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Giovanni Verga



¿Qué día cumple años Giovanni Verga?

Giovanni Verga cumple los años el 2 de septiembre.


¿Qué día nació Giovanni Verga?

Giovanni Verga nació el día 2 de septiembre de 1840.


¿Cuántos años tiene Giovanni Verga?

La edad actual es 184 años. Giovanni Verga cumplió 184 años el 2 de septiembre de este año.


¿De qué signo es Giovanni Verga?

Giovanni Verga es del signo de Virgo.


¿Dónde nació Giovanni Verga?

Giovanni Verga nació en Catania.


Giovanni Carmelo Verga (Catania, 2 de septiembre 1840 - Catania, 13 de enero 1922) fue un escritor italiano, considerado el mayor exponente de la corriente literaria verista.

Giovanni Carmelo Verga nació el 2 de septiembre de 1840. Su padre, Giovanni Battista Catalano, era de Vizzini, donde la familia Verga tenía propiedades, y descendía de una rama menor de una familia a la cual pertenecían los barones de Fontanabianca. La madre se llamaba Caterina Di Mauro, y pertenecía a una familia burguesa de Catania. El abuelo de Giovanni, como testimonia De Roberto[1]​ en un artículo recogido, junto a muchos otros, en un volumen a cargo de Carmelo Musumarra, había sido carbonario y, en el 1812, elegido diputado por Vizzini al primer Parlamento Siciliano.[2]

Presenta aún motivos de debate la cuestión sobre el lugar de nacimiento exacto de Giovanni Verga, al igual que la fecha del evento. Si bien gran parte de los textos sitúen en Catania su lugar de origen, basándose sobre el contenido del acta de nacimiento, existen fundadas argumentaciones sobre las cuales es posible retener que el nacimiento de Verga haya sucedido en los alrededores de Vizzini.

Entre los estudiosos que dedicaron numerosos estudios para solucionar este interrogante, están el profesor Emilio Interlandi (docente de letras, crítico, escritor y polemista agudo) y el abogado Alfredo Mazzone (periodista, dramaturgo y escritor, particularmente activo en el ámbito teatral). Este último, en particular, fue autor de un ensayo titulado Polémicas Verguianas,[3]​ que dedica la mitad del libro a la investigación sobre el lugar y la fecha de nacimiento de Verga. La obra está apoyada en artículos escritos sobre el mismo argumento por el profesor Interlandi y citados integralmente.

La tesis según la cual Verga nació en una zona agrícola, propiedad del tío don Salvatore, en el distrito de Tièpidi (una zona de campo a pocos kilómetros del centro habitado de Vizzini, citada por el autor verista en sus escritos con el nombre de Tebidi o Tèpidi) se apoya sobre diversas pistas. La primera es sobre la epidemia de cólera que en el verano del 1840 sufrió Catania y que habría empujado a la familia Verga (ya acostumbrada a abandonar la sofocante Catania en verano por la frescura de las colinas de Vizzini) a elegir el pequeño centro de Calatino para proteger tanto a la madre como al futuro niño. Nacido prematuro, de 7 meses, el pequeño habría vuelto a la capital ya que la epidemia se había movido hacia el campo de Vizzini.

La segunda pista está basada en el número del acta de nacimiento con el cual el padre, Giovanni Battista Verga (originario de Vizzini pero residente en la capital), registró al hijo como nacido en Catania, en la habitación de la via Sant'Anna. El documento trae el número 284 ter, prueba del hecho que se trata de un acto intermedio (junto al 284 bis). Extrañamente, el acto se firmó eligiendo como testigos al ujier Michele Dell'Acqua (58 años) y al analfabeto guardia marina Alfio Murabito (70 años), y no dos parientes o amigos de la familia. Es probable, además, que Giovanni Battista Verga eligiese Catania también para complacer a la esposa Caterina Di Mauro (o Mauro), de Catania, y por comodidad, dado que el eventual pedido de certificaciones habría necesitado un viaje en la distante Vizzini.

La tercera pista la da una anotación puesta en una copia de la primera edición de los Relatos Rústicos, que Verga regaló al amigo escritor Luigi Capuana. Se lee:

Si bien según Corrado Di Blasi, curador de la biblioteca Capuana, la nota exacta sería:

el uso del vocablo "campesino" ("villano" en italiano) demostraría como Verga estaba al tanto de haber nacido en una pequeño pueblo de provincia (como Capuana), en Vizzini o casi, justamente en un distrito de campo, y por lo tanto campesino.
Finalmente el mismo Verga, en muchas de sus cartas a distintos interlocutores, se demuestra esquivo a hablar de la cuestión, signo que, efectivamente, también en él existe la conciencia que Catania como lugar de nacimiento es una declaración dudosa. No hay que olvidar, además, que muchos amigos personales de la época, como el científico geólogo Ippolito Cafici, el cirujano Gesualdo Costa, el profesor Luigi La Rocca y el abogado Giovanni Selvaggi, sostenían, por conocimiento directo, que Verga había nacido en los campos de Vizzini.

También es grande la incertidumbre sobre la fecha de nacimiento. El acta de nacimiento[4]​ reporta la fecha del 2 de septiembre de 1840. Verga, el 1 de marzo de 1915, escribió en una carta a Benedetto Croce:[5]

El 8 de septiembre es en realidad la fecha del bautismo, mientras que la de nacimiento podría ser a finales de agosto, quizás el 29, día en donde en Vizzini se festeja San Giovanni. La transferencia de Vizzini a Catania justificaría por lo tanto el retraso en el registro y la postergación de la fecha.

Verga, cumplido los estudios primarios en la escuela de Francesco Carrara, fue enviado, para los estudios secundarios, a la escuela de don Antonio Abad, escritor, ferviente patriota y republicano, del cual absorbió el gusto literario romántico y el Patriotismo. Abad hacía leer a sus discípulos las obras de Dante Alighieri, Francesco Petrarca, Ludovico Ariosto, Torcuato Tasso, Vincenzo Monti, Alessandro Manzoni y páginas de la Estética de Hegel. Además proponía también la novela histórica-patriótica Los tres del asedio de Turín (escrito en 1847) por el poeta de Catania Domenico Castorina, que era un pariente lejano de Verga y que en aquel tiempo "era considerado por los contemporáneos el mejor poeta y escritor catanio de la primera mitad del Ochocientos".[6]

En el 1854, a causa de una epidemia de cólera, la familia se refugió en el campo de Tèbidi y volverá en el 1855 por el mismo motivo. Los recuerdos de este período, ligados a las primeras experiencias de adolescente y al campo, inspirarán muchas de sus novelas cortas, como Cavallería Rusticana y Jeli el pastor, además de la novela Mastro don Gesualdo.

Con solo quince años, entre el 1856 y el 1857, Verga escribió su primera novela de inspiración resugimental Amor y patria que quedó inédito. La novela obtuvo una crítica positiva por parte de Abad, pero fue considerado inmadura por el profesor de latín, don Mario Torrisi, que lo convenció a no publicarlo. Se inscribió en el 1858 en la facultad de leyes en la Universidad de Catania, pero no mostró gran interés por las materias jurídicas y en el 1861 abandonó los cursos, prefiriendo dedicarse a la actividad literaria y al periodismo político.

Con el dinero que le dio el padre para concluir los estudios, el joven publicó a su costa la novela Los carbonarios de la montaña (1861-1862), una novela histórica que se inspira en las empresas de la Carbonería calabresa contra el despotismo napoleónico de Murat.

La suya fue por lo tanto una formación irregular que, como escribe Guido Baldi:

Además de este género de novelas, él prefería las novelas históricas italianas, sobre todo aquellas de carácter fuertemente romántico, como las de Guerrazzi cuya influencia se nota también en su tercera novela, publicada en el 1863, en varias entregas sobre el apéndice de la revista florentina La nueva Europa, titulado Sobre las lagunas, en el periodo en donde, lograda ya Italia la independencia, Venecia está todavía bajo la potencia austriaca. La novela narra la historia sentimental de un oficial austriaco con una joven veneciana en un estilo severo y privado de retórica. Los dos enamorados de la vida terminaran muriendo juntos. Verga trabajó en este período frecuentemente también en Aci Trezza y Aci Castello.

En Sicilia se verificó un período de violentos disturbios populares que exigían la abolición de los impuestos sobre el grano y, sobre todo en la provincia de Catania, se asistió a la reacción de los campesinos que, exasperados, llegaron a matar y saquear las tierras. Será Nino Bixio que, con la fuerza, impondrá el orden. En la narración Libertad, Verga revive con fuerza dramática uno de estos disturbios, el de Bronte

Con la llegada de Garibaldi a Catania fue instituida la Guardia Nacional y Verga, en el 1860, se alistó en ella prestando servicio por casi cuatro años pero, no teniendo inclinaciones por la disciplina militar, se liberó con un pago de 3100 liras (equivalentes a casi 1.30 euros actuales)[8]​ a la Tesorería Provincial. En tanto, junto a Nicolò Niceforo, conocido con el alias de Emilio Del Cerro, fundó el semanal Roma degli Italiani (Roma de los Italianos), que se basaba sobre un programa anti-regional, y lo dirigió por tres meses además de colaborar con la revista L'Italia contemporanea. El semanal pasará después bajo la dirección de Antonio Abad.

En el 1862, Verga y Niceforo intentan de nuevo la experiencia con la revista literaria L'Italia contemporanea sobre la cual Verga publica su primera novela corta verista, Casa da thè. Pero la revista dura poco y, después del primer número, es asimilado por Enrico Montazio a la revista florentina Italia, veglie letterarie.

También el diario Indipendente, fundado y dirigido por Verga siempre en el '62, será dejado, después de diez números, a la dirección de Abad. En aquel mismo año Verga publicó en la Nuova Europa las dos primeras entregas de la novela Sulle lagune (Sobre las lagunas) que serán suspendidas por un año y finalmente retomadas al inicio y terminadas el 15 de marzo de 1863 después de 22 entregas.

En 1865 fue por primera vez, dejando la provincia, a Florencia y se quedó desde el 13 de enero al 14 de mayo. En este nuevo período escribió una comedia, que fue publicada solo en 1980, con el título I nuovi tartufi, que fue enviada, en forma anónima, al Concurso Dramático de la Sociedad de estímulo al arte teatral pero sin éxito y la novela Una pecadora.

Florencia era en aquellos tiempos la capital del Reino, y representaba el punto de encuentro de los intelectuales italianos. Así el joven Verga tendrá la posibilidad de conocer, en este breve periodo, a Luigi Capuana, entonces crítico de la Nazione, a los pintores Michele Rapisardi y Antonio Gandolfo, al maestro Giuseppe Perrotta y al poeta Mario Rapisardi.

Volverá a Florencia en el abril de 1869 después que la nueva epidemia de cólera que se había difundido en el 1867 lo había obligado, junto a la familia, a encontrar refugio primero en las propiedades de Sant'Agata li Battiati y después en Trecastagni. Decidió establecerse en Florencia, y se quedará hasta 1871, al comprender que su cultura provinciana era demasiado restrictiva y le impedía de realizarse como escritor.

En el 1866 el editor de Turín Negro le había mientras tanto publicado Una pecadora, una novela de carácter autobiográfico y fuertemente melodramático, que narra la historia de un pequeño burgués de Catania que, habiendo obtenido la riqueza y el éxito, se suicida por amor a una mujer.

Los años florentinos serán fundamentales para la formación del joven escritor, pues conocerá a artistas, músicos, literatos y hombres políticos al frecuentar los salones más conocidos del momento. Con una carta de presentación de Mario Rapisardi se introdujo fácilmente en casa del escritor y patriota Francesco Dall'Ongaro donde encuentra a Giovanni Prati, Aleardo Aleardi, Andrea Maffei y Arnaldo Fusinato.

Introducido gracias a Dall'Ongaro en las salas culturales de Ludmila Assing y de las señoras Swanzberg (madre e hija eran pintoras), conoce a Vittorio Imbriani y otros literatos. Inició entonces a llevar una vida mundana frecuentando el Caffè Doney, donde tratará a literatos y actores, y el Caffè Michelangiolo, lugar de encuentro de pintores macchiaioli más conocidos de la época. Asistía de continuo por la noche al teatro.

Sobresale en este período la escritura de la novela epistolar Storia di una capinera, que apareció en el 1870 en el diario de moda Il corriere delle Dame y que el año siguiente será publicado, por el interés de Dall'Ongaro, por la tipografía Lampugnani de Milán. El prefacio de la novela fue redactado por Dall'Ongaro, que mostraba la carta escrita por él a Caterina Percoto para presentar el libro. La novela tuvo un gran éxito y Verga comenzó a obtener su primera ganancia monetaria.

El 20 de noviembre de 1872, Verga se traslada a Milán, donde se quedará, a pesar de algunos retornos a Catania, hasta el 1893. Lo presentarán el amigo Capuana con una carta para el novelista Salvatore Farina, director de la Rivista minima, y Dall'Ongaro con otra para el pintor y escritor Tullio Massarani.

En Milán frecuenta a menudo el salón Maffei donde conoce a los mayores representantes del segundo romanticismo lombardo y se encuentra con el ambiente de los llamados scapigliatos, juntándose sobre todo con Arrigo Boito, Emilio Praga y Luigi Gualdo.

Al frecuentar restaurantes, como el Cova y el Savini, lugar de encuentro de escritores y artistas, conoce a Gerolamo Rovetta, Giuseppe Giacosa, Emilio Treves y Felice Cameroni, con el cual mantendrá una correspondencia regular y muy interesante tanto por las opiniones sobre el verismo y el naturalismo que va desgranando en ellas, como por sus juicios sobre la narrativa contemporánea, desde Zola hasta Flaubert y D'Annunzio. Conocerá también a De Roberto del cual será amigo por el resto de su vida.

Los años milaneses serán ricos en experiencias y fomentarán la nueva poética del escritor. Son de estos años Eva (1873), Nedda (1874), Eros (que narra una vida mundana sin rumbo, disoluta, que conduce a la destrucciónal protagonista), y Tigre real (1875). El escritor se había acercado a nuevos autores (por temática y forma expresiva), como Balzac, Maupassant, Daudet, Zola, Flaubert, Bourget, y por entonces había iniciado un esbozo de su gran novela: Los Malavoglia.

En el 1876 será publicado por el editor Brigola una colección de cuentos cortos, Primavera e altri racconti, que habían aparecido en las revistas Illustazione italiana y Strenna italiana; presentan un estilo y una temática distintos de los escritos precedentes.

En el 1878 aparece sobre la revista Il Fanfulla el cuento Rosso Malpelo y en tanto inicia a escribir Fantasticheria.

De estos años es el proyecto, anunciado en una carta del 21 de abril al amigo Salvatore Paolo Verdura,[9]​ de escribir un ciclo de cinco novelas, Padron 'Ntoni, Mastro-don Gesualdo, La duquesa de las Gargantas, El honorable Scipioni, El hombre de lujo, que en principio habrían sido titulados como Marea para después ser cambiados por I vinti (Los vencidos), que, en la intención de Verga, debían representar cada estrato social, del más humilde al más aristocrático. Será esto "el inicio de la más feliz y ferviente estación narrativa del escritor catanio".[10]

El 5 de diciembre de 1878 Verga vuelve a Catania por la muerte de la madre y seguirá entonces un largo período de depresión. En julio deja Catania y, después de haber estado en Florencia vuelve a Milán donde empezará de nuevo, con mayor fervor, a escribir. En agosto de 1879 saldrá Frantasticherie en el Fanfulla de la domenica y, en el mismo año, escribirá Jeli el pastor, además de publicar, en distintas revistas, algunas novelas cortas de Vida de los campos, que verá la luz a través del editor Treves en el 1880.

En el 1881 aparece en el número de enero de la Nuova Antologia el episodio sacado de Los Malavoglia que narra la tormenta con el título Pobres pescadores y, en el mismo año, será publicado por Treves la novela que será acogida muy fríamente por la crítica como confesará el mismo Verga al amigo Capuana en una carta del 11 de abril desde Milán: "Los Malavoglia son un fiasco, fiasco pleno y completo. Salvo Boito y Gualdo, que han hablado bien, muchos, Treves primero, me han dicho mal".[11]

En el 1882, agobiado por los asuntos económicas, publicó a través de Treves la novela El marido de Elena donde retomó los temas eróticos-mundanos de los inicios pero haciendo análisis psicológico mucho más profundo. En este período, fue elaborando los futuros "Relatos rústicos", que serán publicados poco a poco en algunas revistas.

Durante la primavera, el escritor fue a París donde encontrará al escritor suizo de lengua francesca Louis Edouard Rod, conocido el año precedente, que en 1887 publicará Los Malavoglia en francés. Después de París cumplió otro viaje a Médan para ver a Zola y en junio va a Londres. A finales del año, pero con la fecha de 1883, publica la colección de doce novelas cortas con el título Relatos rústicos donde predomina ese tema. Trabajaba ente tanto intensamente en los cuentos Per le vie, iniciados el año anterior, que serán publicados en Fanfulla della domenica, Domenica letteraria y Cronaca bizantina, luego, los reunió Treves en 1883.

En 1884 destaca el inicio teatral del escritor con Cavalleria rusticana, donde adaptaba el breve cuento homónimo aparecido en Vida de los campos, que será representada el 14 de enero de 1884 por la compañía teatral de Cesare Rossi en el Teatro Carignano de Turín y tendrá como actores a Eleonora Duse como Santuzza y Flavio Andò como Turiddu. El drama, como ya había intuido Giacosa, que había seguido el trabajo de Verga, obtuvo un gran éxito.

Consolado, Verga preparó otra comedia adaptando otro cuento breve, "Il canarino del n. 15", de Per le vie; la presentó en Milán en el Teatro Manzoni, con el título In portineria, el 16 de mayo de 1885, sin obtener el éxito que tuvo la anterior.

Afligido por una grave crisis psicológica debido a las preocupaciones de carácter económico y del hecho que no lograba seguir adelante como quería con el Ciclo de los Vencidos, decidió entonces volver a Sicilia. En el 1887 salió, a través del editor Barbèra de Florencia, la colección Vagabondaggio (Vagabundaje).

En el 1888 estuvo algunos meses en Roma y al inicio del verano volvió a Sicilia y, a excepción de algunos días en Roma, se quedó allí hasta finales de noviembre del 1890. Terminó en tanto la primera escritura de la novela Mastro don Gesualdo, que se fue publicando en varias entregas en la revista La Nuova Antologia.

Durante el 1889 se dedicò completamente a la revisión de Mastro don Gesualdo que fue dado a las imprentas, por Treves, a fin de año obteniendo una buena crítica tanto del público como de los críticos.

El escritor, animado por el buen éxito de la novela, proyectó continuar con el Ciclo de los Vencidos con La duquesa de Leyra y El honorable Scipione mientras continuó la publicación de las novelas cortas que harán después parte de las últimas dos antologías.

El 8 de abril de 1890, en el Teatro Costanzi de Roma, fue puesta en escena Mala Pascua sacada de la novela de escritor que no obtuvo un gran éxito. Solo un mes después fue representada, en el mismo teatro, la obra Cavalleria rusticana musicalizada por Pietro Mascagni obteniendo un gran aplauso del público y la crítica.

La obra continuó representándose siempre con mayor éxito y Verga pidió al músico y al editor, como estaba pactado, la parte de la ganancia por los derechos de autor. Le será ofrecida una cifra modesta, 1000 liras que Verga no quiso aceptar. Se dirigió entonces a la Sociedad de los Autores, que se mostró solidario con el escritor, pero él actuará igualmente a través de los caminos legales. Así inicia, en el 1891, una compleja lucha judicial que parece concluirse, el 22 de enero de 1893, dado que Verga acepta, una tantum, la suma de 143.000 liras como "compensación final".[12]

En 1891 habían en tanto salido con el editor Treves Los recuerdos del capitán d'Arce y en el 1894 Don Candeloro y C.i. Y en 1893 el escritor se instala definitivamente a Catania donde, además de algún que otro viaje corto a Milán y Roma, se quedará hasta la muerte.

En 1895 inicia minuciosas investigaciones de costumbres que consideraba necesarias para la tercera novela del Ciclo de los vencidos, La duquesa de Leyra, que nunca llegó a terminar (quedan el primer capítulo y un fragmento del segundo).

Desde hacía algunos años el escritor había iniciado una relación con la pianista Dina Castellazzi condesa de Sordevolo que duró toda la vida, a pesar de que la renuencia de Verga al matrimonio redujo la relación amoroso a una afectuosa amistad.

Con Treves fueron publicados en el 1896 los dramas La lupa, In portineria, Cavalleria rusticana. La lupa fue representada con éxito en el Teatro Gerbin de Turín, y a mediados de año volvió a trabajar sobre La duquesa de Leyra.

En la revista de Catania Le Grazie, fue publicado el relato titulado "La caccia al lupo" ("La caza al lobo"), el 1 de enero de 1897, y el editor Treves publicó una nueva versión de Vita dei campi con las ilustraciones de Arnaldo Ferraguti que presentaba notables cambios si se compara con la edición del 1880.

Parece que prosigue la escritura de La duquesa de Leyra, como se lee en una carta escrita al amigo Edouard Rod en 1898, noticia confirmada por La Nuova Antologia que anuncia la próxima publicación.[13]

En 1901 fueron representados los bocetos La caccia al lupo y La caccia alla volpe (La caza al zorro) en el teatro Manzoni de Milán, que serán publicados en 1902 una vez más por el editor Treves. Al morir el hermano Pietro en 1903, Verga se encarga de los hijos de éste. En noviembre del mismo año se representa, en dicho teatro, el drama Dal tuo al mio, que se difundirá en varias entregas por La Nuova Antologia en 1905, y será impreso, por Treves, en 1906.

Ya lejos de la escena literario, Verga redujo mucho sus actividades de escritor para dedicarse asiduamente al mantenimiento de sus tierras, aunque se sabe por una carta al amigo Rod, del 1 de enero de 1907, que continuaba trabajando en La duquesa de Leyra, del cual verá la luz solo un capítulo publicado póstumo en La Letteratura a cargo de De Roberto el 1 de junio de 1922.

A De Roberto, el escritor le dio, entre el 1912 y el 1914, el guion cinematográfico de algunas de sus obras; y él mismo redujo la Storia di una capinera y de La caccia al lupo de forma que se pudiese hacer una versión para el teatro. Su último relato, titulado Una capanna e il tuo cuore es del 1919 y fue publicado póstumamnete, el 12 de febrero de 1922, en Ilustrazione italiana, mientras que en el 1920 será publicada una edición revisada de los Relatos rústicos en Roma en la revista La Voce.

En julio de ese año, por los ochenta años del escritor, fue homenajeado en Roma, en el Teatro Valle, con la presencia del entonces Ministro de la Instrucción Pública Benedetto Croce y el discurso oficial fue dado por Luigi Pirandello. En ese mismo año, Verga fue nombrado senador del Reino.

El 26 de enero de 1922 sufrió un ictus; no recuperó la conciencia y a los cinco días murió en Catania, en la casa de Sant'Anna, asistido por los sobrinos y por el amigo De Roberto.



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