x
1

Intendencia del Caquetá



La intendencia del Caquetá fue una antigua entidad territorial de Colombia que correspondía a la totalidad del hoy departamento del Caquetá, ubicado al sur del país. La entidad fue creada por decreto no. 177 del 18 de febrero de 1905 con parte del área del antiguo territorio del Caquetá.[2][3]

En 1906 la intendencia desapareció por medio del decreto 290 y su territorio fue incorporado a los departamentos de Cauca y Nariño. En 1912 por medio del Decreto 320 reapareció como comisaría especial del Caquetá, con los mismos límites de 1905 y permaneció con esta denominación hasta 1950, cuando se estableció de nuevo como Intendencia por medio del decreto 963 del 14 de marzo.[2][4]​ Finalmente por la ley 78 del 15 de diciembre de 1981 se elevó al Caquetá a la categoría de departamento.[5]

La intendencia durante su existencia cambió muchas veces de límites tanto internos (por la creación de otras entidades segregadas de la misma) como externos (debido a la fijación de fronteras internacionales con el Brasil y el Perú). De tal modo, el Caquetá comenzó su vida jurídica (1905) con los siguientes límites:[2]

Abarcando así la parte norte del antiguo territorio del Caquetá; la capital de esta región era Florencia. Tras ser delimitadas la fronteras con el Brasil (1907) y el Perú (1922) y las segregaciones de las comisarías del Vaupés (1910) y del Amazonas (1928) adquirió la configuración territorial actual, cuyos límites quedaron definidos en la ley 78 del 15 de diciembre de 1981:[2]

Para 1912 la intendencia contaba con un único municipio, la capital Florencia (erigido como tal en 1912), y cuatro corregimientos: Yarí, Tres Esquinas, San Vicente del Caguán y Puerto Rico. En 1967, mediante el decreto 1978, se elevaron a la categoría de municipio los corregimientos El Paujil, El Doncello y Puerto Rico.[3]​ Ya para 1968, la intendencia tenía por municipios a Florencia (30.455 hab.), Belén de los Andaquíes (16.390), La Montañita (5.658), San Vicente del Caguán (10.936), El Doncello (10.721), El Paujil (6.999) y Puerto Rico (10.328), y los corregimientos Milán (5.639), Solano (3.156) y Morelia (536).[1][6]



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Intendencia del Caquetá (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


GUILLERMO CARVAJAL MOLINA M.V.Z.:
CICOLAC EN EL CAQUETÁ: para acercarnos a los proveedores, cuyo listado conservo hoy día en forma manual (2023) organicé "Días de Campo" aprovechando la experiencia en el Dpto. del Cesar; cada mes se efectuaba un Día de Campo, donde se les daba una charla sobre bases de ganadería y ordeño, sobre el pasto alemán y el reciente Brachiaria decumbens, llevaba toretes para que los proveedores los compraran, se les ofrecían los productos del almacén agropecuario, construcción de ramadas (que las financiaba la empresa), sobre Inseminación Artificial, a cargo del Capitán (R.) Gustavo Artunduaga Paredes quién montó su empresa en la Intendencia, en fin, sobre las inquietudes de los ganaderos. No disponiamos de energía eléctrica y las charlas se efectuaban en las escuelas de las veredas, a punta de tablero y tiza. El problema grande hecho el diagnóstico de esta zona, era el largo período interpartos, casi de 2 años, pues las vacas entraban en celo, después de destetar las crías, debido a grandes deficiencias en macro y microminerales (calcio, fósforo, selenio, zinc, etc)y al exceso de otros (aluminio y hierro) por lo cual empezamos a llevar sal mineralizada, adicionada con melaza, que nos enviaban desde el Departamento Agropecuario de Bugalagrande (Valle), de donde dependíamos. La teoría que aprendí en la Universidad, tuve que borrarla de mi memoria. La teoría hablaba de consumo de sal diario de 50 gramos/cabeza adulta. Confirmamos consumos hasta de 200 gr/día. Empezó a mejorar la fertilidad y la natalidad. El control de ecto y endo-parásitos se comenzó a efectuar periódicamente. La higiene de la leche y el volúmen producido subía lentamente. El promedio de producción de leche en la mayoría de los casos era entre 5-8 litros, la mayoría con vacas cebú y/o criollo, financiadas por el extinto Instituto Colombiano de Reforma Agraria (INCORA), el extinto Banco Ganadero y el Fondo Ganadero del Caquetá, principalmente. La venta de la leche constituía el ingreso permanente de los proveedores, pues Cicolac pagaba cada quincena, en esa época con cheque. Otros ingresos eran cíclicos, por venta de ganado, plátano, etc. Así fué subiendo la producción promedio/vaca de leche, de terneros y de nivel socio-económico de los proveedores. Tres años después de haber llegado al Caquetá, me retiré de CICOLAC y me fuí a trabajar a Santander del Sur. Muchos años después, antes de la pandemia, me encontré con un ex-compañero del Comité de Cafeteros de Cundinamarca, criador del ganado BON (blanco orejinegro) en el Tolima, con quien hablaba cuando se nos acercó un grupo de personas, el me las presentó como ganaderos del Caquetá. Uno de ellos me dijo que se recordaba de mí en los Días de Campo que hacíamos a nivel veredal. Que recordaba la charla en las que les expliqué las diferencias entre ganado cebú y ganado de origen europeo (Holstein, Pardo Suizo, etc). Cuarenta años después, esta persona era un alto dirigente de la Federación de Ganaderos, (Fedegan) quien me habló del certificado de origen obtenido por los quesos del Caquetá. Gratos recuerdos y muchas anécdotas. (Continuará)
2023-06-14 11:50:42
RESPONDER A ESTE COMENTARIO
GUILLERMO CARVAJAL MOLINA M.V.Z.:
CICOLAC EN EL CAQUETÁ: para acercarnos a los proveedores, cuyo listado conservo hoy día en forma manual (2023) organicé "Días de Campo" aprovechando la experiencia en el Dpto. del Cesar; cada mes se efectuaba un Día de Campo, donde se les daba una charla sobre bases de ganadería y ordeño, sobre el pasto alemán y el reciente Brachiaria decumbens, llevaba toretes para que los proveedores los compraran, se les ofrecían los productos del almacén agropecuario, construcción de ramadas (que las financiaba la empresa), sobre Inseminación Artificial, a cargo del Capitán (R.) Gustavo Artunduaga Paredes quién montó su empresa en la Intendencia, en fin, sobre las inquietudes de los ganaderos. No disponiamos de energía eléctrica y las charlas se efectuaban en las escuelas de las veredas, a punta de tablero y tiza. El problema grande hecho el diagnóstico de esta zona, era el largo período interpartos, casi de 2 años, pues las vacas entraban en celo, después de destetar las crías, debido a grandes deficiencias en macro y microminerales (calcio, fósforo, selenio, zinc, etc)y al exceso de otros (aluminio y hierro) por lo cual empezamos a llevar sal mineralizada, adicionada con melaza, que nos enviaban desde el Departamento Agropecuario de Bugalagrande (Valle), de donde dependíamos. La teoría que aprendí en la Universidad, tuve que borrarla de mi memoria. La teoría hablaba de consumo de sal diario de 50 gramos/cabeza adulta. Confirmamos consumos hasta de 200 gr/día. Empezó a mejorar la fertilidad y la natalidad. El control de ecto y endo-parásitos se comenzó a efectuar periódicamente. La higiene de la leche y el volúmen producido subía lentamente. El promedio de producción de leche en la mayoría de los casos era entre 5-8 litros, la mayoría con vacas cebú y/o criollo, financiadas por el extinto Instituto Colombiano de Reforma Agraria (INCORA), el extinto Banco Ganadero y el Fondo Ganadero del Caquetá, principalmente. La venta de la leche constituía el ingreso permanente de los proveedores, pues Cicolac pagaba cada quincena, en esa época con cheque. Otros ingresos eran cíclicos, por venta de ganado, plátano, etc. Así fué subiendo la producción promedio/vaca de leche, de terneros y de nivel socio-económico de los proveedores. Tres años después de haber llegado al Caquetá, me retiré de CICOLAC y me fuí a trabajar a Santander del Sur. Muchos años después, antes de la pandemia, me encontré con un ex-compañero del Comité de Cafeteros de Cundinamarca, criador del ganado BON (blanco orejinegro) en el Tolima, con quien hablaba cuando se nos acercó un grupo de personas, el me las presentó como ganaderos del Caquetá. Uno de ellos me dijo que se recordaba de mí en los Días de Campo que hacíamos a nivel veredal. Que recordaba la charla en las que les expliqué las diferencias entre ganado cebú y ganado de origen europeo (Holstein, Pardo Suizo, etc). Cuarenta años después, esta persona era un alto dirigente de la Federación de Ganaderos, (Fedegan) quien me habló del certificado de origen obtenido por los quesos del Caquetá. Gratos recuerdos y muchas anécdotas. (Continuará)
2023-06-14 11:50:19
RESPONDER A ESTE COMENTARIO
GUILLERMO CARVAJAL MOLINA M.V.Z.:
CICOLAC EN EL CAQUETÁ: para acercarnos a los proveedores, cuyo listado conservo hoy día en forma manual (2023) organicé "Días de Campo" aprovechando la experiencia en el Dpto. del Cesar; cada mes se efectuaba un Día de Campo, donde se les daba una charla sobre bases de ganadería y ordeño, sobre el pasto alemán y el reciente Brachiaria decumbens, llevaba toretes para que los proveedores los compraran, se les ofrecían los productos del almacén agropecuario, construcción de ramadas (que las financiaba la empresa), sobre Inseminación Artificial, a cargo del Capitán (R.) Gustavo Artunduaga Paredes quién montó su empresa en la Intendencia, en fin, sobre las inquietudes de los ganaderos. No disponiamos de energía eléctrica y las charlas se efectuaban en las escuelas de las veredas, a punta de tablero y tiza. El problema grande hecho el diagnóstico de esta zona, era el largo período interpartos, casi de 2 años, pues las vacas entraban en celo, después de destetar las crías, debido a grandes deficiencias en macro y microminerales (calcio, fósforo, selenio, zinc, etc)y al exceso de otros (aluminio y hierro) por lo cual empezamos a llevar sal mineralizada, adicionada con melaza, que nos enviaban desde el Departamento Agropecuario de Bugalagrande (Valle), de donde dependíamos. La teoría que aprendí en la Universidad, tuve que borrarla de mi memoria. La teoría hablaba de consumo de sal diario de 50 gramos/cabeza adulta. Confirmamos consumos hasta de 200 gr/día. Empezó a mejorar la fertilidad y la natalidad. El control de ecto y endo-parásitos se comenzó a efectuar periódicamente. La higiene de la leche y el volúmen producido subía lentamente. El promedio de producción de leche en la mayoría de los casos era entre 5-8 litros, la mayoría con vacas cebú y/o criollo, financiadas por el extinto Instituto Colombiano de Reforma Agraria (INCORA), el extinto Banco Ganadero y el Fondo Ganadero del Caquetá, principalmente. La venta de la leche constituía el ingreso permanente de los proveedores, pues Cicolac pagaba cada quincena, en esa época con cheque. Otros ingresos eran cíclicos, por venta de ganado, plátano, etc. Así fué subiendo la producción promedio/vaca de leche, de terneros y de nivel socio-económico de los proveedores. Tres años después de haber llegado al Caquetá, me retiré de CICOLAC y me fuí a trabajar a Santander del Sur. Muchos años después, antes de la pandemia, me encontré con un ex-compañero del Comité de Cafeteros de Cundinamarca, criador del ganado BON (blanco orejinegro) en el Tolima, con quien hablaba cuando se nos acercó un grupo de personas, el me las presentó como ganaderos del Caquetá. Uno de ellos me dijo que se recordaba de mí en los Días de Campo que hacíamos a nivel veredal. Que recordaba la charla en las que les expliqué las diferencias entre ganado cebú y ganado de origen europeo (Holstein, Pardo Suizo, etc). Cuarenta años después, esta persona era un alto dirigente de la Federación de Ganaderos, (Fedegan) quien me habló del certificado de origen obtenido por los quesos del Caquetá. Gratos recuerdos y muchas anécdotas. (Continuará)
2023-06-14 11:50:00
RESPONDER A ESTE COMENTARIO
GUILLERMO CARVAJAL MOLINA:
Soy Médico Veterinario Zootecnista, graduado en la U. de Caldas, Manizales, en 1972. Siendo empleado de la Compañía Colombiana de Alimentos Lácteos "CICOLAC", propiedad de la multinacional suiza NESTLÉ, fui trasladado de la fábrica de Valledupar, Dpto. del Cesar, a Florencia, Intendencia del Caquetá, llegando al Aeropuerto Capitolio (así se llamaba en esa época), el 1° de Enero de 1978, en un avión de la empresa Aeropesca, como primer Veterinario de esta compañía en esta región de la Amazonia colombiana. Cicolac había cerrado su Planta de Precondensación de leche fresca en Puerto Boyacá, (Boyacá), la desmontaron y la instalaron sobre la vía Florencia-Morelia, km. 4, junto a la quebrada de la Yuca. Allí fue mi debut. Poca leche se recepcionaba, baja producción por proveedor, triple juego de cantinas en muchos casos, pues el transporte era por ríos, la Intendencia no tenía interconexión eléctrica, se trabajaba con plantas eléctricas, la mayoría de habitantes eran colonos en proceso de organización, vías pésimas, en fin, el reto era grande. Cicolac trabajaba en base a un programa quinquenal, para fomentar la producción de leche en condiciones desfavorables y transportarla a la fábrica de Bugalagrande, Valle del Cauca, hermosa fábrica que necesitaba más leche para industriazarla, pues los cultivos de caña de azúcar desplazaban a las ganaderías de las zonas planas hacia las cordilleras. Arrancamos a conocer las rutas lecheras, los proveedores, la problemática y la idiosincracia de la población. Problemas en el proceso de ordeño, de la higiene de las cantinas, el problema de sus tapas, que funcionaban mejor las de caucho que las de aluminio, pero la contaminación de la leche era mayor con las de caucho. Se abrió un almacén agropecuario en Florencia, se montó una Estación de recibo en El Doncello, y se empezó a aplicar el programa de Extensión Rural, igual al que funcionaba ya en Valledupar. Para montar la Planta de Precondensación, la empresa compró una pequeña finca con potreros, adonde empezaron a llegar terneros y toretes enviados desde diferentes criaderos de razas lecheras del interior del país, proveedores mejoraran los genes productores de leche, con razas Pardo Suizo y Holstein, que eran financiados a 18 meses y pagados con leche, al igual que la sal mineralizada, tejas de zinc, medicamentos, etc. Trabajábamos los 365 días del año, pues las vacas en producción no conocen Domingos, ni festivos, igual que gallinas, pollos, cerdos, peces, equinos, etc. Había que capacitar y entrenar gente en todo el proceso. (Continuará)
2023-06-13 21:07:14
RESPONDER A ESTE COMENTARIO