Abu Muhammad al-Hasan ibn Alí (en árabe, أبو محمد الحسن بن علي, Abū Muḥammad al-Ḥasan ibn ʿAlī) (Medina hacia 846 - Samarra 1 de enero de 874), más conocido como Al-Hasan al-Askari (en árabe الحسن العسكري ', al-Ḥasan al-ʿAskarī), fue el undécimo imán de los chiíes duodecimanos, conocido también como as-Ṣāmit, al-Hādī, az-Zakīy otros apodos. Su padre era Ali al-Hadi, y la madre una mujer de nombre Hudayth o Susan.
Su apodo es Abu Muhammad, y su seudónimo es Askari, Zaki. El periodo de su Imanato (Liderazgo) duró 6 años. De ellos, 3 años estuvo en cárcel.
Según la tradición Alí an-Naqí lo designó sucesor poco antes de morir en Samarra en el 868 (el hermano mayor Abu Yafar Muhammad ya había muerto) pero otro hermano, Yafar ibn Alí, se opuso a la designación, y una parte de los seguidores reconocían como imán solo al hijo premuerto (como el imán escondido). Al ser proclamado fue encarcelado por el califa al-Mu'tamid (870-892), y murió prisionero el 1 de enero del 874 en Samarra. Durante su periodo, grupos extremistas realizaron actividades que ya habían comenzado bajo su padre, principalmente los Namiriya (seguidores de Ibn Nusayr en Kufa, los Ishakiya (seguidores de Ishaq ibn Muhammad Nakai al-Basri) en Basora, Bagdad y Madain, y los Hasakiya (seguidores de Alí ibn Hasaka) en Qom.
En la época de Hasan Askari, el chiismo llegó a tener una autoridad grande, debido a que los chiíes no aceptaban el gobierno de los abásidas, sino que creían en al liderazgo de Hasan al-Askari. Por eso los califas abásidas tomaban prisionero al Imán (Líder) del grupo, para que no ocurriera una revolución de los chiíes.
Hasan Askari se enfrentó con los califas abásidas, como hizo su padre, sobre todo porque los Imanes anteriores habían dicho que el Mahdi (el salvador) sería su hijo.
Siempre ha habido muchos recelos entre suníes y chiíes, y ya en la época de Hasan Askari la situación era así. Así que él celebraba reuniones para aclarar los recelos, o educaba a los alumnos para presentar y mostrar los puntos de vista sobre el islam y los chiitas.
Sus seguidores se dividieron a su muerte entre los que suponían que Alá le resucitaría y otros que creían que había dejado un hijo de nombre Muhammad al-Mahdi. De todos los grupos solo los imamíes decían que Alá haría aparecer un nuevo imán, que se llama Mahdi y que era el único hijo de Hasan Askari.
Vivió en el periodo de varios califas abasíes:
El tiempo del Imanato y liderazgo de Hasan Askari comenzó en el año 254 hasta 260 AH (6 años).
Sheyk Tusi dice: «los alumnos de Hasan Askari fueron más de 100 hombres». Los más famosos son:
Los califas abasíes siempre molestaban a los chiíes. Y en el tiempo de vida de Muhammad Ibn Ali, Ali Ibn Muhammad y Hasan Askari en Samarra, la vida era muy difícil y limitada para ellos y los condenó a cortas vidas. Ali Ibn Muhammad y Hasan Askari se enfrentaron con los militares del gobierno abásida y por eso ellos son famosos como los Askariyeyn (Quienes viven entre los militares).
Las limitaciones para Hasan Askari fueron mayores, porque en esta época, el chiismo llegó a ser un poder grande en Irak y por eso el gobierno abásida tuvo miedo de ese poder y movimiento. También los gobernadores supieron que el Mahdi era el hijo de Hasan Askari, y que lucharía contra el gobierno opresivo. Por esa razón le hicieron frente, y los gobernadores abásidas le obligaron a ir los lunes y jueves al palacio del califa.
Finalmente, fue encarcelado por Al-Mu'tazz, que incluso le quería asesinar, pero murió más pronto que Hasan Askari y no pudo hacerlo.
A pesar de todas las presiones del gobierno abásida, el Imán Hasan Askari, se abocó hacia las actividades políticas, sociales y científicas para proteger el islam y las creencias correctas.
Según las narraciones chiíes, Hasan Askari era famoso como “Fuente de ciencias de los sucesores del profeta del Islam” y “Tesorería de la ciencia”. Asimismo él dijo: “hay setenta y tres palabras para Dios y nosotros (Imanes) sabemos setenta y dos de aquellas palabras.”
Hasan Askari vivió en muy malas condiciones en el periodo del gobierno abásida. Pero él como sus padres, educaba a sus alumnos y les enseñaba y celebraba sesiones. Su libro de descripción del Corán, es famoso. Además, formó delegados para tener relación con los chiíes y la gente en todas las tierras islámicas. Sheij Tusi menciona los nombres de 103 de sus alumnos, compañeros y delegados.
En la vida de Hasan Askari en Samarra, los chiíes vivieron en zonas diferentes. Por eso, para tener relación con ellos, eligió unos delegados. Además los chiíes no pudieron visitarle por las malas condiciones de ese tiempo. Un día cuando Hasan Askari quería pasear por la calle, la gente le estuvo esperando pero él escribió una carta y dijo; “Que nadie hable conmigo, porque el gobierno abásida os molestará”.
Por supuesto Hasan Askari y los chiitas tuvieron oportunidades para entrevistarse, pero según las narraciones la mejor manera para tener relaciones entre ellos fue por carta.
Por estas redes, envió cartas a los chiíes, como las que envió a los chiíes de Qom y Aveh o las cartas que envió a Medina. Y también las cartas que envió a Ishaq Ibn Ismail, y a los chiíes de Neyshabor.
A pesar de las limitaciones impuestas a Hasan Askari, tuvo actividades secretas para conseguir sus metas.
Tenía unos delegados para las relaciones con los chiíes, como Aghid. Asimismo los chiíes se relacionaban con Hasan Askari a través de Osman Ibn Saeid, y le dieron Joms y [[azaque]s (limosnas especiales en dinero que los chiíes dan a sus Imanes).
Osman Ibn Saeid, después de la muerte de Hasan Askari, también fue el primer delegado especial del Imán Mahdi.
Otra actividad de Hasan Askar fue ayudar a financiar a los chiíes, porque ellos no tuvieron ningún poder para tener una vida normal.
Hay un libro que se atribuye a Hasan Askari, en el que el Imán glosó el Corán. El libro es una descripción del Corán y se llama Tafsir Al-Askari.
En este libro hay dichos de Hasan Askari sobre la excelencia del Corán y la calidad de leer el Corán y unas narraciones sobre la Ahlul Bayt (La gente de la Casa, o sea los familiares del profeta) y calidad de la vida del profeta del Islam. Pero algunos estudiosos entran en contradicción sobre este libro, y dicen que no es obra de Hasan Askari.
Fue martirizado en Samarra (Iraq), el 8 de Rabi' al-Awwal del año 260 de la Hégira, envenenado cuando solo tenía 28 años.
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