Gobierno de Salvación Nacional de Siria
El Gobierno de Salvación Nacional de Siria es el nombre con el que se conoce al auto proclamado Estado sirio ubicado dentro de la zona desmilitarizada de Idlib en el marco de la guerra civil siria creado desde la ruptura de la oposición siria.
Al ser un gobierno no reconocido por ninguna entidad su territorio era compartido con la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria hasta 2019.
Tras la cumbre de Teherán de septiembre de 2018, los garantes de la pacificación de Siria: Rusia e Irán por un lado y Turquía por el otro acordaron crear la zona desmilitarizada de Idlib, una región geopolítica que en teoría debía ser un área de separación entre los rebeldes sirios y las fuerzas armadas árabes del presidente Bashar al-Ásad repartido entre las gobernaciones de Alepo, Idlib, Hama y Latakia. En la práctica los rebeldes se enfrascaron en una guerra de guerrillas entre ellos por el control del territorio interno, siendo el principal origen de esto las disputas que se habían generado por la intromisión forzada de otros rebeldes —traídos principalmente del sur y centro de Siria— a la región que rivalizaba con la hegemonía ya existente, igualmente las diferencias políticas ideológicas fueron un factor para la crispación y la necesidad de imponer un orden gubernamental, los autóctonos tenían más cercanía a Turquía y pertenecen al islamismo moderado mientras que los de afuera tenían más cercanía a las monarquías del Golfo, a Estados Unidos y pertenecen al islamismo radical.
A pesar de la convulsionada situación de la zona desmilitarizada los principales financiadores (Estados Unidos, Turquía, Monarquías del Golfo y varias naciones europeas) de la oposición siria si habían creado una entidad administrativa en el lugar desde 2012, la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria, conocido locamente como el Gobierno Interino de Siria, pero ésta se vio menguada con la llegada de la organización Tahrir Al-Sham, vinculada a Al-Qaeda, que comenzó a ganar adeptos ante la ineficiente gestión del gobierno interino y a ser proclamado como «el verdadero gobierno de Siria». Esto llevó a que la Coalición Nacional tenga que aceptar una especie de diarquía con Tahrir Al-Sham si quería seguir teniendo presencia en Idlib.
Entre las concesiones estaba la administración civil que era llevada a cabo por consejos locales dirigidos cooperativamente entre el gobierno interino y el grupo islamista. Para Tahrir Al-Sham no fue del agrado compartir el poder con la menguante coalición por lo que antes de finales de 2018 prefirió dar importancia en consolidar territorio para sí mismo anexándose pequeños grupos rebeldes no miembros de la Coalición ubicados al sur de la zona desmilitarizada, esta última se hacía de la vista gorda con la esperanza que de esa forma Tahrir Al-Sham se retire de su territorio o por lo menos poder recuperarse y expulsarlos militarmente hacia las áreas periféricas de la zona desmilitarizada.
De agosto a septiembre de 2017 Tahrir Al-Sham celebró la Conferencia General Siria, en donde se acordó crear una asamblea constituyente y que se decida un primer ministro para todo los territorios bajo control de la organización islamista. La Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria rechazó está decisión, la Federación Democrática del Norte de Siria también envió un comunicado a la Coalición mostrando su total apoyo al rechazo del proyecto de Tahrir Al-Sham, la organización islamista se pronunció:
La medida fue vista como parte de un intento de Tahrir Al-Sham de imponer su control sobre la región. La asistencia del coronel del Ejército Libre Sirio Riyad al-Asad a la conferencia fue polémica, a pesar de que formaba parte de la política de la Coalición de no intervención en las acciones de Tahrir Al-Sham. Esto no salvó a al-Asad de comentarios polémicos, dentro de la propia Coalición incluso, como forma de defenderse al-Asad expresó que "Tahrir al-Sham ha declarado previamente que se disolverá solo y se unirá a la Coalición, lo cual es una demanda externa e interna que les hicimos", también agregó que no tiene comunicación con ellos desde la conferencia. Sin embargo, el Ejército Nacional Sirio y el Frente Nacional para la Liberación (una rama de la Coalición que no se encontraba de acuerdo con la convivencia con Tahrir Al-Sham y que por tal fue expulsado) condenaron a al-Asad, así como a toda la cabeza de la Coalición de conspirar en favor de Al-Qaeda para mantener su poder.
El 11 de septiembre de 2017, la Conferencia General formó el Gobierno de Salvación Nacional de Siria. Siguieron semanas de conflictos entre el nuevo gobierno y la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria, el 12 de diciembre del mismo año Tahrir Al-Sham tomo el control de las oficinas de los consejos locales, aprisionando a los empleados públicos de la Coalición Nacional.
El 6 de enero de 2018, el Gobierno de Salvación Nacional declaró el control sobre la Universidad Libre de Alepo, administrada por la Coalición, y cerró varias facultades en las ciudades de al-Dana y Sarmada, al norte de la gobernación de Idlib, donde estudian 4.000 estudiantes. Esto dio lugar a protestas de los estudiantes y profesores de la universidad contra el nuevo gobierno.
El 11 de marzo de 2018, aviones rusos habrían disparado un misil contra el Ministerio de Justicia del Gobierno de Salvación Nacional al este de la ciudad de Idlib.
Para finales de diciembre de 2018 el control de la Coalición Nacional sobre el territorio de la zona desmilitarizada era ya mínimo, se iniciaron revueltas muy violentas de ambos bandos, por un lado los que nombraban al Gobierno de Salvación Nacional como el legítimo representante de los sirios, así como otros que no aceptaban dicha afirmación. A pesar de esto la Coalición prefería seguir con su política de no intervención, la consecuencia fue el alzamiento del Frente de Liberación de Siria, el sector más beligerante de la Coalición, y asesinar de manera selectiva a varios funcionarios del Gobierno de Salvación Nacional.
Esto fue la luz verde para iniciar el verdadero plan de expulsión total de la Coalición, el Frente de Liberación de Siria al ver esto pidió ayuda al Ejército Nacional Sirio y éste a su vez lo invitó a unirse al Frente Nacional para la Liberación. Para el 1 de enero de 2019 Tahrir Al-Sham lanzó una campaña relámpago contra toda la Coalición Nacional, el 9 de enero de ese mismo año, la Coalición reducida a las áreas periféricas de la zona desmilitarizada pidió un tratado de paz, Tahrir Al-Sham aceptó con la condición de que todo el Frente Nacional para la Liberación así como toda la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria se retire lo más ante posible de todo la zona desmilitarizada de Idlib.