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Ultocoche



Ultocoche. Del quechua, "el culo del mundo".

Ultocoche es un pueblo ficticio de la sierra peruana, creado por el escritor Juan Morillo Ganoza para ambientar su novela Fábula del animal que no tiene paradero, el cual se va consolidando como el universo de los olvidados de los Andes.

A pesar de la distancia temporal y geográfica de la novela, Ultocoche bien podría ubicarse en la alta sierra boliviana, en los humedales de los páramos colombianos, en la serranía venezolana o en las faldas de los volcanes chilenos y ecuatorianos. Se puede afirmar que Ultocoche es a los Andes lo que Macondo al Caribe.

En su novela Fábula del animal que no tiene paradero, Morillo Ganoza toma como punto de partida su infancia y va insertando la denuncia social de forma natural e insistente en un recóndito pueblo de los Andes peruanos, al que identifica como "el culo del mundo" y eso es lo que significa el vocablo quechua.

El crítico literario Javier Ágreda se refiere a Fábula del animal que no tiene paradero (Universidad de San Marcos, 2003) en los siguientes términos:

"Morillo Ganoza vuelve a las serranías del norte del departamento de La Libertad para seguir desarrollando el vasto ciclo narrativo con el que dejó atrás 35 años de silencio literario y que lo ha convertido en uno de los narradores peruanos más destacados de hoy...

"La historia del poblado de Ultocoche es contada en esta novela a través de las palabras de varios narradores orales, caminantes pobres cuyas únicas posesiones son su memoria y su habilidad para atrapar a los oyentes con sus relatos. Estos personajes, básicamente tres, van alternando sus voces a lo largo de las más de 900 páginas del libro, para elaborar un retrato (siempre desde su perspectiva de miseria y desamparo) de la vida en Ultocoche, que abarca tanto las costumbres y situaciones cotidianas como las festividades y sucesos extraordinarios. Y hasta las creencias locales".[1]

Más adelante, el crítico recalca el valor literario de esta obra, destacando que, "como los campesinos de Rulfo o los compadritos de Borges, los habitantes de Ultocoche se expresan de una manera que, sin dejar de remitirnos al habla de los referentes reales, muestra antes que nada la creatividad literaria del autor. Hay muchos otros aspectos de interés dentro de esta amplia y ambiciosa novela, entre los que hay que destacar las recurrentes reflexiones de los personajes acerca de su propia actividad de narradores orales, tanto en lo formal ("redondear los ejemplos") como en lo temático."Fábula del animal que no tiene paradero es, por todo lo dicho, una gran novela, y junto con El río que te ha de llevar representan una original y valiosa opción para el desarrollo de la narrativa neoindigenista peruana.[1]

Ultocoche fue construido en las estribaciones de las serranías del Departamento de La Libertad, en el noroeste de Perú,pero no se sabe cuándo.

Según el profesor Xu Shicheng, "la temporalidad de la novela se remonta, en un marco general, hasta el mito del origen del mundo, pero el núcleo de los sucesos reales carece de referentes históricos precisos; no obstante, algunos fragmentos nos permiten ubicar el marco histórico entre los años 30 y 50 del siglo XX". [2]

Xu Shicheng: Comentario sobre la novela de Juan Morillo Ganoza Fábula de el animal que no tiene paradero en "Juan Morillo y el oficio de fabular"

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