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Linares (Jaén)



(+34) 953 6X XX XX

Linares es un municipio y ciudad española perteneciente a la provincia de Jaén, en la comunidad autónoma de Andalucía. Es el segundo municipio más poblado de la provincia, ya que cuenta con 57 353 habitantes según el padrón municipal del INE de 2020.[5]

Está situada en el noroeste de la provincia de Jaén, entre el sector oriental de Sierra Morena y la parte alta de la depresión del río Guadalquivir, por lo que se pueden apreciar dos zonas bien diferenciadas: la sierra y la campiña. Goza de una situación geográfica privilegiada por ser encrucijada de caminos y por su riqueza agrícola, pecuaria y minera.

Linares es la capital de la comarca de Sierra Morena, ocupando su municipio el 14% de su extensión y sumando el 58% de su población total. Hoy en día, es una ciudad que se caracteriza por una clara vocación al comercio, tras haber desaparecido la totalidad de la industria de extracción minera con el cierre de todas las minas durante el final del siglo XX.

Con casi nueve siglos de historia, el topónimo de «Linares» se registró por primera vez en septiembre de 1155, durante el reinado Alfonso VII.[6]​ El origen del topónimo de esta población podría ser la posible existencia de un templo o altar romano cercano en honor a la Luna, Luni arae.[7]​ En tal caso, si el área o la zona donde se ubica Linares ya tuvo un nombre de ascendencia latina, cuando los musulmanes llegaron a la península ibérica, lo más usual era que estos adaptaran el nombre preexistente a sus modos fonéticos, dando lugar a un vocablo similar o parecido a Linarum.[8]​ No obstante, con mayor certeza la ciudad actual parece deber su nombre a la expresión romance procedente del término latino linum y posteriormente utilizada por los mozárabes como linar para designar los lugares relacionados con el lino, en cuya base y plural descansa la evolución y el eslabón filológico y lingüístico que acabaría otorgando el topónimo «Linares».[9]​ Este origen latino además explicaría la toponimia geográfica de otras poblaciones españolas con el mismo nombre.

Respecto al gentilicio linarense, es el único utilizado, y gramaticalmente posee género común, válido tanto en masculino como en femenino.

Compartiendo el mismo nombre que la «ciudad minera» existen numerosas localidades en el mundo. En España hay varias localidades y parroquias homónimas, aunque de bastante menor población, en Asturias, Cantabria, las provincias de Burgos, Huelva, Salamanca, Segovia y Teruel. En el continente americano, existen localidades homónimas en Chile, Colombia y México.

En campo de gules, un losange de azur, que carga un castillo de oro, abierto, mazonado de sable, sobre tres ondas de azur y plata, y surmontado por una campana cimada de una cruz latina, de plata (u oro). Bordura de plata con la divisa en letras de sable:

El losange se halla acamado a una cruz en aspa o de San Andrés, de oro. Contorno hispano-francés, fileteado de oro. En la rehabilitación de los símbolos linarenses, adoptada en el año 2015 el timbre tradicional, una corona de marqués con un diseño arcaico, fue sustituida por una corona real abierta pero no se introdujo el contorno español, el segundo cambio requerido por la legislación en vigor.[10]

Bandera rectangular vez y media más larga que ancha (del asta al batiente), compuesta por cinco franjas horizontales de colores amarillo, verde, blanco, rojo y azul en orden descendente, todas proporcionadas en la misma anchura y longitud.

El término municipal de Linares abarca una extensión de 197,92 km². La ciudad se encuentra en un pequeño altiplano que desciende desde la zona norte del término municipal, que pertenece a Sierra Morena, hacia el oeste, abriéndose por aquí hacia el valle del Guadalquivir. Su orografía es suave, mostrando una transición entre la sierra al norte y la zona abierta de la campiña en el sur. El punto de mayor elevación del término municipal es el Paño Pico con 552 metros.[11]

Linares se enclava sobre el territorio en que se enlazan geográficamente dos de las unidades morfológicas de rango principal en las que puede subdividirse la península ibérica: la meseta ibérica y la depresión del Guadalquivir. La primera unidad se manifiesta como una antigua penillanura, tallada sobre materiales paleozoicos, graníticos o pizarreños. La segunda unidad corresponde a materiales margoarenosos, que han ido rellenando la depresión del Guadalquivir desde el Neógeno. En estos sedimentos subhorizontales, la erosión ha tallado lomas bajas y redondeadas.[12]

El subsuelo del municipio está constituido por rocas paleozoicas, recubiertas en amplias zonas por sedimentos más recientes. Ambos conjuntos, zócalo paleozoico y recubrimiento poshercínico, difieren mucho en su composición, estructura, reflejo morfológico externo e importancia minera. El zócalo paleozoico de Linares está representado esencialmente por pizarras con intercalaciones de areniscas, granitos y diques intrusivos, así como formaciones metamórficas en el contacto de ambos conjuntos. El recubrimiento posterior lo integran, exclusivamente, sedimentos triásicos y miocenos.

Los ríos Guadiel y Guadalimar, ambos afluentes del Guadalquivir, marcan respectivamente los límites con los términos municipales de Bailén y Guarromán al suroeste, y con los de Ibros y Torreblascopedro al sureste. Asimismo, los ríos Guarrizas y Guadalén, subafluente y afluente respectivamente del Guadalimar, establecen el límite de Linares al este con el municipio de Vilches.

Linares tiene un clima mediterráneo continentalizado con una elevada amplitud térmica, del orden de 20 °C. Los inviernos son frescos, aunque con algunas heladas que en ocasiones han llegado a ser intensas, debido a su distancia del mar. Los veranos son muy calurosos y áridos, con importantes oscilaciones térmicas diarias y temperaturas máximas que suelen sobrepasar los 40 °C en varias ocasiones. Las temperaturas medias oscilan entre los 8 °C del mes de enero y los más de 27 °C de temperatura media del mes de julio. El régimen de lluvias presenta dos estaciones pluviométricas bien diferenciadas, siendo la húmeda de octubre a mayo y la seca de junio a septiembre. El nivel de precipitación media es de alrededor de 500 mm, pudiendo existir grandes oscilaciones de un año a otro debido a la importante irregularidad interanual. El ombroclima es un seco superior, donde las precipitaciones en verano puede ser tan escasas que en los meses de verano este se puede situar en un semiárido, y en invierno o primavera las precipitaciones son tan abundantes que puede pasar a un subhúmedo.

Según la clasificación climática de Köppen, el clima de Linares se encuadra en la variante Csa, clima mediterráneo continentalizado de veranos calurosos y secos e inviernos frescos y moderadamente húmedos. El suelo está cubierto de arbustos y de árboles de verdor permanente o de verdor en verano, y raras veces de bosques, pero frecuentemente con extensos matorrales.

El conjunto de plantas que pueblan el término municipal de Linares se puede distinguir en tres zonas principales: la campiña (70% de la extensión municipal), la dehesa mediterránea (7%), los pastizales (5%), matorral mediterráneo (4%) y los bosques de la ribera (2%).[14]​ La campiña está poblada mayoritariamente por olivar y por herbáceos de secano, rodea al núcleo urbano y se extiende por todo el municipio, aunque su predominancia es más acusada en la mitad sur y gran parte del cuadrante noroeste.

La gran parte de la superficie que ocupan los cultivos está destinada al olivar, que ocupa alrededor del 70% de los terrenos agrícolas. Algo menos del 27% de este terreno está destinado a los cultivos de secano, fundamentalmente, cereales del tipo del trigo, la cebada o la avena, y sólo algo más del 3,5% a los cultivos en regadío, básicamente, algodón y las típicas huertas familiares. En esta unidad, y a pesar de no formar nunca masas importantes, las encinas están presentes de modo testimonial, diseminadas por toda la zona de cultivos, aprovechando fundamentalmente linderos de caminos y bordes de las líneas de ferrocarril.

Las dehesas del término municipal de Linares se localizan, fundamentalmente, en la zona de La Aceitosilla, La Garza, Cañada Incosa y alrededores del Cerro Pelado. Representan aproximadamente el 43% de toda la vegetación autóctona que aún se encuentra presente en el mismo. Estas formaciones vegetales han sido tradicionalmente manejadas para su explotación ganadera, de manera que la cubierta arbustiva existente ha sido completamente eliminada para poder aprovechar los pastos que, naturalmente, sustituyen al matorral cuando este desaparece o para plantar forrajeras para el ganado.

La cubierta arbórea que permanece es monoespecífica, con la encina (Quercus ilex rotundifolia), como único representante del bosque original. Las dehesas de Linares mantienen un buen grado de regeneración del arbolado, observándose muchos ejemplares en distintos estados de desarrollo.

Los pastizales, poco o nada arbolados son frecuentes rodeando los mismos enclaves citados para las dehesas. Constituyen la última etapa serial del bosque de quercíneas primitivo y son pastizales destinados al ganado, con especies vegetales típicas de las familias gramíneas, compuestas y leguminosas.

En la unidad serrana, también se pueden identificar áreas de matorral mediterráneo que se distribuyen entre la zona del Cerro Pelado, el Hoyo de San Bartolomé, El Arenal Blanco y Vadollano. Son formaciones típicas de sustitución del bosque mediterráneo original en las que prácticamente ha desaparecido la cubierta arbórea, o bien etapas evolutivas del pastizal, que una vez que ha sido abandonado como terreno productivo para el ganado ha comenzado a regenerarse con la aparición de especies propias del matorral. Muy probablemente esté más generalizada la regeneración del matorral desde etapas menos desarrolladas ya que la variedad de especies de flora que actualmente conforma estos matorrales es escasa.

Los bosques de ribera son una intrusión del paisaje vegetal de la región climática eurosiberiana en la Iberia mediterránea. La compensación freática permite que especies propias del bosque caducifolio europeo se desarrollen en las cercanías de los cursos de agua de la región climática y biogeográfica mediterránea. En muchos tramos, tanto de los ríos Guadalimar, Guadiel y Guarrizas se mantiene una vegetación densa y variada, típica de los bosques en galería, compuesta principalmente por fresnos (Fraxinus angustifolia), sauces (Salix alba), álamos blancos (Populus alba), eucaliptos (Eucalyptus camaldulensis), alisos (Alnus glutinosa), especie interesante por su distribución tan al sur de Sierra Morena, tarajes, tamujos (Securinega tinctoria), cañas (Arundo donax), etc.

Para empezar a hablar de Linares y su historia, es inevitable remitirse a Cástulo, un importantísmo enclave íbero y posteriormente romano (Kastilo), considerado como «capital» de la antigua Oretania (región que abarcaba no sólo el actual término municipal de Linares sino gran parte del noreste de la provincia y además, zonas de Ciudad Real y Albacete).

En el siglo VI a.C y ya desde entonces, gestionaba la riqueza minera de la zona. Posteriormente, dada su importancia, atrajo al pueblo cartaginés, que había perdido la I Guerra Púnica contra los romanos en Sicilia, y puso sus miras en Iberia (como llamaron ellos a la península), y en concreto en sus ricos yacimientos mineros.

Dentro de la política de interés, concertaron matrimonios mixtos con la población local, siendo el más conocido de ellos el concertado entre la castulonense Himilce y el general Aníbal Barca, líder cartaginés. Tras la muerte de su padre y tío respectivamente, se inició tras el saqueo de Sagunto la II Guerra Púnica contra los romanos. La leyenda cuenta que llevó a su esposa hasta Qart Hadast (actual Cartagena) y se fue a la guerra, aunque se dice que también tuvieron un hijo, Áspar, que falleció. Himilce falleció en Cartagena y sus restos fueron trasladados a Cástulo, donde se le erigió una estatua en su honor (podría ser la que preside una fuente en Baeza, aunque su cabeza no es la original).

Los hermanos Escipión, generales romanos, desembarcaron en la península y rápidamente se dirigieron a la actual Andalucía donde querían vengar la muerte de su padre, saqueando y destruyendo la vecina Illiturgi por no plegarse a su condiciones. Cástulo decidió rendirse dadas las circunstancias, lo cual hizo que se iniciara su período de romanización y esplendor posteriores.

Cástulo no fue ajena al periodo de cristianización del imperio romano, llegando incluso a contar con obispos, que también acudían a concilios durante el periodo de dominación visigoda.

Durante la invasión musulmana, fue conocida como Qastuluna, siendo testigo de un movimiento de resistencia contra el califato, sofocado en la conocida como batalla de Qastuluna, hasta caer en una paulatina decadencia, dado también su abandono como ciudad o asentamiento.

La primera mención a Linares data de 1155 por parte del rey Alfonso VII el emperador. Luego siempre ha sido llamada así. Linares fue reconquistada por Fernando III el Santo el 30 de noviembre de 1227, entregándola a Baeza, de la que dependería administrativa y políticamente hasta su emancipación en el siglo XVI por parte de Felipe II.

A mediados del siglo XIX, con la introducción del maquinismo y el capital extranjero, fue cuando Linares dio el salto, cualitativa y cuantitativamente, más grande de su historia gracias a la actividad minera de extracción del plomo y, en menor medida, plata y cobre. En unas décadas multiplicó su población y obtuvo el título de ciudad, que le otorgó, en 1875, Alfonso XII. El producto de sus entrañas comenzó a cotizar en la bolsa de Londres y la ciudad experimentó una impresionante transformación urbana. Se convirtió en un bullidero de gentes venidas de cualquier parte, con la esperanza de una vida mejor. Vio abrir delegaciones diplomáticas de Reino Unido, Francia, Alemania y Bélgica.

La zona minera de Linares-La Carolina llegó a configurarse a finales del siglo XIX como la primera productora de plomo en todo el mundo, situación que se mantuvo durante alrededor de cuarenta años (entre las décadas de 1880 y 1920).[15]​ Uno de los principales complejos minero-metalúrgicos fue el de la Mina-Fundición de «La Tortilla», que tuvo su apogeo entre 1864 y 1892.

Al calor de este desarrollo industrial y minero, también se convirtió en un nudo de comunicaciones. En Linares llegó a haber operativas hasta cinco estaciones de ferrocarril,[16][17]​ e incluso un servicio de tranvías. En 1866 fue inaugurada al sur del municipio la estación de Baeza-Empalme, construida por la compañía MZA.[18]​ Con los años, Baeza-Empalme se convirtió en uno de los centros ferroviarios más importantes de la red española. A esta se sumó otra estación, construida también por MZA en la zona de Vadollano. En los años que siguieron se inauguraron nuevos recintos ferroviarios: la estación de Almería (1893),[19]​ de la Compañía de los Caminos de Hierro del Sur de España; la estación de Zarzuela, de la Compañía de los Ferrocarriles Andaluces; o la estación de Madrid (1925),[19]​ construida por MZA. Sin embargo, en la actualidad solo se mantiene operativa para viajeros la estación de Linares-Baeza, operada por Renfe.

En una época en que la ciudad superó en población a la capital de la provincia, Jaén, también destacó por tener una intensa actividad periodística. En el primer tercio del siglo XX circularon por Linares varios periódicos, como fue el caso de El Noticiero (1895-1929), Diario Regional (1925-1931), Diario de Linares (1926-1928) o El Día (1929-1932).[20]

A mediados del siglo XX, comenzó una paulatina decadencia de la extracción de plomo, si bien Linares fue reinventándose a nivel industrial y comercial. La actividad minera decayó, hasta el punto de que cerraron todas las minas. En 1959 se inauguró la fábrica azucarera de Azucareras Reunidas de Jaén como parte de la industria azucarera de Andalucía para la elaboración de azúcar a partir de remolacha azucarera.[21]​ Paralelamente se desarrolló una potente industria fabril, de la que Santana Motor fue el buque insignia. Los inicios del siglo XXI trajeron a Linares la diversificación, el declive y el final de Santana. La ciudad se centraba en los servicios como uno de sus principales ejes económicos.

El municipio linarense tiene una superficie de 197,5 km² y cuenta, según el padrón municipal del INE de 2020, con 57 353 habitantes habitantes, de los cuales 28 042 son hombres y 29 311 son mujeres, datos que implican que posea una densidad de población de 295,94 hab./km². Linares fue la ciudad más poblada de la provincia hasta el inicio de la posguerra, momento en que fue superada en población por Jaén, situándose actualmente en el segundo puesto a nivel provincial. Linares continuó creciendo a un ritmo más lento, hasta alcanzar una población estable próxima a los 60 000 habitantes. No obstante, el municipio linarense ha perdido en la última década cerca del 6 % de su población.[23]​ Las principales causas de esta caída son la alta tasa de desempleo que ha soportado Linares desde hace años y la precariedad laboral, además la reducción de la tasa de natalidad, contribuyendo aún más al envejecimiento de la población. Linares se sitúa actualmente en el puesto 28 de la lista de los municipios andaluces más poblados, habiendo sido superado recientemente por Motril.

     Población de derecho según los censos de población del INE.[24]      Población según el padrón municipal de 2019.[25]

Del total de 57 414 personas censadas en 2019, 1434 son de nacionalidad extranjera. Esto equivale a un 2,50 %, claramente inferior a la media nacional de inmigrantes que se sitúa en el 11,4 %. Los inmigrantes proceden de todos los continentes, siendo los de nacionalidades africanas (431), asiáticas (362) y americanas (311), las colonias más numerosas. Las nacionalidades más representativas son la marroquí (336 habitantes), la paquistaní (215), la rumana (173), la china (130) y la colombiana (62).[26]

La administración política de la ciudad se realiza a través de un ayuntamiento de gestión democrática cuyos componentes se eligen cada cuatro años por sufragio universal. El censo electoral está compuesto por todos los residentes empadronados en Linares mayores de 18 años y nacionales de España y de los otros países miembros de la Unión Europea. Según lo dispuesto en la Ley del Régimen Electoral General,[27]​ que establece el número de concejales elegibles en función de la población del municipio, la Corporación Municipal de Linares está formada por 25 concejales.

Desde la reinstauración de la democracia en España, el partido más votado ha sido el Partido Socialista. Tras las elecciones municipales de 1995, la ciudad pasó a ser gobernada por el Partido Popular. No obstante, cuatro años más tarde el Partido Socialista recuperó el gobierno municipal con Juan Fernández Gutiérrez como candidato, que se mantuvo en la alcaldía de Linares durante 20 años desde 1999 hasta el 15 de junio de 2019. Actualmente, el alcalde de Linares es Raúl José Caro-Accino Menéndez, de Ciudadanos, que tras haber quedado en tercera posición en las elecciones y sin mayoría absoluta, consiguió los votos favorables, además de su formación política, del Partido Popular y CILU-Linares, cuyos respectivos líderes ocuparon los cargos de tenientes de alcalde.[28]​ Tras los acontecimientos sucedidos en la ciudad motivados por los efectos de la crisis sanitaria del coronavirus, que han originado el cierre de numerosos comercios, Caro-Accino anunció a finales de enero de 2021 una remodelación de su equipo de gobierno.[29]​ Esta decisión del actual alcalde provocó la renuncia en bloque de los concejales de CILU-Linares de sus delegaciones.

El municipio linarense ha contado desde 1979 con los siguientes alcaldes:

Linares es la capital de su propio partido judicial, del que forman parte además los municipios de Bailén, Jabalquinto y Torreblascopedro. Linares dispone actualmente de dos sedes judiciales de primera instancia e instrucción, que podrían agruparse próximamente en una única sede. [31]

En la ciudad de Linares, tradicionalmente el sector secundario ha tenido un peso importante (hasta los años 60, especialmente debido a las actividades mineras, y más recientemente por la industria automotriz), pero el cierre de diversas empresas del sector industrial ha dejado al sector servicios como el más importante de la ciudad, con diferencia, intensificando asimismo los efectos de la crisis económica, que se manifiestan en unas elevadas tasas de desempleo, que podría alcanzar el 44,5% según algunas fuentes, lo que ha supuesto para Linares ser la ciudad de población superior a 50 000 habitantes con la tasa de paro más elevada de toda España.[32]

Al igual que en la mayor parte de la provincia de Jaén, el olivo constituye el principal cultivo, ya sea destinado a la comercialización de la aceituna, o bien del aceite de oliva.

La principal industria de Linares fue Santana Motor, más que un símbolo de Linares. En su parque empresarial actualmente se está realizando una apuesta de diversificación, destinada a la construcción de aerogeneradores por parte de la empresa Aemsa-Santana y vagones de metro y tranvía por la empresa CAF-Santana.

Actualmente la propiedad del capital social de las empresas del parque de proveedores de Santana es de la Junta de Andalucía. Convirtiéndose en una empresa de capital público gracias a que en 1994 se impidió el cierre ante la posible salida de Suzuki, convirtiéndose esta movilización ciudadana en la más grande de la historia de Linares: 100 días de lucha.

En 2011 y tras la disolución de la compañía Santana Motor, se dio a conocer el plan «Linares Futuro» un plan presentado por los sindicatos donde tienen cabida empresas dedicadas a las energías renovables o a la fabricación de componentes electrónicos.

Linares contaba con la empresa Azucareras Reunidas de Jaén S.A., la cual tras la parada en septiembre de 2006 se convirtió en la accionista principal de Linares Biodiésel Technologies S.A., empresa que centra su actividad en la producción de biodiésel, con una capacidad de producción a partir de 100 000 toneladas a partir del aceite de colza, palma, soja o girasol. Sin embargo, esta última no está teniendo un buen funcionamiento y además se ha encontrado con un mercado paralizado, por lo que a finales de 2009 presentó un ERE que afecta a sus cerca de 30 trabajadores.[33]

Azucareras Reunidas de Jaén S.A., por su parte, continuó en el sector azucarero con una planta de envasado. En diciembre de 2009 anuncia el cierre completo de la fábrica al finalizar el convenio de trabajo de tres años que tenía con los trabajadores.[34]​ El desmantelamiento se llevó a cabo en el primer trimestre de 2010.[35]

Linares es conocida en la provincia como la «ciudad minera» pero, a lo largo de esta última década, el comercio y la industria han tomado mucha importancia. En 2004 ganó el premio nacional al comercio.[36]​ Esto es debido a su potente impulso económico y a su potente centro comercial.

La ciudad de Linares es foco comarcal y provincial en lo que a desarrollo comercial se refiere, destacando el Centro Comercial Abierto (CCA), en el que se integran una gran cantidad de lugares donde comprar[37]​ a lo largo de la ciudad.

Los martes y viernes se celebra el tradicional mercadillo en la prolongación del paseo de Linarejos donde se pueden encontrar una multitud de artículos a precios muy económicos como calzado, ropa, bolsos y complementos de bisutería, cuadros, perfumería, etc.

     Deuda viva del Ayuntamiento de Linares en miles de Euros según datos del Ministerio de Hacienda y Ad. Públicas.[38]

Dada la situación geográfica de Linares, prácticamente a mitad de camino de la más importante vía de comunicación que vertebra el sur peninsular, desde los tiempos más remotos la ciudad ha sido y continúa siendo un lugar estratégico como cruce de importantes vías de comunicación. En particular, destaca su posición como puerta de entrada de la comunidad autónoma andaluza desde la meseta central.

Linares se encuentra desplazada hacia el noroeste respecto al centro geográfico de la provincia y al noreste de la comunidad autónoma. La siguiente tabla muestra las distancias por carretera entre Linares y las localidades más importantes de la provincia, las capitales de provincias andaluzas y algunas del resto de España.[39]

La autovía A-32 comunica Linares al este con Úbeda y al oeste con Bailén. Esta conexión con Bailén enlaza tanto con la autovía A-4 que comunica con el norte de España hacia Madrid y con el oeste de Andalucía hacia Sevilla así como con la A-44 que comunica el sureste de Andalucía hacia Granada.

Las carreteras autonómicas y comarcales comunican Linares con los términos municipales colindantes de menor población como Torreblascopedro, Jabalquinto, Guarromán, Baños de la Encina, La Fernandina y Guadalén.

Además, alrededor de la ciudad pasan la ronda oeste-norte y el cinturón sur. La autovía A-32 comunica Linares con la estación de tren de Estación de Linares-Baeza, a 6,4 km al sureste.

Las carreteras que pasan por Linares o tienen su origen o final próximos la ciudad son las que aparecen en la siguiente tabla.

Linares cuenta en la actualidad con la Estación de Linares-Baeza, cuyo nombre original era Estación de Baeza-Empalme, situada en la pedanía homónima, a pocos kilómetros al sureste del casco urbano de Linares. En el pasado fue un importante nudo ferroviario, actualmente es zona de paso, partida o destino de trenes que la atraviesan diariamente. La estación está comunicada con el casco urbano de la ciudad mediante taxis y autobuses urbanos cada media hora.

Antiguamente la ciudad dispuso de cuatro estaciones de tren dentro del núcleo urbano:

Las tres primeras estaciones eran de vía ancha y la última de vía estrecha.

Actualmente, la Estación de Madrid alberga instalaciones municipales y la Estación de Almería se ha rehabilitado y alberga el área de Urbanismo de Exmo. Ayuntamiento. De la tercera estación y de la última, anexa a esta, no queda rastro alguno. El trazado de las vías férreas ha sido reconvertido en la actualidad en vías verdes para su recorrido a pie o en bicicleta. Desde principios del siglo XX, la ciudad contó con una extensa red de tranvías que conectaba la ciudad con diversas localidades y minas cercanas hasta los años 60.

Está en construcción una línea ferroviaria CAF Santana-Vadollano para dar salida a los trenes de la factoría CAF-Santana.

Linares cuenta con una moderna flota de autobuses urbanos que comunican los distintos barrios periféricos con el centro de la ciudad y la Estación de Linares-Baeza. El servicio de autobús urbano en Linares está gestionado por la empresa Transportes Urbanos de Linares S.L., fundada en 2005, que dispone de una flota de 9 vehículos y una plantilla de 28 trabajadores. Los vehículos están equipados con la última tecnología de explotación de transporte urbano, tales como sistema electrónico multiplex, SAE, canceladoras por tarjeta sin contacto, poste con indicación del tiempo restante para el paso por parada del siguiente autobús, etc. En total son ocho las líneas de trasporte urbano que están implantadas.[40]

Linares contaba en 2008 con una red de 40 taxis conectando toda la ciudad. Los taxis de Linares se caracterizan por ser de color blanco, con la bandera y el escudo de Linares a ambos lados del vehículo. Existen dos compañías de taxistas: Radio Taxi Linares y Teletaxi Provincial.

Linares cuenta con un centro de estudios universitarios, nueve centros de bachillerato, cinco centros de ciclos formativos de grado medio y superior, quince institutos de educación secundaria, veintidós centros de educación primaria y otros veintidós centros de educación infantil. Además, hay un conservatorio superior de música y un centro de enseñanza de lenguas modernas, la Escuela Oficial de Idiomas «Carlota Remfry». Por último, Linares dispone de dos bibliotecas públicas.

La ciudad acoge la Escuela Politécnica Superior de Linares, dependiente de la Universidad de Jaén, cuyas instalaciones actuales se localizan, desde el 1 de septiembre de 2015, en el Campus Científico-Tecnológico de Linares. Hasta esa fecha se habían situado en dos edificios que datan de 1949, en la calle Alfonso X «el Sabio» de Linares, donde era conocida popularmente como «la Escuela de Peritos». Anteriormente existían además en Linares otros centros universitarios: la Escuela Universitaria de Formación de Profesorado «Antonia López Arista» y la Escuela Universitaria de Trabajo Social, que en el año 2005 fue trasladada al Campus Universitario de Las Lagunillas, situado en Jaén.

Fachada del antiguo emplazamiento de la Escuela Politécnica Superior de Linares.

Campus Científico-Tecnológico de Linares, sede actual de la Escuela Politécnica Superior de Linares.

Red Averroes de Centros Educativos en Linares de la Junta de Andalucía.

El IES Huarte de San Juan es el centro educativo más antiguo de la ciudad y el Ciudad de Linares es el de construcción más reciente.

La localidad de Linares cuenta con un Hospital General Básico que dispone de 264 camas, 7 quirófanos, 37 consultas, un servicio de Urgencias y una Unidad de Cuidados Intensivos. Tiene asignada la población de 22 localidades de la zona norte de la provincia de Jaén, a excepción de Andújar y Arjona.

El Hospital Universitario San Agustín, de titularidad pública gestionado por el SAS, es el único centro hospitalario de la ciudad. La atención primaria en la provincia de Jaén se divide de acuerdo con el «Mapa Sanitario de Andalucía» en 4 distritos, tratándose del principal hospital del Área de Gestión Sanitaria «Norte de Jaén».

Linares, aunque no es una ciudad monumental, posee un variado conjunto de edificios (iglesias, palacios, casas solariegas, edificios públicos) de diferentes estilos y épocas, que, desde la sencillez del arte románico hasta el preciosismo de los edificios modernistas de los siglos XIX y XX, hablan de la evolución de una ciudad que se ha hecho a sí misma.

En Linares sorprende la profusión de plazas y plazuelas, de rincones ajardinados, sombreados por frondosos árboles. La calle de los Álamos desemboca en uno de estos rincones: la deliciosa Plaza del Gallo, hermana menor de Plaza Nueva o de Alfonso XII, luminosa plaza decimonónica nacida a la par y con el estilo del nuevo siglo.

Un poco más abajo el Convento Hospital de San Juan de Dios muestra en su portada de placas talladas a bisel un magnífico ejemplo de la arquitectura barroca. En la actualidad el Palacio de Justicia, que fue construido a finales del siglo XVII y principios del XVIII, conserva aún el claustro y las galerías inferiores y superiores. Es Monumento Nacional desde 1962.

Fuera del casco antiguo existen atractivos lugares —plazas, parques, calles— para visitar y pasear. Entre las plazas, destaca la de San Francisco, con la iglesia de igual nombre. Construida a finales del siglo XVI y ampliada durante el siglo XVII y el siglo XVIII, contiene en su interior un bello retablo del barroco andaluz.

La aportación más destacada de Linares en cuanto a arquitectura se refiere es la que se realiza durante la segunda mitad del siglo XIX y primer tercio del XX, que ha dejado salpicada la ciudad de atractivas casas modernistas adornadas en balcones y ventanas con bella rejería. Es de destacar la creación de singulares edificaciones como el Hospital de los Marqueses de Linares, dentro de un estilo neogótico, que posee en su interior el mausoleo de bronce y alabastro de los Marqueses, obra de Coullaut Valera; o la estación de ferrocarril del Paseo de Linarejos, de un airoso modernismo en ladrillo rojo; el Mercado de Abastos, etc.

De estilo gótico y renacentista, se encuentra situada frente al Ayuntamiento. En ella participaron los arquitectos Andrés de Vandelvira (crucero y arranques de la bóveda lateral del Evangelio); Andrés de Salamanca (en 1564); Juanes de Izpurrio (capilla mayor); y Eufrasio López de Rojas (portada de San Pedro). La portada de la Asunción procede del convento jiennense de La Coronada. El retablo mayor, una de las principales obras de arte que atesora, es de estilo plateresco y lo componen veintidós tablas de mediados del siglo XVI. Preside el altar mayor desde 1953, cuando es trasladado a la iglesia de Linares desde la aldea leonesa de Villarrabines, en sustitución del desaparecido durante la Guerra Civil. De carácter narrativo, está dividido en cuatro ciclos: San Pelayo (en el primer piso; patrón de Villarrabines), Vida de la Virgen (segundo piso), Vida de Jesús (tercer piso), y parejas de profetas (banco). En mayo de 2016 fue declarada basílica menor, un título que solo poseen tres iglesias más en la provincia.

Fuera ya del casco antiguo, merece visitar la Iglesia de San Francisco, que da nombre a la plaza donde se encuentra ubicada. Data del siglo XVI, cuando los Franciscanos se establecieron en Linares. Adosado a la iglesia se hallaba el convento cuyo claustro coincide hoy con el patio central del edificio de Correos y Telégrafos. El templo fue ampliado durante los siglos XVII y XVIII, añadiéndosele la torre campanario en el año 1927.

Su interior es de una sola nave rectangular, construida en el siglo XVII, con capillas laterales y cúpula de medio cañón articulada con falsos arcos y lunetos, estando decorada con pasajes de la vida de San Francisco. Un arco carpanel sostiene el coro. Cuatro capillas con bóvedas ovaladas sobre pechinas le fueron añadidas en la década 1720-1730 y posteriormente otra más. Destaca el bello retablo del barroco andaluz (siglo XVII).

La fachada principal, obra de Eufrasio López de Rojas, es de estilo barroco y abre en arco de medio punto con clave ornamentada flanqueado por columnas dóricas que sostienen un frontón partido decorado con triglifos y metopas; sobre este, una pequeña hornacina con arco de medio punto que acoge una escultura en piedra de San Francisco. Remata el conjunto con vanos arqueados y cruz de forja.

Otro lugar para visitar es el Santuario de Linarejos, donde se halla la imagen de la patrona de la ciudad y cuya orfebrería está realizada a forja por obreros linarenses. El Santuario de la Virgen de Linarejos, patrona de Linares, es un edificio barroco construido a mediados del estilo XVII. Profundamente restaurado en la década de los cincuenta del siglo XX, en la actualidad está bajo el cuidado de una comunidad de frailes franciscanos. Además de la imagen de la Virgen, expuesta en su camarín en la Capilla Mayor, el elemento de mayor interés del Santuario son los magníficos frescos policromados que decoran los muros, bóvedas y cúpula del interior; son obra de los artistas Francisco Carulla y Francisco Baños Martos, quienes los pintaron en los años cincuenta del siglo XX.

Aunque el proyecto de construcción de este edificio data del año 1905 no se inaugura hasta 1917. El proyecto fue encargado al arquitecto Francisco de Paula Casado aunque también participó en el mismo el arquitecto Arturo de Navascués y Ligués.

El hospital de los Marqueses de Linares cuenta con portada neogótica y una cripta bajo la capilla donde se encuentra el mausoleo de los marqueses de Linares, obra de Lorenzo Coullaut Valera.

En la actualidad la explotación del hospital está a cargo de una empresa de sanidad privada como centro residencial. Cuenta con capacidad para 122 plazas repartidas entre habitaciones dobles e individuales y diversos servicios entre los que se encuentran fisioterapia, psicología, enfermería 24 h, peluquería, farmacia, etc.

A 5 km de Linares, por la carretera de Torreblascopedro, se encuentra, aunque grandemente deteriorada, la antigua ciudad oretana e iberorromana de Cástulo. Se trata de un asentamiento de origen íbero, que alcanzó su máximo esplendor bajo el imperio Romano. De esta época datan una serie de importantes construcciones de diferente carácter: obras de infraestructura para la conducción del agua; vías de comunicación como la Vía Augusta, cuyo tramo Cástulo-Cartagena se terminó en tiempos de Tiberio y el de Cástulo a Córdoba en tiempos de Claudio; así mismo una inscripción nos da notificación de que una sacerdotisa llamada Annua mandó construir un Ninfeo dedicado a Roma y a Augusto en Cástulo. Contemplar los restos (aún en gran parte sin excavar) de Cástulo da idea de la importancia de esta ciudad, cuyas piezas de orfebrería, cerámica, escultura se exponen públicamente en el Museo Arqueológico de Linares.

El puente romano de Vadollano sobre el río Guarrizas, en la carretera de Arquillos, que formaba parte de la Vía Heraclea, es otra interesante muestra de la importancia de la zona en época romana. Está integrado en el paraje denominado El Piélago, declarado Monumento Natural por la Junta de Andalucía.

Un lugar para visitar es la Fuente del Pisar: cuenta la leyenda que, allá por el siglo XVI, al pasar por este lugar un caballero, el caballo en que iba montado hundió su pie en la tierra quedando aprisionado; al librarle, su dueño vio cómo surgía un abundante caño de agua que desde entonces no ha dejado de manar. También hay un dicho, que hace referencia a cuando Aníbal dio de beber a su caballo en la Fuente del Pisar. En referencia a la belleza del lugar, el dicho popular dice así:

Esta historia-leyenda de una fuente que surgió «al pisar» de un caballo, tiene su explicación en la existencia de un acueducto que se abastecía del agua de los veneros de Linarejos y la llevaba hasta Cástulo, cuyos habitantes, bajo la dominación romana, fueron los autores de esta construcción que aún se conserva en parte.

Hay numerosos museos en Linares que ofrecen una propuesta variada y de calidad, donde se exponen colecciones de gran interés artístico, etnológico y cultural. Cada uno de ellos está especializado en un tema concreto. Entre los museos operativos y visitables de la ciudad destacan los siguientes:

En el barrio antiguo de Linares, en un palacio del siglo XVII, se creó este museo en 1956 con la intención de conservar los restos arqueológicos de la comarca. Se pueden ver restos de todas las épocas desde el Paleolítico hasta la etapa hispano musulmana. Aunque el Museo está dedicado especialmente a la antigua ciudad íbero romana de Cástulo.

La casa museo existe desde hace años como colección privada, aunque con ocasión de la Feria de San Agustín 2000 se inauguró como Casa Museo y Centro de Documentación de carácter público. El lugar elegido para el mismo es el Palacio de los Marqueses de Orozco, que ha sido habilitado y dotado de las medidas de seguridad necesarias para alojar el museo.

Se puede contemplar una magnífica colección de objetos y documentos relacionados con el mundialmente afamado guitarrista D. Andrés Segovia, donados por su esposa, Emilia de Segovia y por Alberto López Poveda, amigo, fiel seguidor y biógrafo de Segovia.

Viendo la amplísima variedad, la riqueza y lo remoto de la procedencia de muchos de sus recuerdos, uno se puede hacer una idea del relieve internacional de Andrés Segovia.

El centro contará además de las salas de museo, con un archivo, salones de actos y conciertos, zona administrativa, patios y una cripta donde se espera que un día reposen los restos de Andrés Segovia.

En este museo se encuentran muestra del pasado minero de Linares y su comarca. Se encuentra al lado de la antigua estación de Madrid, en el paseo de Linarejos. Aquí se hallan muestras de como trabajaban los mineros o restos de piedras de las minas. También tiene ordenadores donde se pueden ver videos sobre ello y las localizaciones de las minas de todas las épocas.

Concebido como centro de interpretación de la ciudad, se enclava en un edificio del siglo XVIII. En él se sitúa el museo del cantante Raphael, así como información acerca de la ciudad, de la cantaora Carmen Linares y del torero Sebastián Palomo Linares. El museo fue inaugurado en marzo de 2011.

Linares cuenta con el Teatro Cervantes, edificio del siglo XIX En peligroso estado de ruina, fue rescatado para la ciudad por el ayuntamiento de la mano del concejal y diputado provincial de cultura don Ignacio Ortega Campos y rehabilitado a finales del siglo XX, cuando tomó su nombre actual. En el Teatro Cervantes se celebran todo tipo de actividades culturales, desde jornadas teatrales a certámenes de cortometrajes o actos cofrades.

En Linares existen varios grupos de teatro aficionado que cuentan con el respaldo de las asociaciones:

Además, existen varios grupos profesionales de teatro como:

Durante el Otoño Teatral además de producciones nacionales, los grupos locales celebran las Jornadas Teatrales Vicente del Moral, creadas en colaboración de estos grupos con el IES Huarte de San Juan y que desde hace pocos años organiza el ayuntamiento.

Linares cuenta con una gran tradición musical que está muy asociada con la Semana Santa. Diversas cofradías patrocinan bandas de música en las que participa voluntariamente la juventud linarense. En este ámbito destacan las bandas de cabecera de Semana Santa. Son bandas formadas por 90-150 músicos ataviados con el traje de estatutos -hábitos o túnicas propias de la Hermandad o Cofradía en cuestión a modo de Nazarenos-.

En el plano de la música estudiantil linarense está la Tuna Universitaria Politécnica de la Escuela Politécnica Superior de Linares, popularmente conocida como La Tuna de Peritos de larga historia en la ciudad y en España, galardonada con los premios a la mejor tuna y al mejor baile de bandera en el Certamen Nacional de Tunas de Ingeniería Técnica celebrado en Valencia los días 8 y 9 de octubre de 2010. La Tuna de Peritos editó en la década de los 90 un disco con sus mejores éxitos titulado Media vida parcheando.

Linares también cuenta con la Asociación de Antiguos Tunos de la Escuela Politécnica Superior de Linares o como se le conoce popularmente, cuarentuna. Esta asociación ha actuado en los principales festivales de cuarentunas de España como los de Valencia u Oviedo. El 29 de abril de 2006 vio la luz su primer disco titulado Contigo, compuesto de 17 canciones. En el año 2009, los días 17 y 18 de abril se celebró el Certamen Internacional de Cuarentunas, donde se reunieron algunas de las mejores tunas del mundo como las de Viana do Castelo (Portugal), cuarentuna de Barcelona, cuarentuna de Holanda o la cuarentuna universitaria de Oaxaca (México).

Este festival musical se celebra en la ciudad desde 2008. Participan numerosos músicos del panorama nacional e internacional, dándose a conocer como referentes del jazz y del blues de la provincia de Jaén.

La gastronomía linarense se basa en sus tapas, además, está muy vinculada a la gastronomía de la provincia, al ser comunes la mayoría de los productos utilizados en la elaboración de sus platos y que tienen como denominador común el aceite de oliva que realza el sabor de sus guisos y ensaladas, sin olvidar las aceitunas aliñadas que son frecuentes como aperitivo.

Junto a los platos tradicionales, algunos influidos por la cocina islámica, como las gachas, migas, gazpacho, ajo blanco, andrajos, pipirrana y roscos de anís, aparecen algunos de ascendencia minera como las patatas con bacalao, patatas con pimentón y el remojón a base de ensalada de naranjas, bacalao, aceitunas, cebolleta y aceite de oliva, y otros tal vez procedentes de los pastores trashumantes de las tierras de Soria como el perolo a base de castañas, matalahuva y ciruelas pasas.

Sin lugar a dudas, es la fiesta más importante de Linares. Se celebra desde agosto de 1734[6]​ en honor a San Agustín de Hipona, aunque el santo patrón de Linares es oficialmente San Sebastián. Como la mayoría de las ferias locales, originariamente se trataba de una muestra de ganadería pero actualmente ha evolucionado para ser una fiesta de ocio popular, conciertos musicales y corridas de toros.

El recinto ferial acoge multitud de casetas abiertas a todos los visitantes en las que se puede comer, beber y bailar todo tipo de música (incluyendo las típicas sevillanas y otros bailes folclóricos). Además, el recinto ferial dispone de atracciones tanto para adultos como para los más pequeños. De entre todos los grupos musicales que han actuado durante la feria, pueden destacarse los siguientes: Maldita Nerea, Pablo Alborán, Mägo de Oz, Joaquín Sabina, Héroes del Silencio, Alejandro Sanz, No me pises que llevo chanclas, David Bisbal, El Canto del Loco, Barricada, Danza Invisible, Ska-P o La Oreja de Van Gogh. Las corridas de toros y rejones celebrados durante las fiestas se consideran de una calidad excepcional teniendo en cartel toreros de renombre nacional[cita requerida]. Actualmente es una de las ferias más importantes de la provincia.[44]

La Semana Santa de Linares, declarada de interés turístico nacional en el conjunto de Andalucía, destaca por la calidad de las bandas de cabecera de las cofradías y hermandades y de los tercios de trompeteros, la belleza de la imaginería cofrade y, especialmente, por el acto de la Expiración en la calle Marqués, la lectura de la sentencia en el Prendimiento de Nuestro Padre Jesús, el recogimiento de madrugada de los rezos de las Hermanas de Santa Ángela de la Cruz a La Hermandad de la Columna y la bendición de Nuestro Padre Jesús Nazareno que, con su brazo articulado, concede a los miles de linarenses que se agolpan a su paso en la "madrugá" del Jueves Santo al Viernes Santo primero tras su salida en la plaza San Francisco y posteriormente en el Paseo de Linarejos, siendo la cofradía con un mayor número de hermanos en la ciudad y a la que mayor devoción se le tiene en la ciudad.

La Virgen de Linarejos es la patrona de Linares desde el 1 de noviembre de 1783, según el decreto del Obispo de Jaén e Inquisidor General de España D. Agustín Rubín de Cebayos con fecha 24 de febrero de 1784, según consta en los Libros de Actas del Cabildo correspondientes a dicho año. Dicho documento se conserva en el Archivo Municipal de Linares donde se especifica el carácter retroactivo del nombramiento y la denominación de María Santísima de Linarejos. Desde entonces, las fiestas en honor a la patrona de Linares tienen lugar el último domingo de Pentecostés.

Cada año, la afluencia de personas hacia el Santuario de la Virgen de Linarejos es masiva. Junto al santuario se instala una pequeña feria con carruseles, tómbolas y demás instalaciones recreativas.

Linares no es una ciudad tradicionalmente carnavalesca. Solo existen cuatro chirigotas de reciente formación:

Como cada año, en 2013 se celebró el certamen carnavalero organizado por el Ayuntamiento de Linares. En esta ocasión participaron además agrupaciones de localidades vecinas como Úbeda con las chirigotas Aquí No Se Fía, Arciser y La Voz de la Conciencia siendo esta última siendo un reconocido referente en la provincia y que ha actuado en varias ocasiones en Cádiz, la cuna del carnaval. Para finalizar la semana de carnaval, el Ayuntamiento de Linares organiza el entierro de la sardina donde se regalan sardinas para su degustación a través de las agrupaciones locales.

Además de participar en el certamen local, las agrupaciones carnavalescas de Los Otros y Andrés Seagobia han participado en el concurso de Úbeda en 2013 realizando un papel muy bueno a nivel provincial a pesar de no clasificarse para las semifinales. En ocasiones, también actúan en pubs, bares, cafeterías e incluso por las calles.

Este torneo de ajedrez fue uno de los acontecimientos de mayor relevancia en Linares debido a su proyección internacional. Durante años fue considerado uno de los mejores torneos de ajedrez del mundo pues participan asiduamente los 12 o 14 ajedrecistas más importantes del panorama internacional. Han participado célebres ajedrecistas como Gari Kaspárov, Anatoli Kárpov y Viswanathan Anand.

En los torneos de ajedrez internacionales, los dos únicos celebrados en el mundo con más de 12 jugadores fueron en Linares. Con categoría inferior y 16 jugadores, de los cuatro que se han celebrado en todo el mundo, tres de ellos fueron en Linares (el otro fue en Suecia). La última convocatoria ha sido de categoría 19.

Desde 1964 la ciudad celebra antes y durante la Real Feria y Fiestas de San Agustín, con ánimo de mantener vivas sus raíces mineras, el prestigioso Concurso Nacional de Taranta. En este concurso se dan cita grandes cantaores para participar en las especialidades de tarantas y cantes libres.

Desde 1978 se celebra en mayo el Concurso de Piano Ciudad de Linares "Marisa Montiel", cuyo interés cultural es de nivel nacional. Durante el mismo, se reúnen jóvenes promesas nacionales juveniles e infantiles de piano.




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