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Unión Nacional Sinarquista



La Unión Nacional Sinarquista (UNS) es un movimiento político, social y cultural mexicano, fundado el 23 de mayo de 1937 en la ciudad mexicana de León, Guanajuato.

Su ideología la define la propia organización como nacionalista, democrática, cooperativista y social-comunitaria. .

Actualmente el movimiento permanece activa de manera oficial en México contando con la personalidad jurídica de agrupación política nacional.

Con dos tendencias:

El Movimiento nace el 23 de mayo de 1937 en la Ciudad de León, Guanajuato. Sus principales fundadores fueron José Antonio Urquiza, Juan Ignacio Padilla, Jesús Hernández Alcalá, los Hermanos Trueba, los Hermanos Zermeño, entre otros.

Los principales grupos que apoyaron la Fundación fueron:

1930 – 1939

Para comprender al MNS hay que dejar de lado el afán eurocentrista de Jean Meyer, la investigación pagada por el Estado de Mario Gil (empleado del Gobierno), y los devaneos de más de un escritor que solo repitió lo escrito por los anteriores.[cita requerida]

Lázaro Cárdenas llega al Poder en 1936 y genera una serie de Reformas Sociales combinado con una astuta construcción de un Estado Corporativista y Presidencialista. Más social que Calles, pero más firme en el control de la sociedad mediante corporaciones dependientes del Partido Oficial. El PRM, que luego sería el PRI.

El MNS nunca se opuso a las reformas sociales del Presidente Cárdenas: Reforma Agraria, Seguro Social, Educación Universal, Reparto de Utilidades, Derechos Laborales, etcétera.

Al contrario:

Se impulsó la exigencia de REFORMA AGRARIA INTEGRAL, Seguro Social efectivo (no solo a los sindicalizados en la CTM y organizaciones oficiales), libertad sindical, respeto al derecho de huelga (la CTM y la CROC ofertaban pactos con los patrones y ponían esquiroles para boicotear huelgas, incluso, se llegó a la represión abierta).

El Reparto de Utilidades fue parte de una propuesta del Movimiento Sinarquista:

La Empresa Comunitaria y la autogestión cooperativista independiente.

Tema que el Estado Priista jamás pretendió siquiera mencionar.

Cárdenas contuvo solo un poco la corrupción de los líderes como Fidel Velázquez, pero apenas deja el poder, los Sindicatos Oficiales desataron la avaricia de líderes eternizados, represivos y corruptos.

Respecto al fascismo:

“Seríamos insinceros si negáramos la influencia ejercida sobre el Sinarquismo por los Movimientos de tipo Totalitario victoriosos entonces en Europa. Aquí como en todos los Pueblos, Hitler y Mussolini ganaron de pronto simpatías, admiración y aplausos.

Lo que se admiró e imitó con frecuencia, fue el espíritu y férrea voluntad de esos pueblos que, bajo la dirección de hombres innegablemente colosales, lograron elevar a sus países de la postración más ominosa a un plano de progreso material y poderío bélico."

Para 1939 la UNS contaba con más de 90 mil afiliados que se concentraban en 102 comités.

Al año siguiente el partido decidió tomar un papel neutral en las elecciones presidenciales, pero la gran simpatía popular al candidato opositor Juan Andrew Almazán, desató un movimiento de apoyo a su favor, elección que concluyó con acontecimientos violentos de primer orden, donde el ganador fue el oficialista general Manuel Ávila Camacho.

En 1944 la UNS obtiene su registro como partido político con más de medio millón de afiliados. En 1948, un par de jóvenes, durante un mitin, colocan una sábana en la cabeza de la estatua de Juárez, en el Hemiciclo del D.F.

Pretexto que el Régimen usó para cancelar el registro oficial a Fuerza Popular.

Ese 23 de mayo, se votó por la Asamblea.

No se aceptó como Partido, para darle un sentido más amplio.

Su perfil fue definido como un Movimiento POLÍTICO-SOCIAL Y CULTURAL.

Su Ideología: NACIONALISMO-MEXICANIDAD, DEMOCRACIA PARTICIPATIVA, CONCIENCIA DE PUEBLO Y SOCIAL-COMUNITARISMO.

1937 a 1946. En los primeros años, hubo cierta ambigüedad pero al constituirse el Partido Fuerza Popular (1946) se asentó una Plataforma.

Basada en el Manifiesto, los 16 Puntos Básicos y el Pentálogo.

1950 a 1960. Años más tarde, se acude a teóricos de la llamada Corriente Social del Cristianismo como Jacques Maritain, la experiencia de los Democrata-Cristianos de Alemania (Adenauer), pero sobre todo, el Socialismo Comunitario de Emanuel Mounier.

Se organiza la Confederación Mexicana del Campo, los primeros Sindicatos (o impulsar la liberación de sindicatos antaño oficialistas), se crea la Confederación Nacional de Colonos y Usuarios de Servicios Públicos. Se fomentan el Tequio, las Cooperativas y los Proyectos Comunales. Las primeras Cajas de Ahorro Solidario.

Se impulsa el trabajo cultural y las jornadas de salud a través del Servicio Social Sinarquista.

Los profesionistas se van al Campo o a las colonias que empezaban a formarse en las periferias.

En lo ideológico, se leía a Teilhard de Chardin y otros teóricos de la Comunidad como el espacio social entre el individualismo liberal y la masa anónima de los totalitarismos. Se lee a Jaurés y se estudian los "socialismos no totalitarios".

Se fortalece la visión de la "Mexicanidad" como un proceso cultural para construir un "Pueblo" y una "Nación".

Más tarde, se aprecia el trabajo de rescate histórico – cultural de autores como León Portilla, Guillermo Marín (Toltecayotl) en la visión sinárquica de la Mexicanidad.

En el periodo comprendido entre 1970 a 1994, el candidato Gumersindo Magaña destaca junto a Ignacio González Gollaz y otros.

1970. Las experiencias de los cristianos sociales se rescataron pero también, se fortalecieron las tendencias de un nacionalismo democrático popular. Se estudia la Democracia Cristianas y los Partidos Social-Cristianos. Pero se mantiene distancia por considerarlos “burgueses” y por los casos de corrupción en varios de ellos.

1971. Surge el proyecto de Nacionalismo Revolucionario (se entiende que no tiene nada que ver con el PNR de Calles).

En ese mismo años se funda el Partido Demócrata Mexicano como una vanguardia política del Movimiento Social aglutinado en torno al Sinarquismo.

Se define como un Partido Nacionalista, Democrático, Popular y Revolucionario.

En años recientes, se acude a Paulo Freire, Martin Buber, Alain de Benoist y filósofos latinoamericanistas.

Se buscó definir un nacionalismo con contenido social, no militarista, ni racista y se aplicó la teoría del Ver-Pensar-Actuar aunque un sector se mostró receloso.

1982. El PDM comienza su participación electoral con resultados notables. Pese a la existencia de fraudes electorales en todos lados[cita requerida], aun así, se gobierna en más de 17 municipios y varias decenas de diputados y regidores.

1988. El FDN de Cárdenas arrasa la votación y los operadores políticos de Salinas de Gortari hacen fraude. Pretenden que el PDM avale a Salinas para conservar su Registro y que se reconozcan sus triunfos. El PDM no se deja comprar y le quitan el registro.

Pero mantiene control en varias regiones. Desarrolla desde el Municipio, estrategias de participación democrática de los ciudadanos. Impulsa el Tequio para vencer los bloqueos de presupuestos y las cooperativas, son solución para el desempleo. (Santa Ana Chiautempan, por ejemplo).

Durante los primeros años de 1990 se produce un alud de afiliados que venían de partidos y grupos más cercanos a la democracia liberal que a las tesis Sinárquicas.

Algunos, con un anticomunismo exaltado, otros con una visión muy ingenua de lo religioso y otros, con intenciones bastante dudosas.

Se fueron apropiando de Comités y de grupos.

Para terminar provocando conflictos, pleitos y divisiones cada vez más drásticas.

1994. Se funda la Unión Nacional Opositora que marginó a todos los Organismos de Proyección Social-Comunitaria del MNS y del PDM.

Se privilegió el apoyo a grupos provenientes del ex PARM, del viejo PFCRN, de grupos liberales y ex panistas.

Tal abanico caótico provocó la caída de las tendencias electorales y la división irremediable con el MNS.

Los “neo-pedemistas” abandonan el Partido y se van al PAN o al PRD. La mayoría con la excusa de que el Sinarquismo era un lastre y los “huarachudos” (los campesinos y grupos populares urbanos) eran un estorbo para la “política moderna”.

Así, PDM y MNS se separan.

La confusión ideológica es terrible.

Los Organismos de Proyección Social se fragmentan y entran en crisis.

El PDM no los quiere y hasta los elimina donde puede, los dirigentes del MNS no logran captar los tiempos que corren y pierden toda perspectiva.

Entre 1994 y 1996 el MNS se reduce a mínima expresión. El PDM se desintegra y algunos dirigentes fundan el PAS (Partido Alianza Social), sin ninguna relación con el Sinarquismo o con el mismo PDM. El Sinarquismo se ve por primera vez en su historia, ante el dilema de su desaparición.

La postura del antiguo dirigente sinarquista Baltasar Valadez y su grupo, era que asumiera la dirección nacional del Movimiento, un administrador. El objetivo era hacer del sinarquismo un grupo de presión a secas. Sin los riesgos y complejidades de ser partido, ni la enorme carga de trabajo de un movimiento popular. Solo un grupo de presión. Y de algún modo, canalizado al PAS. Darle un perfil cuasi religioso, confundiendo la tradición social de muchos camaradas cristianos. Pero a la vez, favoreciendo la fuga de militantes del Movimiento Sinarquista al PAS. Antiguos sindicalistas sinarquistas se fueron al FAT o a nuevos movimientos sindicales.

1996. En marzo se realiza la Asamblea Nacional del MNS. La Terna de candidatos a la Dirección Nacional: José Guadalupe Muñoz, Guillermo Valencia y Leonardo Andraca.Parecía simple trámite. Ganó Andraca. Vino después la Asamblea Nacional: Votar si el MNS se convertía en Partido Sinarquista y participar en elecciones, o que se fusionara en el PAS. La primera propuesta fue abucheada y rechazada. La segunda, fue cuestionada y también rechazada. Con una pasión atronadora, la Asamblea fue sacudida. Se acusó de traición al grupo afín a los antiguos dirigentes del PDM y del MNS mientras se exigía una renovación total del Sinarquismo.

Se multiplican los grupos y reuniones clandestinas mientras se desaparecía al Sinarquismo de la Escena Nacional.

Mientras tanto, en el escenario nacional ya en 1994, el Alzamiento Zapatista cimbró la confianza de las clases gobernantes y empresariales que aspiraban al Primer Mundo con el Tratado de Libre Comercio (TLC) y las políticas privatizadoras del neoliberalismo Salinista. El TLC comienza con el Error de Diciembre, tremenda crisis económica que estalla las deudas al incrementar los intereses y la inflación sube al cielo

El Neoliberalismo Social de Salinas se perfecciona con el pretendido Modernismo de Ernesto Zedillo generando desempleo, represión, desapariciones, asesinatos de activistas, asesinato de Digna Ochoa y la matanza de Acteal en 1997.

Deudores, campo en quiebra, sensación de revueltas sociales…

Pero el Sinarquismo estaba exhausto y entra en período de introspección. Se celebra una reunión entre 3 tendencias más o menos claras: De San Luis Potosí, Magaña Negrete y su equipo. De Jalisco: Antonio Mota, Jesús Solís y María Luisa Soriano al frente. De Guerrero y con respaldo de los antiguos organismos de proyección social: Leonardo Andraca y Lorenzo Serrano (ex–diputado y fundador de la UNTC en 1986). Apoyado por Leonardo Durán de Guanajuato y Muñoz Ramos, Periodista y destacado sinarca nacional.

Estas tres tendencias renovadoras poseían varias visiones sobre el rol del Sinarquismo a fin de Siglo. Con un Capitalismo vencedor y una alternancia de partidos (pero con el mismo modelo económico–social).

Se considera a este período de reajuste. No se trataba de corrientes separadas o excluyentes, si no de visiones sobre el motivo, vigencia y estrategia del MNS en el México de inicio de milenio. En pleno proceso de asimilación del Estado Nacional por el Capitalismo Globalizador.

El fracaso del PDM que aún en 1997 participó en las elecciones intermedias (Diputados) con bajísimos resultados, cuestionó la Vía Electoral.

Por supuesto, nunca se consideró la Vía Armada para hacer cambios de raíz.

Se empezó por el cuestionamiento: ¿Qué sentido tiene un Movimiento Social como el Sinarquismo? ¿Hacia donde va? ¿Qué se rescata de su herencia y qué se deja descansar en paz?

Gumersindo Magaña, quien fue candidato en 1988 a la presidencia de la república, periodista, destacado abogado laboral, diputado, estudioso de la Comunidad y la Democracia Participativa, escribió “El Régimen Comunitario” y dio luces.

También se leyeron los clásicos sinarquistas como “Sinarquismo–Contra Revolución” de Padilla, Doctrina Obrera, Síntesis de Doctrina Sinarquista, la Dinámica entre otros.

Pero no era suficiente. Había que confrontar primero la realidad.

En 1998 se comenzaron talleres y reuniones nacionales donde se seguía el proceso de VER-PENSAR Y ACTUAR. Un añejo problema era la notable carencia de intelectuales e investigadores en el área de ciencias sociales y estudios políticos. Se fortaleció el estudio y la vinculación con organismos independientes de investigación social e incluso con los aportes de Tradiciones Culturales como la Toltecayotl y la psicología social.

Pero no todos los sinarquistas comprendían y apoyaban el Proceso.

No estuvo lejos la mano de los pasistas que esperaban el fracaso del Comité Nacional para obtener el control del MNS y sumarlo al PAS.

Y el oportunismo de grupos que veían al MNS como un peligro en caso de convertirse de nuevo en un Movimiento de masas.

Se cierra el Siglo con una Asamblea en Guadalajara el 26 de mayo. Donde se deciden 3 líneas de acción.

2001. Se crea el Comité Nacional de la UNTC con Maximino Aviléz al frente. La UdeCU con Magdaleno Yáñez no logró organizarse, excepto en algunas regiones. Más tarde, estos grupos se fusionaron con movimientos sociales de diversa índole o con la misma UNTC.

2002. Se realiza el Encuentro Nacional de Jóvenes Sinarquistas. Donde ya se diseñan nuevas líneas a seguir.

Poco antes, ante las Elecciones del 2000, el Comité Nacional lanzó un comunicado:

“Los partidos políticos actuales son mercenarios de la política, su objetivo es cambiar de partido pero no de modelo político-económico social.

No apoyaremos a ninguno: ni a Cárdenas ni a Fox.

Fox solo maquilla al Sistema pero mantiene intacto el esquema neoliberal que ha llevado a la ruina al Campo Mexicano”

Un sector importante de ex pedemistas aglutinados en el PAS si apoyaron a Cárdenas. (Alianza por México: PRD, CD, PT y PAS).

La postura del Sinarquismo fue:

“La única Alianza Sinarquista es con el Pueblo y su Destino” (Editorial de Orden y Comunicado Público).

Aun así, algunos articulistas, sin motivo claro, comenzaron el rumor de que Fox era “sinarquista” y por ende, el Gobierno Neoliberal lo era también.

Durante ese sexenio, el Sinarquismo se deslindó varias veces.

Y continuó hasta la fecha.

Su enfoque es en construir redes comunitarias autogestionarias basadas en la economía solidaria y la participación activa y consciente de las comunidades.

Más de 40,000 personas involucradas en su red de cooperativas, proyectos comunitarios, ecológicos, culturales, en educación, promoción y defensa de los derechos fundamentales, gestión de recursos a grupos populares en zonas rurales y urbanas, entre otras tareas.

El Comité Nacional Coordinador publicó un Comunicado donde señalan que la participación electoral a nivel local es según las condiciones bien analizadas y bien definidas.

Pero a nivel federal se mantiene la instrucción de ninguna relación ni vínculo con absolutamente ningún partido.

Se propone construir un Polo de Economía Solidaria que ya ha comenzado con programas de Gestión Social y apoyo a la Autogestión y Cooperativismo.

Desde Guerrero, Morelos, Oaxaca, Jalisco, Veracruz, entre otros estados de la República.

La estrategia de Comunidades autogestionarias ha avanzado también en el trabajo cultural.

Se mantiene la distancia ya demasiado notable con los antiguos pasistas y aún queda algún antiguo militante retirado de la vida activa militante por creer que ha sido demasiado protagónica.

Dice un Documento interno de Evaluación:

"Hoy contamos con una Base Popular importante que vive un proceso de reflexión, educación y aplicación práctica de la solidaridad a través de cooperativas, proyectos productivos en redes solidarias, de proyectos culturales y de luchas sociales, ecologistas y por democracia participativa.

Una Historia no exenta de conflictos pero persistente en la búsqueda de alternativas reales. Siempre desde la participación Popular y con la visión de que sean las mismas comunidades las que sean dueñas de sus condiciones de vida. Que la Política sea asumida por las Comunidades como un proceso de lucha para garantizar su existencia.

El Movimiento Nacional Sinarquista actualmente se desarrolla pues, como un Movimiento autogestionario y patriótico, popular y social-comunitario".

Existen dos tendencias principales dentro del Sinarquismo:

El jefe nacional actual del movimiento es el Lic. Guillermo Valencia.

Para comprender al Movimiento Nacional Sinarquista es necesario distinguir lo siguiente:

En el Archivo General de la Nación, desapareció el material brindado por el MNS y solo quedó el aportado por Santa cruz. Aquel que recibió apoyo del Régimen para crear un “sinarquismo” acorde a la estrategia gubernamental.

Leer:

La abundante información proveniente de la Historia Oficial provocó el efecto esperado de que algunos confundidos buscaran en el Movimiento Nacional una ideología inexistente. Que buscaran justificar posturas intolerantes y hasta de un fanatismo vulgar. Actitudes que no hallaron eco en los grupos populares pero sí propiciaron una grave crisis que en los años de 1990 casi desaparece al Movimiento.

Por ello, consideramos un error describir al Sinarquismo solo en su etapa Fundal 1937-1947, en un artículo como éste.

Por la sencilla razón de que existe una línea continua ininterrumpida de participación social, política, cultural, ecologista y de economía solidaria. Basta hacer trabajo de campo fuera de la Historia Oficial.

Consideramos pues, que Jean Meyer falló terriblemente pues se niega rotundamente a analizar la Historia completa y contextualizada del Movimiento destacando solo la religiosidad de sus militantes pero sin profundizar en el Símbolo de lo Sagrado (como Mircea Eliade lo propone) ni entiende la diferencia entre espiritualidad y eclesialidad (René Guénon aporta elementos a considerar para distinguir esto).

Queremos resaltar el enorme peso que tienen en el Sinarquismo las tesis de Teilhard de Chardin y Emanuel Mounier.

Sobre todo a partir de los años de 1950

En sí, distinguir con claridad la mística ética y el imaginario simbólico comunitario de las Plataformas Políticas del Movimiento. (Casos semejantes concretos: El Símbolo Guadalupano en la Independencia y el Zapatismo).



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