x
1

Acento circunflejo en francés



El acento circunflejo es uno de los cinco diacríticos utilizados en la lengua francesa. Se utiliza en las vocales a, e, i, o y u.

Tiene tres funciones principales:

En ciertos casos, el acento circunflejo no tiene una función lingüística específica.

El circunflejo apareció por primera vez en francés (incluso en la tipografía occidental) en el siglo XVI. Es el griego antiguo, tal como se tipografió en esa época (y aún ahora para lo esencial), el que le suministró este diacrítico, constituido simplemente de la reunión de un acento grave y un acento agudo (para la historia del acento circunflejo griego, ver Diacríticos del Alfabeto Griego). Parece que el anatomista y gramático Jacques Dubois, conocido como Sylvius, fue el primero en importar el circunflejo en el francés, aunque haya escrito en latín.

Varios gramáticos de este siglo han intentado de darle al circunflejo un rol dentro de la ortografía de su lengua, rol que no necesariamente ha conservado. Hizo falta en efecto esperar hasta el siglo XVIII para que su uso fuese normado y se tornara cercano al que se le da hoy en día

Sylvius hizo del circunflejo un indicador de diptongos gráficos (o falsos diptongos fausses diphtongues, ya que en el francés de su época los diptongos pronunciados ya no eran considerados). Sylvius señala sus motivaciones personales en su obra Iacobii Sylvii Ambiani In Linguam Gallicam Isagoge una, cum eiusdem Grammatica Latinogallica ex Hebraeis Graecis et Latinus authoribus ("Una introducción a la lengua gala [francesa] al igual que a su gramática a partir de autores hebreos, griegos y latinos", editada por Robert Estienne en 1531). Éste, es un estudio gramatical de la lengua francesa escrita en latín en el cual el autor se apoya principalmente en la comparación entre las lenguas antiguas y el francés, para explicar las particularidades de su propio idioma (en esta época, únicamente se concebía la idea de describir una lengua moderna en relación a los modelos griegos y latinos). Se puede leer, al inicio de la obra (Plantilla:10e página sin numeración), la lista de ses convenios tipográficos. El autor presente de manera breve el circunflejo, el mismo que será descrito en detalle más adelante:

Sylvius es consciente que se trata en este caso, de una notación puramente gráfica, ya que reconoce únicamente diptongos, esos dígrafos tan solo llevan el nom (lo que sigue solamente concierne ; página 8):

El acento circunflejo se opone, por el mismo grupo de letras, a la diéresis (situada también entre las dos vocales). El problema radica en que, y como lo señala Sylvius, solo se encuentran pocos casos para los cuales las letras de dichos grupos deben ser pronunciadas separadamente: traî (« je trais») ~ traï (« je trahis»), lo que es normal. El francés de esta época no conserva diptongos reales, los casos señaladas son más bien coalescencias, como para trahis, que no se distingue del resto como en el inglés try /traj/. Sylvius hace sin embargo, gran uso de las diéresis en la notación de sonidos griegos y latinos. Esta notación que opone los diptongos gráficos a los "diptongos" orales resulta sin embargo, artificial en el idioma francés. El acento circunflejo no se justifica, la diéresis es ampliamente suficiente para ciertas formas ambiguas (he ahí pues un ejemplo).

Étienne Dolet, en su Maniere de bien traduire d'une langue en aultre: d'aduantage de la punctuation de la langue Francoyse, plus des accents d'ycelle (1540), utiliza el circunflejo (escrito esta vez entre dos letras) para marcar tres metaplasmas:

Dolet hace entonces del circunflejo, la marca de los fonemas suprimidos: en francés, esta es una de las principales funciones de este diacrítico en la actualidad. Sin embargo, en algunos ejemplos dados por Dolet, poco se utiliza tal artificio, salvo âge: en vraiment, la antigua e en hiato simplemente no se escribe, en los femeninos plurales como pensées, no se ha aportado ninguna modificación, verosímilmente para conservar las marcas flexivas, muy útiles en la lectura. Su testimonio ofrece un interés doble: por una parte para la historia de la tipografía, se considera importante para la fonética evolutiva del francés y permite saber que es en su época que la e caduca (y otras vocales) en hiato comenzaron a suprimirse.

Podemos dejar a Dolet concluir por sí mismo: Ce ſont les preceptions [préceptes], que tu garderas quant aux accents de la langue Francoyse. Leſquels auſsi obſerueront tous diligents Imprimeurs: car telles choſes enrichiſſent fort l'impreſsion, & demõſtrent [démontrent], que ne faiſons rien par ignorance.

La presencia de un circunflejo sobre a, e y o denota en la mayoría de casos un cambio en la pronunciación:

Esa es en ocasiones la única razón que justifica la presencia de un acento así dentro de una palabra, el mismo que desaparece en una derivación si la pronunciación cambia: infâme [ɛ̃fɑm] (per infamie [ɛ̃fami]), grâce [gʁɑs] (pero gracieux [gʁasjø]), fantôme [fɑ̃tom] (pero fantomatique [fɑ̃tɔmatik]). Aun así, ciertas irregularidades son notables: bêtise se pronuncia [betiz] con una /e/ cerrada, a pesar de la presencia de ê, la palabra habiendo sido directamente formada sobre bête [bɛt], sin respeto de la alternancia. Se escucharía *bétise.

En palabras tomadas del griego, se nota esporádicamente la presencia de un oméga (ω) dentro de la palabra cuando la o se pronuncia [o] (aunque oméga haya sido pronunciada [ɔ], es decir, /o/ prolongada abierta, en griego): diplôme (de δίπλωμα), cône (κῶνος). La regla carece de coherencia ya que podemos encontrar palabras de origen griego sin el circunflejo, como axiome (ἀξίωμα), que se pronuncia [aksjom]. Por el resto, si la palabra heredada del griego no conservó una [o], el acento no es utilizado: comédie [kɔmedi] (de κωμῳδία).

Además del cambio de timbre, la vocal es a veces prolongada (al menos para ciertos locutores). En numerosos acentos, las oposiciones de timbre entre los alófonos de los fonemas /a/, /e/ y /o/ no se respetan sistemáticamente y funcionan únicamente en variante combinatoria. Ese es el caso, generalmente, en el sur de Francia, donde los locutores no oponen [ɛ] y [e] / [ɔ] y [o] en sílaba abierta, ciertamente no emplean el alófono [o]. Se pronunciará entonces dôme [dɔm] en lugar de [dom], por dar un ejemplo. Por otra parte, todos los locutores del francés están lejos de utilizar [ɑ]. Numerosos son aquellos que dirán entonces [am] en vez de [ɑm] en la palabra âme.

Mientras que, normalmente, es el acento grave el que sirve como signo discriminativo en francés (là-la~ où-ou~ çà-ça~à, a etc.), el circunflejo, por razones históricas, tomó un rol semejante. De hecho, los casos de homografías evitadas son casi explicadas por las razones mencionadas anteriormente: sería falso decir que en ciertas palabras es un signo discriminativo que se habría sumado como se hizo con el acento grave. Esto permite sin embargo quitar las ambigüedades, lo que, en las palabras con u seguido de eu, le ha permitido ser conservado a veces. Se ha demostrado que los acentos circunflejos seguidos de antiguos diptongos eü monoptongaron en ëu [y] luego escritos u fueron eliminados salvo cuando se comprobó que eran útiles en caso de homografía, como para su- y no *sû- proveniente de seü/sëu. Las parejas siguientes se deben anotar:

Conscientes de las grandes dificultades que representa el empleo del acento circunflejo y del número de incoherencias en su uso, los expertos representantes de las instancias francófonas competentes cargadas de poner simplificaciones de la ortografía oficial del francés propusieron en 1990 una serie de reformas ortográficas que se publicaron en el Journal officiel de la République française.[5]​ El circunflejo se convierte en opcional sobre i e u salvo en los casos donde acarrea una ambigüedad (il croît ─ verbo croitre ─ conserva su circunflejo para diferenciarse de il croit ─ verbo croire).

Estas recomendaciones son poco aplicadas en Francia mientras que fueron ratificadas en Bélgica y Canadá por los Conseils de la langue française así como por el Conseil international de la langue française (para la francofonía). Desde el 2008, los programas oficiales de educación nacional francesa para la primera enseñanza se refieren a la ortografía revisada de 1990 como ortografía de referencia.[6]

Las listas que a continuación enlistan las palabras que poseen acento circunflejo que figuran en la última edición de algunos diccionarios de uso frecuente como: Larousse, Robert, Hachette o Littré. Algunos diccionarios enlistan los dobles grafismos pertenecientes a la recomendación de 1990 introducida parcialmente en su uso. Así el Littré admite la palabra "boite", pero no el Larousse. Por el contrario, el Littré no admite el grafismo "connaitre", mientras que esta procede de la misma recomendación de 1990.

En numerosos casos, un acento circunflejo indica que la palabra contenía una letra desaparecida debido a la desaparición de un fonema con el tiempo.

Este es el fonema más conocido. La mayoría de casos provienen de una /s/ sostenida, es decir delante de una consonante. La /s/ delante de una consonante atenuada en el siglo XI alrededor del año 1066, debido a un cambio fonético (y al cierre permanente de la vocal /o/), cerrado después del siglo XIII. Sin embargo los neologismos posteriores, pudieron introducir en el léxico francés nuevas palabras que contenían una /s/ sostenida. Como se observa la situación es compleja.

Si bien la grafía guarda la presencia de /s/, no es hasta al XVII siglo (ediciones de 1740 del Diccionario de la Academia Francesa) donde al eliminar y notar la desaparición se empleó el recurso sistemático del acento circunflejo, el cual, es el más preciso en la pronunciación de ciertas vocales que lo contengan, como la o

Sin embargo en el siglo XVII, algunas tentativas de modificación de la grafía habían surgido, sin gran éxito. Pierre Corneille, a quien se le debe también la oposición entre é y è utilizada en textos de forma antigua de la letra s, ſ, para indicar la atenuación de una s, alargando la vocal precedida y suprimiendo la s sorda. El indica los ejemplos siguientes como aviso a los lectores del Teatro de P. Corneille, revisado y corregido por el autor (1664):

La formación de palabras o recientes estudios de radicales en los que una /s/ sostenida lleva a familias de palabras a utilizarla, o no, el circunflejo, de acuerdo con la /s/ es pronunciada (en palabras formadas o tomadas de otros idiomas después de 1066, que no tienen ninguna atenuación de una /s/ sostenida, en los cuales este fenómeno no tiene cabida) o no (arcaísmos). Sin embargo en algunos arcaísmos la /s/ sostenida es necesariamente atenuada, no era corregida en la grafía pero era remplazada por la influencia de una palabra cercana. Por la influencia de la grafía en la pronunciación pudo haber sido escuchada de nuevo. Ejemplos de palabras con radical proveniente del latín:

También:

Conviene notar que en numerosos casos tomados del idioma normando (y empleados más tarde al francés), una /s/ delante de una consonante sorda se pronuncia, de forma contraria a la diacronía francesa: forest - forêt, feast - fête, beast -bête, hospital - hôpital, etc. En efecto, estas palabras son aportes de Inglaterra debido a las conquistas de Guillermo el Conquistador (batalla de Hastings, 1066) una época donde todavía se pronunciaba en francés. El inglés no tenía atenuación, se mantenía la consonante. Por el contrario, la s delante de una consonante sonora es atenuada en los dos idiomas: isle [aɪɫ] ~ île época de Hastings, ya era sorda en francés (o normando). La secuencia de la /s/+ consonante sonora (denotado por G) evolucionó más rápido que la secuencia de la /s/ +consonante sorda (denotado por K):

Otra s, de otras letras atenuadas es representada por un acento circunflejo. Este es el caso de las vocales en hiato donde la primera no se pronuncia o se contraía como las siguientes:

El caso es frecuente en las palabras u viene desde diptongos antiguos medievales ëu / ey (la diéresis no se escribe originalmente) que se pronuncian /y/ pero se escribe de una manera conservadora eu. A fines del siglo XVIII debido a que la grafía duda entre ëu (la diéresis sirve también a marcar una sílaba sorda), eu o û, fijada en û:

Ciertas formas han sido tratadas, hoy en día no se pronuncian: seüsu (de savoir) ou peupu. Para los verbos, en virtud a analogía, los pasados participios en –u tienen acento solamente para evitar posibles homografías (véase más adelante)

En el caso de la palabra dîme, el acento circunflejo proviene de la atenuación de una x:

dixmedîme: la 4.ª edición del Diccionario de la Academia francesa (1762) denota que « se pronuncia la x solamente cuando sirva para alargar la primera sílaba» La edición siguiente (1798) adoptara la grafía dîme.



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Acento circunflejo en francés (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!