x
1

Ernesto de la Peña



¿Qué día cumple años Ernesto de la Peña?

Ernesto de la Peña cumple los años el 21 de noviembre.


¿Qué día nació Ernesto de la Peña?

Ernesto de la Peña nació el día 21 de noviembre de 1927.


¿Cuántos años tiene Ernesto de la Peña?

La edad actual es 96 años. Ernesto de la Peña cumplirá 97 años el 21 de noviembre de este año.


¿De qué signo es Ernesto de la Peña?

Ernesto de la Peña es del signo de Escorpio.


Ernesto de la Peña Muñoz (Ciudad de México; 21 de noviembre de 1927 - íb.; 10 de septiembre de 2012) fue un escritor, humanista, lingüista, políglota, académico y erudito mexicano. Mereció el Premio Xavier Villaurutia, por la colección de cuentos Las estratagemas de Dios (1988), entre los que destaca El único y su propiedad. Su conocimiento de 33 lenguas y culturas se refleja en toda su obra literaria, como en La rosa transfigurada (1999), Palabras para el desencuentro (2005) y Carpe risum. Inmediaciones de Rabelais (2015).[1][2][3]

El poeta Eduardo Lizalde comentó que en la prosa de Ernesto de la Peña se encuentran "sorprendentes hallazgos, alucinantes relatos, descripciones de personajes, atmósferas, historias y fantásticas aventuras, con pericia e imaginación admirables pergeñadas por el autor."[4]

Tras haber sufrido la temprana pérdida de su madre, fue adoptado por su tío Francisco Canale, poseedor de una nutrida biblioteca y de una vasta cultura grecolatina. Desde la infancia, mostró una inclinación hacia las letras y los idiomas, a los que se acercó a través de la Biblia. Como señala la escritora Myriam Moscona:

Este compendio de belleza literaria tenía para él dos funciones. Por un lado, representaba el encuentro con el más grande monumento mítico y cultural de Occidente y, por el otro, era su escuela particular de idiomas.[5]

Ingresó a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en donde cursó la carrera de Letras Clásicas, estudió filosofía presocrática y filosofía de la ciencia. Formó parte del cuerpo de traductores del griego y el latín reconocido por la UNAM para participar en los trabajos de la "Bibliotheca Scriptorum Graecorum et Romanorum Mexicana". Estudió lengua y literatura rusas y lengua árabe en la Facultad de Filosofía y Letras; sánscrito y chino en El Colegio de México y hebreo en la Escuela Monte Sinaí. De forma independiente, estudió lenguas occidentales y orientales. Leía treinta y tres idiomas y hablaba ocho. Conoció los textos bíblicos y tradujo los evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan directamente del griego al español de México del siglo XX.[6]

Carlos Fuentes, en Todas las familias felices, relata la aventura del grupo basfumista, del que, según el autor, formaba parte "un filósofo rubio y delgado, Ernesto de la Peña, que sabía veintitantas lenguas, incluyendo la de Cristo..."[7]

Fue profesor de historia de la cultura en distintas instituciones particulares. Bajo el patrocinio del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, dictó un curso de historia antigua de Israel e instituciones bíblicas. Fue catedrático de religiones orientales, literatura griega y Biblia en el Instituto Helénico y de técnica de la traducción y de lengua alemana en el Instituto de Intérpretes y Traductores.[8]

Fue traductor oficial de la Secretaría de Relaciones Exteriores y de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Colaboró, como tal, en el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (hoy y en el Tribunal Fiscal de la Federación.

Ernesto de la Peña promovió la cultura humanística, bíblica, literaria y operística en varios medios de comunicación como Opus 94.5 del Instituto Mexicano de la Radio y Operomanía en TVUNAM. Comentaba la ópera que se transmitía los sábados desde el Metropolitan Opera House.[9]​ Colaboró con varios diarios y revistas y fue director del Centro de Estudios de Ciencias y Humanidades de la Fundación Telmex.[6][10]

Fue miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua a partir del 14 de enero de 1993, desde el 18 de junio de ese año ocupó la silla XI.[11]​ Fue miembro correspondiente de la Real Academia Española desde el 12 de noviembre de 1993. Perteneció al Consejo de Ópera del Instituto Nacional de Bellas Artes y al Consejo Consultivo del Archivo General de la Nación. El 25 de octubre de 2007,[12]​ la Academia rindió homenaje a Guido Gómez de Silva, Margit Frenk, Ernesto de la Peña y Ruy Pérez Tamayo en ocasión de sus 80 años.[13]​ Fue miembro honorario del Seminario de Cultura Mexicana.[14]

En 1997, la Fundación Telmex adquirió el acervo bibliográfico que Ernesto de la Peña acumuló a lo largo de su vida para consulta libre de sus becarios. A partir del 2012 lleva el nombre Biblioteca Ernesto de la Peña.

El acervo incluye algunos libros que heredó de su tío Francisco Canale y está conformado por más de treinta mil volúmenes en idiomas y lenguas como el latín, griego, arameo, ruso, alemán, chino, árabe, francés, portugués, inglés, entre otros. El perfil de la biblioteca es principalmente sobre humanidades clásicas, grecolatinas, contemporáneas y de literatura; aunque también incluye otros intereses del escritor como la historia de las religiones, gastronomía y la música.[15]

El 25 de noviembre de 2016, tras la muerte de Ernesto, María Luisa Tavernier, su viuda, donó a la biblioteca 6 mil 380 volúmenes de literatura en varias lenguas que se suman al acervo que contiene expedientes en distintos idiomas, objetos personales, esculturas, reconocimientos, pinturas, objetos de escritorio y documentales.[16]



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Ernesto de la Peña (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Franksolo:
Es muy triste que nuestra cultura no haya dado el reconocimiento que Don Ernesto de la Peña merecía, pero muy lamentable es que en diversos medios hayan aparecido muchísimos comentarios sobre Susana Dosamantes una "artista" que nada aportó a la cultura mexicana ni a la cultura escénica, contrario a lo hecho por el maestro De la Peña, cuyos libros son aportes culturales no solo a México y América Latina, sino al mundo entero. Esto sigue siendo responsabilidad de la ignorancia y sumisión de los medios dedicados a los espectáculos hacia las dos grandes cadenas televisivas que hunden la cultura mexicana en el más recóndito oscurantismo social, aunado al consumo de chatarra. Ojalá un próximo gobierno (pues el actual es digno representante de la caquistocracia), a través de las casas de cultura nacionales, rindan el homenaje que se merece este polímata orgullosamente mexicano. Amen
2022-07-14 21:46:39
RESPONDER A ESTE COMENTARIO