Alberto II de Bélgica

Alberto II de Bélgica cumple los años el 6 de junio.

Alberto II de Bélgica nació el día 6 de junio de 1934.

La edad actual es 90 años. Alberto II de Bélgica cumplió 90 años el 6 de junio de este año.

Alberto II de Bélgica es del signo de Geminis.

Alberto II de Bélgica (Albert Félix Humbert Théodore Christian Eugène Marie de Belgique; Castillo de Stuyvenberg, Bruselas, 6 de junio de 1934) fue el sexto rey de los belgas desde la muerte de su hermano Balduino en 1993 hasta su abdicación el 21 de julio de 2013. Es el hijo menor de Leopoldo III y de su primera esposa, la princesa Astrid de Suecia.

Nació el 6 de junio de 1934. Era el hijo más pequeño del rey Leopoldo III y de la reina Astrid. Su verdadero nombre es Albert Félix Humbert Théodore Christian Eugène Marie y al nacer se le otorgó el tratamiento de Alteza Real y el título de príncipe de Lieja.

Perteneciente a la Casa de Wettin, de la dinastía de Sajonia-Coburgo-Gotha. Al año siguiente de nacer murió su madre, por lo tanto el rey belga no posee recuerdos de su madre, dado que solo tenía un año. En un primer momento fue educado en el Palacio Real por preceptores, dándole una educación propia de un príncipe, aunque él no estaba destinado a reinar, puesto que tenía un hermano mayor, Balduino.

En el año 1940, el ejército alemán invadió el territorio belga. En esos momentos su padre, Leopoldo III, marchó con el ejército para combatir a los alemanes, aunque finalmente los belgas fueron derrotados, y ordenó el traslado de sus tres hijos, Josefina Carlota, Balduino y Alberto a España. Tras la derrota, el gobierno belga, presidido por Hubert Pierlot, se exilió a Londres y pidió a la Familia Real que hiciese lo mismo. Así pues, la Familia Real inició su peregrinación de Alemania a Suiza y Londres. En esos tiempos, el por entonces príncipe de Lieja fue enviado al prestigioso instituto Le Rosey, en Suiza, donde perfeccionó su inglés y alemán, ya que la Familia Real hablaba francés perfectamente.

En 1950 se permitió a la Familia Real regresar a Bélgica y se volvieron a instalar en el Palacio Real. Un año después su padre, Leopoldo III, decidió abdicar al Trono a favor de su hijo Balduino, convirtiéndose Alberto en heredero al trono belga. En 1952, el príncipe Alberto ingresó en el Centro de la Marina en Brujas, siendo ascendido en 1957 a teniente de navío. Al año siguiente, fue enviado como dirigente de la comitiva belga a la coronación del papa Juan XXIII y allí conoció a su futura esposa, Paola, princesa Ruffo di Calabria. Ese año fue un año de máxima actividad para el príncipe de Lieja, ya que con tan solo 24 años empezó a formar parte del Senado, tal como estipula el artículo 58 de la Constitución, y además dirigió el Instituto Nacional para el estudio de la agronomía del antiguo Congo belga y el Comité de Honor de la Exposición Universal.

El 2 de julio de 1959 se casó en la Catedral de San Miguel y Santa Gúdula con su prometida, la princesa Paola Ruffo di Calabria, siendo ascendido a capitán de fragata. Desde entonces, ambos iniciaron una peregrinación por el país, pues eran los príncipes herederos hasta el momento, y realizaron apariciones públicas en defensa del medio ambiente y la protección del patrimonio artístico y cultural.

Con la baronesa Sybille de Selys Longchamps tiene una hija extramatrimonial, Delphine Boël, nacida en 1968 y reconocida en 2020, con el título de SAR la princesa Delfina de Bélgica.^[1]​

Además de presidir la Oficina de Exportación, presidió la Cruz Roja y la Caja General de Ahorros y Pensiones y también fue presidente de honor del Comité Olímpico de Bélgica. Fue en 1993, cuando al morir su hermano Balduino sin descendencia, fue proclamado rey de los belgas, ya que era el primero en la sucesión al trono, con el nombre de Su Majestad Alberto II, rey de los belgas. Como tal se mudó a la residencia oficial del jefe de Estado, el Castillo Real de Laeken. Aunque su verdadera intención era abdicar en su hijo mayor, el duque de Brabante, decidió permanecer como monarca por el difícil momento político que sufría el país en la década de los 90, debido a la reforma federalista, que dividía al país en tres regiones y los movimientos separatistas en Flandes y Valonia.

Desde que subió al trono ha contado con una fuerte popularidad por su cercanía y su constante trabajo como embajador. Debido a la crisis económica, afirmó ser poseedor de una única residencia privada, el Castillo de Belvédère, y tener una fortuna de unos 15,5 millones de euros, y para ahorrar ha hecho saber al Gobierno que él mismo cubrirá parte de los presupuestos asignados a la Casa Real (recibe anualmente unos 15 millones de euros). A consecuencia de haberse publicado una biografía sobre su mujer Paola, por el periodista Mario Danneel en 1999,^[2]​ el rey Alberto ha reconocido implícitamente en su discurso navideño del mismo año haber tenido una relación extramatrimonial con la aristócrata belga, la Baronesa Sybille de Selys-Longchamps (ex-Madame Jacques Boël).

La biografía también comenta que dicha relación dio fruto a una hija, Delphine Boël (nacida en 1968), una artista afincada en Londres, de la que no se supo su existencia hasta la publicación de dicha biografía no autorizada, y que el propio monarca no tuvo más remedio que reconocer implícitamente también durante el discurso de Navidad de ese año.^[3]​

El 3 de julio de 2013, Alberto II anunció en un discurso televisado que decidía abdicar, hecho que se realizó el 21 de julio, día nacional de Bélgica.

Se trató de la tercera abdicación en Europa durante 2013, tras la renuncia de Benedicto XVI en la Ciudad del Vaticano y de la reina Beatriz de los Países Bajos, y la cuarta en el mundo, teniendo en cuenta la renuncia de Hamad al Zani, emir del Estado de Catar.