La oreja rota

La oreja rota (L'Oreille cassée) es un álbum de la colección de las aventuras de Tintín, personaje creado por el dibujante belga Hergé.

Esta aventura de Tintín se publicó en álbum en 1937 y fue coloreada en 1943. Una vez más, Hergé hace referencia a situaciones de la actualidad mundial. La guerra entre San Theodoros y Nuevo Rico por culpa del petróleo es un retrato de la guerra del Chaco que enfrentó a Paraguay y Bolivia durante los años 30.

Un fetiche arumbaya ha sido robado del Museo etnográfico y pronto se devolvería un falso fetiche. Tintín ve que el original no tiene la oreja derecha entera. Al día siguiente muere un escultor conocido, Balthazar. Tintín encuentra rara la coincidencia e intenta conseguir un loro de testigo, que se escapa de su dueño. Tintín recupera al loro pero se le escapa y su antiguo dueño aparece intentando robarlo. Al día siguiente es casi atropellado por ese individuo, pero consigue identificar la matrícula y espíar a los malechores. Sus nombres son Ramón Bada y Alonso Pérez. El loro dice el nombre del ladrón y asesino, Rodrigo Tortilla, y le siguen al primer país inventado por Hergé, San Theodoros y matan a Tortilla. Son detenidos pero cohechados y planean cambiar la maleta de Tintín con el fetiche y cambiársela por bombas. Tintín es condenado a muerte pero salvado por una revolución. Conoce al General Alcázar y le nombra coronel y ayudante de campo. Un grupo de excoroneles intenta matar a Alcázar y mientras el general está de baja y conoce al señor Chicklet (que reaparecería en Tintín y el Arte-Alfa) y pretende prenderle la guerra a Nuevo Rico. Ante la negativa del reportero, convence a Alcázar de que Tintín es un espía y es condenado a muerte de nuevo. Con ayuda de Pablo, un coronel que conspiraba que le perdonó la vida (y reaparecería en Tintín y los Pícaros) , huye y se exilia en Nuevo Rico y busca resolver el enigma de los arumbayas, por lo que viaja a la jungla y se adentra con la tribu, y se encuentra a Rigdewell (un explorador que también reaparecería en Tintín y los Pícaros), que le cuenta que Rodrigo Tortilla estuvo con ellos y que el fetiche contenía un diamante que protegía de las picaduras de serpientes a quien lo tocaba. Tintín vuelve a Bruselas y el hermano del escultor fallacido estaba haciendo talla de fetiches en serie y que el fetiche había sido robado por Ramón y Alonso. Los dos bandidos mueren ahogados y Tintín lleva el fetiche al museo sin su diamante, pues cayó al mar a la vez que Ramón y Alonso.

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