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Luis Carlos Sarmiento Angulo



¿Qué día cumple años Luis Carlos Sarmiento Angulo?

Luis Carlos Sarmiento Angulo cumple los años el 27 de enero.


¿Qué día nació Luis Carlos Sarmiento Angulo?

Luis Carlos Sarmiento Angulo nació el día 27 de enero de 1933.


¿Cuántos años tiene Luis Carlos Sarmiento Angulo?

La edad actual es 91 años. Luis Carlos Sarmiento Angulo cumplió 91 años el 27 de enero de este año.


¿De qué signo es Luis Carlos Sarmiento Angulo?

Luis Carlos Sarmiento Angulo es del signo de Acuario.


Luis Carlos Sarmiento Angulo (Bogotá, 27 de enero de 1933) es un empresario, banquero , constructor y magnate colombiano. Es el presidente de la Junta Directiva del holding Grupo Aval Acciones y Valores y el fundador del Centro de Tratamiento e Investigación sobre Cáncer (CTIC), el principal proyecto médico de atención del cáncer en América Latina. Es además, según Forbes, el hombre más rico de Colombia y el número 199 del mundo, con un patrimonio de 11.100 millones de dólares.[2]​ En 2012 compró la Casa Editorial El Tiempo con su principal medio periodístico, el diario El Tiempo, el periódico de mayor circulación en Colombia.[3]

Nació el 27 de enero de 1933 en Bogotá y es el penúltimo de nueve hermanos. Su padre, Eduardo Sarmiento Pulido, fue un hacendado que tenía un aserradero en Guayabetal, al suroriente de Bogotá. Su madre fue Georgina Angulo Rodríguez.

Asistió al Kínder del colegio San Luis Gonzaga y posteriormente inició sus estudios en el Colegio Mayor de San Bartolomé. Desde pequeño encontró gusto por las matemáticas. Sin embargo, no fueron los números los que le brindaron su primera experiencia laboral. Gracias a su buen rendimiento académico, un profesor lo seleccionó para trabajar en el radioteatro de la Radiodifusora Nacional de Colombia, en donde por cada episodio de media hora, le pagaban $1,25 pesos.

Solo tenía 10 años cuando el dueño de uno de los depósitos de madera con quien trabajaba su padre le ofreció a Luis Carlos Sarmiento la posibilidad de manejar la contabilidad del almacén. A partir de ese momento se dedicó a organizar las facturas y calcular utilidades. Ganó experiencia, leyó libros tributarios y rápidamente se encargó también de realizar declaraciones de renta.

Desde pequeño siempre había querido estudiar ingeniería civil. Por esto, se postuló a la Universidad Nacional en un grupo de más de cuatrocientos aspirantes y ocupó el primer lugar en el examen de admisión. En paralelo, manejaba la contabilidad de varias compañías y ya utilizaba una vieja máquina de escribir que le permitía ser eficiente con sus labores.

Ya inmerso en el mundo de la ingeniería civil, su padre le ofreció una nueva oportunidad laboral. Esta vez se trataba de medir la finca de un amigo de su padre. A partir de ahí, inició formalmente este tipo de labores en diferentes municipios de Colombia.  

A finales de 1950, en un paseo prenavideño, Luis Carlos conoció a Fanny Gutiérrez de las Casas, quien para ese entonces estudiaba dibujo arquitectónico en la Pontificia Universidad Javeriana. Desde un primer momento se cayeron bien y empezaron a salir. Fue un noviazgo largo hasta que se casaron en 1955 y hoy tienen cinco hijos: María Claudia, Luz Ángela, Adriana, Luis Carlos y Sonia.

En 1954 se graduó como Ingeniero Civil de la Universidad Nacional. Tuvo los mejores promedios de la carrera y gracias a eso, se ganó una beca para estudiar en el exterior. Sin embargo, el beneficio solo cobijaba el sostenimiento de una persona, por lo que Luis Carlos tomó la decisión de pedir un año para ahorrar y poder viajar con quien sería su esposa.

Durante ese tiempo ocupó un nuevo puesto en la firma constructora Santiago Berrío & CÍA. Al finalizar el año que había solicitado, el director del Icetex le reveló que había sido aceptado en la Universidad de Harvard. Todos los preparativos estaban listos hasta que su jefe, Santiago Berrío, fue asesinado por la guerrilla liberal.

Luis Carlos se había convertido en la mano derecha del empresario y su familia, tras el fallecimiento, le pidió que se hiciera cargo de la compañía. Frente a esta situación, tomó la determinación de continuar al frente de la firma y dejar a un lado el viaje a Boston.

Antes de trabajar para la compañía de Santiago Berrío, Luis Carlos fue jefe de construcciones de Cuellar Serrano Gómez, la firma más importante de ese tipo en Colombia para ese entonces. A mediados de los años cincuenta su paso por esta compañía se vio interrumpido por una discusión que tuvo el primo de su padre con uno de los dueños y que terminó en el despido de todos sus allegados. A partir de entonces, inició una rápida búsqueda laboral que fue satisfecha en el corto plazo en el Instituto Agustín Codazzi, en donde se desempeñó como calculista de geodesia.

Su periodo final en la firma de Santiago Berrío le enseñó a administrar una compañía. Su tarea de liquidar la empresa le permitió identificar un instinto por las organizaciones y el deber cumplido de la liquidación le dejó un capital de $10 000 pesos.

Con veintitrés años y la convicción de querer crear una compañía, Luis Carlos tomó la decisión de montar su propia oficina. De esa manera, con el capital inicial compró una camioneta Chevrolet de 1957 y alquiló un espacio en el edificio Henry Faux, en la avenida Jiménez. Poco a poco se empezó a abrir espacio en el sector hasta que en 1959 tomó la determinación de buscar unos socios. El primero de ellos fue René Salazar Montoya, un antiguo compañero de estudios, el segundo fue Enrique Santamaria Hermida, amigo de Sarmiento en el San Bartolomé, y el tercero fue el arquitecto Luis Alberto Hoyos Gómez.

En 1959 nace la Organización Luis Carlos Sarmiento Angulo. La primera palabra obedecía al carácter sólido y de amplio despliegue con que proyectaba su compañía y su nombre era una tradición que utilizaban las firmas de ingeniería. Esta nueva sociedad rápidamente fue acumulando ahorros importantes que hicieron que Sarmiento buscara nuevas alternativas de negocio. La primera: una finca con cultivos de algodón en Codazzi, César.

Sin embargo, el negocio de la urbanización en Bogotá fue creciendo de manera vertiginosa y el desarrollo de barrios enteros le permitió a la organización expandirse rápidamente. Ya para la década de los setenta las utilidades del negocio se habían disparado, aunque aún no eran suficientes para absorberlas y reinvertirlas de la forma deseada.

Sarmiento entendió entonces que el sector financiero sería un buen complemento para el negocio de las viviendas. Sin embargo, para ese entonces nadie vendía bancos y el gobierno no otorgaba permisos para abrir nuevos. Por ello, para entrar al mercado Sarmiento funda en 1971 Seguros Alfa y, en 1972, la Corporación de Ahorro y Vivienda Las Villas, que transformaría en el año 2000 en el Banco AV Villas.

El gran salto al mundo financiero se dio en 1971 al adquirir el control accionario del Banco de Occidente, fundado en Cali en 1964 y que por ese entonces atravesaba una grave crisis. El encargado de su administración fue su hermano mayor, Guillermo Sarmiento, quien estuvo durante quince años al frente de la entidad y cuyo más importante logro fue sacar al banco de la crisis que atravesaba.

Pronto empezaron a notarse los buenos resultados y en 1981 inicia la adquisición del Banco de Bogotá, la cual termina en 1988.

En poco más de un cuarto de siglo, Sarmiento pasó de una pequeña empresa de ingeniería a un conglomerado. Además del Banco de Bogotá, Sarmiento adquirió el Banco del Comercio – que fusionó con Bogotá- y el Banco Popular. En el sector de la vivienda, un estudio calculó en esos años que uno de cada cincuenta habitantes de Bogotá residía en una vivienda levantada por la Organización Luis Carlos Sarmiento Angulo.

En 1994 ganó la licitación para operar una de las dos bandas de telefonía celular de la región occidental y para ello fundó Cocelco. Posteriormente, se asoció con el grupo Santo Domingo y EPM, y crearon Orbitel para competir por el mercado de larga distancia.

La política liberalizadora de César Gaviria permitió la creación de fondos de pensiones privados y en conjunto con la mayor administradora de fondos de Chile, AFP Provida, fundó Porvenir, que muy pronto se convirtió en líder del mercado.

El crecimiento de sus entidades financieras y la necesidad primaria de crear una estructura que le permitiera manejar las compañías de forma adecuada hizo que en 1998 creara el holding, Grupo AVAL, que concentró las acciones de Sarmiento en las distintas entidades financieras y designó una junta, presidida por él, para la supervisión y seguimiento de estas.

En 2000 fue designado su hijo, Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez, como presidente de Grupo AVAL; hoy día, el conglomerado financiero más importante de Colombia, que cuenta con más de 14.7 millones de clientes bancarios – equivalente a la población conjunta de Suecia y Uruguay-, que atienden a través de una red bancaria con 1,421 oficinas y 3,781 cajeros automáticos en Colombia.[4]

En Centroamérica, tiene presencia en 6 países: Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Panamá y Nicaragua con los bancos BAC Credomatic y Multibank, también parte del Grupo AVAL, conformada por una red de 694 oficinas y 1,993 cajeros automáticos en esta región. En 2018, el Grupo AVAL registró el mejor desempeño financiero de toda su historia, obteniendo una utilidad neta por COP $2.91 billones, equivalente a un crecimiento del 48,4% con respecto a 2017.[5]​  

Algunos proyectos finalizados y en desarrollo a través de Construcciones Planificadas, empresa constructora del Grupo son:



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