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Tharsis Sulphur and Copper Company Limited



La Tharsis Sulphur and Copper Company Limited (TOS) fue una empresa minera británica que operó en España durante los siglos XIX y XX, dedicada a la extracción y comercialización de piritas. A lo largo de su existencia explotó varios yacimientos situados en la cuenca minera de Tharsis-La Zarza. En fuentes españolas también es conocida como la Compañía de Azufre y Cobre de Tharsis Limitada,[1][2]​ o simplemente como la «compañía de Tharsis».[3]

Constituida en 1866 por capitalistas británicos, con los años llegó a ser una de las principales sociedades mineras de la provincia de Huelva y una de las principales empresas productoras de piritas de España. La TOS fue propietaria de una línea de ferrocarril que comunicaba las minas con la ría de Huelva, donde construyó un muelle-embarcadero para facilitar la descarga y transporte del mineral extraído vía marítima. Así mismo, la compañía tuvo una gran influencia en la comarca que iba más allá de lo económico. En la década de 1970 los yacimientos e instalaciones de Tharsis pasaron a manos españolas, si bien la empresa continuó operando como una de las principales comercializadoras de piritas en Occidente. La compañía fue disuelta finalmente en 2006.[4]

A mediados del siglo XIX los inversores extranjeros comenzaron a interesarse por las minas de la provincia de Huelva, algunas de ellas con una tradición que se remontaba a la Antigüedad.[5]​ Este fue el caso de la cuenca minera de Tharsis-La Zarza, que desde 1855 fue objeto de importantes inversiones por parte del capital francés. Varias empresas operaron los yacimientos de esta zona, los cuales ofrecían buenas perspectivas de explotación de cara al futuro. Con ese fin, el 27 de octubre de 1866 se fundó en Reino Unido la «Tharsis Sulphur and Copper Company Limited».[6][7]​ En la creación de la compañía intervinieron figuras tales como Charles Tennant, un acaudalado industrial escocés que poseía algunas de las principales factorías químicas del Reino Unido.[8]

Aunque la empresa fue escriturada inicialmente en Edimburgo, la sede social se encontraba situada en Glasgow e inicialmente contó con un capital de 300.000 libras esterlinas.[9]​ La compañía «Tharsis» puso en marcha un ambicioso programa de inversiones en la cuenca con vistas a aumentar la explotación de los cotos mineros.[10]​ Además, también acometió la construcción de una línea férrea para facilitar la salida por mar de los minerales extraídos, la cual se inauguró en febrero de 1871.[n. 1]​ En los primeros años la producción minera de Tharsis experimentó un gran auge y fue de tal calibre que esta llegó a desbancar durante un tiempo a la producción de las cercanas minas de Riotinto.[12]​ Por su parte, la Tharsis Sulphur and Copper Company Limited realizó importantes ampliaciones de capital que le permitieron afrontar con holgura desde la modernización de sus explotaciones mineras en España a la compra de hasta siete plantas industriales en puertos del Reino Unido.[13]

Dos años después de su creación el capital de la empresa fue ampliado hasta un millón de libras esterlinas,[14]​ y con el tiempo también entrarían en su accionariado algunos inversores franceses. El mineral extraído en Tharsis por lo general no solía ser tratado en territorio español; en su lugar, era trasladado por vía marítima al Reino Unido y procesado en las fábricas que allí poseía la empresa. En 1893 la mayor parte de estas plantas fueron vendidas a la United Alkali Company.[15]

Para finales del siglo XIX la Tharsis Sulphur and Copper Company Limited se había erigido como una de las principales empresas mineras a nivel mundial. En una valoración global se puede señalar que los negocios fueron rentables durante el último tercio del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX.[15]​ Como resultado de ello, durante este período la compañía repartió unos elevados dividendos entre sus accionistas.[16]​ Para finales del siglo XIX las actividades de la TOS en la zona de Huelva se encontraban en expansión, logrando esta convertirse en un importante comerciante mundial de azufre. En 1895 adquirió a la Sociedad de Minas de Cobre del Alosno, empresa de capital francés, el complejo de la mina Lagunazo.[n. 2]​ A pesar de esta bonanza, la «Tharsis» tenía una importancia menor en comparación con la actividad que para entonces ya desarrollaba la Rio Tinto Company Limited (RTC).[17]​ Durante aquellos años ambas empresas mantuvieron una abierta rivalidad por dominar el mercado de piritas. Esta circunstancia no impidió que en 1911 la RTC y la compañía de Tharsis llegasen a suscribir un acuerdo mediante el cual procedían a repartirse los clientes.[18][19]

La influencia de la empresa iba más allá de lo meramente económico, haciéndose notar esta en el ámbito político. En 1890 llegó a apoyar activamente junto a la RTC una candidatura «minera» a la Diputación provincial de Huelva formada por José María Parejo Bécquer y Vicente Ferrer Ramírez Cruzado.[20]​ El objetivo conjunto de esta iniciativa era conseguir la derogación del decreto Albareda, que en 1888 había prohibido las calcinaciones de mineral al aire libre por lo contaminantes que eran. Aprovechando el contexto que imperaba a finales del siglo XIX, la compañía de Tharsis también llegó a disponer de una red de representantes en la provincia que defendían sus intereses, entre los cuales sobresalían nombres como Gregorio Arrayás Vizcaíno, Vicente Ferrer Ramírez Cruzado o José María de Monsalve.[21]

La actividad minera en la cuenca generó un gran impacto paisajístico, pues la compañía inglesa acabó optando por una extracción a cielo abierto en detrimento de las labores de contramina. Con los años se llegaron a formar grandes explotaciones como Filón Norte, Filón Sur, Filón Centro, Sierra Bullones o la Corta de los Silos. Para el tratamiento y la clasificación de los minerales la TOS levantó numerosas instalaciones industriales, destacando la planta trituradora de mineral situada en Corrales. El volumen de trabajo conllevó la existencia de una numerosa plantilla, por lo que la compañía estableció poblados mineros en Tharsis, La Zarza y Corrales.

Aunque tradicionalmente la mayor parte de la pirita extraída en los distintos yacimientos de Tharsis tenía como destino la exportación al extranjero, desde mediados del siglo XX una importante cantidad de mineral empezó a ser destinada al consumo nacional. Durante el período comprendido entre 1954 y 1971 la empresa fue el primer vendedor de piritas en España, teniendo unas ventas totales de 6,7 millones de toneladas y un 42,3% de la cuota de mercado.[22]​ Entre los principales clientes de Tharsis se encontraban las sociedades Cros, Industrias Químicas Canarias, Energía e Industrias Aragonesas, Industrial Química de Zaragoza, Compañía Navarra de Abonos Químicos, Sociedad Navarra de Industrias, Sociedad Ibérica del Nitrógeno, Barrau, etc.[23]​ La posición dominante que en esos años llegó a detentar TOS la situó por delante de importantes competidores como la Compañía Española de Minas de Río Tinto o la Sociedad Francesa de Piritas de Huelva.[22]

En 1966 la empresa matriz creó una sucursal en España mediante la cual comenzó a operar, la «Compañía de Azufre y Cobre de Tharsis Limitada».[24]​ Para esa época las principales labores de extracción se desarrollaban en torno a la Corta Filón Norte de Tharsis y en el Pozo Algaida de La Zarza. La empresa llegó a realizar fuertes inversiones de cara a una mayor mecanización de los trabajos mineros y una modernización del parque motor ferroviario, sustituyéndose las viejas locomotoras de vapor.[n. 3]​ Este proceso se vio completado con la adquisición en esas mismas fechas de nuevos vagones de mercancías, con el objetivo de aumentar el volumen de pirita transportado. A mediados del siglo xx la línea férrea vivió su apogeo, llegando a transportar casi un millón de toneladas de mineral al año.[26]

A partir de 1970[27]​ las minas e instalaciones de la zona empezaron a pasar a manos del capital español, en cumplimiento con lo establecido por la Ley de Minas.[28]​ En ese momento la empresa constituía la última gran compañía extranjera que operaba en la provincia de Huelva, en un contexto en que el negocio minero había pasado a estar dominado por españoles. La sociedad anónima Cros, uno de los principales clientes de Tharsis, comenzó a entrar en el accionariado. Este proceso se alargó durante varios años, hasta el período 1978-1979, momento en que se completó la transferencia de los activos a la nueva Compañía Española de Minas de Tharsis.[29]​ A comienzos de la década de 1980 la histórica empresa fue reorganizada y renombrada como «The Tharsis Public Limited Company», sobresaliendo en aquella época como una de las principales comercializadoras de piritas de Occidente. No obstante, con posterioridad su actividad decayó notablemente. La compañía fue disuelta en 2006.[4]

La compañía de Tharsis tenía su domicilio social en Reino Unido, concretamente en la ciudad escocesa de Glasgow. En España la empresa dispuso de una delegación, oficinas y personal para la gestión de la empresa. En la zona de Tharsis se encontraban situadas las oficinas y la dirección operativa de la compañía, así como un pequeño núcleo de población ligado a las actividades mineras. Con los años se llegó a articular una colonia británica formada por los ingenieros y directivos, razón por la cual se levantó el llamado «Pueblo Nuevo» de Tharsis a cierta distancia del casco de Alosno. Esta urbanización fue concebida como un barrio de carácter exclusivo para alojar al staff de la compañía, cuyos miembros hacían vida de forma separada respecto a los españoles.

En la actualidad una parte de los fondos documentales de la compañía se encuentra bajo custodia del Archivo Histórico de las Minas de Tharsis.[30]



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