x
1

Nuestras Hijas de Regreso a Casa



Nuestras Hijas de Regreso a Casa es una organización de familiares y amigos de víctimas de los feminicidios en Ciudad Juárez, Chihuahua, pionera en la documentación de casos de mujeres desaparecidas o asesinadas en Juárez que vienen perpetrándose desde 1993. Las primeras acciones de la organización se registran en febrero 2001 con protestas públicas por el asesinato de Lilia Alejandra García Andrade asesinada en febrero de ese mismo año. La organización fue registrada legalmente en mayo de 2003.[1]

Las copresidentas de la asociación y fundadoras son Marisela Ortiz y Norma Andrade, maestra y madre, respectivamente, de Lilia Alejandra García Andrade.[2]​ Ambas tuvieron que salir de Ciudad Juárez y viven con asilo político en Estados Unidos. La organización lucha por denunciar y prevenir el feminicidio en esta localidad y contra la violencia de género en el país. Asimismo brindan apoyo a las madres y familiares que han perdido a sus hijas y crean talleres con los hijos huérfanos de las víctimas.

Sus integrantes han sido amenazadas frecuentemente por su reclamo de justicia.[3]​ En enero de 2017, Malú García Andrade, hermana de Lilia Alejandra, también activista de Nuestras Hijas de Regreso a Casa, sufrió un atentado. La camioneta en la que viajaba su escolata fue tiroteada.[4][5]​ En mayo anunció que el gobierno federal la trasladaba "a un lugar seguro".[6]

Como proyecto paralelo y de apoyo encabezan la radiodifusiora "RadioFem: Rompiendo el Silencio", así como el proyecto "Niños y niñas de Ciudad Juárez"[7]​ La organización ha contado con el apoyo de importantes organizaciones internacionales de derechos humanos como Amnistía Internacional. También con el apoyo de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos para lograr documentar los casos de asesinatos.[8]

Sus inicios están registrados a partir de febrero de 2001, con una serie de protestas públicas provocadas por la impotencia y la indignación que se agregan al dolor de perder un ser querido en estas circunstancias, en este caso la desaparición y posterior asesinato de Lilia Alejandra García Andrade.[9]​ En ese año la maestra de Alejandra, Marisela Ortiz Rivera, consternada por el asesinato de su alumna y ante la injusticia en Ciudad Juárez, impulsó a Norma Andrade para crear juntas “Nuestras Hijas de Regreso a Casa”, agrupación que fue pionera en la documentación de casos de mujeres desaparecidas o asesinadas en Juárez.[8]

Durante 2001 fue mi exigencia como mamá ante las autoridades, explica Norma Andrade. “Exigía justicia yo sola, iba a la Fiscalía, hablando en singular, en la situación personal de Alejandra, creyendo toda las mentiras que nos decían las autoridades”. “Pero en el 2002, después de lo de Campo Algodonero, abro los ojos, las mismas organizaciones me hacen abrir los ojos, y conozco a otras mamás del caso y veo que somos muchas. Me doy cuenta de que lo que decían las autoridades eran mentiras, es cuando me integro y empiezo a exigir, ya no sólo como mamá de Alejandra, sino como compañera de otras igual que yo”.[10]

Mujeres jóvenes y de origen humilde, en su mayoría, son raptadas, mantenidas en cautiverio y sujetas a una feroz violencia sexual antes de ser asesinadas y dejadas en lotes abandonados. En algunos casos, sus restos son hallados por transeúntes al cabo de unos días o años después.

En otras ocasiones las mujeres nunca son encontradas y sus familiares tienen que vivir con la angustia permanente de desconocer su destino o paradero.

Todo parece indicar que estas jóvenes son seleccionadas por sus victimarios por ser mujeres sin ningún poder en la sociedad. Suelen ser trabajadoras de las industrias maquiladoras que dominan la economía de Ciudad Juárez; camareras, empleadas en la economía informal o estudiantes. Muchas viven en circunstancias precarias, a veces con hijos que mantener.[11]

Desde 2011 tras numerosas amenazas recibidas Marisela Ortíz y Norma Andrade viven exiliadas en Estados Unidos donde han recibido asilo.[8]

En enero de 2017, Malú García Andrade, hermana de Lilia Alejandra, e hija de Norma Andrade, también activista de Nuestras Hijas de Regreso a Casa, sufrió un atentado. La camioneta en la que viajaba su escolta fue tiroteada.[4][5][12]​ En mayo anunció que el gobierno federal la trasladaba "a un lugar seguro".[6]​ La hija de la activista Norma Andrade cuenta con medidas cautelares, dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos desde 2008.[13]

Miembros de la organización han participado en varios documentales y han apoyado [películas]] y obras de teatro para denunciar este feminicidio:"Seguir viviendo" de Alejandra Sánchez', donde participan Nora Huerta, Jade y Kaleb Garcia Andrade hijo e hija de Alejandra Garcia Andrade "La ciudad del silencio" ("Bordertown") con Jennifer López y Antonio Banderas,[14]​ "Bajo Juárez" de Alejandra Sánchez y José Antonio Cordero producido por Vanessa Bauche, "Juárez: la ciudad donde las mujeres son desechables" de Alex Flores y Lorena Vassolo, "Señorita Extraviada" de Lourdes Portillo, "Ni una más" de Alejandra Sánchez, así como las obras de teatro "Mujeres de Arena" de Humberto Robles y otros autores, "Estrellas Enterradas" de Antonio Zúñiga, "Hotel Juárez" de Victor Hugo Rascón Banda, "Los Trazos del Viento", de Alan Aguilar, "Las muertas de Juárez" del grupo Sinergia, "Mujeres de Ciudad Juárez" de Cristina Michaus, "Rumor de Viento" de Norma Barroso, "Murmullos en el Páramo" de Mercedes Hernández, "Gritos de Justicia" de Leopoldo Ibarra Saucedo, el tributo coreográfico de Rossana Filomarino "Ni una más", entre otras.



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Nuestras Hijas de Regreso a Casa (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!