x
1

Autobús



El autobús, bus, ruta, colectivo, flota, bondi, guagua, micro, villavesa u ómnibus (véase la sección «Regionalismos») son los nombres más comunes del vehículo diseñado para transportar numerosas personas a través de vías urbanas. Generalmente es usado en los servicios de transporte público urbano e interurbano y con trayecto fijo. Su capacidad puede variar entre 10 y 120 pasajeros. En sistemas de autobús de tránsito rápido, la capacidad de los buses puede variar entre 160 y 240 pasajeros.

Autobús es un aféresis de la palabra griega autos y de la latina ómnibús. Ómnibús deriva del dueño de una tienda de sombreros, Monsieur Omnès, quien con un juego de palabras llamó a su tienda «Omnes Omnibus». La misma estaba situada frente a una de las primeras estaciones de carruajes en Nantes, Francia, en 1823. Omnès es la resonancia en latín de omnes que significa «todos» y ómnibus «para todos». Los ciudadanos de Nantes poco después le dieron el apodo «Ómnibus» al vehículo. Cuando el transporte tirado por caballos fue motorizado a partir de 1905, el ómnibus fue llamado autobús, un término, que al igual que ómnibus, todavía se utiliza.[1]

Denominaciones usadas para los autobuses, según su capacidad y función, usadas en el mundo hispanohablante.

En Baja California, bus, burra (genérico), calafia (microbuses), ruta troncal (a los articulados)

* No aplica a todos los modelos

También conocido como microbús y buseta, es un autobús de tamaño pequeño con capacidad para 8 a 30 pasajeros.

Autobús mediano entre minibús y autobús, cuya longitud es de entre 8 y 10.5 metros y están diseñado para transportar entre 60 y 80 pasajeros sentados y de pie.

Autobús de dos o más secciones tipo módulos.

Muy típico en transporte urbano y periurbano en países de la Mancomunidad Británica.

Vehículo de gran capacidad para el transporte de viajeros interurbano o de largo recorrido.

Autobús de tracción eléctrica, sin carriles, que toma la corriente de un cable aéreo por medio de un trole doble.

Vehículo ferroviario ultra ligero por lo general con un chasis regular o modificado de autobús.

Un tranvía turístico o trolley turístico, también llamado un autobús turístico, es en realidad un minibús con ruedas de goma, normalmente alimentado por diésel, a veces con gas natural comprimido, pensado para parecerse a un tranvía de estilo antiguo.

Las chivas son autobuses típicos de Colombia, Ecuador y Panamá adaptados en forma artesanal para el transporte público rural, pensando especialmente en la montañosa geografía de la Región Andina. Se caracterizan por ser muy coloridas y decoradas. La parte superior tiene una parrilla usada para el transporte de equipaje.

La mayoría de los autobuses funcionan como los vehículos de carretera con un motor de combustión interna y combustible diésel, aquí se presentan otras alternativas.

Los autobuses eléctricos ofrecen una opción de transporte más amigable con el medioambiente, reemplazando el motor de combustión interna, por uno eléctrico alimentado principalmente por baterías de diferentes tipos.

Entre las opciones de autobús eléctrico que se ofrecen en Europa, se encuentra el Breda Menarinibus Zeus M-200 E, con capacidad para 30 pasajeros, una autonomía de 120 km proporcionada por baterías de ion de litio.[3][4]​ Uno de sus primeros clientes fue el Ayuntamiento de Figueras.[5]

También está disponible el modelo Gulliver de la empresa italiana Tecnobus.[6]

Tanto el BredaMenarinini Zeus, como el Tecnobus Gulliver se encuentran incluidos en el Plan Movele de ayudas del IDAE, Ministerio de Industria español.[7]

La empresa Solaris Bus & Coach y AMZ Kutno, radicada en Polonia, también fabrica autobuses eléctricos.[8]

Autobús eléctrico que utiliza un volante de almacenamiento de energía en lugar de cables aéreos como un Trolebús.

El uso del autobús como forma de reducir el uso del coche privado ha suscitado en algunas ciudades la implantación del autobús de combustión de gas natural para estos medios de transporte público. El uso de gas natural vehicular (GNV) reduce, aunque no elimina, en más de un 85 % las emisiones de óxido de nitrógeno y de partículas en suspensión, principales contaminantes que afectan a la salud humana, y hasta un 20 % las emisiones de CO2 principal gas de efecto invernadero que genera el cambio climático; respecto al uso de combustibles para vehículos es hoy en día una importante alternativa para mejorar la calidad del aire de las ciudades.

Actualmente en España circulan más de 2900 vehículos con gas natural, fundamentalmente vehículos pesados de ámbito urbano, como camiones de recogida de basura o autobuses. Un total de 26 localidades disponen de estaciones de suministro, entre ellas Barcelona, Burgos, Madrid, Salamanca, Sevilla y Valencia.

Varias ciudades alemanas disponen de autobuses guiados que circulan por carriles exclusivos delimitados por bordillos de cierta altura a cada lado de la pista en los que se apoyan unas pequeñas ruedas horizontales que guían el autobús. El vehículo puede entrar y salir del sistema por unas entradas en forma de embudo por donde se encaja el autobús. En este mismo sistema pueden entrar trolebuses o vehículos mixtos a conveniencia del operador. También pueden circular por túneles y vías mixtas con carriles para tranvías. En estos casos se impide la circulación de cualquier otro vehículo que intente entrar en la vía. Además existen líneas en las que el apoyo del vehículo se realiza sobre una vía de madera (tablones) y el guiado lateral se realiza por una guía metálica; este sistema suele utilizarse donde hay una vía férrea previa, normalmente en líneas de extrarradio, y donde circulan trenes de cercanías. Es un sistema mixto muy potente para estaciones intermodales. El sistema es similar al de las líneas del metro de París, cuyos vagones cuentan con ruedas dotadas de neumáticos. La gran desventaja de este tipo de guiado es su mayor consumo de energía comparado con el material ferroviario, (se necesita diez veces más energía para impulsar un peso determinado rodando sobre neumáticos que sobre railes y también se pierde energía por la fricción de las ruedas laterales).

También existe un sistema de orientación óptica en pruebas, para autobuses y trolebuses que utilizan marcas pintadas en el suelo y un sistema óptico (láser o visión artificial).[9]

En Castellón ya está funcionando el TVRCAS un trolebús guiado y con motores eléctricos integrados en las llantas del vehículo, (dotado también de un generador diésel para poder circular si es preciso donde no haya catenaria/filovía). Utiliza guiado láser con marcas en la calzada y plataforma exclusiva, pero puede circular sin ellas.

Autobús de Tránsito Rápido en carriles reservados con sistema de «orientación óptica» en Eindhoven, Holanda (Países Bajos).

Guía volante de un autobús guiado en Mannheim, Alemania.

Primer plano de una guía volante en un autobús en Suffolk, Inglaterra.

Son soluciones de transporte de media y alta capacidad en superficie; basadas en autobuses que circulan por carriles exclusivamente reservados, y son accesibles solo desde las estaciones. Una de las ventajas que se esgrimen a su favor es que los costos de construcción tienden a ser inferiores a los de sistemas como los metros o tranvías, teniendo una capacidad de movilización de pasajeros similar. Sin embargo, a diferencia de los sistemas subterráneos, ocupan un espacio vial en la superficie, lo que puede dificultar su implantación en grandes urbes densamente urbanizadas y alterar el flujo del tránsito de las mismas. A pesar de las dificultades que se plantean al implementar este tipo de medios de transporte, día a día han ido teniendo una buena acogida en las grandes urbes. En las ciudades que cuentan con un sistema de metro, el Autobús de Tránsito Rápido es utilizado como un sistema complementario, mientras que en ciudades que carecen de un tren metropolitano estos sistemas son el eje principal del transporte urbano.

Este tipo de sistemas se ha implantado en ciudades como Barcelona, Bogotá, Buenos Aires, Caracas , Ciudad de México, Curitiba, Hamburgo, Lima, Montreal, São Paulo, Ecuador, La Paz Bolivia, San Salvador El Salvador, entre muchas otras.

Servicio de transporte realizado por autobuses entre las principales ciudades de las provincias. El sistema tiene como punto de partida y destino a las estaciones de autobuses interprovinciales. Por lo general este servicio no contempla escalas o paradas en la mitad del camino, sin embargo pueden darse cuando el viaje supera las 5 horas. En caso que la conexión se realice entre provincias de países distintos, la categoría de transporte será Internacional y no Interprovincial.

El primer modelo de autobús producido en masa fue el autobús de dos pisos B-type diseñado por Frank Searle y operado por la London General Omnibus Company; entró en servicio en 1910, y habían sido construidos casi 3000 al finalizar la década. Cientos fueron utilizados con fines militares en el Frente Occidental durante la Primera Guerra Mundial.[10]

En 1939 fue creado el modelo RT por Albert Arthur Molteno Durrent, jefe de ingenieros de la London Transport's Bus and Coach Division, un autobús del tipo double-decker, muchos sin techo que reemplazaba a los trolebuses y a los tranvías. En 1954 se construye el primer Routemaster RM.[11]​ Hoy en día circulan solo dos líneas de los famosos autobuses tradicionales de color rojo, el restante de las líneas siguen operando modernas versiones del mismo.

Al autobús urbano en Buenos Aires y varias localidades de la Argentina se lo conoce como Omnibus. Su historia se remonta a finales de la década de 1920, cuando algunos propietarios de taxis decidieron establecer un servicio con recorridos preestablecidos y paradas fijas. Dado que el servicio fue bien aceptado por la población porteña, los empresarios comenzaron a utilizar todo el espacio disponible (no solo asientos internos del automóvil, sino también los «traspuntines»).

En definitiva, el origen del Ómnibus argentino fue un taxi sin reloj, que ocupaba todos los asientos y realizaba un recorrido fijo, en un vehículo adaptado para tal fin (primero berlinas grandes, luego camiones modificados y luego chasis de camiones carrozados). A fines de la década de 1980, el colectivo como vehículo, tras la evolución de los chasis y carrocerías para buses, dejó de producirse, sin embargo, el sistema de Ómnibus y su cultura se mantienen al día de hoy.[12]



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Autobús (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!