René Rebetez cumple los años el 19 de marzo.
René Rebetez nació el día 19 de marzo de 999.
La edad actual es 1024 años. René Rebetez cumplirá 1025 años el 19 de marzo de este año.
René Rebetez es del signo de Piscis.
René Rebetez nació en Subachoque.
René Rebetez Cortés (Subachoque, 1933 - Isla de Providencia, 1999) fue un escritor de ciencia ficción y Literatura fantástica y cineasta colombiano.
Hijo de un relojero suizo y Lucrecia, una pintora y maestra de pintura colombiana. Su padre fallece cuando cuenta cuatro años de edad, por lo que madre e hijo se mudan a la ciudad de Bogotá, a casa de su abuelo, el escultor Dionisio Cortés. Ya en esa época, goza con la lectura de Salgari, Stevenson, Dickens y Julio Verne. El artista Juan Carlos Moyano nos habla de su infancia:
A los 16 años, toma un barco en el puerto de Buenaventura y viaja a Ginebra y otras ciudades de Suiza, donde comienza a escribir poesía. Allí entra en contacto con la familia de su padre, presta el servicio militar y estudia ciencias económicas en la Universidad de Ginebra, profesión que nunca ejercería. Cada vez que podía, viajaba a París, donde escribía, hacía traducciones y formaba parte de la bohemia del Barrio Latino. Dice el mismo Rebetez:
A los 23 años vuelve a Colombia, donde se dedica a fabricar quesos y luego a vender suscripciones de la revista Visión. Esta labor le permite acceder a ciertas esferas de poder:
Tras haber alcanzado esta posición, Rebetez renuncia a ella. Escribe poemas de corte revolucionario; se hace amigo de los nadaístas; Camilo Torres lo guía hacia la insurgencia; termina viajando a Cuba, en donde brinda apoyo a la Revolución Cubana. Conoce al Ché Guevara y entra en contacto con la santería:
En su viaje de regreso a Colombia, el avión hace escala en México, en donde Rebetez decide quedarse. Allí, estudia restauración de arte colonial y trabaja en una galería de arte. Con sus conocimientos de arqueología, emprende una búsqueda de tesoros arqueológicos, negocia con traficantes de objetos precolombinos, y, al igual que en Cuba, conoce a fondo el pasado aborigen del país. En México, lee a Bradbury, Sturgeon, Asimov, Lovecraft, Huxley, Arthur C. Clarke, y comienza a escribir cuentos de ciencia ficción. En 1964, publica su primer libro de cuentos y poemas: Los ojos de la clepsidra. Durante esos años, tiene contactos con Carlos Monsiváis, Arturo Ripstein, Efraín Huerta, Vicente Leñero, Juan José Arreola, Juan Rulfo, José Luis Cuevas, Salvador Elizondo, Jorge Portilla y, principalmente, con Alejandro Jodorowsky, con quien realizaría varios proyectos en conjunto. El más destacado de ellos sería la revista Crononauta, la primera publicación latinoamericana dedicada a la ciencia ficción. En 1966, escribe el que puede considerarse el primer ensayo colombiano sobre ciencia ficción, titulado Ciencia ficción: Cuarta dimensión de la literatura. En 1967, publica La nueva prehistoria, que circula poco en Colombia y no es bien recibido por la crítica.
En esta época, escribe historias que van a parar a los experimentos del nuevo cine mexicano. A comienzos de los 70s, establece una pequeña compañía cinematográfica y trabaja como productor de cine. De su experiencia en el cine dice Moyano:
Rebetez se lanza a filmar una película que es documental y argumental al mismo tiempo, en busca de la terra incognita de las iniciaciones mágicas en los ritos de mazatecos, en las celebraciones que perviven en la península de Yucatán, en las ceremonias de vudú entre los haitianos, en los misterios del yagé entre los indígenas del río Pirá-Paraná, en las entrañas amazónicas, en el territorio del Vaupés y en las proporciones alteradas de los rituales urbanos que habían emergido de modo insólito entre los jóvenes de los años sesenta, al ritmo de ácido lisérgico y psicotrópicos profundamente reveladores. El título de la película es La magia y tiene como pretexto fragmentos elegidos del Popol Vuh, el libro sagrado de los mayas. Grabados quedaron en esta película los cantos de María Sabina y de su hija María Polonia, al igual que los trances extáticos de brujos y chamanes, en una producción que demoró más de dos años de laboriosa dedicación.
Hay mucho de mística, esoterismo y pseudociencia en la obra de Rebetez, lo que en su visión relativista son expresiones tan válidas como las de la ciencia moderna. Edita libros pseudocientíficos tales como su versión del Tarot de Acuario y su versión del I Ching. Estudia la obra de Gurdjieff. Tras un simposio de filosofía budista, permanece en Japón durante un año, tras el cual traduce y prologa el tratado de zen llamado El Libro del Dragón. Recorre los Estados Unidos, donde entra en contacto con derviches iraníes.
Nuevamente, en un viaje de regreso a Colombia, hace escala en la Isla de Providencia, donde viviría sus últimos catorce años y donde escribe los libros Ellos le llaman amanecer y otros relatos y Cuentos de amor, terror y otros misterios, junto con obras a Providencia tales como The Last Resort y un libro de la cocina de la isla. A mediados de los 80, viaja a Turquía, donde conoce de cerca al sufismo, lo que lo motiva a escribir su obra mística- pseudocientífica La Odisea de la Luz, donde establece un paralelo entre la filosofía sufista y los avances de la ciencia. Su epitafio reza, mitad en broma y mitad mostrando su visión del cosmos: "Aún hay más".
Este libro es el comienzo de Rebetez en la literatura fantástica. Copia tópicos ya ampliamente tratados como la bruja, la mutación, el vampiro, los piratas, los muertos vivientes y seres sobrenaturales con pocos aportes propios. Por otra parte, en algunos relatos propone paradojas, juegos de metaficción y crítica a la religión, representando esto lo más resaltable del texto. El fin de la humanidad tal y como la conocemos es un tema central de La Nueva Prehistoria, en el que se plantea que el hombre se encuentra en un punto de su evolución que lo puede hacer regresar a la barbarie a través de mutaciones o involuciones. La relativización de las costumbres humanas y la superación de roles binarios también forman parte de las principales propuestas de Rebetez. En La Nueva Prehistoria ya puede apreciarse las tesis gnósticas que luego dominarían el estilo del escritor colombiano.
En Ellos lo llaman amanecer y otros relatos, Rebetez incluye 10 relatos de la Nueva Prehistoria y los complementa hasta formar un corpus de 22 relatos y un ensayo sobre la ciencia ficción. El fin del hombre y su deshumanizaciónsigue siendo un tema de preocupación para Rebetez. La tesis gnóstica del sufismo es apreciable mucho más en esta obra, y empieza a notarse en Rebetez esta corriente como posible salvación del hombre. A su vez, las historias de piratas, influencia de su residencia en las isla de Providencia, se hacen con un campo en el texto. En su ensayo sobre la ciencia ficción se deja ver que este género (y la literatura fantástica en general) han sido víctimas del Conflicto armado interno en Colombia, pues al no dejar arraigar la modernidad en el país, la ciencia ficción ha carecido de materia prima con la que nutrirse. No es posible cuestionar el impacto de la modernidad en unpaís que aún no la ha alcanzado.
Cuentos de amor, terror y otros misterios constituiría el último libro de Rebetez en vida. Cuenta con un prólogo y dieciséis relatos, diez de ellos nuevos. En este volumen se hace claro el gnosticismo de Rebetez, que desde el prólogo manifiesta que cada relatos es un Kōan pensado a modo de acertijo o moraleja, cuya resolución permitiría al lector avanzar un poco en su ascenso espiritual. En Cuentos de amor la ciencia ficción y la fantasía han sido tomados como simples excusas para divulgar una especie de evangelio gnóstico de base sufí. Estos géneros serían simplemente otras lógicas para trascender el pensamiento binario. El temor de una involución o deshumanización ha sido superado por una nueva esperanza que sería este camino gnóstico hacia el conocimiento.
Por haber escrito la mayor parte de su obra en México, Rebetez ha sido considerado uno de los más importantes autores de ciencia ficción mexicanos. Al mismo tiempo, en Colombia es considerado como uno de los padres de la Ciencia ficción colombiana junto con Antonio Mora Vélez.
Escribe un comentario o lo que quieras sobre René Rebetez (directo, no tienes que registrarte)
Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)