Enrique Herrera Oria

Enrique Herrera Oria (Santander, 15 de julio de 1885 - 1951), escritor, historiador, pedagogo y jesuita español, hermano del cardenal Ángel Herrera Oria, famoso fundador de la Asociación Católica Nacional de Propagandistas.

Como otros dos hermanos suyos ingresó como novicio en la Compañía de Jesús en Loyola, Guipúzcoa, (1902). Estudió lenguas clásicas, filosofía y teología y dio clases en colegios de su orden. Luego se ordenó sacerdote (1916). Cuando enseñaba en Valladolid (1912) comenzó a escribir ensayos de tipo histórico para la revista Razón y Fe, que edita la Compañía de Jesús, y para Atenas.

Jesuita antisemita, la prensa católica castellana acudía a su firma para la publicación de artículos difusores de la teoría de la conspiración judeomasónica.^[1]​

Resultó ser el más extremista de sus hermanos; presumió de haber orientado políticamente a Onésimo Redondo, fundador de las Juntas Castellanas de Actuación Hispánica (que tras diversas fusiones con otros grupos y partidos formaría parte de Falange Española y de las JONS) y antiguo alumno suyo en el colegio de Valladolid.^[2]​

Durante la Guerra Civil sufrió cuatro meses de cárcel en Bilbao tras huir de la Santander republicana, experiencia que narró en su libro Los cautivos de Vizcaya, así como los comienzos de la guerra en ambas ciudades. También escribió una especie de catecismo espiritual franquista titulado España es mi madre, publicado durante la Guerra civil, donde se reducen todos los males de la patria a la Institución Libre de Enseñanza, la masonería y las conspiraciones del judaísmo internacional. Colaboró con el ministro de Educación Nacional Pedro Sainz Rodríguez en la elaboración de la Ley de reforma de enseñanza secundaria de 20 de septiembre de 1938, que diseñaba un bachillerato con siete años de latín y religión y cuatro de griego.

El falangista Dionisio Ridruejo, crítico mesurado de sus adversarios, no tuvo reparos en desacreditarlo:

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