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Genocidios



El genocidio (del griego γένος génos "estirpe" y el latín -cidio, apofonía de caedere "matar") es un acto perpetrado con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso.

El término «genocidio» fue acuñado por Raphael Lemkin en 1944 y es un delito internacional. Comprende cualquier acto que consista en la «matanza y lesión grave a la integridad física o mental de los miembros del grupo, sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial, medidas destinadas a impedir nacimientos en el seno del grupo, traslado por la fuerza de niños del grupo a otro grupo».

El término fue acuñado y definido por primera vez por el jurista judeo-polaco Raphael Lemkin, que en 1939 había huido del holocausto y encontrado asilo en Estados Unidos. En su libro El poder del Eje en la Europa ocupada publicado en 1944 definió así el genocidio:[1]

Según el sociólogo e historiador estadounidense Michael Mann, el genocidio es el grado más extremo de violencia intergrupal y el más extremo de todos los actos de limpieza étnica.[2]​ Para este autor el impacto de los genocidios durante el siglo XX es devastador, tanto por el número de víctimas, que cifra en más de 70 millones de personas, como en la extrema crueldad de las agresiones.[3]

Existe una discrepancia entre el significado jurídico y el significado coloquial o profano de la palabra, lo que da lugar a equívocos y enconados debates acerca de la cuestión.

Desde un punto de vista jurídico, el genocidio, ya sea cometido en tiempo de paz o en tiempo de guerra se considera un delito de derecho internacional. Tanto la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948 como el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI) de 1998 recogen una idéntica definición:[4][5]

Se entenderá por “genocidio” cualquiera de los actos mencionados a continuación, perpetrados con la intención de destruir total o parcialmente a un grupo nacional, étnico, racial o religioso como tal:

En el lenguaje común, sin embargo, el término tiene un significado diferente, tal como viene recogido por la Real Academia Española:[6]

Este segundo significado es el que mueve a muchas personas a calificar como genocidio determinadas matanzas de personas que, en realidad, no se ajustan al tipo penal del delito de genocidio definido internacionalmente.[7]

La invención del término y su primera definición jurídica fue obra del jurista judeo-polaco Raphael Lemkin, quien desde su llegada a Estados Unidos en 1939 huyendo de la persecución nazi, emprendió una acción decidida de denuncia de las atrocidades nazis —«el crimen sin nombre» como las llamó Winston Churchill[8]:14 que culminó con la publicación en 1944 del libro Axis Rule in Occupied Europe ('El poder del Eje en la Europa ocupada'), obra en la que utiliza por primera vez el término genocidio.[9][10]​ Según el historiador francés Bernard Bruneteau, Lemkin veía la asunción del crimen de genocidio «como el punto de partida de un nuevo Derecho internacional».[8]:10

Lemkin compuso la palabra genocidio a partir de genos (término griego que significa familia, tribu, raza o pueblo) y -cidio (del latín -cidere, forma combinatoria de caedere, matar). Lemkin quería referirse con este término a las matanzas por motivos raciales, nacionales o religiosos. Sus estudios iniciales habían basado en el genocidio perpetrado por el Imperio Otomano sobre el pueblo armenio entre 1915 y 1923 y a partir de entonces dedicó su vida a conseguir que las normas internacionales definiesen y prohibiesen el «genocidio», de forma que se introdujera para los grupos el concepto de lo que el homicidio es para los individuos, el reconocimiento de su derecho a existir.[11]

En el libro Axis Rule in Occupied Europe, Lemkin enumeraba todas las políticas nazis dirigidas a la aniquilación de pueblos —el judío y el polaco en primer lugar- por sus características nacionales, religiosas y étnicas. Para Lemkin, como ha destacado el profesor Bruneteau, «el genocidio iba más allá de la eliminación física en masa, que a su juicio era un caso límite y excepcional; consistía, más bien, en una multiplicidad de acciones destinadas a destruir las bases de la supervivencia de un grupo en cuanto grupo. Era una síntesis de los diferentes actos de persecución y destrucción». Así Lemkin, proponía una acepción amplia a la noción de genocidio, que englobaba los actos que más adelante se calificarían como etnocidio. «En cierto modo, la muerte era la consecuencia, y no el medio, del fin perseguido. En la acción genocida perpetrada por el Tercer Reich, Lemkin veía, por lo demás, la síntesis y la plenitud de todas las barbaries pasadas, tanto las que en la Antigüedad y la Edad Media pretendían destruir físicamente a algunos pueblos, como las que, en la Edad Moderna, trataban de aniquilarlos culturalmente. La Europa nazi, continuadora de estas antiguas prácticas, jerarquizaba a los grupos con miras a su aniquilación física inmediata (los judíos y los gitanos) o a su extinción sociocultural (los eslavos). Recordemos, pues, que Lemkin no deseaba designar un fenómeno nuevo, sino más bien estigmatizar una práctica secular de la humanidad designándola como crimen en virtud del derecho internacional»[8]:14-15

Tras el final de la Segunda Guerra Mundial Lemkin dedicó todos sus esfuerzos al reconocimiento internacional del delito de genocidio. En abril de 1946 publicó un artículo en la revista American Scholar que tuvo mucha repercusión, pero el término genocidio, aunque fue utilizado por las acusaciones en el juicio de Núremberg, los jueces no lo aplicaron en la sentencia que condenó a los dirigentes nazis, sino el de «crimen contra la humanidad» establecido en la Carta de Londres.[8]:16

El Acuerdo o Carta de Londres de 8 de agosto de 1945 estableció el Estatuto del Tribunal de Núremberg y definió como el crimen contra la humanidad como el "asesinato, exterminio, esclavitud, deportación y cualquier otro acto inhumano contra la población civil, o persecución por motivos religiosos, raciales o políticos, cuando dichos actos o persecuciones se hacen en conexión con cualquier crimen contra la paz o en cualquier crimen de guerra". Por otro lado, la Convención sobre imprescriptibilidad de los crímenes de guerra y de los crímenes de lesa humanidad considera el genocidio del género crímenes de lesa humanidad.[12]

Sin embargo, a finales de 1946 la Asamblea General de la ONU, recién creada, aprobó la resolución 96 en la que el término genocidio aparece por primera vez en un documento internacional. La resolución lo definió como «una denegación del derecho a la vida de los grupos humanos», independientemente de que estos «grupos raciales, religiosos, políticos o de otro tipo hayan sido destruidos por completo o en parte»; y, por tanto, como un crimen sometido al Derecho en cualquier lugar. Así, en la resolución no se distinguía entre el «crimen contra la humanidad» aplicado en Núremberg y el de genocidio, quedando este último de cierta forma incluido en el primero.[8]:16-17

La separación entre los dos tipos de acusaciones se produjo dos años después, y la diferenciación se ha mantenido hasta hoy,[8]:17 cuando en diciembre de 1948 la Asamblea General de la ONU aprobó la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio que luego sería ratificada por cada uno de los Estados miembros. De la aprobación de la Convención contra el genocidio nació el Tribunal Internacional de Justicia, «de acuerdo con la idea lemkiana de que el ataque contra un grupo humano equivale a atentar contra la humanidad», afirma el profesor Elorza.[9]

La presión de la Unión Soviética hizo que de la definición de genocidio de la Convención de 1948 se cayera la referencia a grupos "políticos y de otra clase" que aparecía en la resolución de 1946, salvaguardando así la política exterior estanilista durante la guerra y la posguerra (en algunos ámbitos se había empezado a usar el término de genocidio para calificar la anexión de los países bálticos por la Unión Soviética). Así el artículo II de la Convención consideró genocidio todo acto «cometido con la intención de destruir, totalmente o en parte, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso» (pero no «político o de otro tipo», como se decía en la resolución de 1946).[8]:17

La definición de genocidio plasmada en la Convención de 1948 fue acogida en el artículo 4 del Estatuto del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia, de 1993, el artículo 2 del Estatuto del Tribunal Penal Internacional para Ruanda, de 1994, y el artículo 6 del Estatuto de Roma de 1998, por el que se creó la Corte Penal Internacional.

Existen debates entre historiadores y sociólogos frente a un concepto jurista establecido por Matthias Bjornulund, Eric Markusen y Matthias Mennecke como “el aniquilamiento sistemático de un grupo de población como tal”. Aunque estos patrones han sido practicados desde hace mucho tiempo, el concepto de genocidio es moderno surgiendo a comienzos del siglo XX tras el aniquilamiento cometido por el Estado Ittihadista turco a la población armenia y las muertes producidas por el nazismo. La evolución, caracterización y delimitación de este término logra establecer el término de genocidio moderno. Se puede establecer el siglo XIX y XX como punto de partida de las características y sucesos que lo definen, siendo sus prácticas sociales principalmente las cuales no solo giran alrededor del aniquilamiento sino también abarca la legitimación de un consenso y obediencia así como la modificación de las relaciones sociales entre perpetradores y afectados. Definir socialmente al genocidio logra deslindar esta práctica de la naturaleza humana la cual requiere un entrenamiento, perfeccionamiento y legitimación por lo que al ser una construcción social, esta puede ser deconstruida. [13]

La periodización del genocidio también es posible concebirse gracias a esta postura ya que la práctica social a su desarrollo previo el cual incluye símbolos narrativos y representativos que llevan a su ejecución y finalmente a las consecuencias sociales, pudiendo así establecer una periodización más exacta y pudiendo así lograr una alerta temprana de estos procesos. Una vez establecidos estos preceptos sobre la práctica social del genocidio es posible obtener algunas posturas sociológicas sobre este fenómeno. Para 1975 Vahakn Dadrian definiría al genocidio como:

[14]

Para la sociología algunas de las causas de este fenómenos incluyen la poca valoración de los valores humanitarios, prejuicios colectivos, etnocentrismo, fanatismo, odio y xenofobia.[15]

El aniquilamiento de masas de población es registrada por diversas crónicas de la antigüedad, siendo este ya un fenómeno antiguo, llevado a cabo por conquistas militares como campañas. Ejemplos de esto son el arrasamiento griego en Troya o la destrucción de Cartago a manos de los romanos en el 146 antes de Cristo.

Para 1492 la expulsión tanto de musulmanes como judíos dentro de los reinos hispánicos de sus aspectos materiales como culturales y el descubrimiento de América el cual conlleva la discusión de humanidad o inhumanidad de las poblaciones indígenas pueden ser consideradas como antecedentes sociales del genocidio moderno.[13]​ Posteriormente el periodo de las colonias europeas dejó una huella demográfica dentro de sus colonias, las cuales fueron consecuencias de la conquista y otras tras la conquista, la tecnología militar era punto clave en la desigualdad de combatientes muertos, ejemplo de esto es la batalla de Omdurman en 1890 donde 10,800 sudaneses murieron frente a sólo 49 bajas ingleses. La estructura económica introducida tras estas campañas también generaron muertes debido a la falta de adaptación por parte de pobladores colonizados. No se plantea este antecedente como un acto de genocidio, pero la atmósfera de indiferencia y el respaldo científico y estatal que respaldaba este tipo de acciones no son ajenas a una forma de ideología con  pretensiones universalistas.[8]

Desde un punto de vista internacional, el genocidio viene regulado por la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948 y el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI) de 1998 (entrada en vigor en 2002).[4][5]​ Junto al genocidio se castigan otros delitos conexos, que son la asociación para cometer genocidio, la instigación directa y pública, la tentativa y la complicidad.

Las personas acusadas de genocidio serán juzgadas, de acuerdo con el artículo 6 de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, en un tribunal competente del territorio donde se cometió el delito. No obstante, ha surgido paralelamente un derecho consuetudinario por el que los tribunales de cualquier Estado podrían juzgar casos de genocidio, aunque fueran cometidos por no nacionales y fuera de su territorio. También la Corte Penal Internacional puede conocer de este delito, siempre y cuando sea competente por haberse reconocido su jurisdicción.

La Convención afirma que es irrelevante que el acusado sea gobernante, funcionario o particular y declara que, a efectos de extradición, no se considerará al genocidio como delito político.

Sin embargo, desde el punto de vista nacional, cada Estado deberá trasponer la tipificación del delito a su propio ordenamiento penal y establecer las penas a aplicar para cada uno de los comportamientos sancionados, de forma que los tribunales nacionales puedan castigar adecuadamente y conforme al principio de legalidad los comportamientos que se ajusten a la tipificación internacional del delito. Nada impide que, en esa trasposición al derecho interno, un Estado amplíe la definición convencional, sea para ampliar el listado de comportamientos sancionables, sea para ampliar el número de grupos que pueden ser víctimas del delito. De esta manera, España modificó el artículo 607 de su Código Penal para incluir también a los grupos determinados "por la discapacidad de sus integrantes" entre quienes pueden ser víctimas de genocidio.[16]​ Los delitos de lesa humanidad están recogidos a continuación en el artículo 607 bis del Código Penal español. Más lejos ha ido Francia al ampliar la tipificación en el artículo 211 de su Código Penal, pues ha añadido una cláusula de cierre que incluye a cualquier otro "grupo determinado a partir de cualquier otro criterio arbitrario".[17]

La prescripción en derecho penal es la institución jurídica por medio de la cual se produce la extinción de la responsabilidad penal, en razón del transcurso del tiempo.

El genocidio es una especie del género crimen contra la humanidad o crimen de lesa humanidad y su imprescriptibilidad se encuentra regulada por Convención sobre la imprescriptibilidad de los crímenes de guerra y de los crímenes de lesa humanidad de 26 de noviembre de 1968.[18]​ En el caso de España, los delitos de lesa humanidad y de genocidio y la mayoría de los delitos cometidos contra las personas y bienes protegidos en caso de conflicto armado (salvo los del artículo 614) no prescriben en ningún caso, es decir, nunca, tal y como establece el artículo 131 n.º 4 del Código Penal.

Se ha debatido mucho sobre el sentido y alcance de la palabra genocidio. No se trata de algo relacionado con la guerra, pues, según Karl von Clausewitz, el fin de la guerra es desarmar al enemigo, no exterminarlo. El genocidio o asesinato en masa también se diferencia del asesinato en serie, que consiste en el asesinato sucesivo y periódico de personas aisladas, mientras que el genocidio es "una negación del derecho de existencia a grupos humanos enteros", de acuerdo con la Asamblea General de Naciones Unidas. El genocidio tiene, en este sentido, un carácter masivo, por lo que con frecuencia necesita de la colaboración efectiva de una estructura social.

Algunas de las críticas al alcance del concepto de genocidio se centran en el hecho de que no se considere como tal más que los actos realizados contra grupos nacionales, étnicos, raciales y religiosos, y no los realizados por otros motivos, como los sociales o políticos. Si bien el borrador inicial de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio contemplaba y extendía la definición de genocidio a estas matanzas, posteriormente se eliminó la referencia ante la necesidad de contar con el apoyo del bloque comunista (representado mayoritariamente por la URSS), que objetó esta acepción. Con la desaparición de la Unión Soviética como nación y la implantación de la democracia en sus naciones, se busca fortalecer la convicción de que no existen razones válidas, ni desde un punto de vista jurídico ni ético, para que las masacres globales cometidas contra colectividades que se identifican por sus ideas políticas no sean incluidas en esta definición.

Esta restricción del concepto, afirman estas voces, puede significar la expiación de gobiernos totalitarios que durante el siglo XX llegaron a matar a más de 100 millones de sus propios ciudadanos. En todo caso, estos actos podrían calificarse como crímenes de lesa humanidad, constitutivos de delito internacional de acuerdo con el artículo 7 del Estatuto de la Corte Penal Internacional.

Se discute si puede definirse como genocidio a:

En 1985, el informe del relator especial para la cuestión del genocidio, Benjamin Whitaker, reconoció la necesidad de que otros grupos (sociales, sexuales, políticos) sean incluidos a través de la ampliación del campo de aplicación de la Convención.

Del 2,5% al ​​9% de la población humana fue asesinada por los mongoles en el siglo XIII. (No incluye a los muertos en la plaga bubónica).[23]

15.000.000 y 20.000.000

Una hambruna natural que causó 4 millones de muertes coincidió con el genocidio.[37]

En general, del 90% al 95% de la población. [50][51]

[52][53][54][55][56][57][58][59][60][61][62]

95% de la población [65][66][67]

El 10%[88]​ a 1/3[89]​ de la población de Argelia murió durante el período

Se estima que solo la población yakuta ha disminuido en un 70 por ciento entre 1642 y 1682 debido a las expediciones de moscovitas.[107]

El 90% de los Kamchadals y la mitad de los Vogules fueron asesinados desde los siglos XVIII al XIX, y el rápido genocidio de la población indígena hizo que se eliminara por completo a grupos étnicos enteros, con unos 12 grupos exterminados que Nikolai Iadrintsev podría nombrar como 1882. Gran parte de la matanza fue provocada por el comercio de pieles.[108]

Más del 90% de las tribus como los Yuki fueron asesinados,[144]​ y los Yahi fueron eliminados por completo.[145]


2017- Actualidad: (9,000 - 13,700)[152]


2017- Actualidad: 43,000[153]

2.000 y 4.000

El Holocausto fue el plan de exterminio masivo y sistemático perpetrado por el régimen nazi contra la población judía durante la Segunda Guerra Mundial, tanto en el territorio alemán como en los países ocupados.

El Holocausto incluyó prácticas como la segregación, anulación de los derechos civiles, confiscación de la propiedad, traslados forzosos, confinamiento en guetos y campos de concentración bajo condiciones de hacinamiento, y finalmente asesinatos sistemáticos que incluyeron campos de exterminio y el envenenamiento en cámaras de gas.

En el Holocausto fueron asesinados unos seis millones de judíos.

Ruanda se localiza en la región de los Grandes Lagos de África. Su población étnica nativa se compone principalmente por una mayoría hutu, pero también conviven tutsis y twas.

Los orígenes del conflicto en Ruanda pueden ser rastreados desde la ocupación colonial belga. Durante la colonia, el gobierno belga estableció un sistema de tarjetas de identificación racial que diferenciaba una etnia de otra, favoreciendo a la etnia tutsi por encima de la mayoría hutu.

A partir de 1950 comenzaron a suceder los primeros roces entre etnias, provocados por el temor de los Tutsis de perder sus privilegios, una vez instaurado el régimen democrático. En 1961, los Hutus ganan por una abrumadora mayoría en las elecciones supervisadas por la ONU. Es así que el 1 de julio de 1962 Ruanda reclama su independencia de Bélgica y su separación de Burundi. Grégoire Kayibanda sube al poder como el primer presidente ruandés elegido democráticamente en 1961 y es derrocado por un golpe de Estado, encabezado por el militar Juvénal Habyarimana, en 1973.

Habyarimana instauró un régimen de partido único, el del Movimiento Revolucionario Nacional para el Desarrollo (MRND), que consolidó las políticas de exclusión étnica y los discursos de odio en contra de la población tutsi, hasta el final de su régimen el 6 de abril de 1994; en el marco de una guerra civil, detonada en 1990, encabezada por el Frente Patriótico Ruandés (FPR).

Tras la firma de los Acuerdos de Arusha, el gobierno de Kayibanda accedió, junto al FPR, al cese de hostilidades. Del mismo modo se compromete a la reintegración política de los refugiados Tutsis, así como a someterse a juicio por genocidio ante el Consejo de Seguridad de la ONU (TPIR). Además, accede a la creación de un Tribunal Penal Internacional para Ruanda para capturar y juzgar a los responsables de las masacres provocadas durante la guerra civil tanto del lado Hutu como del lado Tutsi, creando un gobierno de transición compuesto por ambas etnias. Lamentablemente, estos acuerdos no lograron concretarse debido al asesinato del presidente Habyarimana, que desencadenó el comienzo del genocidio en Ruanda.

Los principales delitos perpetrados durante el genocidio ruandés, que dejó al país con menos del 75% de la población tutsi, se le atribuyen al grupo paramilitar comandado por el MRDN Interahamwe; no obstante también existen casos cometidos por FPR bajo el comando de Paul Kagame, actual presidente de Ruanda.

El genocidio en Ruanda se caracteriza por su notable rapidez. El exterminio abarcó de la noche del 6 de abril de 1994, con el asesinato de Habyarimana, hasta el 18 de julio del mismo año, con la intervención de la milicia tutsi y el alto al fuego general.[182]​ El número de víctimas durante el genocidio oscilan entre 500,000 y 1,000,000. Unas 500 personas fueron sentenciadas a muerte y otras 100,000 continúan en prisión.[183]

Jean Kambanda fue primer ministro durante el gobierno interino, instaurado en Ruanda durante la caída del régimen anterior. Ejerció tanto ‘de hecho’ como ‘de derecho’ la autoridad y el control sobre los miembros todos los niveles gubernamentales.

Distribuyó armas, incitó a cometer masacres y fracasó en su deber de garantizar la seguridad a la población ruandesa. Apoyó la Radio Televisión Libre de las Mil Colinas o RTLM, principal medio de difusión de discursos de odio contra los tutsis y hutus moderados.

Kambanda fue juzgado por su responsabilidad directa en las masacres. Fue encontrado culpable por el TPIR de seis cargos (genocidio, conspiración para cometer genocidio, directa incitación pública para cometer genocidio, complicidad en genocidio, crímenes contra la humanidad: asesinato y exterminio) y sentenciado a cadena perpetua.

La condena de Jean Paul Akayesu constituye un hito mundial al ser considerada la primera condena internacional por genocidio y la primera en reconocer la violencia sexual como acto constitutivo de genocidio. El Tribunal Penal Internacional para Ruanda (TPIR), creado el 8 de noviembre de 1994, en el caso Akayesu, declaró a un acusado culpable de violación por no haber impedido ni detenido una violación en su calidad de oficial, y no por haberla cometido personalmente. El tribunal consideró que la violación constituía tortura y que, dadas las circunstancias, la violación generalizada, como parte de unas "medidas dirigidas a impedir nacimientos dentro del grupo", constituía un acto de genocidio. Por ejemplo, en las sociedades donde la pertenencia a una etnia está determinada por la identidad del padre, violar a una mujer para dejarla embarazada puede impedirle dar a luz a su hijo en el seno de su propio grupo.

Jean Paul Akayesu, antiguo alcalde de la ciudad ruandesa de Taba, fue arrestado en Zambia el 10 de octubre de 1995 y fue transferido a la Unidad de Detención del Tribunal en Arusha el 26 de mayo de 1996. El juicio comenzó en junio de 1997 y el 2 de septiembre de 1998 la Cámara Procesal I lo encontró culpable de genocidio, incitación directa y pública a cometer genocidio y crímenes de lesa humanidad. El 2 de octubre de 1998 fue sentenciado a prisión de por vida. Akayesu cumple condena a cadena perpetua en una prisión de Malí.

Théoneste Bagosora fue encontrado culpable por un tribunal de la ONU y condenado a cadena perpetua. Fue acusado de comandar las tropas y milicias hutu Interahamwe, responsables de la masacre. Además, el tribunal consideró que Bagosora fue "responsable" del asesinato de la primera ministra Agathe Uwilingiyimana y destacados miembros de la oposición, así como de diez soldados belgas.

Aloys Ntabakuze fue comandante de las milicias hutus durante el genocidio. Fue acusado por conspiración para cometer genocidio; delitos de genocidio; complicidad en casos de genocidio. A todo ello se suman casos de homicidio, violación, persecución, exterminio y “actos inhumanos” como crímenes de lesa humanidad. Ntabakuze fue arrestado el 18 de julio de 1997, juzgado el 18 de diciembre y sentenciado a cadena perpetua.

Anatol Nsengiyumva, ostentó el cargo de teniente-coronel durante el genocidio en Ruanda. Comandó operaciones militares en el sector Noroeste de Ruanda, ejerciendo su autoridad sobre el sector que abarca la ciudad de Gisenyi.

Nsengiyumva supervisó el entrenamiento de las milicias Interahambwe, principales perpetradoras del genocidio. Se le acusó de cometer genocidio; así como otros cargos de asesinato, violación, persecución, exterminio y crímenes de lesa humanidad. Fue arrestado el 2 de marzo de 1996 en Camerún y juzgado por el TIPR, el 18 de diciembre del 2008. Fue encontrado culpable y sentenciado a cadena perpetua.

Gratien Kabiligi fue un jefe militar, responsable de planificar, coordinar y ejecutar las operaciones militares durante el genocidio en Ruanda. Kabiligi fue acusado de conspirar para cometer genocidio, crímenes de genocidio y crímenes de lesa humanidad.Fue arrestado en Kenia en julio de 1997. Gratien Kabiligi fue puesto en libertad al ser declarado como no culpable por un juzgado militar.

Durante el conflicto, Simon Bikindi fue un conocido cantautor, así como el principal oficial en el Ministerio del deporte y la juventud y miembro activo del partido MRND.

Las canciones de Bikindi tuvieron una parte crucial en la perpetración del genocidio en Ruanda al incitar al odio hacia la etnia tutsi. Fue responsable de causar serios daños físicos y mentales a los miembros de la población tutsi, llegando inclusive a participar en el entrenamiento militar de las milicias Interhambwe.

Simon Bikindi fue arrestado en los Países Bajos en el 2001 y trasladado a la sede del TIPR para ser juzgado en Arusha el 2002. Fue encontrado fue acusado de incitar directamente a cometer crímenes de genocidio, por lo que fue condenado a 15 años de prisión.

En Guatemala, la desigualdad económica y política llevó a la población civil a manifestarse en protestas contra el régimen que consideraban opresivo.[184]​ En 1960 comenzó lo que se conoce como la Guerra Civil de Guatemala, en la que se enfrentaron la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca y las Fuerzas Armadas de Guatemala hasta el año de 1966.

En 1980 el Ejército de Guatemala llevó a cabo la Operación Sofía,[185]​ una serie de acciones que tenían el objetivo de crear una política de tierra arrasada en ciertas comunidades mayas para eliminar la resistencia de guerrilla. Así mismo, los documentos registran otros ataques militares contra poblaciones indígenas de Guatemala.[186]​ Los registros demuestran que esta operación fue parte de la estrategia del presidente de facto de Guatemala, Efraín Ríos Montt, bajo el mando y control de altos oficiales militares del país, lo cual incluye al entonces Viceministro de la Defensa, Mejía Víctores. Durante tres años, las acciones de esta operación resultaron en la destrucción de más de 600 poblados, con más de 50 000 personas desaparecidas y 1,5 millones más desplazadas.[184]

En 1999 se hizo pública una bitácora en la que se anotaban los detalles de las desapariciones forzadas de 183 personas. El documento fue contrabandeado de los archivos de Inteligencia de las Fuerzas Armadas de Guatemala .[187]​ Esta bitácora ya fue usada por las familias de algunos desaparecidos para iniciar acción legal en la Corte Interamericana de Derechos Humanos.[188]

El 10 de mayo de 2013, la justicia Guatemalteca condenó a 80 años de prisión al exjefe de Estado General José Efraín Ríos Montt por el delito de genocidio, al encontrársele culpable de dicho delito y de cometer crímenes de lesa humanidad en contra de la población maya ixil en Guatemala entre otras poblaciones.[189][190][191]

Durante el gobierno de Ríos Montt (1982-1983) se desarrolló una de las épocas más violentas del enfrentamiento armado interno en Guatemala (1960-1996), la política contrainsurgente implementada por el Estado, contemplaba el ataque sistemático contra población civil indígena por considerar que eran o podían ser una fuente de apoyo a los movimientos guerrilleros de la región. El 28 de enero de 2013, Miguel Ángel Gálvez (juez primero B de mayor riesgo) dio apertura de juicio contra José Efraín Ríos Montt y José Mauricio Rodríguez Sánchez, por los delitos de genocidio y crímenes de lesa humanidad. En marzo de 2013 consigue un amparo provisional del juicio. El 19 de marzo de 2013, una juez abrió formalmente juicio contra el octogenario exdictador, acusándolo de genocidio contra indígenas durante su régimen (1982-1983), delito por el cual puede ser condenado a medio siglo de reclusión.

El Tribunal Primero A de Mayor Riesgo lo sentenció a un total de 80 años de cárcel inconmutables, 50 años por el crimen de genocidio y 30 años por delitos contra los deberes de la humanidad.[192]

Resalta la importancia de la sentencia por convertir a Ríos Montt en el primer gobernante latinoamericano en ser condenado por ese delito, además de convertirse en el primer caso en que dicha condena la realiza un Tribunal propio del país en el que se cometieron los hechos de genocidio.[190]

También hay que señalar, que resalta la controversia, porque según las opiniones de diferentes juristas, durante el proceso se violentó de diferentes formas la presunción de inocencia de los imputados, y se han cometido otras irregularidades. Además, entre diferentes intelectuales de la sociedad civil, quienes expresan su rechazo a los crímenes cometidos tanto por militares como guerrilleros, cuestionan si realmente se trata de genocidio o crímenes de guerra.[193]

El 20 de mayo de 2013 la Corte Constitucional de la República de Guatemala, por el voto favorable de tres de los cinco magistrados, ha anulado la sentencia tras analizar una recusación planteada por los abogados defensores, que alegan que el exdictador se quedó sin defensa porque el día 19 de abril su abogado fue expulsado brevemente de la corte después de haber acusado al tribunal de parcialidad. Queda por tanto sin efecto la sentencia que condenaba a 80 años de prisión al exdictador Efraín Ríos Montt por genocidio y crímenes contra la humanidad -muerte de 1771 indígenas ixiles entre 1982 y 1983. Durante la guerra civil murieron o desaparecieron 200.000 personas, la mayoría indígenas y civiles, y miles de mujeres fueron víctimas de violencia sexual. Según estableció la propia ONU, el 93% de aquellos crímenes fueron perpetrados por militares y paramilitares.[194]​ El general deberá enfrentarse a un nuevo juicio.[195]

El 1 de abril de 2018 el General Efraín Rios Montt fallece por una falla cardiaca en su casa de habitación en donde se encontraba bajo arresto domiciliario.

Darfur es una localidad situada al occidente de Sudán, el tercer país más grande de África. De los 26 millones de habitantes estimados en el país, aproximadamente una tercera parte vive en zonas urbanas, más del 50% en zonas rurales y un 7% es nómada. La religión que predomina es el islam en el norte y el cristianismo en el sur. Aunque la lengua predominante es el árabe, hay alrededor de 130 idiomas dentro del país. La economía del país está dedicada a la agricultura, ganadería y a la explotación petrolera, razón por las que mantiene relaciones comerciales con varios países.[196]


Aunque el inicio del conflicto de Darfur se sitúa en el 2003, existen varios acontecimientos de inestabilidad y violencia que anteceden al conflicto, como acuerdos de paz que no se respetaban, golpes de estado o la guerra civil, la cual ha dejado dos millones de muertos entre 1983 y 2005.

En el 2003, grupos de rebeldes se levantaron en armas contra el gobierno de Sudán, el cual respondió con ataque hacia la población civil, provocando la muerte de 300 mil personas y provocando el desplazamiento de tres millones. La manera en la que el gobierno sudanés efectúa estos ataques es a través de milicias árabes de mercenarios conocido como Janjaweed o Yanyauid. Algunos de los crímenes que se adjudican a los Jannjaweed son muerte, desplazamiento de población, destrucción de pueblos, incendio de tierras, detenciones arbitrarias, violaciones, y tortura.[197]

A pesar de que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha determinado la colaboración del gobierno sudanés con los Janjaweed, este ha negado públicamente su apoyo, dificulta la investigación sobre los mismos y rechaza o aminora las atrocidades que realizan.

Por ello, varias organizaciones no gubernamentales manifestaron su apoyo a la población de Darfur, por medio de ayuda, promoción de los derechos humanos y asistencia humanitaria. Por ello, en el 2006 el gobierno de Sudán y fuerzas rebeldes firmaron un acuerdo de paz, el cual no se respetó ya que los crímenes y la violencia han continuado, e incluso se ha expandido más allá de Sudán.[198]

La República Federal Socialista de Yugoslavia existió desde 1963 hasta 1992, se conformaba por seis repúblicas: Bosnia-Herzegovina, Croacia, Eslovenia, Macedonia, Montenegro y Serbia, además de dos regiones autónomas que son Kosovo y Voivodina, de tradición húngara.

En 1980 muere Josip Broz “Tito”, líder que mantuvo unificada la república por varias décadas. Cuando se avecinaba la caída del bloque comunista y se presentaron dificultades económicas, surgieron diversos movimientos separatistas y nacionalistas que provocaron la desintegración de Yugoslavia.

El término genocidio en Bosnia se refiere al genocidio cometido por las fuerzas serbio-bosnias en Srebrenica en 1995, o a la limpieza étnica que ocurrió en 1992-1995 durante la guerra de Bosnia.

La masacre de Srebrenica fue un conflicto provocado tras la era postsoviética por la desintegración de Yugoslavia y derivado de la independencia de Croacia y Eslovenia en 1991. Debido a la inestabilidad política y por cuestiones tanto nacionalistas como religiosas, los líderes Slobodan Milošević y Radovan Karadžić tenían como objetivo agrupar a los ciudadanos serbios, distribuidos en Yugoslavia para que vivieran en un mismo país.

El consejo de seguridad de la ONU en 1993 creó el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia, para poder enjuiciar e investigar los crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra y genocidio.

El 28 de agosto de 1995, fue lanzado un proyectil por las fuerzas serbo-bosnias, contra un mercado de Sarajevo, matando a civiles, debido a esto la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte), lanzó durante dos semanas una campaña aérea contra serbo-bosnios; las autoridades serbo-bosnias eran conscientes de que perdían territorio y por ello asistieron a las conversaciones de paz en Dayton Ohio en Estados Unidos.[cita requerida]

El 14 de diciembre de 1995 se firmó en París, Francia un acuerdo de paz entre Milošević, presidente de Serbia, Alija Izetbegović, presidente de Bosnia-Herzegovina, y Franjo Tuđman, presidente de Croacia, donde se estipulaba cese al fuego duradero.

Debido a los testimonios el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia dictó encontrar y capturar a Ratko Mladić por haber cometido crímenes de guerra y genocidio, por el asedio a Sarajevo, en el cual murieron más de 10 000 personas, y por la masacre de Srebrenica, en la que fallecieron más de 7 000 hombres y niños bosníacos, que es el mayor caso de asesinato en masa realizado en Europa después de la Segunda Guerra Mundial. fue detenido el 21 de julio de 2008 en Belgrado y ahí vivió protegido por Slobodan Milošević y fue hasta el 26 de mayo de 2011, que, Boris Tadić , el presidente de Serbia, anunció la captura de Mladić y su proceso de extradición a La Haya.

De igual modo fue acusado Radovan Karadžić, como autor intelectual de la masacre.

Radovan Karadžić nació el 15 de febrero de 1948 en Vlasenica, Bosnia y Herzegovina (Yugoslavia). Fue Jefe de Personal y Comandante Adjunto del Cuerpo del Drina del Ejército de la República Srpska (VRS) (ejército serbio de Bosnia) de octubre de 1994 hasta el 12 de julio de 1995. Fue condenado en 2016 a 40 años de cárcel por el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) de La Haya.

El 20 de marzo de 2019 Radovan Karadžić fue condenado a cadena perpetua en apelación.[200]

Franjo Tuđman (también escrito Tudjman) fue historiador, escritor y político croata. Se convirtió en el primer presidente del país tras su independencia en 1991. Defendía y apoyaba posturas nacionalistas croatas tras la muerte de Tito en 1980. Lideró el partido Croata llamado Hrvatska Demokratska Zajednica - HDZ en la década de los 90. Es acusado de haber negociado con Milosevic, a través del Acuerdo de Karađorđevo, la división de Bosnia-Herzegovina entre Croacia y Serbia. Muere de cáncer en 1999.

Radislav Krstić fue Jefe de Personal y Comandante Adjunto del Cuerpo del Drina del Ejército de la República Srpska (VRS), Krstić fue acusado de crímenes de guerra por el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia en La Haya en 1998, por la matanza de 8.100 hombres y niños bosnios el 11 de julio de 1995, en la masacre de Srebrenica; La corte de Apelaciones del tribunal confirmó la acusación como ayudante y colaborador en dicho delito, condenándolo a 35 años de prisión.

Slobodan Milošević ocupó la presidencia de Yugoslavia (RFSY) y Serbia de 1989 a 1997 y de Yugoslavia desde 1997 hasta el año 2000. Fue detenido y acusado de crímenes de guerra, contra la humanidad y genocidio. Murió en la celda del centro de detención de La Haya.

Ratko Mladić nació el 12 de marzo de 1943 en Kalinovik (actual Bosnia y Herzegovina). Fue jefe de Estado Mayor del Ejército de la República Srpska (VRS) entre 1992 y 1995. Durante la Guerra de Bosnia. Fue acusado de genocidio, Persecución, exterminio y asesinato, deportación, actos inhumanos y toma de rehenes. Fue condenado en 2017 a cadena perpetua por el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) de La Haya.

La Unión Democrática Croata (en croata, Hrvatska demokratska zajednica, HDZ) fue fundada el 17 de junio de 1989 por disidentes nacionalistas croatas encabezados por Franjo Tuđman, es el principal partido político de centroderecha de Croacia y está asociado al Partido Popular Europeo.

Conocido como Holocausto Armenio, fue el exterminio y deportación forzada de un número indeterminado de personas, alrededor de dos millones armenios, por el gobierno de los Jóvenes Turcos en el Imperio otomano, desde 1915 hasta 1923.

Está caracterizado por la utilización de marchas forzadas a deportados en condiciones extremas y en la brutalidad de las masacres. Generalmente es considerado el primer genocidio moderno, las deportaciones eran conocidas como caravanas de la muerte.

Durante más de 600 años el Imperio Otomano dominó gran parte de un territorio en el cual convivieron de manera armoniosa diversas comunidades, cristianas, musulmanas, judías y otros grupos étnicos y religiosos; a finales del siglo XIX empezaron una lucha para independizarse, iniciando el siglo XX tomó el poder el movimiento llamado Unión y Progreso, conocido como Jóvenes Turcos, que era un partido político progresista y nacionalista en contra de la monarquía. Al iniciar la primera guerra mundial en 1914 Rusia ataca al imperio Otomano, contando con un apoyo mínimo de la población Armenia. Los armenios realizaron un levantamiento importante en la ciudad de Van, por ende el 24 de abril de 1915 el gobierno detuvo a varios líderes armenios, y tiempo después el gobierno Otomano ordenó la deportación masiva de armenios, argumentando que eran un peligro para el imperio.

Al término de la primera guerra mundial, el Imperio Otomano y las potencias aliadas formaron el tratado de Sevres, en el cual se desintegraba el Imperio Otomano y Armenia conseguía su independencia. El gobierno Otomano estableció un tribunal en Constantinopla (Estambul), que enjuició y condenó a diferentes oficiales por haber atentado en contra de la humanidad y la civilización; Los Aliados como los Británicos continuaron los juicios en Malta, y fue en 1921 cuando se negoció la entrega de prisioneros y el final de los juicios

Turquía fue fundada en 1923 y desde entonces niega el genocidio, argumentando que los asesinatos no fueron planeados ni formaron parte de una política de exterminio, y que la mayoría de los muertos se debieron a la guerra.

Cada 24 de abril, los armenios conmemoran los crímenes ocurridos durante la primera guerra mundial.

En octubre de 2009, Turquía y Armenia acordaron normalizar sus relaciones y la creación de historiadores independientes para investigar lo ocurridos durante la primera guerra mundial.

Ismail Enver (1881-1922), conocido como Enver Pachá o Enver Bey por los europeos de su época, fue un oficial otomano y líder de la Revolución de los Jóvenes Turcos. Durante su mandato ocurrió la Primera Guerra Balcánica y la Primera Guerra Mundial, se le conocía en el Imperio otomano como Hürriyet Kahramanı, "El Héroe de la Libertad".

El Comité de Unión y Progreso (CUP), en abril de 1912 conocido como los Jóvenes Turcos, consiguió una victoria en las elecciones, pero la pérdida de Libia y el Dodecaneso tras la Guerra Ítalo-Turca de ese año desapareció el apoyo al partido que este se vio forzado a consolidar un gobierno de coalición conocido como la Unión Liberal.

Mehmet Talat Paşa, (1872-1921) fue parte del movimiento de los Jóvenes Turcos, estadista, gran visir (1917) y un dirigente principal del Imperio otomano entre 1913 y 1918.

Fue exiliado a Berlín, junto con Ismail Enver Paşa y Ahmed Cemal Paşa. Fue asesinado el 15 de marzo de 1921 por un armenio llamado Soghomon Tehlirian, que lo acusaba de ordenar la masacre de su aldea; Tehlirian fue arrestado, juzgado y absuelto por la justicia alemana.

Ahmed Cemal (1872-1922) fue uno de los tres pachás que detentaron el poder en el Imperio otomano durante la Primera Guerra Mundial.

Ahmed Cemal fue acusado de persecución contra súbditos árabes del Imperio Otomano y condenado a muerte por un tribunal militar in absentia, huyó del país , no regresó a Turquía. Tras una breve estancia en Suiza fue a Asia Central, donde trabajó en la modernización del ejército de Afganistán, y luego al Cáucaso, donde trató de ayudar a los pueblos no-rusos que luchaban por la creación de sus propios estados nacionales independientes y se resistían a ser parte de la Unión Soviética. Fue asesinado en Tiflis (Georgia) el 21 de julio de 1922 junto a su secretario por el armenio Stepan Dzaghigian, que le consideraba responsable del genocidio de su pueblo. Su cuerpo fue trasladado a Erzurum, al oeste de Turquía y sepultado.

La historia de Camboya ha estado ligada a los factores externos de vecinos, colonialismo europeo, Guerra Mundial y Guerra Fría. Hacia el siglo IX se fundó el imperio jemer uniendo diversas ciudades, su decadencia resultó influyente en los líderes camboyanos de la década de 1970. Parte de la decadencia del poder de Camboya fueron los repetidos ataques por parte de sus vecinos, Vietnam y Tailandia hasta 1863 cuando Francia conquistó gran parte de la península indochina estableciendo un protectorado a Camboya pero dividiendo en regiones el territorio sin respetar las antiguas divisiones étnicas, generando así un conflicto de incomprensión de costumbres entre etnias así como una desigualdad educativa en la región. Tras los conflictos de la Segunda Guerra Mundial en la región, el Vietminh aumentó su poder logrando independizar a toda la región para 1954, siendo Vietnam un nuevo escenario para la Guerra Fría.

Durante los años de 1954 a 1970 el primer ministro y príncipe de Camboya, Norodom Sihanouk, hizo todo lo posible para mantenerse ajeno a los conflictos ideológicos que rodeaban a la nación pero Vietnam del Norte invadió parte de Laos y Camboya en el establecimiento de un camino de suplementos para la guerrilla del Vietcong, por lo que el 30 de abril de 1970 Nixon ordenó bombardear el territorio de Camboya, volviéndose este un punto estratégico en el conflicto. El príncipe continuó lidiando tanto contra los conflictos externos como los internos, siendo estos las guerrillas comunistas Jemer Rojo. En 1970 Lon Nol organizó un golpe de Estado apoyado por Estados Unidos. Este gobierno resultó impopular volviendo al Jemer Rojo una opción de combate en contra del recién instaurado gobierno. Ambos bandos, Jemer y el gobierno golpista de Lon Nol comenzaron a ejecutar y aislar a los vietnamitas del territorio debido a un miedo de volver a caer bajo el dominio vietnamita. Tras la derrota de Estados Unidos en la región, Phnom Penh comenzó un régimen que duró 3 años y nueve meses.



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