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Fawkes (Harry Potter)



Las criaturas mágicas comprenden un aspecto colorido e integral del mundo mágico ficticio en la serie Harry Potter de J. K. Rowling. A lo largo de los siete libros de la serie, Harry y sus amigos se encuentran con varias de estas criaturas en sus aventuras, así como en la clase de Cuidado de Criaturas Mágicas en Hogwarts. Rowling también escribió Animales fantásticos y dónde encontrarlos, una guía de los animales fantásticos encontrados en la serie. Varios de estos derivan del folclore, principalmente de la mitología griega, pero también del folclore británico y el escandinavo.[cita requerida] Varias de las criaturas mitológicas que los rodean también se incorporan a los libros. "Los niños (...) saben que yo no inventé los unicornios, pero he tenido que explicar frecuentemente que en realidad no inventé los hipogrifos", le dijo Rowling a Stephen Fry en una entrevista para BBC Radio 4. "Cuando uso una criatura que sé que es un ente mitológico, me gusta averiguar tanto como pueda sobre él. Tal vez no lo use, a menos que lo haga tan consistente para que sienta que es bueno para mi trama."[1]

Varias mascotas en la serie son animales ordinarios con propiedades mágicas. Las lechuzas, por ejemplo, llevan el correo.

La magizoología (un acrónimo de magia y zoología) es el estudio de las criaturas mágicas en la serie Harry Potter. Una persona que estudia la magizoología es conocida como magizoólogo. Hay magizoólogos que trabajan en el Ministerio de Magia, particularmente en el Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas. Un magizoóloga notable es Lucía Granger, [2]

El Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas del Ministerio de Magia es responsable de supervisar y regular las criaturas mágicas. Está dividido en tres grupos: la División de Bestias, la División de Seres y la División de Espíritus.

Un ser generalmente se define, de acuerdo con Animales fantásticos, como "cualquier criatura que tenga suficiente inteligencia para comprender las leyes de la comunidad mágica y compartir parte de la responsabilidad que implica su formulación." Esto incluye humanos, duendes, hombres lobo y vampiros.

De acuerdo con esta definición, las hadas, los duendecillos, los gnomos y la mayoría de las otras criaturas se clasifican como bestias. Se dice que los centauros y la gente del agua han rechazado el estatus de seres, prefiriendo el de bestias, como han hecho los leprechauns.

Los hombres lobo y los animagos son notables porque normalmente tienen forma humana —un hombre lobo se transforma de estado humano solo cuando hay luna llena, y un animago es un humano que ha aprendido a transformarse en un animal a voluntad—. Su clasificación no está clara, y existen oficinas responsables de los hombres lobo tanto en la división de bestias como en la de seres.

Un número de criaturas, como los elfos domésticos, gigantes, banshees, duendes y dementores, nunca han sido llamadas seres o bestias, así que su estatus legal no está claro (véase más abajo). Los fantasmas y poltergeists se clasifican como espíritus.

A continuación se muestra la lista completa de criaturas mágicas mencionadas en el universo de Harry Potter, junto a cada una de las cuales está la clasificación que el Ministerio de Magia les dio basándose en qué tan peligrosas son. Aquellas criaturas que Rowling tomó de mitos y folklore tienen enlaces a sus artículos principales de mitología.

Clasificación del MM: XXXX

Un abraxan —derivado de Abraxus, un caballo volador que tiraba del carruaje de Helios, el dios del Sol, a través del cielo en la mitología grecorromana[3]​ es una raza de caballo alado. Es gigante y extremadamente poderoso. Madame Maxime, Directora de Beauxbatons, los cría, y los usa para tirar de su carruaje y hacerlo volar. Sus caballos solo toman whisky puro de malta y requieren que alguien fuerte se encargue de ellos,[n. 1]​ aunque no se sabe si esto es cierto para toda la raza. En Harry Potter y el misterio del príncipe, luego de la muerte de Albus Dumbledore, los abraxan regresan a Hogwarts tirando del carruaje azul pálido, en el cual Madame Maxime viaja para asistir al funeral de Dumbledore.[n. 2]

Clasificación del MM: XXXXX

La acromántula —derivado del griego ακρος (acro, en español, alto, grande) y -mántula, del español "tarántula"— es una monstruosa araña de ocho ojos capaz de hablar como las personas. Es originaria de Borneo, donde habita en la jungla impenetrable. Sus características distintivas incluyen un grueso pelo negro que cubre su cuerpo; unas patas cuya envergadura puede alcanzar hasta cuatro metros y medio; sus pinzas, que producen un chasquido peculiar cuando la acromántula está excitada o enfadada; y una secreción venenosa. Esta criatura es carnívora y prefiere las presas grandes. Teje su tela con forma de cúpula sobre la tierra. La hembra es más grande que el macho y puede depositar hasta cien huevos en una puesta. Suaves y blancos, son tan grandes como pelotas de playa. La incubación dura de seis a ocho semanas. Los huevos de acromántula han sido designados como Bienes no Comerciables de Clase A por el Departamento de Regulación y Control de las Criaturas Mágicas, lo que significa que su importación o venta se castiga con severidad

Se cree que estos animales fueron creados por magos, posiblemente con la intención de que custodiaran moradas o tesoros, como ocurre a menudo con los monstruos creados mágicamente. Aunque poseen una inteligencia casi equiparable con las personas, es imposible adiestrarlas, pues son muy peligrosas tanto para los magos como para los muggles.[n. 3]

En Harry Potter y la cámara secreta, las acromántulas que viven en el bosque prohibido trataron de comerse a Harry y Ron cuando ellos fueron a preguntarle a Aragog, el líder de estas acromántulas, sobre el pasado de Hagrid.[n. 4]​ Las acromántulas participaron en la Batalla de Hogwarts del lado de lord Voldemort.[n. 5]

La acromántula es usada para simbolizar el número ocho en el alfabeto rúnico, debido a sus ocho ojos.[4]

Clasificación del MM: XX-XXXX

El aethonan —derivado de Aethon (en español, Aetón, resplandeciente), un caballo volador que tiraba del carruaje de Helios, el dios del Sol, a través del cielo en la mitología grecorromana— es una raza de caballo alado. Es zaino y popular en Gran Bretaña e Irlanda.[n. 3]

Clasificación del MM: XXX

La ashwinder —derivado del inglés ash (en español, ceniza), y de winder (en español, cuerda), que alude a las serpientes y su movimiento en zigzag— nace cuando se deja arder un fuego mágico[n. 6]​ demasiado tiempo sin controlarlo. Son serpientes delgadas, de color verde pálido y con ojos de un rojo resplandeciente; surgen de las brasas de un hogar sin vigilar y se alejan deslizándose hacia las sombras de la morada en la que se encuentran; dejan tras de sí un rastro de cenizas.

La ashwinder vive solamente una hora. Durante ese plazo busca un lugar oscuro y cerrado donde poner sus huevos, y después se desintegra en forma de polvo. Los huevos de la ashwinder son de color rojo brillante e irradian un calor intenso. Prenden fuego a la casa en cuestión de minutos a menos que se los encuentre y congele con un encantamiento adecuado.Cualquier mago que se dé cuenta de que una o más ashwinders están sueltas por la casa debe seguir su rastro inmediatamente y localizar el nido de huevos de cada una de ellas. Una vez congelados, los huevos tienen propiedades muy valiosas como ingredientes de pociones amorosas y pueden ingerirse como remedio para accesos de fiebre.

Las ashwinders se encuentran por todo el mundo.[n. 3]

Clasificación del MM: XX

El augurey —derivado del término inglés augury (en español, augurio)— (también conocido como fénix irlandés) es nativo de Gran Bretaña e Irlanda, pese a que algunas veces aparece en otros lugares del norte de Europa. Es un pájaro de aspecto delgado y apesadumbrado, y su plumaje es negro verdoso; se diría que parece un buitre pequeño y desnutrido. Es sumamente tímido, anida en zarzas y espinos, y come insectos grandes y hadas. Vuela solo cuando llueve mucho; si no, permanece escondido en su nido, que presenta forma de lágrima.

El augurey tiene un canto bajo y tembloroso característico; antes se pensaba que presagiaba la muerte. Los magos evitaban sus nidos por miedo a escuchar ese sonido desgarrador, y se cree que más de uno sufrió un ataque al corazón al pasar por un matorral y oír el lamento de un augurey que no había visto. Sin embargo, una investigación más minuciosa reveló que este animal simplemente canta cuando percibe que se aproxima la lluvia. Desde entonces, el augurey está de moda como recurso casero para predecir el tiempo, aunque muchos consideran que el incesante quejido que emite durante los meses de invierno es difícil de soportar. Sus plumas no sirven para escribir porque repelen la tinta.[n. 3]

Clasificación del MM: XX Una babosa carnívora (en inglés, Flesh-Eating Slug) es una criatura mágica muy similar a la babosa común. La baba de la babosa carnívora tiene un efecto corrosivo tanto en piel como en plantas.

Es una peste de jardín, y en la cámara secreta, Rubeus Hagrid le explicó a Harry que las babosas carnívoras estaban arruinando todas las berzas de la escuela. La única manera conocida de deshacerse de estas babosas es usando un repelente específico que puede comprarse en el callejón Knockturn.[n. 7]

La banshee —del gaélico irlandés bean si (en español, mujer de los túmulos)— es una oscura criatura nativa de Irlanda y Escocia. En Harry Potter y el prisionero de Azkaban es descrita como "una mujer de pelo negro tan largo que le llegaba al suelo, con un rostro huesudo de color verde".[n. 8]​ El grito de una banshee es fatal para las orejas, de una forma similar a las mandrágoras maduras.

El boggart de Seamus Finnigan es una banshee.[n. 8]

Clasificación del MM: XXXXX

En el universo Harry Potter, un basilisco (en inglés, Basilisk) —del latín basiliscus, y este del griego βασιλίσκος (basilískos, en español, pequeño rey)—, también conocido como el "rey de las serpientes", es una gigantesca serpiente monstruosa. Más grande que su homólogo mitológico, el basilisco en el universo Harry Potter es capaz de medir hasta más de quince metros de largo y vive hasta cientos de años.[n. 9]​ Los basiliscos son incontrolables excepto por los hablantes de pársel, y se cree que el primer basilisco ha sido creado por un mago tenebroso griego y hablante de pársel llamado Herpo el Loco. Herpo descubrió que el basilisco nacía de un huevo de gallina incubado por un sapo. Un basilisco macho luce una pluma escarlata sobre la cabeza. Un basilisco mata tanto con su poderoso veneno como con sus ojos, que son letales para cualquier criatura que los mire directamente.[n. 3]​ A cualquiera que los mire indirectamente, como a través de una cámara o en un reflejo, crea un profundo estado de petrificación similar a la mirada de Medusa. Los fantasmas que los miran directamente quedarán petrificados, ya que no podrían morir por segunda vez.[n. 9]​ Una lágrima de fénix es la única cura conocida para el devastador efecto del veneno del basilisco.[n. 10]​ Las arañas huyen de él, ya que son enemigos mortales.[n. 9]

En la cámara secreta, un basilisco es el monstruo que habita la Cámara Secreta.[n. 9]​ Cuando el estudiante Tom Riddle, más tarde conocido como lord Voldemort, abrió la cámara, el basilisco asesinó a Myrtle la Llorona y se escondió en la cámara por 50 años, hasta que el recuerdo de Riddle abrió la cámara nuevamente poseyendo a Ginny Weasley. Durante los eventos del libro, es liberado varias veces por el recuerdo de Riddle, e intenta matar a varios hijos de muggles, pero debido a la buena suerte todas sus víctimas solo resultaron petrificadas. Él envió a Ginny a matar a todos los gallos de la escuela (debido que el canto de un gallo es sumamente mortal para el), como comenta Hagrid. Cuando Harry descubre la existencia de la cámara y de su localización, Riddle revela su identidad y libera al basilisco sobre Harry mientras Ginny pierde su fuerza vital. Fawkes ayuda a Harry, cegando al basilisco con sus patas y llevándole el Sombrero Seleccionador; Harry saca la espada de Godric Gryffindor del sombrero, y se la clava al basilisco en el paladar, asesinándolo.[n. 10]

El veneno del basilisco tiene la capacidad de destruir Horrocruxes, y al ser absorbido por la espada de Gryffindor esta también adquiere esta capacidad, siendo usada más tarde en la serie para destruir varios de los Horrocruxes de Voldemort.[n. 11]​ En la cámara secreta, luego de matar al basilisco, Harry clava uno de sus dientes en el diario de Tom Riddle[n. 10]​ —uno de los Horrocruxes de Voldemort—[n. 12]​. En las Reliquias de la Muerte, luego de darle la espada de Gryffindor a Griphook,[n. 13]Ron Weasley y Hermione Granger regresan a la cámara y sacan algunos dientes del esqueleto del basilisco, usando uno para destruir la copa de Helga Hufflepuff. Esta vez la cámara es abierta por Ron imitando el pársel de Harry.[n. 14]​ Ron, Neville Longbottom y Dumbledore usaron la espada de Gryffindor, impregnada con el veneno del basilisco, para destruir el guardapelo de Salazar Slytherin,[n. 15]​ a Nagini[n. 16]​ y el anillo de Marvolo Gaunt,[n. 17]​ respectivamente.

Un bicornio (en inglés, Bicorn) —del latín bicornis (en español, de dos cuernos), de los elementos bi (en español, dos) y cornu (en español, cuerno)— es una peligrosa criatura parecida a una vaca. Al menos uno de sus cuernos es usado como uno de los ingredientes de la poción multijugos.

Clasificación del MM: XXX

El billywig es un insecto nativo de Australia. Mide alrededor de un metro y veinticinco centímetros de largo y es de un azul zafiro muy llamativo, aunque, gracias a su velocidad, rara vez es detectado por los muggles o incluso por los magos, hasta que los pican. Al billywig le crecen las alas en la parte superior de la cabeza y estas dan vueltas de una manera que hace que el insecto gire sobre sí mismo mientras vuela. Del final del tórax sale un aguijón largo y fino. Quienes sufren la picadura de un billywig experimentan mareos seguidos de levitación. Todas las generaciones de jóvenes magos y brujas australianos han tratado de atraparlos y obligarlos a picar para disfrutar de esos efectos, aunque un exceso de picaduras puede provocar que la víctima flote en el aire incontroladamente durante días; si se produce una reacción alérgica grave, puede terminar en un estado de flotación permanente. Los aguijones secos de billywig se utilizan en varias pociones y se cree que son un ingrediente de la popular golosina brujas fritas.[n. 3]

El blibber maravilloso (en inglés, Blibbering Humdinger) es una de las varias criaturas extrañas que Luna Lovegood creía que existían, como los snorkacks de cuernos arrugados, que pueden no ser reales.

Luna le mencionó a los blibbers maravillosos por primera vez en la Orden del Fénix a Lavender Brown y Parvati Patil, que se reían de sus aretes.[n. 18]​ Al final de la Segunda Guerra Mágica, con la intención de darle a Harry un poco de tranquilidad, ella distrajo a todos en el Gran Salón pretendiendo ver una de estas criaturas.[n. 16]

En el universo Harry Potter, un boggart —probablemente del inglés bog (en español, pantano) y art (en español, arte), significando "arte pantanoso"— es un cambiante que toma la forma del peor miedo de su víctima. Mientras la mitología británica describe a los boggarts y elfos domésticos como seres problemáticos o malévolos que habitan pantanos u otros lugares solitarios, los boggarts de Rowling son más como los brollachans, criaturas mágicas originarias de Escocia. Sin embargo, hay registros de un supuesto boggart de Lancashire que podía tomar forma varios animales, o en realidad criaturas más temibles.[5]​ A los boggarts les gusta esconderse en la oscuridad y en lugares cerrados como armarios y gabinetes (por ejemplo, en la Orden del Fénix, Alastor Moody determina, con su ojo mágico, que hay un boggart en el escritorio de la sala de estar).

En el prisionero de Azkaban, Remus Lupin le enseña a sus estudiantes de Defensa Contra las Artes Oscuras a enfrentar a un boggart en grupos de dos o más, así al boggart se le dificultará elegir a quién asustar. El encantamiento riddikulus es usado para combatir a los boggarts, cambiando su apariencia a una menos terrorífica o incluso cómica, lo que debilita a la criatura.

La forma en la que los boggarts se convierten indican los peores miedos de varios personajes, así como ocurre a los boggarts cuando se les lanza el encantamiento Riddikulus:

Clasificación del MM: XX

El bowtruckle —del antiguo dialecto escocés bow (en español, vivienda), y el antiguo dialecto inglés truckle (en español, rama de un árbol)— es un guardián de árboles que se encuentra principalmente en el oeste de Inglaterra, el sur de Alemania y algunos bosques escandinavos. Es muy difícil divisarlos, ya que son pequeños; su altura máxima es de veinte centímetros; aparentemente están hechos de corteza y ramitas, y tienen dos pequeños ojos de color castaño.

El bowtruckle, que come insectos, es una criatura pacífica y muy reservada, pero, si atacan el árbol donde vive, no es raro que salte sobre el leñador o trabajador forestal y trate de arrancarle los ojos con sus dedos largos y puntiagudos. El ofrecimiento de unas cochinillas (aunque unos huevos de hada también sirven) aplacará al bowtruckle lo suficiente para que un mago o una bruja puedan sacar madera de varita del árbol.[n. 3]

En la Orden del Fénix, en una clase de Cuidado de Criaturas Mágicas con la profesora Grubbly-Plank, Harry y sus amigos deben examinar a un bowtruckle para aprender de sus cualidades y saber mejor cómo defenderse de ellos.[n. 18]

Clasificación del MM: XXX

Los bundimuns se encuentran en todo el mundo. Dada su habilidad para escurrirse entre las tablas del suelo y por detrás de los zócalos, constituyen una plaga para las casas. La presencia de esta criatura es habitualmente delatada por una emanación de olor a podrido. El bundimun exuda una secreción que pudre todos los cimientos de la vivienda en la que se encuentra.

Un bundimun en reposo se parece a un pedazo de hongo verdoso con ojos, aunque cuando se asusta se escabulle deprisa con sus numerosas patas larguiruchas. Se alimenta de la suciedad. Unos encantamientos limpiadores pueden erradicar una plaga de bundimuns de una casa; aunque, si se permite que se extienda más de la cuenta, hay que ponerse en contacto con el Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas (Subdivisión de Plagas) antes de que la casa se desplome. Las secreciones de bundimuns se usan diluidas en ciertos fluidos mágicos de limpieza.[n. 3]

Los calamares gigantes (en inglés, Giant Squid) son cefalópodos gigantes, con ocho brazos y dos largos tentáculos. Los calamares gigantes pueden alcanzar tamaños inmensos, y son unos de los organismos que viven por más tiempo. Se cree fuertemente que los calamares gigantes tienen poderes mágicos.[7]

Los calamares gigantes son conocidos por los muggles, aunque son animales extraños para ellos. Aunque sus extraordinarios cuerpos son conocidos por todo el mundo, los muggles solo lograron grabar a un calamar gigante vivo en 2006.[7]

Un calamar gigante semi-domesticado[7]​ habita el gran lago, en los terrenos de Hogwarts.

Clasificación del MM: XXX

Pese a su nombre, el cangrejo de fuego (en inglés, Fire Crab) se asemeja mucho a una gran tortuga con un caparazón cubierto de joyas. En su nativa Fiyi, una extensión de costa se ha convertido en reserva para protegerlos tanto de los muggles, a quienes podría tentar el valioso caparazón, como de magos sin escrúpulos, pues los hay que utilizan los caparazones como calderos de lujo. Sin embargo, el cangrejo de fuego tiene su propio mecanismo de defensa: cuando lo atacan, lanza llamas por el extremo posterior. Los cangrejos de fuego se exportan como mascotas, pero es necesaria una licencia especial.[n. 3]

Clasificación del MM: XXXX[n. 20]

Los centauros (en inglés, Centaur) —en griego antiguo, Κένταυρος, romanizado: kentauros, lit. 'matador de toros, cien fuertes'— en el universo Harry Potter son criaturas salvajes que dicen ser más inteligentes que los humanos. Sus cabezas y torsos se asemejan a los de los humanos pero poseen las cuatro patas, los cuerpos interiores y las colas de un caballo. Aunque son conscientes, no han pedido ser asignados como seres, ya que prefieren alejarse completamente de los asuntos de los humanos. Los centauros que deciden asociarse con ellos, como Firenze, que acepta enseñar Adivinación en Hogwarts, pueden verse como traidores y ser atacados por otros centauros. El interés de Firenze en los asuntos humanos resultó en violentas represalias por parte de otros centauros y si no fuera por la intervención de Hagrid, Firenze podría haber muerto. El Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas del Ministerio de Magia tiene una Oficina de Coordinación de Centauros, pero ningún centauro la ha usado nunca. Los centauros son habilidosos en curación y astrología, y pasan mucho de su tiempo buscando augurios en las estrellas. Viven en los bosques, y su sociedad consiste en manadas de entre diez y cincuenta miembros. No parecen usar o necesitar tecnología más avanzada que un arco y flechas. Son orgullosos y territoriales, así que deben emplearse altas habilidades diplomáticas al lidiar con centauros. Faltarles el respeto puede tener violentas consecuencias, como Dolores Umbridge aprendió por las malas.[n. 21]​ En las Reliquias de la Muerte, la manada de centauros de Hogwarts, luego de ser ferozmente advertidos por Hagrid, se une a la Orden del Fénix, y cambia el rumbo de la Batalla de Hogwarts.

Las películas muestran a los centauros con características faciales muy bestiales y animales. Sin embargo, en los libros, las estudiantes expresan atracción a ellos, sugiriendo que sus rostros son como los de los humanos.

Clasificación del MM:XXXX

El cerbero o perro de tres cabezas (en inglés, Cerberus) —en griego antiguo, Κέρβερος, romanizado: kérberos, lit. 'demonio del pozo'— es una criatura muy extraña. No se sabe si, como la runespoor, cada cabeza tiene un propósito diferente.[n. 3]​ Su gran debilidad es que se quedan dormidos al escuchar música.

Rubeus Hagrid tenía un perro de tres cabezas llamado Fluffy, el cual obtuvo de un hombre griego que conoció en una taberna.[n. 22]​ En Harry Potter y la piedra filosofal, Fluffy fue uno de los obstáculos para proteger la piedra filosofal.[n. 23]

Clasificación del MM: XX

Los chizpurfles —del inglés chiz (en español, trampa, estafa) y purfle, el borde de una prenda adornado con pieles— son pequeños de medio centímetro de alto; se parecen a los cangrejos y poseen unos colmillos considerables. La magia los atrae, y pueden infestar el pelaje y plumaje de criaturas como los crups y los augureys. También pueden entrar en las viviendas de los magos y atacar objetos mágicos, como las varitas: las roen hasta la médula en busca de su fuente de poder mágico; o, si no, se instalan en calderos sucios y se dan un festín con la poción residual. Aunque los chizpurfles son fáciles de destruir con cualquiera de la gama de pociones patentadas que hay en el mercado, las infestaciones graves pueden requerir una visita de la Subdivisión de Plagas del Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas, ya que estos parásitos, cuando están atiborrados de sustancias mágicas, resultan muy difíciles de combatir.[n. 3]

El chupasangres (en inglés, Blood-Sucking Bugbear) era una criatura mágica aparentemente encontrada en Escocia. En la cámara secreta, luego del asesinato de dos de sus gallos, Hagrid sospechaba que zorros o chupasangres eran los responsables.[n. 24]​ Harry se encontró con Hagrid mientras él iba en camino a pedirle permiso a Dumbledore para colocar un encantamiento alrededor del gallinero para proteger a las gallinas de más ataques.[n. 24]​ Sin embargo, como resultó, Ginny Weasley había matado a las gallinas mientras estaba poseída por Tom Marvolo Riddle.[n. 10]

Clasificación del MM: XX

El clabbert —de la palabra escocesa y anglo-irlandesa clabber (en español, barro, tierra blanda), también es un término inglés para "hacer leche"— es una criatura que vive en los árboles. Por su aspecto, parece un cruce entre un mono y una rana. Originario de Sudamérica, se ha exportado al mundo entero. La piel, suave y desprovista de pelo, es verde jaspeada, y tiene membranas entre los dedos de manos y pies; los brazos y las piernas son largos y flexibles, lo que permite al clabbert balancearse entre las ramas con la agilidad de un orangután. Tiene unos cuernos cortos en la cabeza, y una boca ancha que parece sonreír todo el rato y está llena de dientes afilados. El clabbert se alimenta principalmente de lagartos y pájaros pequeños.

La característica más distintiva de esta criatura es una gran pústula en medio de la frente que se vuelve roja y luminosa cuando advierte algún peligro. En cierta época, los magos americanos tuvieron clabberts en sus jardines para poder estar sobre aviso cuando se aproximaran muggles, pero la Confederación Internacional de Magos introdujo multas que han acabado con esa práctica casi por completo. Por muy decorativo que pudiera resultar, un árbol lleno de pústulas de clabberts iluminadas en plena noche llamaba la atención de demasiados muggles, que se acercaban a preguntar el motivo por el que sus vecinos todavía tenían puestas las luces de Navidad en junio.[n. 3]

Clasificación del MM: XXX

Los colaganchos (en inglés, Nogtail) son demonios que se encuentran en zonas rurales a lo largo de Rusia, el resto de Europa y América. Parecen lechones mal desarrollados con colas gruesas y cortas, patas largas y ojos negros y entrecerrados. El colagancho se cuela furtivamente en una pocilga y mama de una cerda común junto con las verdaderas crías. Cuanto más tiempo permanezca sin ser detectado y más de le deje crecer, mayor será la ruina de la granja en la que ha entrado.[n. 3]

El colagancho es excepcionalmente rápido y difícil de atrapar, aunque si un perro totalmente blanco lo persigue más allá de los límites de la granja, nunca regresará. El Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas (en concreto, la Subdivisión de Plagas) tiene una docena de sabuesos albinos entrenados para ese propósito.[n. 3]

Algunas personas también cazan colaganchos por diversión. Por ejemplo, Cormac McLaggen fue llevado a cazar colaganchos a Norfolk junto con Bertie Higgs y Rufus Scrimgeour.[n. 25]

Clasificación del MM: XXX

El crup surgió en el sudeste de Inglaterra. Se parece mucho a un Jack Russell terrier, salvo por la cola bífida. Parece claro que el crup es un perro creado por un mago, ya que es totalmente leal a los hechiceros, mientras que con los muggles es feroz. Es un gran carroñero, como de todo: desde gnomos hasta llantas viejas. Las licencias para tener crups pueden obtenerse en el Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas; solo hay que contestar a un sencillo test para demostrar que el solicitante es capaz de controlar al animal en las zonas habitadas por muggles. Los dueños del crup están legalmente obligados a cortarle la cola con un encantamiento seccionador indoloro cuando la criatura tiene de seis a ocho semanas: así se evita que los muggles se fijen en él.[n. 3]

La clase de quinto año de Cuidado de Criaturas Mágicas de Hagrid estudió esta criatura en la Orden del Fénix.[n. 26]​ Estuvieron entre aquellas criaturas que aparecieron más seguido en los exámenes TIMO y así parte del Ministerio de Magia aprobó el plan de estudios para los estudiantes de Cuidado de Criaturas Mágicas a ese nivel.[n. 27]

Clasificación del MM: XXXXX

Los dementores —del latín dēmēns (en español, estar demente)— son espectros malvados y fantasmales[6]​ que "están entre las criaturas más nauseabundas del mundo":[n. 28]​ una especie fantasmal con aspecto de "La Muerte" o "La Parca" que gradualmente privan las mentes humanas de inteligencia. Son los guardias de la prisión mágica Azkaban, hasta después del regreso de Voldemort.

En los libros, los dementores tienen una forma generalmente humana, de aproximadamente tres metros de altura, cubiertos con oscuros mantos encapuchados que sólo revelan sus manos de apariencia momificada o necrofada. Bajo el manto, los dementores no tienen ojos, y la única característica notable es su respiración aspirada constante, a través de la cual se alimentan de la felicidad y de los recuerdos alegres, dejando solo la tristeza y la desolación.

De acuerdo con la autora, los dementores crecen como hongos en lugares húmedos y oscuros, creando una densa niebla fría. Aunque se supone que son conscientes, esto no queda del todo claro. La presencia de un dementor hace que la atmósfera circundante se enfríe y oscurezca, y los efectos son acumulativos con el número de dementores presentes. La culminación de su poder es el 'beso del dementor', en el que el dementor engancha su boca a los labios de la víctima y consume su psique, probablemente para dejar a la víctima en un estado vegetativo. Los dementores son invisibles para los muggles, pero los afectan de igual manera.

A pesar de su apego a las emociones humanas, los dementores parecen tener dificultad distinguiendo un humano de otro, como se demuestra con el escape de Barty Crouch, Jr. de Azkaban, donde no pudieron detectar diferencia emocional entre Crouch y su madre. Su sensibilidad parece menos precisa en proporción a la complejidad de las emociones; esta debilidad en particular le permitió a Sirius Black, un animago, escapar de Azkaban convirtiéndose en un perro. El método principal contra ellos es el encantamiento patronus, que protege al que lo conjura y repele a los dementores. El chocolate es un primer auxilio efectivo contra casos de contacto leve.

Harry se encuentra por primera vez con un dementor durante su tercer año escolar, cuando son enviados a vigilar Hogwarts en busca de Sirius Black. Habiendo recordado el asesinato de sus padres gracias a la presencia de estas criaturas, Harry le pide ayuda a Remus Lupin, y así aprende a hacer el encantamiento Patronus.[n. 29]​ Al final de la Orden del Fénix, los dementores de Azkaban efectuaron una revuelta masiva contra sus empleadores para unirse a Voldemort, que les permitía acceso casi libre a las víctimas. En las Reliquias de la Muerte, el Ministerio, bajo el control de Voldemort, usa a los dementores para castigar a los nacidos de muggles. Los dementores también toman partido con Voldemort durante la Batalla de Hogwarts. Luego del nombramiento de Kingsley Shacklebolt como Ministro de Magia, los dementores son retirados de Azkaban, y el Ministerio los contiene limitando sus números.

Rowling, por su cuenta, creó a los dementores luego de un tiempo en el que ella, en sus propias palabras, "estaba deprimida clínicamente". Por lo tanto, los dementores pueden verse como una metáfora para la depresión.

Clasificación del MM: XXXX

El demiguise —del inglés demi (en español, semi, parcial) y guise (en español, aspecto); probablemente es un juego de palabras con disguise (en español, disfraz)— puede encontrarse en el Extremo Oriente, aunque no sin cierta dificultad: este animal es capaz de hacerse invisible cuando se siente amenazado, y solamente magos expertos en su captura pueden distinguirlo.

El demiguise es una bestia herbívora y pacífica. Es como un mono cuyos movimientos poseyeran donaire, con ojos grandes, negros y tristes, casi siempre ocultos por su pelo. Todo su cuerpo está cubierto por un pelo largo, sedoso y fino de color plateado. Las pieles de demiguise son muy preciadas, ya que con su pelo se pueden tejer capas de invisibilidad.[n. 3]​ Las capas hechas de su piel se vuelven opacas con el tiempo, perdiendo sus efectos de invisibilidad poco a poco.[n. 30]

El demiguise se usa para simbolizar el número cero en el alfabeto rúnico, debido a su habilidad para hacerse invisible.[4]

Clasificación del MM: XX

El diricawl es originario de la isla Mauricio. Con un cuerpo rechoncho y un plumaje esponjoso, este pájaro es incapaz de volar, pero dispone de un impresionante sistema para escapar del peligro. Puede desaparecer en un estallido de plumas y reaparecer en cualquier otro punto (el fénix comparte esta habilidad).

Curiosamente, los muggles estuvieron al tanto de la existencia de los diricawls, aunque los conocían por el nombre de «dodo». Al no saber que los diricawls pueden desvanecerse a voluntad, los muggles creyeron que los habían cazado hasta extinguir la especie. Como esto parece haber aumentado la conciencia muggle sobre los riesgos de matar indiscriminadamente a sus hermanas las criaturas, la Confederación Internacional de Magos estima apropiado no informar a los muggles de que los diricawls siguen existiendo.[n. 3]

Clasificación del MM: XXX

La doxy (también llamada hada mordedora) —del término inglés arcaico doxy (en español, prostituta), derivado del alemán docke (en español, muñeca)— es a menudo confundida con un hada, pese a que se trata de dos especies bien distintas. Como el hada, posee una diminuta figura humana, si bien la de la doxy está cubierta por un tupido pelaje negro, y tiene otro par más de piernas y brazos. Sus alas son gruesas, convexas y brillantes, muy parecidas a las de un escarabajo. Las doxys se encuentran por todo el norte de Europa y de América, pues muestran predilección por los climas fríos.

Cuando llega la época de la puesta, cavan un hoyo y depositan hasta quinientos huevos; luego, los entierran. Los huevos eclosionan a las dos o tres semanas.

Las doxys tienen cuatro filas de dientes afilados y venenosos. En caso de mordedura es necesario tomar un antídoto.[n. 3]

Fred y George Weasley usaron veneno de doxy para sus surtidos saltaclases, que se venden en su tienda de chascos Sortilegios Weasley.[n. 31]Harold Dingle usó excrementos de doxy secos para pretender que era polvo de garra de dragón para vendérselo a los de quinto año, pero fue confiscado por Hermione.[n. 32]

Clasificación del Ministerio de Magia: XXXXX

El dragón —del latín draco, y este del término en griego antiguo, δρακων, romanizado: drakon, lit. 'víbora o serpiente'—, probablemente la más famosa de todas las criaturas mágicas, es también de las más difíciles de ocultar. La hembra es generalmente más grande y agresiva que el macho, aunque no hay que acercarse a ninguno de los dos salvo que uno sea un mago hábil y experimentado. La piel, la sangre, el corazón, el hígado y los cuernos de dragón contienen una tasa elevada de propiedades mágicas; los huevos están clasificados como Bienes No Comerciables de Clase A.[n. 3]

Mientras la piel de dragón puede resistir a la mayoría de los hechizos, como el encantamiento aturdidor, algunos hechizos pueden afectar a los dragones en el punto justo, o si son lanzados por varias personas a la vez.

Existen diez especies, aunque hay constancia de cruces ocasionales que producen extraños híbridos. Los dragones de pura raza son los siguientes.[n. 3]

El bola de fuego chino (en inglés, Chinese Fireball), también llamado dragón león, es el único dragón oriental que existe, y tiene un aspecto especialmente llamativo. De escamas suaves y escarlatas, tiene una hilera de astas doradas alrededor de la cara, un hocico chato y ojos sumamente protuberantes. El bola de fuego se ganó ese nombre por la llama con forma de hongo que sale de sus narinas cuando está enfadado. Pesa entre dos y cuatro toneladas, y la hembra es más grande que el macho. Los huevos son de un carmesí brillante moteado de amarillo dorado y las cáscaras, muy estimadas en la hechicería china. El bola de fuego es agresivo, pero más tolerante con sus congéneres que la mayoría de los dragones; algunas veces acepta compartir su territorio con otros dos bolas de fuego. Aunque puede comer casi todos los mamíferos que se conocen, prefiere cerdos y seres humanos.[n. 3]

En el cáliz de fuego, Viktor Krum enfrentó a este dragón en la primera prueba del Torneo de los Tres Magos en un intento de recuperar el huevo dorado que este estaba vigilando, y usó el maleficio de conjuntivitis para cegar temporalmente al dragón, pero este comenzó a tambalearse y aplastó la mitad de los huevos de verdad, y debido a eso se quitaron puntos.[n. 33]

Clasificación del MM: XXXXX

Considerado el más peligroso de todos los dragones, el colacuerno húngaro (en inglés, Hungarian Horntail) tiene escamas negras, y su cuerpo recuerda el de un lagarto. Tiene ojos amarillos, cuernos broncíneos y pinchos de un color similar que surgen de su larga cola. El colacuerno posee una de las llamas de mayor alcance (más de quince metros). Sus huevos son de color cemento y de una cáscara particularmente dura; las crías se abren camino utilizando sus colas, ya que tienen los pinchos bien desarrollados al nacer. Se alimentan de cabras, ovejas y, siempre que es posible, de humanos.[n. 3]

En el cáliz de fuego, Harry tuvo que enfrentar a este dragón en la primera prueba del Torneo de los Tres Magos para conseguir un huevo de oro. Él invocó su Saeta de Fuego y la usó para maniobrar alrededor del dragón y atrapar el huevo.[n. 33]

El galés verde común (en inglés, Common Welsh Green) armoniza con la hierba exuberante de su tierra natal, aunque anida en las montañas más altas, donde se han establecido las reservas para su preservación. A pesar del episodio de Ilfracombe,[n. 35]​ esta raza está entre las menos problemáticas. Al igual que el opaleye, prefiere cazar ovejas y evita tenazmente las personas, a menos que estas lo provoquen. El galés verde tiene un rugido fácilmente reconocible y sorprendentemente melodioso. Lanza fuego en chorros finos, y sus huevos son de un marrón terroso moteados de verde.[n. 3]

En el cáliz de fuego, Fleur Delacour tuvo que enfrentar a este dragón en la primera prueba del Torneo de los Tres Magos para conseguir un huevo de oro. Ella hizo un encantamiento para poner al dragón en trance que funcionó, pero este roncó y echó un chorro de fuego que incendió la falda de Fleur, y ella tuvo que usar el encantamiento aguamenti para apagarla.[n. 33]

El hébrido negro (en inglés, Hebridean Black), nativo del Reino Unido, es más agresivo que su homólogo galés. Cada ejemplar requiere un espacio de más de ciento sesenta kilómetros cuadrados para sí solo. De unos nueve metros de longitud, el hébrido negro tiene escamas rugosas, brillantes ojos púrpura y una cresta baja pero de puntas agudas a lo largo del lomo. La cola acaba en una púa con forma de flecha y tiene alas semejantes a las de los murciélagos. El hébrido negro se alimenta principalmente de ciervos, aunque se sabe que ha cazado perros grandes e incluso vacas. El clan de magos MacFusty, que ha vivido en las islas Hébridas durante siglos, se ha hecho cargo tradicionalmente del cuidado de los dragones autóctonos.[n. 3]

El hocicorto sueco (en inglés, Swedish Short-Snout) es un atractivo dragón azul plateado cuya piel está muy demandada en la manufactura de guantes y escudos protectores. La llama que lanza es azul brillante y puede reducir huesos y madera a cenizas en cuestión de segundos. El hocicorto tiene menos muertes de personas en su haber que la mayoría de los dragones; aunque, como prefiere vivir en zonas montañosas salvajes y deshabitadas, el dato no habla tan a su favor como parece.[n. 3]

En el cáliz de fuego, Cedric Diggory tuvo que enfrentar a este dragón en la primera prueba del Torneo de los Tres Magos para conseguir un huevo de oro. Él transformó una roca en un labrador para distraer al dragón con resultados positivos, aunque se llevó una gran quemadura.[n. 33]

Los ironbellys ucranianos (en inglés, Ukrainian Ironbelly) —del inglés iron (en español, hierro) y belly (en español, vientre, barriga)— son los dragones de mayor tamaño: algunos han alcanzado seis toneladas de peso. Gordinflón y más lento en el aire que el vipertooth y el longhorn, el ironbelly es aun así sumamente más peligroso, capaz de destruir las viviendas en las que aterriza. Las escamas son de color gris metálico; los ojos, de un rojo intenso, y las garras, particularmente grandes y sanguinarias. Los ironbellys han estado sujetos a la vigilancia constante de las autoridades mágicas ucranianas desde que en 1799 uno de ellos se llevara volando un velero (afortunadamente vacío) del Mar Negro.[n. 3]

Gringotts tenía un ironbelly ucraniano que vigilaba la bóveda de Bellatrix Lestrange y más tarde, en las Reliquias de la Muerte, lo liberan Harry, Ron y Hermione cuando irrumpien en dicha bóveda y escapan de Gringotts.[n. 13]

El longhorn rumano (en inglés, Romanian Longhorn) —del inglés long (en español, largo) y horn (en español, cuerno)—tiene escamas de color verde oscuro y largos cuernos dorados y brillantes con los que cornea a la presa antes de asarla. Pulverizados, esos cuernos son muy estimados como ingrediente para pociones. El territorio nativo del longhorn se ha convertido en la actualidad en la reserva de dragones más importante del mundo, donde magos de todas las nacionalidades estudian de cerca una gran variedad de ejemplares. Los longhorns han sido objeto de un programa de reproducción intensiva. En los últimos años su número había decrecido mucho, fundamentalmente a causa del comercio de sus cuernos, que ahora están clasificados como Material Comerciable de Clase B.[n. 3]

Los opaleyes de las antípodas (en inglés, Antipodean Opaleye) —del inglés opal (en español, ópalo) y eye (en español, ojo)— viven en Nueva Zelanda, aunque hay registros que indican que emigraban a Australia cuando escaseaba el terreno en su país natal. Este dragón prefiere habitar valles en detrimento de las montañas, una característica inusual en la especie. Es de tamaño mediano (entre dos y tres toneladas). Quizá sea el tipo de dragón más hermoso que existe: tiene escamas iridiscente s y nacaradas y ojos sin pupila, multicolores y centelleantes; de ahí su nombre. Este dragón produce una llama escarlata muy intensa, pero, comparado con otros, no es especialmente agresivo y rara vez mata, a menos que tenga hambre. Su alimento favorito es la oveja, aunque a veces caza presas más grandes. A finales de 1970 hubo una serie de matanzas de canguros; el suceso se atribuyó a un opaleye macho que había sido desplazado de su territorio por una hembra dominante. Los huevos de opaleye son de color gris pálido, y los muggles ingenuos pueden confundirlos con fósiles.[n. 3]

El ridgeback noruego (en inglés, Norwegian Ridgeback) —del inglés ridgeback (en español, crestado)— se parece al colacuerno en casi todo, pero, en lugar de una cola con pichos, tiene una prominente cresta de color negro azabache a lo largo del lomo. Excepcionalmente agresivos con los de su propia raza, los ejemplares de esta especie son muy difíciles de encontrar en la actualidad. Se sabe que atacan a la mayoría de los grandes mamíferos terrestres y, algo inusual para un dragón, también se alimentan de criaturas que viven en el agua. Un informe no confirmado sostiene que un ridgeback apresó un ballenato en la costa de Noruega el año 1802. Los huevos de ridgeback son negros y las crías desarrollan la capacidad de exhalar fuego mucho antes que otras razas (entre uno y tres meses después de nacer).[n. 3]

Rubeus Hagrid recibió un huevo de ridgeback noruego de un extraño encapuchado en una taberna. Luego de eclosionar el huevo, Hagrid lo nombró Norberto, y trató de criarlo con Harry, Ron y Hermione. Sin embargo, el dragón fue descubierto, y finalmente Hagrid se lo dio a Charlie Weasley, que se llevó al joven dragón con otros de su tipo al Santuario de Dragones Rumano donde él trabajaba. Más tarde, en las Reliquias de la Muerte, se descubrió que Norberto era una dragóna, así que su nombre fue cambiado a Norberta.[n. 36]

Este es el más pequeño de los dragones y el que vuela más rápido. Con una longitud de apenas cuatro metros y medio, el vipertooth peruano (en inglés, Peruvian Vipertooth) —del inglés viper (en español, víbora) y tooth (en español, diente)— tiene escamas suaves de color cobre con distintivas crestas negras. Los cuernos son cortos, y los colmillos, especialmente venenosos. Los vipertooth no les hacen ascos a cabras y vacas, pero tienen tal afición por la carne humana que la Confederación Internacional de Magos se vio obligada a enviar exterminadores a finales del siglo XIX para reducir el número de vipertooths, que había aumentado con la alarmante rapidez.[n. 3]

Clasificación del MM: X

Los duendes (en inglés, Goblin) —de la expresión "duen de casa" o "dueño de casa"— son criaturas mágicas principalmente involucrados con el trabajo de los metales y el funcionamiento de Gringotts, el banco de los magos. Son representados por el Instituto de Coordinación de los Duendes en el Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas. Los duendes son antropomorfos, "de piel cetrina, largos y delgados dedos, ojos negros, pies alargados [...], un poco más alto que un elfo doméstico y con una cabeza abombada más grande que la de un ser humano."[n. 37]​ Los duendes tienen una dieta de en gran medida de "carne cruda, raíces y algunas setas"[n. 38]​ y hablan en un lenguaje conocido como duendigonza.[n. 39]​ Ellos consideran que el verdadero dueño de un objeto es su creador en vez de su comprador, y resienten el paso de reliquias hechas por duendes a través de las familias de magos sin pagos adicionales.[n. 38]​ La Ley Mágica prohíbe que los duendes tengan varitas; pero los duendes son capaces de una magia diferente por su cuenta.

Las relaciones entre duendes y magos han sido tensas por siglos debido a malentendidos en ambos lados, a veces evocando la violencia. Junto con los elfos domésticos, los duendes parecen ocupar una posición de ciudadanos de segunda clase en el mundo mágico. Los duendes permanecen en una posición neutral durante la Segunda Guerra Mágica, no estando ni junto a Voldemort ni en contra de él.[n. 11]​ En algunos casos, existe una débil amistad entre ciertos magos y duendes (particularmente Bill Weasley, que trabaja como rompedor de maleficios para Gringotts), e incluso ha habido algunos ejemplos de cruces entre duendes y magos (el profesor Flitwick tiene ancestros duendes distantes, lo que es probablemente causa de su pequeña estatura).

Clasificación del MM: XXX

La mayoría de los duendecillos (en inglés, Pixie) se concentra en Cornualles, Inglaterra. De color azul eléctrico, tienen unos veinte centímetros de altura y son muy revoltosos: les encantan los engaños y las bromas pesadas. Aunque no tienen alas, pueden volar y a veces atrapan por las orejas a personas desprevenidas y las ponen en las copas de árboles altos o en las azoteas de edificios. Los duendecillos se comunican entre sí mediante un agudo parloteo que ninguna otra criatura comprende. Dan a luz jóvenes.[n. 3]

En la cámara secreta, Gilderoy Lockhart llevó un grupo de "duendecillos de Cornualles recién cazados" a Hogwarts siendo profesor de Defensa contra las Artes Oscuras. Diciendo que eran "unos seres endemoniadamente engañosos", pensó que serían perfectos para una lección práctica de dicha asignatura. Perdió el control de ellos, e intentó acorralarlos con el hechizo peskipiksi pesternomi. Esto no funcionó, ya que probablemente Lockart lo inventó. Los duendecillos levantaron a Neville Longbottom de las orejas y lo colgaron en el techo. Lockart huyó del salón de clases, diciéndole a Harry, Ron y Hermione: "Bueno, ustedes tres meterán en la jaula a los que quedan." Hermione finalizó con el alboroto usando un encantamiento congelador.[n. 40]​ Debido a esto, Ron proclamó que la única cosa que aprendió de Lockhart fue "no dejar sueltos a los duendecillos."[n. 41]

Clasificación del MM: XXX Nativo de: Europa y América. Estatus: bestia.

El dugbog —del inglés dug (en español, excavado) y bog (en español, pantano)— es una criatura que vive en pantanos de Europa y todo el continente americano. Se parece a un leño mientras está inmóvil, pero si se examina más de cerca, se apreciarán unas patas delgadas y unos dientes muy afilados. Se desliza por los terrenos pantanosos en busca de pequeños mamíferos de los que alimentarse, e inflige heridas graves en los tobillos de los excursionistas. Sin embargo, el alimento favorito de los dugbogs es la mandrágora. Han existido casos de cultivadores de mandrágora que fueron a agarrar por las hojas una de sus valiosas plantas y se encontraron debajo un destrozo infame debido a las atenciones de un dugbog.[n. 3]

"Nos preguntaban cómo nos enfrentaríamos a un dementor, no a un dugbog." -Hermione Granger corrigiendo a Ronald Weasley.

XX

Los elfos domésticos (en inglés, House-Elf, en plural House-Elves) son pequeños elfos usados por magos como esclavos. Miden de 60-90 centímetros de altura, con delgadas extremidades y cabezas y ojos de gran tamaño. Tienen orejas puntiagudas parecidas a las de un murciélago y voces altas y chillonas. Sus nombres son usualmente diminutivos para mascotas, y no parecen tener apellidos. Habitualmente se refieren a sí mismos en tercera persona. Los elfos domésticos son generalmente obedientes, dóciles y serviles; y al ser esclavizados, usan artículos desechados como fundas de almohada y trapos de cocina. Los amos de los elfos domésticos pueden liberarlos dándoles una prenda de vestir. Los elfos domésticos se intoxican si toman cerveza de mantequilla.

Los elfos domésticos poseen una magia distinta a la usada por magos y brujas, que ellos generalmente usan en el servicio de sus amos. Esta magia puede usarse sin el permiso de sus amos, o aun en contra de sus órdenes, aunque tal desobediencia lo obliga a castigarse en varias maneras dolorosas. Entre otras cosas, esta magia les permite a los elfos domésticos viajar instantáneamente de un lugar a otro, aun en Hogwarts y otros lugares donde no pueden aparecerse y desaparecerse los magos; y aun así pueden transportar humanos.[n. 42]​ El alcance total de la magia de los elfos nunca se da a conocer, pero parece inmenso. Junto con la habilidad de aparecerse donde y cuando sea, Dobby, Winky, Hokey y Kreacher demuestran que pueden vencer a los magos cuando lo necesitan: en la cámara secreta, Dobby repele con fuerza a Lucius Malfoy mientras protege a Harry;[n. 43]​ mientras que en el cáliz de fuego, cuando Barty Crouch, Jr. es desenmascarado y confiesa lo que pasó la noche del Campeonato Mundial de Quidditch, él dice: "Winky [...] usó sus propias dotes mágicas para atarme a ella";[n. 44]​ y en las Reliquias de la Muerte, Harry le ordena a Kreacher que capture a Mundungus Fletcher y lo lleve al número doce de Grimmauld Place, una tarea que cumple en unos días —aun cuando Fletcher, como Kreacher dice, "tiene muchos escondrijos y muchos cómplices."—.[n. 45]​ Por otra parte, aunque a los elfos domésticos no se les permite tener varitas, la magia que pueden realizar sin varitas es considerablemente mejor que la magia de los magos.

En el cáliz de fuego, se dice que a un elfo doméstico que había sido liberado normalmente se le dice que encuentre una nueva familia a la que servir. Hay una Oficina para el Realojamiento de los Elfos Domésticos en el Ministerio de Magia. Los elfos domésticos son infinitamente leales a sus familias humanas; tanto que Dobby, que servía a la familia Malfoy, intenta castigarse cada vez que hace una observación negativa de ellos (aun luego de su libertad) hasta el último libro, en donde desafía a Bellatrix Lestrange. De acuerdo con Kreacher, "la primera ley de un elfo doméstico es cumplir las órdenes de su amo";[n. 46]​ sin embargo, mientras los elfos domésticos deben obedecer a sus amos sin preguntas, han sido conocidos por desobedecer las reglas (usualmente encontrando lagunas jurídicas en órdenes que den lugar a interpretaciones no intencionadas) para protegerse o proteger a sus amigos. Debido a su naturaleza obediente y dócil, algunas familias abusan de sus elfos domésticos; las familias de magos tenebrosos en particular parecen hacer de esto un hábito, como cuando los Malfoy forzaron a Dobby a torturarse, o cuando la familia Black habitualmente decapitaban a sus elfos domésticos cuando se debilitaban por la edad. No obstante, a la mayoría de los elfos domésticos los horroriza la libertad aun de los amos más crueles. Dobby, el primero en aparecer en la serie, es la única excepción; pero este se extiende principalmente al servicio voluntario, labor pagado y la elección de su propio empleo y vestimenta. Durante su período en Hogwarts, Hermione establece la PEDDO (Plataforma Élfica de Defensa de los Derechos Obreros) para defender los derechos de los elfos domésticos; pero adquirió poco interés de sus compañeros de clase y los elfos domésticos. Luego de que Hermione comienza a dejar prendas de vestir del tamaño de los elfos por la sala común de Gryffindor, con la intención de que los elfos domésticos de Hogwarts se liberen a sí mismos inadvertidamente mientras limpian, Dobby le dice a Harry que los otros elfos domésticos encuentran la idea tan insultante que Dobby es el único elfo residente dispuesto a limpiar la torre de Gryffindor. De acuerdo con Rowling, Hermione trabaja en el Ministerio de Magia luego de Hogwarts y así aumenta los derechos de los elfos domésticos; pero esto nunca es visto en los libros, dentro de los cuales su última aparición es en la Batalla de Hogwarts, liderados por Kreacher contra los antagonistas.

En las Reliquias de la Muerte, Dumbledore le dice a Harry: "Voldemort [...] no sabe ni entiende nada de elfos domésticos [...] Nada en absoluto. Porque [...] tiene[n] un poder que supera el suyo, un poder que está fuera del alcance de cualquier magia; es una verdad que él nunca ha captado."[n. 47]

Clasificación del MM: XXXX

El erkling —del alemán erlkönig (en español, rey aliso); podría también ser una mala traducción del danés original elverkonge (en español, rey elfo)— es una criatura oriunda de la Selva Negra alemana, cuyo aspecto es similar al de los elfos. Son más grandes que un gnomo (miden noventa centímetros como término medio) y tienen una cara puntiaguda. Los niños encuentran fascinante su alegre y agudo parloteo, y los erklings tratarán de apartarlos de sus tutores con engaños para comérselos. Sin embargo, gracias a los severos controles del Ministerio de Magia alemán, durante los últimos siglos se han reducido espectacularmente los asesinatos a manos de erklings; el último ataque conocido de un erkling, cuyo objetivo era un mago de seis años llamado Bruno Schmidt, terminó con la muerte del erkling cuando el señorito Schmidt lo golpeó fuerte en la cabeza con el caldero plegable de su padre.[n. 3]

Clasificación del MM: XXXX

El erumpent —del latín ērumpēns, participio activo en presente de ērumpō (en español, estallar)— es una bestia grande, de gran tamaño y poder, natural de África. Pesa más de una tonelada y, de lejos, puede confundirse con un rinoceronte. Tiene una piel gruesa que repele la mayoría de los encantamientos y maleficios, un cuerno largo y puntiagudo sobre el hocico y una cola larga que parece una soga. Los erumpents solo dan a luz una cría en cada parto.

Esta bestia no ataca a menos que se la provoque exageradamente, pero, cuando lo hace, los resultados suelen ser catastróficos. El cuerno del erumpent puede atravesar cualquier cosa, desde la piel hasta el metal, y contiene un fluido mortal que provoca el estallido de todo lo que haya sido inyectado con él.

Los erumpents no son muy numerosos porque, durante la época de apareamiento, los machos se hacen estallar unos a otros a menudo. Los magos africanos tratan la especie con mucha prudencia. El cuerno, la cola y el fluido explosivo del erumpent son utilizados en pociones, aunque están clasificados como Materiales Comerciables de Clase B (Peligrosos y Sujetos a Control Estricto).[n. 3]

Clasificación del MM: XXX

El escarbato (en inglés, Niffler) —del verbo en español escarbar— es una bestia del Reino Unido que tiene un sedoso pelaje negro y un hocico largo. Esta criatura excavadora se pirra por cualquier cosa brillante. Muchos duendes poseen escarbatos para que caven profundamente en la tierra en busca de tesoros. Aunque el escarbato es amable e incluso afectuoso, puede destruir las pertenencias de la gente y, por tanto, nunca debe estar dentro de una casa. Los escarbatos viven en madrigueras a seis metros bajo tierra y tienen de seis a ocho crías por parto.[n. 3]

En El cáliz de fuego, Hagrid los usó como parte de la clase de Cuidado de Criaturas Mágicas de cuarto año. Antes de la clase él escondió oro leprechaun en la tierra frente a su cabaña. Él emparejó a cada estudiante con un escarbato y le prometió un premio a cualquiera que encuentre la mayor cantidad de oro. Ron le preguntó a Hagrid si podrían comprar estos escarbatos como mascotas, y con conocimiento, Hagrid dijo que su madre no querría una ya que ellos destruyen los objetos que hay en los hogares, pero esto no era un 'no' rotundo. Esto significa que hay una buena posibilidad de que los magos puedan comprar escarbatos. Cuando Hagrid atrapó a Gregory Goyle guardándose el oro, le explicó que tratar de robarlo no tenía sentido, ya que el oro leprechaun desaparecía después de unas horas. El escarbato de Ron encontró la mayor cantidad de oro, así que Hagrid lo recompensó con una gran barra de chocolate de Honeydukes.[n. 48]

Durante el período de Umbridge como directora de Hogwarts, Lee Jordan usó el encantamiento levitatorio para levitar a dos escarbatos a través de la ventana de la oficina de Umbridge para destruir el lugar.[n. 32]​ Umbridge culpó a Hagrid por esto,[n. 49]​ y esto lo perjudicó durante las inspecciones de la Suprema Inquisidora de Hogwarts.

Clasificación del MM: XXXX

La esfinge egipcia (en inglés, Sphinx) —en griego antiguo, Σφίγξ, quizá de σφίγγω en español, estrangular— tiene una cabeza humana en un cuerpo de león. Durante más de mil años ha sido usada por magos y brujas para cuidar valiosos y secretos escondites. Sumamente inteligente, la esfinge se deleita con acertijos y enigmas. Por lo general, solo es peligrosa cuando lo que custodia es amenazado.[n. 3]

Una esfinge hembra fue colocada en el laberinto de la tercera prueba del Torneo de los Tres Magos en el cáliz de fuego. La esfinge vigilaba la ruta más próxima a la Copa de los Tres Magos, y también le dio una pista a Harry que involucraba a la última criatura que vigilaba la Copa. El acertijo que la esfinge le dio a Harry para que este resuelva y así pueda pasar fue el siguiente:

Las primeras dos líneas sugieren que la palabra es 'araña', ya que dice que si ella se lo hiciera lo desgarraría con sus zarpas, y eso solo lo haría si él no captaba la respuesta del acertijo. La segunda parte del acertijo indica '-aña', que es como termina la región de los toros, la sangre, el mar y la verbena —España—, y 'ara-', que es como empieza la región de las montañas de arena —Arabia—. La última parte del acertijo dice que es un animal al que a Harry no le gustaría besar, ya que la araña tiene unos colmillos venenosos. Claramente, la respuesta es 'araña', lo que indica que la última criatura del laberinto vigilando la Copa de los Tres Magos es una acromántula. La esfinge le dio a Harry tres opciones: si se quedaba callado, ella le permitiría irse ileso; si él contestaba correctamente, ella lo dejaría pasar; pero si daba una respuesta incorrecta, ella lo atacaría.[n. 50]

Gringotts ha sido conocido por colocar esfinges para vigilar algunas de las bóvedas, la mayoría para la molestia de aquellos clientes que quieran acceder a sus tesoros pero no sean buenos resolviendo acertijos.[9]

El escreguto de cola explosiva (en inglés, Blast-Ended Skrewt) es un híbrido criado por Hagrid en el cáliz de fuego, cruzando mantícoras y cangrejos de fuego. No se sabe si Hagrid usó magia o de alguna otra manera logró que se apareen.

Los escregutos recién salidos del huevo se ven como langostas deformes, pálidas y viscosas sin caparazón. Tienen patas sobresaliendo en ángulos extraños. Miden como quince centímetros de largo y huelen fuertemente a pescado podrido. Al crecer, miden tres metros de largo y son letales. Se parecen a escorpiones gigantes con aguijones enroscados sobre su lomo. Su brillante armadura desvía la mayoría de los hechizos, y usan sus explosiones como propulsión hacia un enemigo. Su único lugar vulnerable es su parte inferior sin armadura.

Uno de estos escregutos fue colocado dentro del laberinto de la tercera prueba del Torneo de los Tres Magos, y Harry lo derrotó usando el maleficio obstaculizador sobre la parte inferior criatura.

De los cientos que Hagrid había criado, solo sobrevivió uno, que fue colocado en el laberinto de la tercera prueba del Torneo de los Tres Magos. Hagrid nunca pudo encontrar alimento para ellos, probablemente la razón por la que hayan muerto tan rápido. No se sabe si el que sobrevivió fue liberado en el Bosque Prohibido o si Hagrid lo conservó para criarlo, o si finalmente murió.

Rita Skeeter dijo que si El Profeta sacaba una columna zoológica y dijo que el escorbuto de cola positiva, así lo llamó, podría ser el evento de ese día si ella entrevistara a Hagrid. Sin embargo, los escregutos nunca aparecieron en la columna zoológica de El Profeta.[n. 51]

En la Orden del Fénix, luego del ataque del rayo aturdidor de Dolores Umbridge y otros oficiales del Ministerio de Magia sobre Minerva McGonagall, Ron sugiere ofrecércela a una caja llena de escregutos de cola explosiva hambrientos como un castigo apropiado, lo que Harry piensa que "no estaba del todo mal".[n. 32]

Los fantasmas (en inglés, Ghost) —en griego antiguo, φάντασμα, romanizado: fántasma, lit. 'aparición'— juegan un papel secundario importante, principalmente como consejeros de los personajes principales. A diferencia de los fantasmas en los cuentos de terror tradicionales, estos fantasmas no son atemorizantes ni necesariamente macabros. Los fantasmas en las novelas son plateados y transparentes. Pueden volar y atravesar paredes, mesas y otros objetos sólidos, sin embargo, tienen cierta capacidad de afectar físicamente, y ser afectados por, el mundo de los vivos —Myrtle la Llorona, por ejemplo, puede chapotear el agua de su inodoro—.[n. 52]​ Las mesas de banquete de los fantasmas están llenas de comida podrida, ya que la descomposición incrementa su capacidad de olerla y saborearla.[n. 53]

En el universo Harry Potter, solo brujas y magos pueden convertirse en fantasmas. Como Nick Casi Decapitado le explicó a Harry, "Los magos pueden dejar un recuerdo de sí mismos en el mundo y pasearse como una sombra por donde caminaban cuando estaban vivos. Pero muy pocos magos eligen ese camino. [...] Yo temía a la muerte. Decidí no aceptarla del todo. A veces me pregunto si no debí... Bueno, es como no estar aquí ni allí. De hecho, yo no estoy ni aquí ni allí..."[n. 54]​ A pesar de haber elegido esta otra vida, varios fantasmas lamentan su inhabilidad de comer, y varios son descritos como lúgubres También albergan una atracción a las imágenes mórbidas y la melancolía.[10]

Los fantasmas son muy sensibles sobre su condición: cuando el Ministerio inicialmente los clasificó como criaturas conscientes con derechos legales completos,[n. 56]​ ellos exclamaron que el término era insensible y recibieron una división de espíritus separada,[n. 55]​ aparentemente para controlar las actividades y localizar a los fantasmas problemáticos —como cuando Mytle fue forzada a buscar el lugar de su muerte, Hogwarts, luego de interrumpir la boda del hermano de Olive Hornby, una chica que la había molestado en la escuela—.

Los fantasmas que aparecen en la serie son:

Peeves, el poltergeist de Hogwarts, no es considerado un fantasma, sino un "indestructible espíritu del caos" de acuerdo con Rowling.[11]

Clasificación del MM: XXX[n. 57]

El fénix (en inglés, Phoenix) —en griego antiguo, φοῖνιξ, romanizado: foínix— es un magnífico pájaro rojo, del tamaño de un cisne, con una gran cola dorada, pico y garras del mismo color. Anida en la cima de las montañas y se encuentra en Egipto, la India y China. El fénix puede llegar a vivir muchísimo tiempo, ya que se regenera: estalla en llamas cuando su cuerpo comienza a decaer y resurge de las cenizas como un polluelo. El fénix es una criatura amable, de la que nunca se ha sabido que matara, y sólo come plantas. Como el diricawl, puede desaparecer y aparecer a voluntad. El canto del fénix es mágico: tiene fama de aumentar el valor de los puros de corazón y de infundir temor en el de los impuros. Sus lágrimas tienen grandes propiedades curativas.[n. 3]

Las plumas de cola de fénix son uno de los núcleos de varitas más populares, teniendo la varita de Harry y la de Voldemort dicho núcleo. Albus Dumbledore tenía un fénix, Fawkes, quien participó en varios hechos importantes de la historia.

Clasificación del MM: XXX

El fwooper es un pájaro africano que exhibe plumajes de colores intensos; los hay anaranjados, rosados, verde lima y amarillos. Este animal ha sido durante mucho tiempo proveedor de plumas de fantasía y sus huevos también llaman la atención por los dibujos de vivos colores de la cáscara. Aunque al principio resulta agradable, su canto acaba por volver loco a quien lo escucha. En consecuencia, el fwooper se vende con un encantamiento silenciador que es preciso reforzar todos los meses. Para ser dueño de un fwooper hay que tener una licencia, ya que estas criaturas requieren un cuidado responsable.[n. 3]

El fwooper se usa para simbolizar el número cuatro en el alfabeto rúnico, debido a sus cuatro colores de plumas.[4]

Clasificación del MM: XXXX[n. 20]

Hay gente del agua (en inglés, Merpeople), también conocida como sirenas, selkies y merrows, por todo el mundo, pero varían en apariencia casi tanto como los seres humanos. Sus prácticas y costumbres tienen un halo de misterio equiparable al que rodea a los centauros, aunque aquellos magos que han aprendido sirenio hablan de comunidades sumamente organizadas que varían de tamaño según el hábitat y que, en algunos casos, disponen de viviendas construidas con mucho esmero. Como los centauros, la gente del agua ha rechazado el estatus de seres en favor de la clasificación de criaturas.[n. 3]

El pueblo de la gente del agua más antiguo del que hay constancia se sitúa en Grecia. Es en las aguas templadas de ese país donde podemos encontrar a las bellas sirenas que la literatura y la pintura muggles han retratado en tantas ocasiones. Los pueblos de Escocia (selkies) y de Irlanda (merrows) son menos agraciados, pero comparten ese amor por la música que es común a toda la gente del agua.[n. 3]

Una colonia de gente del agua vive en el Lago Negro en los terrenos de Hogwarts. Ellos fueron los obstáculos principales en la segunda prueba del Torneo de los Tres Magos en el cáliz de fuego.[n. 58]

Clasificación del MM: XX

Pese a que tiene un aspecto horrible, el ghoul —en árabe, الغول‎, romanizadoghūl, lit. 'demonio'— no es una criatura particularmente peligrosa. Parece un ogro algo baboso, con los dientes torcidos hacia fuera, y generalmente reside en los desvanes o graneros de los magos, donde come arañas y polillas. Gime y en ocasiones arroja objetos, pero suele ser muy tonto; en el peor de los casos, gruñirá de manera alarmante ante cualquiera que tropiece de forma accidental con él. En el Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas existe una Fuerza Operativa Antighouls que se dedica a erradicarlos de las viviendas que han pasado a manos de muggles, pero en las familias de magos el ghoul se convierte a menudo en un tema de conversación o incluso en mascota.[n. 3]

El ático de la casa de la familia Weasley, la Madriguera, es el hogar de un ghoul que de vez en cuando choca con las cañerías, cuando siente que la casa está muy tranquila. En las Reliquias de la Muerte, la familia de Ron transformó a su ghoul para parecerse más a Ron. La idea fue para que el ghoul lo reemplace cuando él, Harry y Hermione fueron a buscar los Horrocruxes en caso de que a cualquier empleado del Ministerio le parezca sospechoso que Ron no vaya a la escuela. El ghoul tenía una apariencia enfermiza, así que cuando los empleados del Ministerio fueron a la Madriguera para controlar esto, la familia dijo que él tenía una enfermedad altamente contagiosa llamada spattergroit.[n. 59]

Clasificación del MM: XXXX

Los gigantes (en inglés, Giant) —del latín gigās, gigantis, en griego antiguo, γίγας, romanizado: gígas, lit. 'gigante'— en el universo Harry Potter son capaces de cruzarse con los humanos — Rubeus Hagrid es un semigigante, como su interés amoroso Olympe Maxime — pero los magos como una población[n. 60]​ se han involucrado en una campaña activa para sacar a los gigantes de la civilización. Los últimos gigantes en el Reino Unido fueron aparentemente asesinados por decreto del Ministerio, pero la mayoría de las muertes fueron debido a la agresión territorial entre ellos mismos, ya que los magos los forzaron a vivir en espacios cada vez más reducidos. Los pocos gigantes restantes en el mundo (en total, 70 u 80) están reunidos en una región aislada de Bielorrusia. Los gigantes pueden llegar a medir de 6 a 7,50 metros, y poseen una piel similar a la de los rinocerontes, que les otorga inmunidad limitada a los ataques con magia.[n. 32]​ Su sociedad está de alguna manera gobernada por un jefe llamado un Gurg, que pasa la mayoría de su tiempo exigiendo comida de sus subordinados.

Voldemort empleó a los gigantes en sus ataques, luego de convencerlos de que él puede ofrecerles una mejor vida;[n. 61]​ mientras Hagrid revela en la Orden del Fénix que él y Maxime fueron a tratar de persuadir a los gigante para que tomen parte en la guerra contra Voldemort, pero su plan se frustró cuando el Gurg fue asesinado y su sucesor se alió con el enemigo. Como resultado, los gigantes tomaron parte en la batalla de Hogwarts al final de la serie, la mayoría luchando a favor de Voldemort.[n. 62]

Los semigigantes son seres con una parte de sangre o herencia de gigantes, no toda, así como parte de sangre humana. Por ejemplo, un humano podría tener una madre gigante y un padre mago o viceversa. Sin embargo, las logísticas de una bruja de tamaño normal que porte un bebé semigigante son difíciles, si no imposibles, de imaginar, mucho menos las logísticas de este tipo de concepción. Los semigigantes conocidos en la serie son Rubeus Hagrid y Olympe Maxime.

Todos los semigigantes conocidos tenían sangre mágica, y eran capaces de producir magia, característica que recibieron de sus ancestros magos. No se sabe si igualmente tuvieran magia si su padre humano fuera un muggle; podrían recibir magia de su padre gigante, pero ya que no ha habido semigigantes no mágicos conocidos no se puede deducir una respuesta definitiva. De su familia gigante, usualmente heredan una gran altura y construcción, ya que normalmente son considerados demasiado altos para los estándares de los humanos y demasiado bajos para los estándares de los gigantes. También heredan la resistencia natural a la mayoría de los hechizos de sus ancestros gigantes.

Varios semigigantes han sido discriminados, como los hombres lobo, los centauros y otros semihumanos. Este prejuicio fue notoriamente demostrado por los mortífagos, algunos sangre pura y otros como Dolores Umbridge.[n. 63]​ Los gigantes puros también menosprecian a los semigigantes debido a su menor tamaño, ya que tener grandes hijos es el orgullo de un gigante.[n. 49]

Clasificación del MM: XXX

Establecido en el norte de Europa, el glumbumble —del inglés glum (en español, triste) y bumble (en español, abejorro)— es un insecto volador, de cuerpo peludo y gris, que produce una melaza que induce a la melancolía y se usa como antídoto para la histeria derivada de la ingesta de hojas de alihotsy. Algunas veces infestan colmenas de abejas, con efectos desastrosos para la miel. Los glumbumbles anidan en lugares oscuros y cerrados, como árboles huecos y cuevas. Se alimentan de ortigas.[n. 3]

Clasificación del MM: XX

Los gnomos (en inglés, Gnome) —en griego antiguo, γηνομος, romanizado: gēnomos, lit. 'terrestre'— son una plaga de jardín muy común: se encuentran por todo el norte de Europa y en Norteamérica. Pueden alcanzar treinta centímetros de altura y tienen una cabeza desproporcionadamente grande y pies huesudos y fuertes. Para desgnomizar un jardín hay que agarrar a los gnomos y voltearlos, como si se fuera a echar un lazo, hasta que estén mareados; a continuación hay que lanzarlos por encima de la cerca. Como alternativa, puede usarse un jarvey, aunque en la actualidad la mayoría de los magos considera que este método para mantener a raya a los gnomos es demasiado brutal.[n. 3]

Clasificación del MM: XXX

Los gorros rojos (en inglés, Red Cap) son criaturas semejantes a los enanos, que viven en los hoyos de antiguos campos de batalla o en cualquier otro lugar donde se haya derramado sangre humana. Es fácil repelerlos con encantamientos y maldiciones, pero son muy peligrosos para los muggles solitarios. Si un gorro rojo da con un muggle en una noche oscura, tratará de golpearlo con su maza hasta matarlo. Se concentran principalmente en el norte de Europa.[n. 3]

En el prisionero de Azkaban, Remus Lupin le enseñó a su clase de tercer año de Defensa contra las Artes Oscuras sobre estas criaturas durante la segunda lección, y más tarde los usó como parte de su camino de obstáculos durante el examen final de ese año.[n. 64]

Clasificación del MM: XXXX

El graphorn —probablemente del idioma inglés grape (en español, uva) y horn (en español, cuerno)— se encuentra en regiones montañosas de Europa. Es grande y jorobado, de color púrpura plomizo. Camina sobre grandes zarpas de cuatro dedos y tiene dos cuernos muy largos y afilados y una naturaleza extremadamente agresiva. Algunas veces se ven trolls de montaña montando sobre ellos, aunque los graphorns no parecen aceptar con agrado ese intento de domesticarlos y es mucho más común ver a un troll con cicatrices infligidas por estas criaturas. Su cuerno, pulverizado, Se utiliza en muchas pociones, pero su precio está por las nubes debido a las dificultades que entraña obtenerlo. La piel de graphorn es más gruesa que la de dragón y repele la mayoría de los hechizos.[n. 3]

Los dos cuernos del graphorn se usan para simbolizar el número dos en el alfabeto rúnico.[4]

Clasificación del MM: XXXX

El grifo (en inglés, Griffin) —en griego antiguo, γρυφος, romanizado: gryphos; en persa, شیردال‌‎, romanizado: shirdal, lit. 'león-águila'— apareció en Grecia. Las patas frontales y la cabeza son las de un águila gigante; el cuerpo y las patas traseras, de un león. Al igual que las esfinges, con frecuencia los grifos son empleados por los magos para custodiar tesoros. Pese a que estas criaturas son feroces, un puñado de magos virtuosos han llegado a trabar amistad con alguno. Los grifos se alimentan de carne cruda.[n. 3]

Clasificación del MM: XX

El grindylow —probablemente del inglés grind (en español, oprimir, pulverizar) y low (en español, bajo, profundo)— es un demonio del agua de color verde pálido que habita en lagos del Reino Unido e Irlanda. Se alimenta de peces pequeños y es hostil con muggles y magos por igual, aunque se sabe de gente del agua que los ha domesticado. El grindylow tiene unos dedos alargados que, aunque pueden hacer presa con una fuerza inusual, se fracturan con facilidad.[n. 3]

Remus Lupin ordenó un grindylow en el prisionero de Azkaban para su clase de tercer año de Defensa contra las Artes Oscuras.[n. 65]

Un año más tarde, en el cáliz de fuego, los grindylows del Lago Negro en los terrenos de Hogwarts atacaban a los estudiantes que competían en la segunda prueba del Torneo de los Tres Magos. Causaron que Fleur Delacour se retirara anticipadamente de la prueba, y casi hacen que Harry se ahogue.[n. 58]

Clasificación del MM: X

El gusarapo, también conocido como gusamoco (en inglés, Flobberworm) vive en zanjas húmedas. Es un gusano grueso de color marrón, que alcanza hasta veinticinco centímetros de largo y se desplaza muy poco. Un extremo es igual al otro,y ambos produces la mucosidad de la que deriva su nombre y que a veces se utiliza para espesar pociones. El alimento preferido del gusarapo es la lechuga, aunque come casi cualquier planta.[n. 3]

Luego de perder su confianza debido al incidente del hipogrifo en su primera lección de Cuidado de Criaturas Mágicas en el prisionero de Azkaban, Hagrid hizo que sus estudiantes de tercer año críen gusarapos por un semestre. Este ejercicio carecía completamente de sentido, ya que ellos prefieren estar solos y no hacer nada. No requerían de mucho cuidado, aunque parecían no saber cuánta comida necesitaban y morían sobrealimentados. Para el examen final, los estudiantes, simplemente tuvieron que vigilar a un gusarapo y asegurarse de que esté vivo al final de la hora destinada a la lección.[n. 64]

El gusano aquavirius (en inglés, Aquavirius Maggot) supuestamente es una criatura que se asemeja a un cerebro. En Harry Potter y la Orden del Fénix, en el Departamento de Misterios del Ministerio de Magia, Luna Lovegood identificó incorrectamente las gotas claras flotando en el tanque de cerebros como gusanos aquavirius aunque en realidad eran solo cerebros.[n. 66]​ El gusano aquavirius es una de las varias criaturas extrañas en las que Luna y su padre creían aunque no muchos otros lo hacían.



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