x
1

Septimino



En música, el septimino o septeto es una agrupación musical compuesta por siete instrumentos o una composición hecha para los mismos, generalmente constando de tres instrumentos de cuerda, dos instrumentos de viento y dos de percusión. También se da en música vocal, denominándose así al conjunto de siete voces. Para identificar el título original de algunas obras para septiminos, se usan expresiones extranjeras como septett en alemán, septuor en francés y septet en inglés.

Uno de los septetos más famosos de la música culta es el Septimino en mi bemol mayor, Op. 20, de Ludwig van Beethoven, compuesto entre 1799 y el 1800 para clarinete, fagot, trompa, violín, viola, violonchelo y contrabajo. La popularidad de este septimino hizo de su combinación de instrumentos un modelo para los compositores posteriores, como Konradin Kreutzer (Op. 62 del 1822), Franz Berwald, Adolphe Blanc (Op. 40 del 1864 ca.) y, con pequeñas modificaciones en la instrumentación, Franz Lachner (1824) y Max Bruch (1849). Cuando Franz Schubert agrega un segundo violín en 1824, creó lo que después se convirtió en octeto canónico, que influyó mucho en otros compositores posteriores a él.[1]

Con el despertar de esta tradición, Camille Saint-Saëns escribió en 1881 el Septimino en mi bemol mayor, Op. 65, para trompeta, piano, cuarteto de cuerdas y contrabajo. El compositor moderno Bohuslav Martinů escribió tres septiminos: el primero, un grupo de seis danzas llamado Les Rondes para oboe, clarinete, fagot, trompeta, dos violines y piano (1930); el segundo, la Serenata n. 3 para oboe, clarinete, cuatro violines e violonchelo (1932); el tercero, una Fantasie para theremín, oboe, pianofo y cuarteto de cuerdas (1944). Darius Milhaud escribió un Sexteto de cuerdas en 1964 para sexteto de cuerdas y contrabajo. Paul Hindemith compuso un Sexteto de vientos en 1948 para flauta, oboe, clarinete, clarinete bajo, fagot, corno e trompeta. Hanns Eisler escribió dos septiminos, ambos para flauta, clarinete, fagot y cuarteto de cuerdas: el Septimino n. 1 Op. 92a ("Variations on American Children's Songs", Variaciones sobre canciones estadounidenses para niños de 1941) y el Septimino n. 2 ("Circus", El Circo de 1947, inspirado en la película homónima de Chaplin de 1928). Dos composiciones de la serie Chôros del brasilero Heitor Villa-Lobos son instrumentadas por siete instrumentos: la n. 3 de 1925, "Pica-páo" (Pájaro carpintero), para clarinete, fagot, saxofón, tres cornos y trombones (o en alternativa para coro masculino o ambos), y la n. 7 de 1924, en portugués "Septimino", para flauta, oboe, clarinete, saxofón, fagot, violín y violonchelo (con tam-tam ad lib.).

Hay muchas obras del s. XX para siete instrumentos para las cuales es inapropiado el uso del término "septeto" o septimino": algunas porque no representan música de cámara, y otras debido a títulos que querían otra cosa. Algunos ejemplos son la Introducción y allegro de Maurice Ravel (1905), la Música para siete instrumentos de cuerdas di Rudi Stephan (1911), el Concertino de Leoš Janáček (1925), la Suite, Op. 29 de Arnold Schönberg (1925–26), la Música para siete instrumentos de Isang Yun (1959), Reflexionem de Aribert Reimann (1966), el canon para siete instrumentos iguales In motu proprio de Dieter Schnebel (1975) y Carta Magna de Iluminada Pérez Frutos (2018), sinfonía concertante para siete solistas y orquesta sinfónica, que rinde homenaje al Septimino de Beethoven.

Con la misma instrumentación de Beethoven o similar:

Con sólo cuerdas:

Con sólo vientos:

Con cuerdas, vientos y teclado o arpa:

Otras composiciónes para siete ejecutantes:

En el jazz un septeto es cualquier conjunto de siete instrumentos, que suelen componerse de batería, contrabajo, bajo eléctrico, y grupos de uno o más instrumentos elegidos entre guitarra, piano, trompeta, saxofón, clarinete y trombón.



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Septimino (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!