El Grao de Castellón (oficialmente y en valenciano Grau de Castelló) es un distrito situado en la costa de Castellón de la Plana (España). Está situado a 4 km del centro de la ciudad, y con una historia y fiestas que le distinguen de la capital de la provincia de Castellón. Se encuentra al sur de Benicasim y al norte de Almazora.
Actualmente, el Grao cuenta con autovía CS-22 que comunica la N-340 con el Puerto de Castellón. También existen dos vías interurbanas que unen la capital de La Plana con la costa: son la Avenida del Mar y la Avenida Hermanos Bou.
Conecta con el centro urbano con la línea 1 de TRAM (Tranvía). Dispone de 2 autobuses lanzadera que conectan la estación de dicho transporte con la playa del pinar y el camino Serradal. Se planea crear un segundo tranvía que conecte con Benicasim.
La aparición de restos ibéricos y romanos junto a la costa viene a confirmar la hipótesis de que la costa de El Grao de Castellón cuenta con más de dos mil años de tradición de comercio portuario.
También durante los siglos de dominación musulmana debió haber comercio en dicho lugar. El rey Jaime I ordenó construir el Camino Viejo del Mar nada más conquistar La Plana para unir Castellón con la zona costera de El Grao. Un vial que desemboca donde han aparecido estos hallazgos, circunstancia que se interpreta como que ya había una zona comercial consolidada antes de la conquista.
La actividad comercial fue en aumento desde entonces, como demuestran diversos documentos y restos. Los primeros pescadores que se conocen, se cifran en 1398 y estaban domiciliados en la parroquia Santo Tomás, ubicada en la calle Escultor Viciano de Castellón, mientras que el primer censo del Grao como barrio independiente data de 1865 con 428 vecinos.
El Grao estaba constituido originalmente por una serie de estanques a los que cierra su salida al Mediterráneo el Serradal, barra de restinga que forma una elevación entre el mar y la zona pantanosa, que no permite un desagüe adecuado, formando un amplia zona de un paisaje pantanoso. Desde el siglo XIX el hombre ha intentado desecar los humedales con el fin de convertir el terreno en zona de cultivo, siendo en la actualidad, prácticamente, toda la franja costera, tierra firme y aprovechada no solo para el cultivo sino también como zona residencial.
En medio de esta zona pantanosa se levantaban una serie de elevaciones de terreno conocidos como pujols. Uno de ellos, que recibía el nombre de Pujol de Gasset, se encontraba entre el estanque de Patos y el de Sotanilla, junto a la actual carretera del Grao a Castellón, hoy en día una zona urbanizada entre el C.P. l’Illa y la avenida de los Hermanos Bou.
Estas zonas más elevadas ya en el siglo XIX se aplanaban para rellenar los almarjales y eliminar las aguas estancadas, y precisamente fue en 1851 –cuando se encontraba en este proceso el Pujol de Gasset–, cuando se localizó en él lo que eran los restos de un asentamiento de época ibérica, al parecer y según los escasos datos que tenemos, puede pertenecer a un momento tardío de esta cultura de la antigüedad mediterránea, concretamente al siglo II a. C.
Una vez identificado y conocido el yacimiento sobre todo por el hallazgo de una inscripción ibérica, desde la Real Academia de la Historia se intentó que se conservara el túmulo en cuestión, así como otros que había en la zona. Evidentemente, la conservación no se ha llevó a cabo y el túmulo se fue deshaciendo poco a poco. En 1905, todavía se sacan tierras así como materiales cerámicos. En 1928, 1943 y 1949 se realizan excavaciones arqueológicas, cuyos resultados no se conocen, pero que confirmaban la existencia y perduración, a pesar de haberse deshecho dicho túmulo, del yacimiento arqueológico. En el año 2001 todavía la zona es objeto de una excavación con sondeos de prospección para conocer la potencialidad arqueológica del yacimiento, en donde se localiza la cerámica ibérica y de barniz negro itálica, de la que ya se tenía constancia, y además cerámica fenicia, de la Edad del Bronce y cerámica islámica, lo que indica que este lugar fue un asentamiento humano a lo largo de muchas épocas históricas.
Hoy en día, tal y como se ha comentado, continúa estando ocupado por el Grao, y a la espera de que se lleve a cabo un proyecto arqueológico apropiado antes de que desaparezca completamente el yacimiento.
El epígrafe encontrado en el Pujol de Gasset es una lámina de plomo de 44,50 centímetros de longitud y 4,00 centímetros de ancho. Presenta cuatro líneas de escritura, la última más corta, que no ocupan toda la longitud del soporte. Está escrita por una sola cara. En un extremo hay dos grafismos aislados. Presenta veintidós palabras separadas por tres puntos verticales. Las letras ofrecen una duplicidad de signos, es decir un grafismo puede tener un par de variantes en las que se modifica el rasgo ya sea añadido o suprimido. Se ha querido ver en estas variantes la representación de los sonidos oclusivos. La escritura pertenece a la variante dual de la escritura ibérica nororiental o levantina, siendo uno de los textos más largos escritos en lengua ibérica.
La Torre del Pinaret era muy semejante a la Torre de San Vicente de Benicasim, que aún se conserva en buen estado, según se deduce de un informe sobre las fortalezas del litoral valenciano llevado a cabo por la Dirección de Subinspección de Ingenieros de Valencia en 1870. Dicho informe señala que la fortificación benicense es de planta cuadrada, de 12 metros de lado y de 15 de altura, mientras que la del Grao también era cuadrada, aunque sus dimensiones eran algo menores: 10 metros de lado y 14 de altura. Ambas fortalezas también contaban con dos torreones en su parte superior, que pueden apreciarse aún en la de Sant Vicent. La mayor diferencia entre ambas estribaba en que la torre benicense contaba con unas caballerizas que no tenía la construcción grauera. Sin embargo, estas cuadras actualmente han desaparecido, por lo que la imagen actual de la torre de Benicasim aún es más semejante a la que presentó la Torre del Pinaret.
La fortaleza grauera, que fue ordenada construir el 1562 como parte de la fortificación del Reino de Valencia, se levantó originalmente en 1571, fue proyectada por Juan Bautista Antonelli, y tuvo un coste de 2875 lliures, 5 sous i 4 diners. Tenía como finalidad la defensa de la costa de los ataques de los piratas. Fue destruida el 1618 y nuevamente rehabilitada el 1626, pero que derruida de nuevo fue finalmente reconstruida en otro lugar en 1671, siendo reformada tiempo después, en 1673. Desapareció a finales del siglo XIX. El informe referido de 1870 puede considerarse como el acta de defunción de la fortificación grauera al concluir que «puede decirse que es de poquísima entidad la utilidad de esta torre como vigía o como defensa y que no sería conveniente su conservación». Este informe también cifra en 120 escudos el coste de las reparaciones que precisaba la torre, que nunca se llevaron a cabo.
En la actualidad se investigan unas las piedras de sillería que han aparecido en el lugar en que antiguamente se alzaba la Torre del Pinaret (siglo XVII). Los restos podrían corresponder a los cimientos de la citada fortaleza, y han aparecido en un solar que hay detrás del Hotel Turcosa donde se están llevando a cabo unas obras. Se trata de una zona en la que antiguamente estaba el denominado Pujol de la Torre, una elevación del terreno sobre la que se encontraba la fortaleza. La aparición de estos restos ha detenido temporalmente la construcción en el solar en el que se encontraron los restos en mayo del 2006.
El pasado más cercano del Grao gira en torno al Puerto, así que podemos consultar la Historia del Puerto para saber más sobre él.
Escribe un comentario o lo que quieras sobre Grao de Castellón (directo, no tienes que registrarte)
Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)