El contrato matrimonial de Francisco y Carlota Aglaé fue firmado el 31 de enero de 1720, seguido de una ceremonia en el Palacio de las Tullerías en febrero; el hermano de la novia, el duque de Chartres ocupó el lugar de su futuro cuñado. La pareja se casó en persona el 21 de julio en Módena.[2]​ En septiembre de ese mismo año, su joven esposa contrajo viruela y durante la enfermedad, a Francisco se le prohibió verla, tiempo durante el cual se hospedó en su villa de Sassuolo hasta su recuperación. A pesar de la buena disposición del príncipe, el matrimonio estuvo condenado desde el comienzo; Carlota había sido casada con Francisco en contra de su voluntad y se aburría mortalmente en Módena, queriendo a toda costa, separarse de este. El matrimonio fue también criticado por no haber producido ningún hijo, aunque la culpa de ello recayó sobre Carlota Aglaé.

Cuando el romance secreto de su esposa con el duque de Richelieu fue descubierto en la corte de Módena, Carlota Aglaé fue exiliada a Francia. Después de la muerte de esta en 1761, Francisco se casó dos veces más morganáticamente con Teresa Castelberco, viuda Simonetta y luego con Teresa Renata d'Harrach, viuda Melzi. Su nieta María Beatriz de Este, duquesa de Massa fue el último de los Este de Módena.

Actuó como apoderado del novio de su hermana Enriqueta de Este en 1728, que se casaba con Antonio Farnesio, duque de Parma. En 1741, Francesco III arregló el matrimonio de su hijo Hércules con María Teresa Cybo-Malaspina, heredera del Ducado de Massa y Carrara, y así Módena adquirió la ambicionada salida al mar.

Francisco fue también el gobernador interino del ducado de Milán, entre 1754 y 1771.

Para restaurar las finanzas exhaustas del Ducado después de la Guerra de Sucesión Española, polaca y austriaca, Francisco se vio obligado a vender las obras de arte más preciadas de la Galería Estense, por 100.000 monedas de oro al Elector de Sajonia y rey de Polonia, Augusto III, que las trasladó a Dresde.

Se acercó cada vez más a Austria, y por sugerencia inglesa, en 1753 organizó el matrimonio de su nieta María Beatriz de Este (el único descendiente de su hijo Hércules y María Teresa Cybo-Malaspina) con el archiduque Fernando Carlos de Habsburgo-Lorena, hijo de María Teresa I de Austria, a cambio de la garantía de la supervivencia imperial el ducado como una entidad separada de los dominios de los Habsburgo. Además, obtuvo el nombramiento como "Administrador y Capitán General de la Lombardía austríaca" hasta la mayoría de edad de archiduque, que entonces asumió las funciones de gobernador.

Un hombre prudente y hábil administrador, el duque se dio cuenta de que el cargo que le había sido conferido sólo tenía funciones honorarias, por lo que se adaptó y dejó la mayor parte de la política financiera en manos del plenipotenciario austríaco, Beltramo Cristiani.

Él intentó de todas formas en los primeros años, llevar a cabo una política exterior independiente de los vieneses, pero la reversión de la alianza, acontecida en 1756, se llevó cada espacio de maniobra. Luego trató de aprovechar al máximo los beneficios económicos que su cargo le ofrecía, entrando al mismo tiempo en buenas relaciones con la aristocracia lombarda, gracias al contrato de matrimonio con Teresa Castelbarcos, viuda del conde Antonio Simonetta.

El 23 de junio de 1765 la emperatriz María Teresa I de Austria decidió transformar la ciudad de Varese, en feudo intransferible, y la concedió a Francisco III, que hizo la entrada oficial el 2 de julio de 1766, recibido por una gran fiesta.

El duque se estableció en Villa Orrigoni, en pleno centro, que hizo que transformar y ampliar gradualmente, transformándola en el actual Palacio Estense. También construyó un gran jardín, inspirado en el palacio de Schönbrunn en Viena. Desde el punto de vista del gobierno, introdujo nuevas y más estrictas normas de higiene para la masacre de los animales, reorganizó el sistema escolar de la ciudad, fijó visitas médicas gratuitas para los más pobres y favoreció con actos de mecenazgo el desarrollo de la cultura (espectáculos de teatro, bailes públicos y salas de juego).

Fue soberano iluminado, aunque libertino en la moral: regula la planificación urbana de Módena e introdujo la numeración de las casas, instituyó el hospital, el Albergo dei Poveri, hoy el Museo del Palacio, el Jardín Botánico y construyó la Vía Vandelli que conectaba Módena con la Toscana y el mar Tirreno e hizo escribir, primer soberano de Italia, un código de leyes, el famoso "Código Estense" de 1771, que fue el progenitor de todas las codificaciones del siglo XIX.

A pesar de todas las dificultades causadas por las tensiones entre las grandes potencias de Europa, demostró ser un duque mucho mejor de lo que era de esperar de su comportamiento como príncipe heredero. Se adhirió a los ideales de la Ilustración y esto repercutió positivamente en la situación económica debido a la confiscación de bienes eclesiásticos, la «renovación» urbana de la capital, la introducción de las primeras máquinas, crearon desarrollo y empleo.

El duque murió en su villa en Varese el 22 de febrero de 1780, resignado a la extinción de la familia, dada la falta de herederos varones de su hijo Hércules III, aunque en el contrato de matrimonio de su nieta con el archiduque de Austria estaba previsto que los hijos heredan el nombre de Este y, posteriormente, los duques serán indicados como Austria-Este.

Fue enterrado en el convento de los frailes capuchinos de Casbeno (cuyas estructuras se han incorporado a la escuela secundaria Ernesto Cairoli). Sus restos fueron posteriormente trasladados al cementerio de Giubiano, en los nichos del antiguo edificio, más precisamente en el columbario 166. Su hijo, el príncipe Hércules le sucedió.

Francisco y Carlota Aglaé tuvieron diez hijos, seis de los cuales sobrevivieron a la infancia:

También tenía algunos hijos ilegítimos:




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