Thrawn es un personaje ficticio del universo expandido de la serie La guerra de las galaxias. En el universo de ficción de la obra tiene el grado de Gran Almirante y es considerado uno de los más brillantes estrategas imperiales.
Aparece por primera vez en el «universo expandido» en la trilogía creada por Timothy Zahn, dentro de las obras Heredero del Imperio, El resurgir de la Fuerza Oscura y La última orden. En esta saga, Thrawn toma el mando sobre los restos del Imperio, reconstruyéndolo y poniendo en jaque a toda la Nueva República.
Sus orígenes se explican en la obra «Vuelo de expansión», también de Timothy Zahn. En este libro, ambientado en un período anterior a las Guerras Clon, aparece Thrawn como comandante de las fuerzas Chiss.
En 1994 Lucasarts hace aparecer a Thrawn en el juego TIE Fighter (simulador espacial) y durante el transcurso del juego es ascendido por el mismo Palpatine del grado de vice-almirante al de Gran Almirante. Es además el desarrollador de algunas naves para el imperio galáctico, entre ellas está el bote de misiles (Missile Boat).
En 2006 hace su aparición en el juego de estrategia del universo expandido Star Wars Empire at War: Forces of corruption, el Almirante Thrawn como personaje controlable, con una clara personalidad de estratega superior, su nave de linea un Destructor Estelar Imperial "Admonitor" con armamento mejorado.
En el canon actual aparece en "Star Wars Rebels" como principal antagonista de la tercera y la cuarta temporada. Esta versión conserva su gusto obsesivo por el arte, más especialmente en el arte mandaloriano, junto con su muy notoria habilidad como estratega. Cabe resaltar que en esta versión es más joven de lo que era en el canon anterior. Al final de la cuarta temporada, desaparece sin dejar rastro, pero sobrevive al intento de asesinato por parte del Jedi Ezra Bridger. Está en paradero desconocido durante toda la Guerra Civil Galáctica, posiblemente reuniendo datos sobre las regiones desconocidas, pero regresó tras la muerte del Emperador, y usó a la Magistrada Morgan Elsbeth para ejecutar algunos de sus planes mientras permanecía en paradero desconocido.
De cara azul y con ojos rojos brillantes cual dos rubíes, el Gran Almirante Thrawn fue el mejor oficial de la flota del Imperio Galáctico. Nativo del planeta Csilla, su nombre original era Mitth'raw'nuruodo y pertenecía al clan Nuruododo. Al unirse al Imperio fue rebautizado Thrawn. Fue un impecable estratega, frío, muy frío, y sobre todo, calculador, una actitud muy valorada en el imperio. Con el tiempo alcanzó el rango de Gran Almirante del Imperio y Vader le entregó como esclavos al pueblo de los noghri.
Este chiss, hábil como todos los de su raza en la táctica y la estrategia militar, era el único alienígena de los doce Grandes Almirantes del Imperio Galáctico. Estaba asignado al destructor victoria Venganza del ambicioso inquisidor Jerec. Junto a él aprendió secretos de la Fuerza, lo que le serviría a Thrawn para enfrentarse a rivales Jedi. Jerec, a cambio, aprendió de las habilidades militares de Thrawn.
Después de la batalla de Hoth, Thrawn ya era un Vicealmirante. Uno de los doce Grandes Almirantes, Demetrius Zaarin, comenzó una revuelta contra el Imperio para intentar suplantar al Emperador. Como Vader estaba demasiado ocupado con su disputa personal contra el príncipe Xizor del Sol Negro, fue Thrawn quien se hizo al mando de los ejércitos imperiales para eliminar al traidor. Aunque Zaarin empleaba los nuevos TIE Vengadores y Defensores, Thrawn no tardó en conseguirlos y emplearlos en su propia flota. Finalmente, Thrawn consiguió derrotar a Zaarin en una espectacular batalla final. Esta hazaña le sirvió para que el Emperador le nombrara Gran Almirante. Tras pasar algo de tiempo junto al Emperador con su nuevo rango, acudió junto al Gran Almirante Miltin Takel para ver los planos de la segunda Estrella de la Muerte en construcción. No mucho después, Thrawn partió a las regiones desconocidas a expandir el Imperio. Por aquella época su destructor personal era el Admonitor.
Cinco años después de la nefasta batalla de Endor, Thrawn volvió y se encontró al Imperio destruido y una Nueva República instaurada en su lugar. Con pocos recursos y haciendo gala de su habilidad de predecir las formas de combate de sus rivales, a partir de estudiar el arte de cada raza, Thrawn reconstruyó el Imperio a bordo de su nave insignia "Quimera" (el destructor estelar de Gilad Pellaeon), y estuvo muy cerca de destruir a la Nueva República. Sin embargo, sus sueños se vieron truncados y su guardaespalda noghri llamado Rukh, lo traicionó y le mató.
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