x
1

Mar de Ansenuza



La laguna Mar Chiquita, o Mar de Ansenuza, es una laguna endorreica de elevada salinidad[3]​ que se encuentra en el noreste de la provincia de Córdoba, en el centro-norte de Argentina. Su superficie variable —que puede rondar los 8000 km²— la convierte en uno de los lagos salados más extensos del hemisferio sur y occidental.

Es la mayor superficie lacustre de Argentina y la 4.º más grande de Sudamérica.[4]​ Además es el 4.º lago salado endorreico más grande del planeta,[1]​ y el 4.º lago de planicie más extenso del mundo.[2]

Gran parte de este mar interior, forma parte del área natural protegida denominada Bañados del Río Dulce y Laguna de Mar Chiquita. Existe un proyecto en el congreso argentino para convertir a la zona en el parque nacional más extenso de la República Argentina, con alrededor de 880.000 ha.[5]

Es también conocida como mar de Ansenuza, y hasta mediados del siglo XIX como laguna de los Porongos, por una especie de calabacilla (Lagenaria vulgaris) muy común en la región, aunque, en la actualidad esta última denominación ha quedado reservada a una serie de lagunas menores que se encuentran algunas decenas de kilómetros al noroeste.

Según los ciclos seculares de hemiciclos húmedo y seco (inundación/sequía) su superficie promedio ronda los 6000 km², pero en épocas de sequía intensa puede disminuir a unos 2000 km², con una mínima registrada históricamente de 1984 km², y un volumen de 14,483 km³.

La laguna de Mar Chiquita, formada en el Pleistoceno superior,[6][7]​ es el punto más bajo de una cuenca endorreica, cuyos principales afluentes son los ríos Dulce, Suquía, Plujunta y Xanaes. La falla geológica sobre la cual se formó durante el plegamiento andino, es, al igual que las Salinas Grandes, el lecho de un golfo marítimo arqueano, por esta causa abunda el sulfato de sodio que saliniza las aguas de la laguna. La salinidad de la misma fluctúa en relación con los aportes fluviales. Cuando éstos se incrementan, la salinidad disminuye, variando en un rango de un máximo de 250 hasta un mínimo de 30 g/L, es decir, idéntica a la salinidad que se encuentra en la costa marítima argentina de Las Toninas. Las sales predominantes son el cloruro de sodio, sulfato de sodio, sulfato de calcio y sulfato de magnesio.

Prácticamente todos los aportes hídricos superficiales son fluviales de agua dulce y entre ellos se destacan por el norte el río Dulce (también conocido, según la zona, como Salí, Míshqui Mâyu y Petri), y por el sur los ríos Primero (o Suquía) y Segundo (o Xanaes), entre el Primero y el Segundo se ubican depresiones longitudinales o paleocauces inundables como la cañada del Manantial y la cañada de Plujunto.[8]​ Por el oeste existen cursos de aguas menores como el río Seco que procede, como el río Primero y el río Segundo, de la zona oriental de las Sierras de Córdoba.

El río Dulce aporta su caudal por el borde norte de la laguna, mientras que los ríos Primero, Segundo y Plujunta, lo hacen por el sur. Antes de alcanzar la laguna, sus afluentes forman bañados sobre una superficie de casi 10 000 km². Los más importantes se ubican en la zona norte de la laguna, llamados Bañados del Petri. Por el lado sur, en cambio, los ríos desembocan en la laguna en forma directa. En el caso del Rio Primero, lo hace en la denominada laguna del Plata, el Plujunta en una bahía cercana a la ciudad de Miramar y el Rio Segundo en una bahía cercana a la localidad de Altos de Chipión.

Otro aporte importante de aguas es subterráneo, en efecto, en gran medida la laguna es una afloración del acuífero Guaraní.[cita requerida] El llamado «borde de los Altos de Chipión» o «Cuesta de Morteros» resulta un verdadero dique natural en el este de la laguna, que impide el flujo superficial de sus aguas hacia la cuenca del Plata. También es elevada la costa sudeste, en la zona llamada Barrancas del Saladillo. En cambio, por el norte y oeste las costas son bajas y poco precisas, existiendo algunas lomadas muy bajas que se entroncan con ramificaciones de las Sierras de Córdoba.

Las principales sales que se encuentran en la laguna son cloruro de sodio, sulfato de sodio, cloruro de calcio y otras sales de manganeso, litio y potasio.[9]​ Los componentes minerales principales en forma de hidrosoles, según análisis efectuados por el Instituto CIQAPA de la Universidad Católica de Córdoba son:[cita requerida]

Las precipitaciones en las regiones avenadas por los ríos Primero y Segundo, y especialmente el Petri o Dulce, son actualmente muy variables. Por tal motivo también es —según el aporte de aguas dulces de tales ríos— muy variable el tenor de la salinidad en Mar Chiquita o Ansenuza. La salinidad varía según el ciclo de aportes hídricos entre un mínimo de 28,7 g/L a un máximo de 360 g/L (en el año 1911), esto es: de 2,87 % a 36,00 %. En diciembre de 2010 la salinidad era de 62 g/L, en enero de 2013 la salinidad o halinidad era de 80 g/L. La salinidad de las aguas de los océanos va desde un 30 ‰ (g/L) a un 50 ‰, siendo el promedio un 35 ‰, por lo que Mar Chiquita durante el tramo final del siglo XX y parte del XXI poseyó la salinidad que le permitiría ser encuadrada como un mar interior.

Por ejemplo los caudales del río Dulce relevados en el dique Los Quiroga ubicado en el centro de la provincia de Santiago del Estero y a más de 400 km de la desembocadura del río en Mar Chiquita han sido los siguientes:

Sin embargo el embalse de Los Quiroga se encuentra a mucha distancia de Mar Chiquita y en el trayecto desde el mismo, el río Dulce pierde mucho caudal por evaporación e infiltración subterránea (realimentando el Acuífero Guaraní) o por utilización humana (para riego, uso hogareño e industrial).

De este modo en el principal brazo del delta que el río Dulce tiene al desembocar en la Mar Chiquita el caudal promedio de sus aguas disminuye de 30 a 40 m³/s. Todo esto significa que el aporte hídrico del Dulce puede pasar de poco más de 0 m³/s a unos 130 m³/s.

Como ocurrió a fines de los 1960 y durante el período 1977-1986. Esto significó un aporte de 41 millardos (mil millones) de m³ de agua solo por el río Dulce, cifra que se duplica al sumársele los aportes de los ríos Primero y Segundo. Tales aportes han hecho que el nivel de Mar Chiquita se haya elevado 9 m desde los períodos reseñados y que el rango de la salinidad de las aguas haya disminuido de 275 a 29 g/L lo cual ha significado una extraordinaria variación en un breve lapso (si bien se ha mantenido casi invariable la salinidad de las arcillas y limos).

Como consecuencia de la elevación de las aguas a partir de la inundación de 1977 no sólo Miramar de Ansenuza fue sumergida (debió mudar su emplazamiento), sino que muchas islas, con playas propias para la nidificación de las diversas especies de flamencos, quedaron anegadas. Si bien persistió una gran cantidad de ejemplares adultos, se contabilizaba una notoria escasez de nidos observada en 1992 (año en que el nivel de las aguas se estabilizó). Luego de este acontecimiento, se reinició la nidificación y reproducción masiva de los flamencos.

El crecimiento de la laguna comenzó en 1977 y finalizó en 1981, inundando varias casas, 108 hoteles y numerosos hospedajes.

La salinidad de las aguas, disminuyó drásticamente en 1977 como consecuencia del aumento del nivel de agua, lo que posibilitó el incremento de la presencia de peces, los cuales compitieron con los flamencos por un alimento entonces abundante: la Artemia salina, un crustáceo cuya presencia disminuyó fuertemente.

En compensación, desde esa época se ha incrementado notablemente la presencia del pejerrey (pez de la familia Atherinopsidae) de excelente carnadura, con buenos rendimientos comerciales y muy atractivo para la pesca deportiva. También apareció —desde el río Dulce— el valioso dorado.

La Mar Chiquita cordobesa posee varias islas, la mayoría de ellas se encuentran en el delta del río Petri (o Dulce) y al formar parte de tal delta son bajas, anegadizas y de formas bastante cambiantes estando pobladas por denso bosque chaqueño; aunque las más importantes islas e islotes de Mar Chiquita se ubican en la mitad sur del espejo de agua, se trata en este caso de unas pocas alargadas islas arenosas, siendo la mayor de ellas la Isla del Mistolar (coordenadas 30°36′53″S 62°52′58″O / -30.61472, -62.88278), estas islas varían de superficie según sean tiempos de sequía o de inundación, la erosión (principalmente la eólica) e incluso por el influjo de las mareas, la isla del Mistolar supera los 10 km².

Si bien constituye por sí sola un ecosistema, la laguna de Mar Chiquita se encuentra en el sector más austral de la región chaqueña, allí donde tal bioma se vuelve transicional con el de la región pampeana. Las precipitaciones medias anuales alcanzan los 758 mm, la temperatura media anual es de 18,5 °C.

La vegetación de sus costas es halófila, aunque casi inmediatamente se encuentra un denso bosque natural de chañar, quebracho, e isletas de palmera.

Abunda la avifauna, con unas 350 especies, alcanzando un 25 % del total de las especies de aves autóctonas que hoy viven en Argentina.[cita requerida] Se destacan las grandes bandadas de flamencos, diversas especies de patos, garzas (incluso raros avistajes como la garza azul), gallaretas, loros, y aves migratorias como el halcón peregrino (que llega en diciembre desde Alaska) etc. En sus aguas se crían nutrias (coipos o quillás).

En los períodos en que las aguas de Mar Chiquita presentan una salinidad similar a la oceánica, las poblaciones de pejerrey (Odontesthes bonariensis) ocupan todo el espejo, al ser esta una especie eurihalina. En los ciclos donde la salinidad aumenta a niveles máximos, este pez se retrae a las áreas próximas a la desembocadura de los ríos, donde la salinidad es menor.

En cuanto a los invertebrados hay estudios sobre los mosquitos de la zona que citan 22 especies.[10]

La mayor parte de la laguna de Mar Chiquita y los bañados del río Dulce, constituyen una extensa reserva provincial de Córdoba: bañados del río Dulce y laguna de Mar Chiquita. Si bien no existe una fecha concreta de formación, toda el área está muy próxima a convertirse en parque nacional, bajo la órbita de la APN.[11]​ De ocurrir esto, lo convertiría en el parque nacional más grande de Argentina, con una superficie que rondaría las 700.000 ha. Tal reserva provincial está integrada a la red hemisférica de reservas para aves playeras, como sitio de categoría «hemisférico»,[12]​ es miembro de la red Living Lakes: red internacional de cooperación entre lagos y lagunas de gran valor ecológico;[13]​ y desde mayo de 2002, ha sido designada Sitio Ramsar.[14][15]

La única población ribereña de este mar interior se ubica en la costa sur, es el centro balneario de Miramar. Unos 12 km en línea recta hacia el oeste de dicha ciudad, también en la costa sur y como salida balnearia septentrional de la pequeña ciudad de Marull —a unos 16 km de la misma— se encuentra el sitio llamado «Playa Grande» que se extiende unos 12 km —aproximadamente entre las coordenadas 30°54′07″S 62°48′51″O / -30.90194, -62.81417 al oeste y las 30°54′15″S 62°46′14″O / -30.90417, -62.77056 al este—; aunque el principal balneario de Marull se encuentra en una ensenada a pocos kilómetros al oeste, en la zona llamada Laguna del Plata. Kilómetros antes se encuentra la localidad de La Para donde se encuentra el comedor Ruta 17 conocido por su especialidad en pejerrey, pocos kilómetros al noreste de La Para y casi en la costa sursuroeste del Mar de Ansenuza se ubica el paraje denominado Pozo de las Palomas. La Laguna La Plata se ubica en las coordenadas (30°55′11″S 62°51′43″O / -30.91972, -62.86194) y trátase en realidad en una bahía muy cerrada de Mar Chiquita. En las coordenadas: 30°53′22″S 62°39′09″O / -30.88944, -62.65250, a 4 km al noroeste de Miramar, se hallan las ruinas del balneario conocido como Colonia Muller, el que fue una colonia de vacaciones perteneciente al estado nacional creada en la primera mitad de la década de 1950 pero luego fue abandonada.

En la costa norte de este mar interior, la zona de humedales y del delta del Petri (o río Dulce) hace imposible la existencia de playas fijas, existiendo solo parajes (caseríos) cercanos a la costa como el de El Mistolar (30°17′39″S 62°57′54″O / -30.29417, -62.96500) y a unos 10 km al este, el pequeño paraje: «Los Huecos».

Con verdadero aspecto de mar interior (el viento provoca oleaje elevado), muy interesantes paisajes y excelente clima, es zona turística aunque aún poco conocida y explotada. Las costas occidental y septentrional están prácticamente deshabitadas y por este motivo presentan paisajes naturales vírgenes y de difícil acceso en donde, entre otros animales silvestres, se encuentran aguaraguazús y pecaríes. Ciertas zonas costeras han cobrado fama por sus lodos terapéuticos, por otra parte el antiguo Gran Hotel Viena actualmente abandonado como hotel, ha sido transformado en un museo. Con todo en su costa sur se han desarrollado poblaciones que obtienen recursos del turismo: Miramar, Balnearia, Marull, La Para, Altos de Chipión etc. Casi veinte kilómetros al este de las costas se encuentra la antigua población de Morteros (fundada como fortín español en el s. XVII sobre un asentamiento de sanavirones o salavinones).

Las sales presentes en la laguna, mencionadas anteriormente, embeben las arenas, limos y arcillas del lecho y las costas, motivo por el cual ciertas playas de Mar Chiquita poseen arenas con propiedades terapéuticas; de modo que estas son utilizables para las llamadas arcilloterapia y fangoterapia, y muy valiosas para cosmética natural.

Debido a la extensión de su espejo de agua permite la navegación a vela, el windsurf y el kitesurf entre otros deportes acuáticos.



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Mar de Ansenuza (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!