Lágrimas de guerrera es una novela del escritor costarricense Daniel González, encuadrada en la literatura épica, de aventuras y de ficción histórica. Es la primera novela de un autor costarricense en tocar el tema de las invasiones bárbaras y fue uno de los libros más vendidos de 2013. Esta es la segunda novela de González, quien ya había incursionado previamente en la literatura con la novela de terror Un grito en las tinieblas.
Elka cuenta catorce años y se encuentra deseosa de participar de las incursiones bélicas que realizan los miembros de su tribu germánica en territorios fronterizos romanos liderados por sus padres que son los reyes de la tribu varna. Al darse cuenta de su edad su padre Oleg decide que es hora de que se case, lo que a Elka no le parece buena idea, pero para aplacarla le indica que si se casa podrá integrarse como guerrera, por lo que accede. Tras lo cual anuncian que en un año realizarán la boda cuando llegue la fecha de Ostara. Pretendientes de todo el mundo bárbaro (suevos, alanos, pictos, galos, pechenegos, hunos, etc.) llegan al lugar y participan de una competencia de pugilato ideada por Oleg de la cual el ganador que saliera sería concedida la mano de Elka. Tras duras peleas en las que participan distintos guerreros de las diferentes tribus resulta vencedor el príncipe suevo Jorg quien llegó acompañado de su hermano el curandero y sacerdote Hans.
La delegación alana es informada de que sus fuerzas requieren refuerzos en la guerra contra Roma en Hispania así que parten de inmediato con ayuda de los suevos, sus aliados, y por consiguiente también los varnos. Elka logra convencer a su padre de que le permita ir y participa en la guerra por primera vez reforzando su entrenamiento con su tío Orgos el berserker. Debido a que no tiene edad de participar en las campañas más sangrientas pasa mucho tiempo con Hans el curandero hasta que desarrollan el amor. Jorg, al descubrilos, se siente traicionado por su propio y amado hermano por lo que lo reta a la muerte para limpiar su honor. Aunque Hans tiene las de perder por no tener el mejor entrenamiento, Jorg es derrotado (o se deja derrotar) obligando a su hermano a matarlo y así permitirle estar junto a Elka.
Tiempo después de la boda entre Elka y Hans la tribu varna recibe la visita de una pareja de sajones viejos amigos de Oleg y Grettel con quienes lucharon en la guerra de los visigodos. Los sajones los invitan a unirse a una campaña militar de saqueo de las Islas Británicas donde las fuerzas romanas están menguando cada vez más. Los varnos aceptan y buena parte de la tribu incluyendo a Elka y Hans, se embarcan en la aventura. Los sajones son liderados por Hengist y Horsa, pero cuando Elka y su hermano mayor Olaf son tomados prisioneros por la guarnición romana comandada por el celta romanizado Vortigern Hengist y Horsa se niegan a salvarlos, así que con ayuda de la esclava irlandesa Brigith, los varnos deciden rescatar a la hija del rey picto que era mantenida como esclava sexual de los reyes sajones y así obtener la ayuda de los pictos de las montañas.
Tras escuchar un relato mitológico sobre los ardides entre Odín y Freya, los varnos realizan una competencia entre los sexos por ver cual de los dos es mejor. El objetivo era cazar un enorme jabalí que vivía en una cueva en la montaña, pero en el proceso los hombres son tomados prisioneros por los romanos. Las mujeres utilizan diversos mecanismos para rescatarlos que van desde la seducción y el engaño, hasta el uso de la espada y de venenos especiales colocados en la fuente de agua de los romanos, y así menguar y debilitar sus fuerzas. Finalmente, las mujeres logran derrotar a los romanos y liberar a los hombres.
Los varnos deciden convertirs en aliados de los hunos ya que es eso o ser invadidos por estos o por Roma. Como primera misión de tal alianza se unen a las campañas de los hunos contra los asentamientos romanos en los Balcanes como la ciudad romana de Singidunum. En el fragor de la batalla Elka mata el hijo del general romano Casio Marco Gregorio quien, enloquecido por la ira, ordena a sus hombres que la atrapen viva. Elka quedó mal herida en una batalla por lo que Hans le ordena guardar descanso, a lo que se niega. En batalla, producto de sus heridas, se desmaya y Hans corre a ayudarla, siendo ambos tomados prisioneros.
Oleg acude al rey huno Uldin por ayuda, y Uldin acepta ayudarlo ofreciéndole a los romanos un intercambio de prisioneros que resultaba más favorable a los romanos pues tenían más de los suyos capturados, pero Casio se niega pues ello implicaría liberar a la asesina de su hijo a quien pretende violar y torturar. Elka se mantiene altiva ante las amenazas del general y le expresa que puede hacer lo que quiera, que no la verá suplicar. Consciente de que el espíritu de la bárbara no se puede quebrantar con dolor físico, le dice que si se entrega a él perdonará la vida de su esposo Hans. Elka acepta, sin saber que Casio no pretendía cumplir su cometido y de hecho tras el pacto baja y ordena la muerte de Hans quien había sido brutalmente torturado y castrado para ese momento. Las acciones de Casio son cuestionadas por su segundo al mando Aurelio.
Cuando los hunos realizan una abatida final contra Singidunum tomando la ciudad Casio escapa y Aurelio libera a Elka y le informa de la muerte de Hans. Los varnos se retiran tras esta refriega a llorar a sus muertos.
De regreso a Germania se realizan los funerales de varios varnos, entre ellos Hans. Elka queda muy afectada por sus experiencias en Singidunum y la muerte de Hans entrando en una severa depresión que preocupa a toda la tribu, en especial su familia. La depresión parece empeorar más y más hasta que Elka tiene un sueño en donde se le aparece el dios nórdico Odín a quien le reclama por la muerte de Hans, y tras romper en llanto, Odín la convence de que aunque tiene derecho a llorar a Hans, ella aún estaba viva y debía seguir su vida como a Hans le hubiera gustado. Elka se recupera después el sueño e incluso cuando los hunos vistan la aldea varna y llevan a Casio prisionero como "regalo" para ella, decide perdonarle la vida ya que estaba derrotado. Tras lo cual Elka vuelve a la normalidad celebrando como toda bárbara y Oleg empieza a planear la boda de Brigith.
Otros integrantes de la tribu son Ulrico el herrero, Siegfried el granjero y guerrero, Matilda la prostituta, Brunilda la cocinera, Frida la hija adolescente de Siegfried e interés amoroso de Olaf, Sven el cazador, Brod el lagman y Usher el bardo
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