x
1

Tordesillas



Vista de la localidad

Tordesillas es un municipio y localidad española de la provincia de Valladolid, en la comunidad autónoma de Castilla y León. La localidad está situada a 704 m sobre el nivel del mar y a 28 km al suroeste de la capital provincial. La población municipal asciende a 8,745[1]​ habitantes. Ostenta los títulos de «Muy ilustre, antigua, coronada, leal y nobilísima villa».[2][3]

No se sabe a ciencia cierta cuál es el origen de Tordesillas. En sus alrededores se han encontrado asentamientos que datan de la segunda edad del hierro. Es probable que en sus cuevas se asentaran tribus íberas y celtas en los siglos V y III a.C.

Se encontraba en territorio Vacceo y por ello algunos autores creen que es la ciudad de Sarabis, mientras que otros defienden que es «la Acontia».[cita requerida]

El nombre de Tordesillas ha dado lugar a animados debates en torno a su etimología, se han dado tres orígenes a la palabra según las opiniones más usuales.

Unos dicen que dataría de época romana y hablan del procónsul romano Quinto Cecilio Metelo como posible fundador de la ciudad hacia el año 83 a. C. el cual podría haber mandado construir una torre para honrar al dictador romano Lucio Cornelio Sila. Esta torre podría ser la vulgarmente conocida con el nombre de «Torreón de las Acercas» o «Torre de Sila». De ser así habría constituido la construcción más antigua de Tordesillas, fechada hacia el año 63 a. C., derivando el nombre de Tordesillas de Turris-Syllae que significa fortaleza de Sila a Turris-Sylana, aunque algunos autores opinan que este torreón no sería más que uno de los cubos de la antigua muralla que rodeaba Tordesillas, y de la cual apenas quedan unos retazos.[cita requerida]

Otra versión dice que procedería de la época de la dominación árabe y que derivaría de Thor Shilah, es decir, fortaleza de los Shilanes, tribus árabes asentadas en la península en el siglo VIII.[cita requerida]

Sin embargo, la opinión más aceptada es la que sitúa el origen de Tordesillas en la Edad Media cuando aparece por primera vez como «Autero de Sellas» en un documento del año 909 de una permuta realizada por el rey Alfonso III con Sarraceno, Falcón y Dulquito de la villa de Alkamín «de termino de Autero de Sellas usque in ualle de Cannas» por San Justo y San Pastor en la vega del Cea. Desde ese año viene nombrada de tal forma así como «Oterdesiellas» y «Otordesillas».[4]

El diseño del escudo heráldico que representa al municipio, aprobado el 02 de julio de 1986, se define por el siguiente blasón:


El término municipal se extiende en un terreno llano caracterizado por la vega del río Duero, que atraviesa el municipio de este a oeste, recibiendo las aguas del río Zapardiel. Es la población más importante de la comarca de la Tierra del Vino vallisoletana. El pueblo se sitúa a 30 kilómetros de la capital provincial y supone un importante cruce de caminos entre la Autovía del Noroeste, la Autovía de Castilla (A-62) y la Autovía del Duero (A-11), siendo un punto de encuentro entre varias ciudades castellanas (Valladolid, Zamora y Salamanca). Se alza a una altura de 701 metros sobre el nivel del mar.

En origen fue un alto escarpe fortificado que servía de vigilancia a los campos yermos de alrededor que constituían parte de la Extremadura castellana. Había otros puntos en igual altura que servían también de vigilancia: Zamora, Toro y Simancas.

En el siglo IX, García, el hijo mayor de Alfonso III, continuó la labor de repoblación de estas tierras desde León a través de Tierra de Campos y Montes Torozos. Ocupó el Otero que más tarde sería Tordesillas y desde allí dirigió y centralizó la repoblación con mozárabes y con gentes llegadas desde Asturias y León. De esta manera puede decirse que el nacimiento de Tordesillas fue de origen asturleonés.

Con la llegada de Almanzor por estas tierras hubo un gran retroceso y despoblación hasta que posteriormente, ya en el siglo XI, empezó una lenta recuperación al frente del conde castellano Sancho García. Los documentos de esta época la nombran como Oterdesillas. En el siglo XII pertenecía al obispado de Palencia cuyos obispos tenían palacios dentro de los muros de esta plaza fuerte.

Durante la Edad Media estaba integrada en la Merindad del Infantazgo de Valladolid (en castellano antiguo citada como: Meryndat del Infantadgo de Ualladolid) una división administrativa de la Corona de Castilla, cuya descripción figura en el libro Becerro de las Behetrías de Castilla,[6]​ redactado por las Cortes de Valladolid de 1351, cuando el estamento de los hidalgos solicitó al rey Pedro I la desaparición de las behetrías mediante su conversión en tierras solariegas.

Tordesillas fue señorío de varias reinas y amantes reales. La primera fue Leonor de Guzmán, amante del rey Alfonso XI. Después Pedro I entregó la villa a su madre, la reina María de Portugal y en 1354 a su amante, María de Padilla. Después de la muerte del rey Pedro, la villa pasó a la esposa de Enrique II, Juana Manuel, posteriormente a la reina Leonor de Aragón, la primera esposa de Juan I, y más tarde a su segunda mujer, la infanta portuguesa, Beatriz de Portugal quien poseyó la villa hasta 1385 cuando su marido la reincorporó a la corona y donó Béjar a su esposa en compensación.[7]

Juana I de Castilla, conocida como Juana la Loca, fue recluida en Tordesillas en 1509, permaneciendo allí hasta su muerte en 1555.

Entre 1981 y 1983 albergó de facto la capitalidad del Ente Preautonómico de Castilla y León.

Tordesillas tiene un clima Csb[8]​ (templado con verano seco y templado) en la transición a un clima Csa según la clasificación climática de Köppen.


Conserva todavía algunos vestigios de muralla de piedra y ladrillo que rodeaba esta población. Tiene un puente medieval, en piedra de sillería con diez ojos de arco apuntado y tajamares en los pilares. En su origen este puente tenía un castillo de defensa construido a un tercio de la entrada. El entramado urbano se organiza a partir de dos calles perpendiculares que terminan (o empiezan) en la plaza Mayor, siguiendo el esquema de los campamentos romanos.

Su estructura actual data del siglo XVII. Es un perfecto cuadrado al que acceden las entradas de cuatro calles. Está toda ella porticada y las casas de dos pisos de altura tienen abajo los locales de las tiendas. Las fachadas presentan grandes ventanales y balcones, diseñados especialmente para presenciar desde ellos las fiestas y los espectáculos. Es una típica plaza castellana donde se encuentra el Ayuntamiento.

Sobre el origen del puente actual no existe referencia alguna, ni fecha, ni trazas, ni autores. El apuntamiento de sus arcos nos indican su origen medieval. Es una gran obra de sillería, tiene diez ojos, y entre los arcos lleva tajamares de planta triangular. En el siglo X se sabe que había un puente, pero el edificio actual tiene sus orígenes en una profunda remodelación del siglo XV. La fuerza de la corriente obligó a su consolidación en los siglos XVI y XVIII. La villa y su puente eran paso obligado de caminos que unían el noroeste de la Península con el centro, facilitando el cruce por el ancho y caudaloso río.

Rodeaba toda la villa, y tenía un carácter fiscal y militar. Estaba construida en piedra, ladrillo y tapial. Sólo se conserva en la parte occidental, una torre llamada "Torre de Sila", en la que se abre un portillo en arco apuntado, que delata su origen medieval. También quedan lienzos en el este, y en el oeste totalmente reconstruidos. La muralla contaba con cuatro puertas principales, que coinciden con los cuatro puntos cardinales. Al sur, la Puerta del Puente, al este, la puerta de Valladolid o puerta de la Villa, al norte, la Puerta del Mercado, y en el oeste la Puerta Nueva.

Está edificado sobre el antiguo palacio mudéjar llamado «Pelea de Benimerín» (que a su vez se edificó sobre otro árabe), mandado construir en 1340 por Alfonso XI de Castilla después de su triunfo en la Batalla del Salado, financiado con el botín sacado en dicha batalla. De esta manera conmemoró la victoria sobre los benimerines africanos que habían llegado a Granada requeridos por Mohamed I, vasallo de Castilla. Su hijo Pedro I el Cruel lo arregló y se lo cedió en 1363 a sus hijas Beatriz e Isabel para que lo transformaran en un convento.

Iglesia-museo, donde están recogidas y expuestas una serie de piezas artísticas de la propia iglesia y de otras varias de la villa, entre las que destaca la tumba de los Alderete. El edificio es una iglesia del siglo X y XVII, comenzada a mediados del XVI y finalizada por Gil de Reynaltos en 1644. Sus naves están cubiertas de bóvedas de crucería estrelladas y nervaduras que descansan sobre ménsulas en forma de ángeles. Lo más destacable es la capilla de los Alderete que posee una balaustrada con pináculos de estilo gótico flamígero.

Declarada Bien de Interés Cultural el 7 de diciembre de 1983. Su estructura es gótica, pero a finales del siglo XVI se replantea en estilo clasicista emanado de El Escorial. Por tanto, la cabecera y dos primeros cuerpos de la torre son de estilo gótico, y el resto de estilo escurialense, llegando sus modificaciones hasta el siglo XVIII. Es la iglesia más grande de la villa, construida en piedra y ladrillo. Tiene una sola nave, dividida en cuatro tramos sobre arcos fajones y pilastras toscanas que se cubre con bóveda de cañón con lunetos decorada con yeserías clasicistas. Cuenta con tres portadas. La torre, de base cuadrada, constituye el punto vigía de Tordesillas debido a su gran altura.Se construyó entre los siglos XVI y XVIII con base gótica y evolución clásica. gótica. Tiene un valioso retablo mayor trazado por los madrileños Pedro y Juan de la Torre, en 1655 y entallo por José de Arroyo. Preside en el centro la talla de la Asunción, con camarín al que se puede acceder, posible obra de Juan Rodríguez. Tiene además varios lienzos, algunos firmados. Cuenta la iglesia con un buen órgano barroco. El órgano es del siglo XVIII.

Iglesia gótica de siglo XVI con planta rectangular de tres naves conformadas por grandes columnas romboidales. El edificio está ehecho en sillería menos el segundo cuerpo de la torre que está realizado en ladrillo. Lo más importante es la capilla de los Gaitán, con una cúpula linterna y con cubierta de pizarra, a la moda madrileña. Su retablo tiene columnas salomónicas y lo preside la imagen de la Virgen del Carmen, de la escuela de Gregorio Fernández.

Cuenta con una talla importante la Inmaculada, de escuela granadina, seguramente de un seguidor de Alonso Cano.

Testimonio de la actividad cortesana que dominó la villa desde tiempos medievales, son sus casas y palacios, vestigios de su esplendor pasado. Se encuentran situadas a los largo de las cuatro calles que parten de la Plaza Mayor, y la mayoría datan del siglo XVI, momento de mayor auge de la villa. Son edificios generalmente de dos plantas. Piso inferior de piedra de sillería, y pisos superiores con ladrillo o tapial, rematados por un alero de madera y entradas con arcos de medio punto de grandes dovelas. Destacan: Una casa situada en la Plaza de Roma, junto a la iglesia de San Pedro. Destacan sus rejas del siglo XVI. El Palacio fortificado de los Alderete, que es una casa situada en la calle San Antolín, toda de piedra con aspecto de fortaleza por sus almenas. Perteneció a la poderosa familia Alderete (Pedro González de Alderete fue regidor de la villa en el siglo XV); situadas junto a la Iglesia de San Antolín, y mirando hacia el río están las Casas del Tratado, llamadas así, porque en ellas tuvieron lugar las negociaciones y firma del Tratado de Tordesillas en 1494.

Construcción declarada Bien de Interés Cultural el 13 de junio de 1996.Son dos palacios unidos, donde la tradición sitúa las negociaciones entre Castilla y Portugal, y que concluyeron con la firma del Tratado de Tordesillas el 7 de junio de 1494. El piso bajo está construido con grandes sillares y los dos pisos superiores con ladrillo. Presentan dos momentos de construcción distintos en el tiempo. La casa más antigua es de finales del siglo XV y en ella tuvieron lugar las negociaciones del Tratado de Tordesillas. Sobre su puerta se encuentra el escudo real de los Reyes Católicos, y los escudos heráldicos de los propietarios, Alfonso González de Tordesillas y Leonor de Ulloa. La otra casa es de la segunda mitad del siglo XVII y su gran volumen y nobleza de elementos demuestran que perteneció a una familia ilustre. Fueron restauradas con ocasión de la conmemoración del V Centenario del Tratado de Tordesillas. En la actualidad el edificio se utiliza con fines culturales y turísticos.

Una de las edificaciones más importantes de Tordesillas fue su Palacio Real, sede temporal de las cortes itinerantes de las monarquías castellanas, y especialmente destacable por ser el lugar donde estuvo la reina Juana I de Castilla durante cuarenta y seis años. Convertido el palacio de Alfonso XI y Pedro I en Convento de clarisas, el rey Enrique III decidió construir otro palacio en las proximidades del anterior, asomado hacia el río Duero y con espléndidas vistas. Su perímetro era rectangular, y estaba construido con mampostería y tapial, y con dos pisos de altura. Tenía tres puertas, la principal, al sur mirando al río, otra al oeste, en la calle San Antolín, y la tercera al norte frente al palacio de los Alderete. Tenía también, un corredor exterior que discurría por la fachada sur y más de la mitad de la fachada del oeste, continuando como pasadizo elevado sobre la calle para comunicar con la iglesia de San Antolín. En el centro de la fachada sur, había una torre de planta cuadrada con tres cuerpos de altura y corredor en el último, que se utilizaba para la vigilancia. Las estancias estaban cubiertas por artesonados de madera y sus paredes con ricos tapices. Se disponían en torno a dos patios y una huerta al este. Debido a la mala calidad de los materiales de construcción, precisó de continuas reparaciones. Tras la muerte de la reina doña Juana, el edificio fue abandonado, y a pesar de realizar reparaciones para evitar su estado ruinoso, fue derribado en el año 1773 durante el reinado de Carlos III.

Las fiestas mayores de Tordesillas tienen lugar en el mes de septiembre, aunque los días son variables cada año. Se celebran en honor de Nuestra Señora la Virgen de la Peña, patrona de la Villa y Tierra de Tordesillas, cuya ermita se encuentra al otro lado del río, y a la que se llega en romería con carros y caballos engalanados.

Las celebraciones comienzan el día 8 de septiembre, día de la patrona de la Villa, la Virgen de la Guía.

En la noche del sábado se celebra el «Desfile de faroles», donde participan todas las peñas con sus charangas compitiendo por ver quien lleva el farol más bonito, que será quien se lleve el premio. El desfile recorre toda la villa, una curiosa celebración que tiene su origen en la ronda de la guardia en las antiguas murallas. Los faroles son realizados de manera artesanal, representando en sus imágenes momentos típicos de las fiestas.

El domingo se celebra la festividad de la Virgen de la Peña, día en el que los mozos se dirigen hasta la ermita de la Virgen de la Peña en carrozas decoradas para saber quién ha sido el ganador del concurso de Faroles. El martes tiene lugar el «Torneo del Toro de la Vega», tradición taurina que se lleva celebrando desde la Edad Media. A día de hoy esta actividad, tal y como estaba concebida, era muy controvertida y venía recibiendo fuertes críticas.

Durante el torneo, que se rige por normas propias,[10]​ el toro es soltado en dirección a la vega donde un grupo de lanceros intentaban matar al toro antes de que saliese de los límites marcados, si esto ocurriera el toro sería indultado y conservado para la monta en la ganadería de Tordesillas. Esta tradición es originaria de la Edad Media, cuando era una costumbre que los nobles celebraran los casamientos invitando a la gente de más alta cuna realizando torneos de justas y despeñando a animales (generalmente vacuno) por las lindes del río. Esta tradición se convirtió en costumbre y dio lugar a las fiestas con la suelta de reses en la plaza mayor del pueblo y un torneo entre un caballero montado y la res más brava, yendo este nada más que con una lanza para intentar abatir al animal, origen así del Torneo del Toro de la Vega.

Desde el año 2005, el Partido Animalista Contra el Maltrato Animal (PACMA)[11]​ y otras organizaciones[12]​ se manifiestan contra esta práctica realizando una manifestación dos días antes del torneo.

Otras formaciones, como Unidad Regionalista de Castilla y León (URCL), defendieron el Torneo del Toro de la Vega, y por encima de ello el que fueran únicamente los tordesillanos los que decidieran su permanencia[13][14]

En mayo de 2016 un decreto de la Junta de Castilla y León (el Gobierno de la región) prohibió dar muerte en público a los toros en celebraciones tradicionales populares en toda la comunidad autónoma. El argumento ofrecido fue la adaptación a la sensibilidad imperante en el siglo XXI.

Las procesiones de la Semana Santa tordesillana, surgen al igual que en muchos ámbitos castellanos, en los siglos XVI y XVII. El siglo XVIII es la época de esplendor de las cofradías pero, curiosamente, también fue la de su declive, tan sólo dos han llegado hasta el siglo XX, cuándo, en un nuevo resurgir, se fundan nueve más.

La Semana Santa de Tordesillas, fue declarada de interés turístico regional en el año 1996. Durante estos días las calles se convierten en auténticos museos, y las obras escultóricas de grandes artistas que dormían en sus templos, recuperan vida y se acercan al espectador.

Sus procesiones probablemente ya eran celebradas antes de 1345, puesto que en ese año ya está documentada la Orden del Sepulcro que tenía a su cargo un Cristo Yacente dentro del Sepulcro. En torno a 1400 se menciona la Cofradía de la Vera Cruz. Sin embargo, es a partir de la predicación de San Vicente Ferrer a los judíos de Tordesillas en 1412, cuando surgen lo que conocemos hoy como Cofradías de Semana Santa, encargadas de procesionar imágenes de la pasión, muerte y resurrección de Cristo.

Dentro de las procesiones que diariamente se celebran en Tordesillas, cabe destacar la Procesión del Encuentro Doloroso el miércoles por la noche en la Plaza Mayor y la Procesión de la Pasión de Cristo el Viernes Santo donde se realiza una procesión de un total de catorce pasos acompañados de sus cofradías titulares.

Durante el primer fin de semana de octubre, las calles de Tordesillas vuelven al Medievo.

Estandartes y pendones cuelgan de los balcones del casco histórico de la Villa, músicos, malabaristas, saltimbanquis, comedores de fuego, señores feudales, damas, príncipes y princesas, monjes, labriegos, soldados, brujas, mendigos, trovadores y un sinfín de personajes realizan entretenidos y coloristas pasacalles que recorren el casco histórico. Los tordesillanos participan ataviados con trajes de la época y son muchos los artesanos de toda España que aprovechan este escaparate para la promoción de sus productos.

El mercado medieval de Tordesillas se celebró por primera vez en el año 1994, fecha en la que se conmemoraba el V Centenario del Tratado de Tordesillas. Desde el año 1995 la organización ha corrido a cargo de la Asociación de Empresarios y Profesionales, y año tras año ha ido incrementando el número de personas que lo visitan, convirtiéndose en un hito de la oferta turística y cultural de Castilla y León.

La Sociedad Deportiva Atlético Tordesillas es el club de fútbol de Tordesillas. Fue fundado en 1969 y juega en el Grupo VIII de Tercera División de España. Ha ganado 3 Trofeo Diputación de Valladolid: 2004, 2016 y 2017.

Además de la propia Tordesillas, pertenecen a su municipio las pedanías de Pedroso de la Abadesa, Villamarciel y Villavieja del Cerro.



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Tordesillas (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!